*DANIELA:
- Aproveché que las clases empezaban mañana para ir a mi casa y leerme los documentos que Kate me dio, cuando llegué intenté no hacer ruido y fui a mi habitación, allí me senté en una especie de escritorio que tenía y abrí las carpetas.
- Era mucha información y periódicos para mi sola, todo esto fue cosa de Agus y debería hacer esto con el.
- Me puse en pie y caminé hacia la puerta, antes de llegar alguien abrió la puerta.
- Era Agus, el me miró con media sonrisa.
Agustin: Por fin...¿Donde estabas?
Daniela: Ocupada.
Agustín: ¿Aún estás enfadada conmigo?
Daniela: A medias.- Le miré seria.
Agustín: Venía cada hora a tu habitación para ver si habías llegado.
Daniela: Ya estoy aquí.
Agustín: Se que no quieres saber nada sobre el lago pero descubrí cosas y ahora me siento muy mal.
Daniela: ¿Que descubriste?
Agustín: Desapariciones y cosas así, fotos de tu padre...- Dice despistado.
Daniela: Yo hice algo por ti. - El levanta su mirada. - Pero por ti, no por mi padre, a pesar de que quieras a tu hija por el dinero y que me hayas mentido.
Agustín: Yo no te he mentido y en cuanto a lo de mi hija, llevabas razón, no me importa el dinero, es cierto que sin dinero no soy nada, pero sin amor...tampoco, quiero recuperar a mi hija.
- Sus palabras me desviaban, aún no quería decirle nada de Carla.
Daniela: Tengo algo como ya te dije para ti.
- Camino hacia el escritorio y le señalo la cantidad de carpetas, el viene hacia mi y las mira.
Agustín: ¿Que es?
Daniela: Toda la información sobre el lago, si mi padre es culpable, esto nos ayudará a descubrirlo.
- El abre la primera carpeta, son fotocopias de periódicos antiguos, anuncios y los sospechosos, entre ellos mi padre.
Agustín: Vamos a necesitar de bastante tiempo para esto.
Daniela: Si, pero yo no lo tengo, mejor te lo dejo a ti, te ayudaré ahora a lo que pueda.- El asiente con la cabeza.
Agustín: Si te enteraras de que tu padre es culpable...¿Que harías?. - Le miro seria, no se que decirle, tampoco se que pensar, mi padre un asesino...
Daniela: Si es un asesino deberá pagar por ello.
Agus: ¿Y si no?
Daniela: Pues todo seguirá como está.
Agus: ¿Le perdonaras algún día?
Daniela: No lo se..., en parte creo que está perdonado.
*CARLA:
- Miranda me llevó a una de sus empresas, quería enseñarme como funciona todo allí, enseñarme su trabajo, me gustaba la idea.
- Al entrar en un gran edificio la gente le saludaba y ella le sonreía, no podía saludar a todos, eran muchos.
- Después me llevó a una de las plantas del medio, todo lleno de mesas y ordenadores, lleno de trabajadores, caminamos hacía un despacho que hacía esquina, era gigante desde fuera y cuando entramos era más grande de lo que esperaba.
Miranda: Este es mi edificio favorito, de aquí hago la mayoria de las cosas, Agustín suele encargarse de los viajes y cosas así, yo me manejo mejor por la ciudad.
Carla: ¿Estas asosiada con alguna empresa de afuera?
Miranda: No, solo que algunas desean compartir y les ayudo, pero luego termino por venderlas, no me gusta que mis empresas tomen nombres diferente, no se si me explico.
Carla: Creo que te entiendo.
Miranda: Por lo pronto quiero que demos las clases aquí, que venga todas las mañanas a este despacho y me veas trabajar.
Carla: Podría estudiar economía en la Universidad, me sería fácil.
Miranda: Yo estoy aquí para ayudarte, me haría muy feliz que te licenciaras en economía, pero no es tan fácil como crees.
Carla: He aceptado tu ayuda, seguro que para ti te será fácil.- Ella sonrie.
Miranda: Si quieres podemos empezar ya, podría enseñarte la empresa.
Carla: Vale.
*DANIELA:
- Llevábamos horas mirando las carpetas, pero no me ayudaban mucho.
Agus: Hey mira esto.- Dice acercándose a mi con la carpeta. - Es un informe de la policía, de la declaración de tu padre, escucha. - Aclara su garganta y lee. - "Es cierto que conocia a Denis Hawke, en el lago nos conocemos todos, pero esa chica nunca fue lo suficiente amable y humilde por decirlo de algún modo, soliamos hacer cenas una vez al mes donde invitabamos a los vecinos, a veces las casas se turnaba y otro mes se hacía la cena en una casa diferente... una noche ella llego mal herida, llegó tarde a la cena y comenzó a insultar a los Colmes, le dijo de todo, ladrones, asesinos, nadie la tomó enserio, estaba bebida y por sus heridas pensamos que se las hizo ella, por lo demás podría decir que una semana más tarde desapareció".- Agus me echa un vistazo rápido y vuelve a leer el documento.- La declaración del policía fue que..."El señor César intenta echar tierra a la familia Colmes, ya que todos los que acudieron aquella cena declaran que a quien recriminó aquella chica fue al señor César y no a la familia Colmes, por lo que me causa mas sospecha en el señor César, podría estar mintiendo..." Y así, dice mas, es el informe del poli...
Daniela: ¿Por que le echaría tierra a los Colmes?, no tiene sentido.
- Agus abre el gran mapa, el que encontramos en aquel baúl, el señala con su dedo hasta encontrar lo que busca.
Agus: La casa de los Colmes está al otro lado del lago, podríamos ir y preguntarle.
Daniela: ¿Que le decimos?¿Hola soy la hija de César y quiero saber por que mi padre os echó tierra de por medio en el juicio?. - Digo irónica
Agus: Eso es muy directo.- Dice burlón. - Pero podríamos hacernos pasar por polis y que nos digan lo que saben.
Daniela: ¿Y la placa?
Agus: Pones pegas a todo, pues vamos en plan vecinos, le decimos que hemos comprado esto y hemos encontrado recortes de periódico.
Daniela: No se...
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- Lo que no se es por que siempre le termino haciendo caso, cogimos mi todoterreno deportivo y fuimos al otro lado del lago, Agus como siempre primero, fue a tocar la puerta de los Colmes.
- A primera vista la casa parecía lujosa, no es de madera y la fachada de piedra, bonita y se ve que costosa.
- Una señora de unos 50 años abrió la puerta con una sonrisa.
Agus: Hola, muy buenas, somos Agus y Daniela, marido y mujer. - El sonríe, yo me sorprendo, ¿Por que no me avisa de estas cosas?. - Somos los nuevos vecinos del otro lado del lago, queríamos saludar.
Señora Colmes: ¿Que vecinos?
Agus: Los que vivimos en la casa de los señores Fernández Cesar.
Sñra. Colmes: Oh...¿La vendieron?
Agus: Si, le ofrecimos buen dinero.
Sñra. Colmes: Que sorpresa, no me lo esperaba...¿Queréis pasar y tomar algo?
Agus: Será un gusto. - Dice sonriente.
- La señora nos dio paso a su casa, observé la cantidad de cuadros con fotos de niños y jovenes...
- La casa olia a galletas, sonreí, amo las galletas.
- Después nos pidió que tomaramos asiento en el salón y ella llegó con unas galletas y dos tazas de té, ella tomó asiento frente a nosotros en un sillón.
Sñra. Colmes: ¿Y como que venis a un lugar tan lejano?, sois jovenes y seguro que vuestro trabajo está en la ciudad.
Agus: Yo trabajo a distancia, con el ordenador, necesitaba un sitio tranquilo y ella no le importa conducir...- Me mira con media sonrisa.
- Antes de que fueramos a preguntas más internas decidí ir al grano.
Daniela: Verás en la casa encontramos unas fotos y recortes de periódicos, al parecer los señores que vivían allí tuvieron problemas con la justicia y vi recortes de una chica desaparecida, bueno, varias chicas desaparecida.
Sñra. Colmes: Ya...¿Y que?
Agus: Nos gustaría que nos hablaras un poco de ese tema.
Sñra. Colmes: No voy a deciros nada que no sepáis. - La señora sonrie, bebe de su té y come una galleta, miro a Agus algo nerviosa.
Agus: Estamos algo preocupados, alguien nos entró en casa hace algunas semanas.
Sñra. Colmes: Tal vez por que vosotros teníais algo que no era vuestro. - Esta señora me estaba poniendo nerviosa.- Ya sabéis que lo que es enterrado no debería desenterrarse.
- Parecía como si ella lo supiera todo.
Daniela: Fui atacada por un extraño, alguien estuvo dispuesto a matarme por una caja
- Ella rie, una risa suave.
Sñra.Colmes: ¿Por que queréis saber de este tema?, es un caso que aún no esta cerrado por la desapareciones de las chicas, ¿Por que os interesa tanto?
Agus: Por que no nos gusta los secretos y menos donde vivimos.
Sñra.Colmes: ¿Y por que no le preguntáis al señor César?
Agus: ¿A César?
Sñra.Colmes: Si...a su padre. - Me mira...¿Como lo sabe?, aunque bueno por desgracia casi todo el mundo me conoce, sabía quién era yo desde el principio y no dijo nada.
Agus: Ah...- Me mira algo aturdido. - Señora le hemos mentido, lo siento, pero es que leímos lo último que dijo César ante el juez, queremos saber que pasó con esas chicas.
Sñra. Colmes: Señor Martín...- También conocía a Agus, esta señora me estaba dando miedo. - Si queréis encontrar a esas chicas, empieza por tu mejor amigo. - Creo que se referia a mi padre. - Os voy a pedir algo amablemente, claro. - Sonríe. - Vais a salir de mi casa por vuestro propio pie, no vais a mirar atrás y mucho menos vais a volver a pisar mi parcela desde cinco kilómetros lejanos.- Nos miró con media sonrisa. - A veces los temas solo deben conocerlo los que lo conocen de verdad y creedme cuando os digo que cerreis este tema, por que a ningún vecino le gustará que vayáis hablando de esto, ahora haced lo que os pedí.
- Miré a Agus y me puse en pie, salí de la casa y fui a mi coche, Agus lo hizo detrás de mi, tras entrar en mi coche lo arranqué y puse rumbo a mi casa.
Daniela: Te dije que era mala idea.
Agus: Esa señora parece una bruja.
Daniela: Era mala idea...no se por que me dejo guiar.
Agus: Por que tienes curiosidad, igual que yo, tenemos que descubrir quién fue.
Daniela: Pues ya me dices como lo vamos a descubrir.
Agus: Esa señora tiene algo que ver, es tan rara...
Daniela: Estamos tocando un tema que no nos pertenece...ella lleva razón, lo enterrado debería quedarse enterrado.
- Tras diez minutos de silencio llegamos a mi casa, bajé del coche y me encontré con un joven, de unos veinti cinco años, bien aseado, con ropa algo grande tipo rapero, pero no tan exagerado, como suele vestir un joven de esa edad.
"Hola...- Dijo colocandose frente a mi.- Yo os voy ayudar a encontrar quien lo hizo."
- Agus me miró y después miró al chico.