La apariencia siempre era una as bajo la manga, ¿Pero si la persona era un asco o muy patética por dentro?
En el proceso de cambio de vida de Hyoyeon, una 'bebé' se le acercó a hablarle, o a amenazarla; como quieran llamarlo.
"¡Tú, hey!" Ese día hacía frío, y la gente estaba más desagradable que de costumbre. "¡Niña, a ti te hablo!" Sin duda no era su día.
"¿Me hablas a mí?" Respondió Hyoyeon, con una indignación sarcástica, no le gustaba tratar con gente así.
"Sí, tú." la muchacha que no aparentaba pasar los trece años intentó amenazarla. Si no hubiese sido porque de verdad se veía como alguien de su edad, seguro la hubiese hecho sentir incómoda por su altura.
Se sintió superior, ya que una 'nenita', como le llamaría ella, intentó acorralarla. Se sentía con poder, aunque solo era dos años mayor que ella y no había notables cambios la una de la otra, incluso, habían más diferencias mentales que físicas. Pero ahí estaba el gran truco, la mentalidad.
"¿Hay algún problema, sweetie?" A Hyoyeon no le gustaba la gente muy arrogante, pero en ese momento supuso que sería bueno utilizar aquello, quizás podría divertirse unos minutos discutiendo con la niña.
La menor enfureció, a ninguna mujer le gustaba sentirse inferior.
"Claro que lo hay..." Omitió el insulto que según ella, la quinceañera se había ganado. "Hay un problema llamado Jeongguk."
Y se volvería a repetir la historia.
O quizás no.
Primero déjenme describirle a esta chica. Fácil, era igual de bellísima que la mujer que acompañaba a Jungkook aquel día.
El estómago se le estrujó y temió. Temió por qué probablemente todo el esfuerzo que había puesto en su magnífico plan se iría directamente a la basura.
Solo faltaba que esta chica fuera su novia.
"No quiero" siguió hablando la niña "¡No quiero que te acerques a mi oppa!"
Hmm.
Eso no se lo veía venir.
"Así que... Jeongguk tiene muchas admiradoras..."