Después de leer aquella carta Natsu estaba enojado, frustrado, triste, todo al mismo tiempo. Lo único que se le ocurrió en aquel momento fue llamar a su mejor amigo. No sabía que hacer. Así que le marcó diciéndole simplemente ''Necesito que vengas'' y colgó. Preocupando de gran manera al peli azul. Natsu estaba observando la carta en cuanto la puerta se abrió.
—¡Y..Ya estoy aquí! —Gray dijo exhausto por la corrida. —Espero que hayas usado protección y no sea lo que estoy pensando. —Gray dijo acercándose.
— ...—Natsu mantuvo sus ojos en la carta.
—O..Oye, ¿dónde está Lucy? —Gray preguntó echando un ojo —La conversación de ayer me dejó una mala espina.
—...—Natsu siguió en silencio.
—¿N..Natsu, estás bien? —Gray preguntó parado al lado del sofá. —N...No me digas que de verdad..— Gray fue interrumpido.
—Gray. —Natsu se puso de pie y aplastó la carta en el pecho de Gray.
—¿Q..Qué es..—Gray abrió la carta y sus ojos se abrieron. Entonces empezó a leerla. —N..No puede ser...—Gray apretaba el papel.
—Se ha ido, Gray. —Natsu miraba al suelo. —Lucy se ha ido por nosotros. —Natsu tenía su vista en el suelo.
—D..Dios mío..—Gray abrió sus ojos. —S..Soy un idiota...—Gray musitó.
—¿Qué quieres decir? —Natsu subió su rostro.
—E..Esto es mi..culpa..—Gray musitó con ojos culpables mientras miraba como Natsu le miraba con ganas de golpearlo.
—¿¡Qué demonios hiciste, Gray?! —Natsu tomó a Gray de su playera y lo empujó contra la pared. —¿¡Qué fue lo que le dijiste?! —Natsu lo miraba con odio. —¡Contesta! —Natsu gritó una vez más.
—L..Lo siento, Natsu..Yo..—Gray lo miraba a los ojos. —Le dije que...Esto se solucionaría cuando todos estuviésemos..—Gray tragó saliva y sus ojos estaban en el suelo. —M..Muertos..—Gray no mostraba resistencia, sabía que lo merecía.
—¿¡Por qué demonios le dijiste eso?! —Natsu hizo que lo miraba a los ojos. —¡Gray, es Lucy! —Natsu le gritó una vez más.
—¡Lo sé, maldición! —Gray gritó y Natsu se quedó en silencio. —¡Mi amigo estaba en un maldito hospital casi muerto y lo único que se me ocurrió fue echarle la culpa a mi amiga! —Gray gritó en lagrimas. —¡Lo sé! —Gray gritó una vez más —¡Ya estoy sufriendo bastante! —Gray gritó una vez más y miró a Natsu en lagrimas.
—...—Natsu se quedó en silencio y desvió sus ojos.
—Golpéame. —Gray musitó. —Anda, vamos. Me lo he merecido. —Gray rompió el silencio. Natsu suspiró.
—No voy a golpearte, Gray. —Natsu lo soltó lentamente. —Eres mi mejor amigo. —Abrió sus brazos y lo abrazó. —Eres un idiota...Pero sigues siendo mi amigo, Gray. —Natsu musitó.
—Perdóname, Natsu. —Gray respondió el abrazo. —Esto es mi culpa. —Gray lloraba.
—Estoy seguro de que Lucy no se fue pensando en eso, Gray. —Natsu deshizo el abrazo y lo miró. —Te ha perdonado, ¿no es así? —Natsu le sonrió y Gray asintió.
—La traeremos de vuelta. —Natsu le dio palmadas en el hombro mientras regresaba al sofá.
—¿Q..Qué es lo que haremos? —Gray limpió sus lagrimas y se sentó en el brazo del sofá.
—Tenemos que decirle a todos. —Natsu miró a Gray con determinación.
• • • Con Lucy • • •
Lucy se había despertado aquella mañana, escribiendo aquella carta con lagrimas resbalando su rostro. Pero tenía que hacerlo. Tenía que irse por la seguridad de todos, no podía sacrificar a uno más de sus amigos. Recogió todas sus cosas y salió, Zeref la esperaba en una limusina frente al apartamento.
—Espero que le hayas dado una buena despedida. —Zeref le comentó sonriendo. —Es probable que no le vuelvas a ver. —Cruzó sus piernas.
—... —Lucy se sentó en el otro extremo y sus ojos estaban tristes, mirando hacia la ventana.
—Tu padre nos está esperando en la mansión Heartfilia. —Zeref comentó. —Estoy seguro de que sus brazos están abiertos para tu llegada. —Zeref le sonrió sarcásticamente mientras Lucy le ignoraba.
—...—Lucy seguía mirando hacia la ventana.
—Supongo que ahora no hablarás. —Zeref suspiró. Por la mejilla de Lucy se resbaló una mejilla.
—Escucha, lo siento. ¿Está bien? —Zeref la miró. —No es que quiera hacerte esto, de hecho yo tampoco quiero casarme contigo. —Zeref se encogió de hombros.
—¿Entonces por qué demonios lo haces? —Lucy por fin habló sin quitar la vista de la ventana.
—Dinero. —Zeref respondió.
—No puedo creer que vayas a sacrificar todo por dinero. ¡Es algo inhumano! —Lucy le miró enfadada.
—Ya se me ha arrebatado todo. —Zeref musitó. —Tampoco es que me importe lo que pienses. —Zeref regresó a su lado frío. —No me malinterpretes. No soy de acero, y lamento mucho lo que te han hecho. Pero no es como si dejaré ir el dinero por ti.— Zeref sonrió.
—Eres un desgraciado. —Lucy giró su mirada al cristal nuevamente.
—Y este es solo el comienzo, mi querida Lucy. —Zeref concluyó sonriendo.
El viaje duró menos de 7 horas debido a que iban en vehículo sin necesidad de esperar trenes. Lucy veía como la ciudad desaparecía a sus espaldas. La limusina aparcó y Lucy bajó de ella al igual que Zeref. Al llegar vio la misma postura fría de su padre desde la ventana, Lucy tomó su mochila y subió a su habitación cerrando la puerta de un puertón.
Ahí estaba otra vez, en las cuatro paredes sin salida. Empezaba a hundirse otra vez. Sabía que jamás saldría de allí otra vez. Entonces observando su habitación una vez más, ahí de pie, empezó a llorar. Extrañaba la ciudad, extrañaba a sus amigos, pero lo que más extraña era a Natsu. Sus abrazos, sus besos. Esto hacía que se rompiera en pedazos, la idea de no volverlo a ver la estaba destruyendo.
—S..Señorita Lucy..—La ama de llaves tocaba a su puerta.
—...—Lucy se quedó en silencio.
—S..Su padre quiere verla.—La señora musitó arrastrando las palabras.
— ...—Lucy escuchó como se alejaba de su puerta.
—Lucy. —Zeref llamó a su puerta. —Hace media hora que te estamos esperando. ¿Estás bie..—Zeref suspiró. Ella no estaba bien.
—...—Lucy se quedó en silencio y Zeref abrió la puerta.
—No hagamos esto más difícil. —Zeref tenía sus manos en sus bolsillos.
— ...—Lucy seguía acostada de espaldas en silencio.
—Llorar no sirve de nada. —Zeref comentó una vez más.
—Lo sé. —Lucy musitó limpiando su rostro mientras seguía de espaldas. —Pero, ¿sabes algo?..—Lucy se puso de pie y miró hacia la ventana. —Mi madre decía que las personas no lloraban por ser débiles, lloran porque han sido fuertes demasiado tiempo. —Lucy contestó con su vista en el suelo.
—...—Zeref se quedó en silencio.
—Venga, vamos. —Lucy se giró. —El ha ganado después de todo. —Lucy cruzó con la mirada apagada al lado de Zeref dirigiéndose hacia el despacho de su padre.
En ese momento Zeref supo que ya no era Lucy. La chica feliz que conoció en Magnolia había desaparecido. Se quedó pensativo por un momento y decidió bajar las escaleras. Lucy se detuvo frente a la puerta del despacho, Zeref tocó.
—Señor Heartfilia. —Zeref dijo detrás de la puerta. —Con su permiso. —Zeref abrió lentamente la puerta.
—Ya era hora. —Jude respondió con su voz seria como siempre. Estaba mirando había la ventana con sus brazos detrás de su espalda.
—Perdone la tardanza. —Zeref respondió. Y miró de reojo a Lucy que tenía sus ojos vacíos y no decía nada.
—Lucy. —Su padre se le acercó. Zeref pensó por un momento que su padre la abrazaría. —Eres una estúpida. —Su padre la abofeteó. Lucy no respondió. —¿¡En qué demonios estabas pensando?! —Jude la abofeteó por segunda vez.
—S..Señor..—Zeref miró la escena impotente.
—¿¡Sabes lo que me ha costado este trato?! —Jude la abofeteó otra vez. Lucy no respondía simplemente lo miraba con la miraba lejos. —¡¿Acaso no piensas contestarme?! —Y la abofeteó por cuarta vez. Zeref vio sus mejillas rojas.
—No sabes cuanto desearía fue eras tu quien estuviera en esa tumba. —Lucy por fin habló, sin mover sus ojos.
—¡No te atrevas a decirme eso! —Jude estuvo apunto de abofetear otra vez, sin embargo, Zeref al ver que Lucy no se defendería, detuvo su mano.
—Señor. —Zeref lo miró serio. —Deténgase. —Zeref dijo estas palabras con el fleco tapando su frente.
—Largo de aquí. —Jude se giró dándole la espalda a ambos.
—Si me disculpa. —Zeref tomó a Lucy de la mano y salió de allí, estaba arrastrando un cuerpo sin vida. —La llevó rápidamente a su habitación para tratarle los golpes—.
—¡¿Qué demonios estás haciendo, Lucy?! —Zeref la sentó y se dirigió al baño en busca el botiquín. ¿Por qué le dijiste eso? —Zeref le preguntó acercándose con rapidez a la rubia.
—Es la verdad. —Lucy respondió con moretones en su mejilla.
—Demonios. —Zeref tomó algodón y alcohol. —Te ha dejado el rostro bastante mal. —Zeref dijo poniendo el alcohol en el algodón.
—Nunca me había pegado. —Lucy musitó.
—¿Por qué no te defendiste? —Zeref dijo arrodillándose frente a ella mientras pasaba el algodón en sus mejillas.
—Ya no me importa. —Zeref abrió sus ojos y detuvo su mano.
—Lucy, no estás pensando claro. —Zeref continuó en sus mejillas.
—Desearía morir ahora mis..—Lucy fue interrumpida.
—¡Cállate! —Zeref le gritó. Lucy abrió sus ojos. —¡¿Dices que quieres morir?! —Zeref empezó a gritar. —¡¿Que ya no importa!? —Zeref se puso de pie. —¡¿Que hay de Natsu?! —Zeref la miró a los ojos.
—El me olvidará. —Lucy cerró sus ojos lentamente.
—Jamás lo haría. —Zeref dijo bajando su tono.
—¿Cómo sabes eso? —Lucy le preguntó con su mirada en el suelo.
—Por que el es como yo. —Zeref respondió bajando sus manos.
—Eso jamás. —Lucy respondió. —Natsu no es como tú. —Lucy dijo una vez más. Y Zeref suspiró.
—Su nombre era Mavis. —Zeref se sentó en la cama, al lado de Lucy. —Murió hace un año. —Zeref mantenía los ojos en el suelo. Lucy lo miró.
—L..Lo siento. —Lucy se ablandó. —N..No quise..—Lucy estaba apunto de decir.
—La última vez que la vi...—Zeref tragó saliva. —Le había pedido matrimonio. —Zeref hizo una media sonrisa. Estaba apunto de llorar.
—Zeref..—Lucy lo miró culpable.
—Al día siguiente recibí una llamada de su madre...—Zeref empezaba derramar lagrimas. —Había muerto en un accidente...Y no encontraron su cuerpo. —Zeref miró hacia arriba. —No pude despedirme de ella...Tan solo...Se fue sin decir adiós. —Zeref mordió su labio.
—... —Lucy se mantuvo en silencio. Mientras lagrimas bajaban por su rostro.
—Todavía recuerdo su sonrisa.. —Zeref cerró sus ojos mientras lagrimas bajaban por su rostro. —La forma en que se molestaba cuando me burlaba de su tamaño..—Zeref dibujó una sonrisa en sus labios mientras tenía sus ojos cerrados. —Ella era simplemente...La persona que más amaba en este mundo..
—L..Lo siento..Tanto..—Lucy abrazó a Zeref.
—N..No sabes cuanto la extraño..—Zeref correspondió el abrazo mientras lloraba en su hombro.
• • • Con Natsu • • •
—¡Natsu! —Gajeel entró desesperado. —¡¿Qué sucedió con Lucy?!—Gajeel le miró enojado.
—¡Espera, Gajeel! —Levy lo detuvo.
—Lucy se ha ido. —Gray respondió.
—N..No puede ser.. —Juvia tapó su boca.
—Lo ha hecho para protegernos. —Natsu por fin comentó y todos se quedaron en silencio mirándose unos a otros.
—¿Qué sucede? —Gray notó el ambiente. —¿Por qué no dicen nada? —Gray los miró preocupado.
—Natsu...—Erza lo miró.
—Ustedes lo sabían. —Natsu acertó y puso sus manos detrás de su cabeza. —Lo sabían. —Natsu repitió una vez más. —¡¿Por qué demonios no me dijeron?! —Natsu gritó.
—C..Cálmate, Natsu..—Levy dijo con temor.
—¡¿Qué me calme?! —Natsu rió. —El amor de vida se ha ido y pude haberlo evitado, ¡¿y me estás pidiendo que me calme?! —Natsu gritó.
—E..Esto es absurdo. —Gray comentó.
—¡Pensé que eran mis amigos! —Natsu gritó.
—¡Natsu! —Erza le gritó.
—Cuando Lucy y Gray discutieron..—Gajeel comentó. —Ella dijo que se iría en cuanto te recuperaras. —Gajeel miró hacia abajo.
—Nos pidió que no te contáramos nada pero..—Levy continuó. —Nos negamos. —Levy miró a Natsu.
—Le dije que lo solucionaríamos, incluso ella..—Gajeel comentó.
—Lo siento. —Erza finalmente terminó. —Ninguno de nosotros pensábamos que de verdad se iría. —Erza miró hacia abajo.
—E..Esto es..—Natsu se sentó con ambas manos en la cabeza.
—En vez de estar gritándonos unos a otros..—Jellal rompió el silencio. —Deberíamos buscar una manera de traerla de vuelta.
—¿Qué sugieres, Jellal? —Erza lo miró.
—Lucy dijo que había estado en una mansión, ¿no es cierto? —Jellal miró a todos.
—Es allí donde ha regresado. —Gray miró a Jellal.
—La mansión está en la región de Isván. —Juvia agregó.
—Pero...—Natsu subió su rostro. —¿Cómo es que ha regresado si ni siquiera tiene dinero? —Natsu miró a todo el mundo curioso.
—A lo mejor se fue con Zeref. —Levy respondió.
—¿Zeref? —Natsu la miró confundido.
—Zeref es su prometido. —Gajeel terminó.
—¿D..De qué están hablando? Zeref es..—Natsu se detuvo.
—Cuando estábamos en el hospital nos dijo que se había encontrado en el parque de diversiones..— Erza comentó.
—N..No solo en el parque de diversiones..—Natsu musitó. —Por eso ella estaba tan nerviosa cuando el fue a verme..—Natsu se quedó pensativo. —¿Por qué..ella no me dijo nada? —Natsu se preguntó mirando hacia el suelo.
—Natsu, Lucy no quería preocuparte hasta que salieras del hospital y..—Levy le respondió. —Queríamos respetar su decisión. —Levy bajó su rostro.
—Zeref... —Natsu apretó su puño.
—Natsu, ¿lo conoces? —Gray se giró a Natsu.
—Me lo encontré en las oficinas de mi padre..—Natsu comentó —El tomará la presidencia en una de las empresas asociadas con la compañía de Igneel. —Natsu respondió.
—Ahí lo tenemos. —Jellal dijo después de escuchar todo.
—¿Qué quieres decir Jellal? —Erza le preguntó.
—Natsu, debes consultar con tu padre todo acerca de esa compañía y quien la dirige actualmente. —Jellal se dirigió a Natsu.
—C..Creo que tengo una mejor idea. —Natsu sonrió sacando su teléfono.
—¿Que vas a hacer? —Gray le preguntó mientras Natsu se ponía el teléfono en la oreja.
—¿Padre? —Natsu le habló al teléfono. —He decidido tomar tu puesto en la empresa. —Natsu sonrió.