♡Get a rich boy♡ |L.S|

By iwhoopsr5

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{en edición} ♡Louis consigue un chico con dinero♡ Contenido: ♡Poemas memorizados. ♡Alcohol. ♡Drogas. ♡Dinero... More

♡playlist♡
♡introducción♡
♥Get a rich boy: Let me♥
{editado}♡1: candy page♡
{editado}♡2: god damn♡
{editado}♡3: he's mine♡
{editado}♡4: daddy's little princess♡
{editado}♡5: bae, i'm gonna ruin u if u let me stay♡
♡6: if i get a little prettier can i be ur baby?♡
♡7: it feels like i'm dying♡
♡8: i need u to touch me♡
♡9: daddy's special touch♡
♡10: let me be the one♡
♡11: love me in pink♡
♡12: every single step♡
♡13: good boys smoke♡
♡14: baby, i'm perfect♡
♡15: hit me up when u'r rich♡
♡16: pacify her♡
♡18: but boy, it's only u♡
♡19: sad words, sad boys♡
♡20: how did it become so violent?♡
♥Get a rich boy: Give me♥
♡21: blow a kiss, fire a gun♡
♡22: baby, go on, twist the knife♡
♡23: tell me what lovers do♡
♡24: i want i want i want♡
♡25: i'm not a little kid now♡
♡26: it's hard, 'cause you make me feel good♡
♡27: i just liked ur tattoos♡
♡28: what kind of bubblegum have u been blowing lately?♡
♡29: but i'm already coolest ♡
♡30: but we never prayed♡
♡31: red, white, blue's in the sky♡
♡32: tell me i'm ur national anthem♡
♥Get a rich boy: Show me♥
♡33: hello, it's me ♡
♡jacky♡
♡trailer♡
♡so i started writing poems♡

♡17: hurt him♡

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By iwhoopsr5

Capítulo 17: "Hurt him"

Una vez que Harry aceptó amarme, no sabía si irme o quedarme; de ambas formas íbamos a sufrir.

La mañana después de que Harry y yo tuviéramos sexo sin sentidos, desperté en mi cama algo mareado. Harry me había llevado a casa por la noche, no mantenía sus ojos sobre los míos, sólo veía el camino y me dio un beso corto de despedida.

De Harry: Te tengo una sorpresa.

Para Harry: Adelante...

De Harry: Tengo un viaje para ambos.

Para Harry: ¿A dónde?

De Harry: Sydney, Australia.

Para Harry: Estás de broma.

De Harry: No.

Para Harry: ¡Quiero ir!

De Harry: Estás oficialmente invitado, ¿puedes?

Para Harry: ¡Sí puedo! ¿Cuándo salimos?

De Harry: Mañana temprano pasaré a tu casa, estaremos allá durante tres días, prepara tu equipaje.

Para Harry: Muy bien.

De Harry: Voy a arreglar los últimos detalles, gatito.

Para Harry: Gracias, papi ♡♡♡

De Harry: No hay de qué, Lou ♥♥♥

Suspiré muy feliz, lancé mi móvil en la cama y sonreí al imaginarnos en Sydney, ambos bajo el cálido sol, en un lindo hotel costoso, yendo a hermosos restaurantes y conviviendo con gente pretenciosa en reuniones de trabajo.

Mi imaginación fue rota por el sonido de llamada en mi celular, gruñí y respondí a chico ruidoso.

"Haz que responderte valga la pena en cinco... cuatro... tres-

"¡Te vas a Sydney!" El sonido irritante de su voz estuvo a punto de romper mi tímpano.

"Mejor al doctor, debiste herir algo en el interior de mi oreja, tremendo idiota" lo reñí.

"¡Amigo, irás súper lejos con él!" Chilló como si quisiera destrozar mis órganos internos.

"Lo sé, miles de kilómetros-

"¡No seas idiota! ¡Hablo en serio!"

"Yo también" hice una mueca, incorporándome para buscar ropa e ir a hablar con el señor Parckings.

"¡Lou, no entiendes! Zayn ni siquiera hace eso por mí, nadie consiente así a su chico-

"Yo digo que sí, la gente lo hace" rodé los ojos, buscando entre mi ropa.

"Si te tiene aprecio de esa forma sí, ¿sabes que es muy fácil para Harry solamente ir... y ya, no llevar a nadie y terminar con su trabajo? Sin embargo, no, él quiere llevarte con él."

"Estás llevando las cosas demasiado lejos, no es como si significara otra cosa, es un viaje, él los tiene todo el tiempo" me metí en una playera rosa de barras.

"¿Tú en serio crees que cualquiera lo haría?" Esta vez su voz se escuchaba más tranquila, por primera vez en la llamada.

"Claro, Zayn te llevaría" me encogí de hombros.

"Zayn irá al viaje y no me ha dicho nada" dijo más que serio.

Dejé de buscar la ropa para ponerle toda mi atención a mi rubio amigo.

"¿Cómo sabes que tienen un viaje?"

"Porque entro al correo de Zayn sin su permiso todo el tiempo" obvió.

"Pero-

"No cualquiera lo haría; sólo Harry por ti" terminó de decir y colgó la línea.

Tallé mi cara con algo de frustración y busqué mi ropa para estar listo. El único en casa era mi padre, las mujeres se habían ido a no sé dónde desde temprano. Tomé mi mochila y salí de casa para buscar al anciano pedófilo.

El señor Parckings estaba en su pórtico, usado una computadora portátil mientras fumaba de su pipa.

"¡Señor Parckings!" Saludé, fingiendo tantito ánimo, el hombre me miró y levantó el mentón en respuesta.

Sonreí, subí los escalones de su pórtico y me senté en la silla al lado del señor.

"¿Qué hace, señor?" Traté de ver en la pantalla de la computadora.

"Comprando en línea" respondió, dejando su pipa al lado.

"Eso suena bien" asentí, descolgué la mochila de mi brazo y saqué un cigarrillo. "¿Puedo?"

Me miró y sonrió.

"¿Él te deja fumar?" Sacó su encendedor.

"Lo hace" me encogí de hombros, acomodé el porro en mis labios y él lo encendió para mí.

"Vaya, debes ser muy bueno" rio mientras volvía su vista a su computadora.

"Lo soy" sonreí, victorioso. "¿Usted no dejaba a sus chicas fumar?"

"Mis chicas eran una princesas" dijo sin mirarme. "Ellas no fumaban porque yo las necesitaba sanas."

"Los chicos buenos fuman" murmuré, dándole una calada al cigarrillo.

"Tengo curiosidad..." puso su dedo índice en su barbilla. "¿Él cómo te llama?"

Mi primera reacción fue ponerme rojo, carraspeé, fingiendo haberme ahogado con el humo.

"Gatito" murmuré.

"Una vez yo llamé así a una chica" dijo pensativo. "Ella era linda, pequeña."

"¿A ustedes sólo les gustan la personas pequeñas?"

"A mí no" negó en seguida. "De todo tipo, lo único que yo necesito es que sean tiernos, que sigan inocentes."

"¿Se puede ser inocente después de tener sexo?"

"Claro que sí, Louis" me miró curioso. "Tú deberías poder responder eso."

Reí con las mejillas encendidas.

"Pero no sé cómo me veo después de...- de bueno, eso" reí nervioso.

"Seguramente te ves bien" se encogió de hombros, tomando todo a la ligera, como si hablar sobre eso fuese de lo más normal.

Estuve un buen rato a su lado, terminé mi cigarrillo y continué hablando con el mayor, era divertido y decía las cosas tal cual deberían ser dichas, no se andaba con rodeos y usaba el lenguaje técnico en cuanto sexo se trataba. Se notaba que había tenido mucha acción en sus años de gloria.

"Mañana voy con Harry a Sydney" comenté después de un rato de conversación.

El señor seguía en su computadora, por lo visto, ahora los ancianos utilizan Facebook, primero la mamá de Harry y luego éste señor, que seguramente acosaba a muchachas tras un perfil de sujeto guapo.

"Un viaje muy largo" agregó. "¿Hasta cuándo van a terminar?"

"¿Usted cuándo lo recomienda?"

"Ya."

"Ya es muy pronto" ladeé la cabeza.

"Louis, si te soy sincero, ya estuviste mucho con él, es decir, sí, ya sé que en un lugar como Richland no se encuentran sujetos como Harry; jóvenes y adinerados, además de gentiles, pero deben haber más. Y tendrías diversidad en tus relaciones" explicó.

"Pero si me siento cómodo con Harry, ¿por qué alejarme?"

"¿Y por qué quedarse?" Planteó. "¿Te vas a quedar para que ambos estén apegados el uno al otro y no poder alejarse ya?"

"Pero-

"En éstas relaciones no te sientes cómodo" explicó con más paciencia, "en éstas relaciones hay que continuar sólo si las ganas de descubrir siguen encendidas, si ya descubriste todo relativamente del chico/chica, entonces te vas."

"Nunca lo vi así" negué.

"Es como un empleo; lo dejas cuando te aburres y buscas mejores opciones" empezó. "Si quieres una relación cómoda, búscate un novio."

Pero el señor Parckings no era tan sabio, porque es no pasa con tu empleo, el empleo lo necesitas y es raro darte el lujo de elegir.

"Además tienes la juventud recorriendo todo tu cuerpo, de cabeza a pies, y de mente. Puedes... si quieres, Louis" guiñó un ojo.

No sabía qué decir, porque él tenía un punto pero yo no me sentía identificado. Continuamos hablando otro rato hasta que me cansé de estar sentado en el suelo y la batería de su computadora se agotó.

Me despedí del señor y volví a casa, donde mi padre seguía solo, viendo la televisión en la sala.

"Papá, iré con Niall unos días, ¿puedo?" Le hablé desde la puerta.

"¿Me estás pidiendo permiso?"

"Eh..." rasqué mi nuca.

"Últimamente has ido a todas partes sin consultarnos, no veo porque ésta vez no" dijo sin mirarme.

"Bien-

"Dieciseis años no te hacen mayor de edad" me recordó.

"No lo creo así-

"Ten cuidado, y siempre considéranos a nosotros antes de salir sin rumbo, tu mamá y yo siempre estamos para ustedes."

"Bien..." alargué y comencé a caminar a las escaleras.

Tenía una maleta que preparar.

•●•

De Harry: Ya estoy aquí.

Afortunadamente, cuando Harry llegó por mí a casa, ésta estaba vacía, todos salieron porque aparentemente el trabajo es más pesado en vacaciones.

Arrastré la maleta conmigo y salí de la casa, Harry estaba esperando junto a su auto.

Volver a verlo despertaba un sentimiento asombroso en mí, su sonrisa me hacía sentir seguro.

"Buenos días" saludó, tomándome en un abrazo para besarme la frente.

"Hola" sonreí y me besó en los labios, un beso de segundo.

"Sydney nos espera" murmuró contra mi oído.

"¿Cuántos días estaremos allá?"

"Tres. Pero sólo voy a cubrir un día en el trabajo, el resto don nuestros" me apretó a él.

Me dejó subir a su auto y él también subió, encendió el motor y condujo con rumbo al aeropuerto.

Durante todo el transcurso traté de despejar mi mente y no pensar en Lisa ni en la señora Styles porque pensar en ellas no dejaba nada más que un mal humor y no quería que eso pasara en pleno viaje con Harry.

En el aeropuerto, pasamos directamente a la zona de abordaje, le dieron unas instrucciones a Harry y subimos a uno de los aviones. Los asientos eran individuales, acomodados en par, uno frente a otro.

Harry pasó sus lentes de su rostro a su cabello y pidió una copa de vino. Sólo de imaginarlo bebiendo se me revolvió el estómago. Permanecí viendo por la ventanilla aun cuando no habíamos despegado, era mejor que verlo a él, consumir ese líquido.

"Ven aquí" la voz gruesa de Harry me sacó de mis pensamientos, movió su copa a un lado y palmeó su pierna en invitación.

Suspiré por lo bajo y me incorporé de mi lugar para ir a su lado, acomodó sus piernas para mí y me senté en ellas, dejando mis piernas colgar por un lado de las suyas.

Busqué meter mi cabeza en el espacio de su cuello y enredé mis brazos por sus hombros, mientras, él movía su mano por mi espalda, de arriba abajo, una y otra vez.

"Eres el gatito más lindo" murmuró y me sentí enrojecer.

"Bueno, bueno, bueno..." reí contra su cuello.

"¿Qué?" Pude escuchar su sonrisa.

"¿Qué vamos a hacer en Sydney?" Jugué con los botones de su camisa.

"Esa es una buena pregunta" metió su mano debajo de mi ropa, haciendo contacto con mi piel tibia. "Supongo que veremos el anochecer, podemos ir a caminar por las calles de la ciudad-

"¿Y a qué hora me follas?" Pregunté en un susurro.

Su mano palmeó mi trasero suavemente, me acomodó lentamente de piernas abiertas sobre su cadera y jugó con mi espalda baja.

"La noche es larga" susurró con voz gruesa en mi oído.

"No quiero esperar" lloriqueé, moviéndome sobre su miembro.

"Gatito" gruñó junto a mi mejilla, controlando mis movimientos sobre él. "Aquí no."

"¿Por qué?" Levanté la mirada y vi directo a sus ojos, moviendo mis dedos sobre su pecho hasta dar con el botón de su camisa.

"Cualquiera podría entrar" dijo sin dejar de mirarme y mirar mis movimientos.

"¿Eso es lo que realmente te interesa?" Besé la piel al descubierto de su pecho.

"Un poco" metió la punta de sus dedos en mi pantalón.

"¿Qué más te preocupa?" Reté. "Seré silencioso."

"Sé que eres silencioso, el problema es que quiero lo contrario" metió más su mano, hasta que sus dedos dieron con mi entrada "Siento que no estoy contigo hace meses, si tenemos sexo, quiero que grites por sentirme" jugó con su dedo corazón, "que jadees mi nombre cada vez que entre en ti. Que me pidas más."

"Siempre te pido más" erguí mi espalda en respuesta a su tacto.

"Podría-

"Señor Styles, ya vamos a llegar" un sujeto entró en el lugar, siendo un interrupción por completo.

Harry retiró la mano de mí pero me mantuvo a su lado.

"Gracias, ¿puedes llamar antes de interrumpir?" casi gruñó.

El chico carraspeó nervioso e incómodo.

"Claro, lo siento" bajó la cabeza y salió de nuestra cabina.

"¿Quién es él?" me incorporé en mi lugar.

"Es mi asistente, lo acabo de contratar."

"Parece muy joven" comenté.

"Lo es, tiene veinte años cuando mucho" estiró la mano para tomar su copa de vino. "Necesitaba un asistente."

"Supongo" me bajé de su regazo y regresé a mi asiento, subí los pies para juntar mis rodillas a mi barbilla.

"Estábamos en algo" dijo serio.

"Estábamos" asentí y miré por la ventanilla.

El capitán pidió oficialmente que abrocháramos los cinturones de seguridad y descendimos del vuelo, Harry bajó primero y me tendió la mano para bajar. El clima era bueno, para nada el frío de Richland, era cálido.

Harry tomó mi mano y ambos fuimos directamente a un auto en el estacionamiento, unos chicos trajeron el equipaje y el asistente de Harry también vino. Del que por cierto, no sabía el nombre. Era un chico delgado, alto, de cabello rojizo y tenía una piel blanca que era decorada por ojos azules, llevaba consigo una agenda y un teléfono celular estaba entre sus dedos mientras hacía llamadas.

"Aquí es muy bonito" murmuré una vez que el auto avanzó por las calles de Sydney, estaba más que embelesado por todo el paisaje.

"Sí, es lindo" añadió el chico pelirrojo por lo bajo, también atento al paisaje, dejé la mirada en él un rato hasta que se dio cuenta y bajó la mirada con las mejillas rojas. "Lo siento, es sólo que-

"Que es bonito" le sonreí. "¿Cómo te llamas?"

"Freddie" tendió su mano y me ofreció un apretón de saludo. "Tú eres Louis, lo sé. El señor Styles te mencionó muchas veces, insistiendo en que tuviera cuidado contigo, que si querías cualquier cosa, la tuvieras de inmediato y yo lo hiciera posible."

"¿Él dijo eso?" busqué a Harry con la mirada, iba en el asiento delantero del auto, charlando con el chófer.

"Lo hizo, varias veces" reí levemente.

"La buena noticia para ti es que no pido muchas cosas" le aseguré y pareció aliviado.

"¿Habías venido a Sydney?" preguntó.

"No, apenas salía de mi casa" reí. "¿Tú?"

"Una vez, para la graduación de preparatoria" asintió mientras sonreía.

Durante todo el camino al hotel estuve hablando con Freddie, quien resultó ser muy amigable y accesible, sabía mantener conversaciones y era divertido, además de inteligente. Harry no nos miró ni por un segundo y no sabía cómo sentirme al respecto. Es decir, ya tenemos un buen tiempo juntos, y para ser sinceros, tenía miedo de que se aburriera de mí, que deseara más emoción en la relación y era algo que yo no le podía dar; mi mal humor, carácter cambiante y un montón de inseguridades, eso sí se lo podía dar.

Sentirlo distante sólo me hacía pensar en estar separados, y había dejado que ambos, o al menos yo sí, me acostumbrara a su presencia.

Los tres nos bajamos del auto, entramos al hotel y ahora Freddie se hizo cargo de la recepción, mientras Harry y yo subíamos en el elevador tomados de la mano. Llegamos a la habitación y Freddie llegó corriendo para pasar la tarjeta de entrada y dejarnos pasar, él se fue a su habitación y nosotros nos adentramos.

"Tomaré un ducha, iré al trabajo y volveré por la noche" comenzó a desabotonar su camisa, lo observé atentamente desde el lugar que había tomado en la cama, su mirada dio con la mía a través del espejo frente a él y entrecerró los ojos mientras me miraba. "¿Qué sucede?"

Parpadeé y retiré la vista de él, negando suavemente con la cabeza.

"¿Estás bien?" insistió.

"Lo estoy" asentí sin verlo.

Se quedó en silencio, no lo escuché moverse así que imaginé que seguía observándome, unos segundos después escuché la puerta del baño cerrarse. Me recosté en la cama, esperando a que él saliera de la ducha, miré el techo sin más opción de pasar el tiempo.

Llamaron a la puerta y era Freddie, al parecer también había tomado un baño, olía a colonia y estaba peinado, aún con su pequeña libreta en la mano y el móvil entre sus manos, siendo manipulado.

"¿Irás con Harry?"

"Sí, el señor me necesita ahí" asintió, despegando la vista de su aparato por apenas unos segundos antes de volverla a la pantalla.

"Me aburriré aquí" renegué y él rio.

"Seguramente encontrarás algo que hacer" negué, completamente en desacuerdo con él. "¿El señor Styles aún no sale de su ducha?"

"No, tarda mucho siempre" me encogí de hombros.

"Vamos quince minutos tarde" miró el reloj en su muñeca como si el móvil que tenía en la mano no mostrara la hora.

"Ya va a terminar."

"¿Le puedes decir que lo veo en el estacionamiento del sótano?"

"Claro, yo le digo" él murmuró algo que era más para él que para mí y cerré la puerta.

Cuando regresé a la habitación Harry ya había salido del baño y se estaba poniendo la ropa.

"Dice Freddie que te ve en el estacionamiento, van quince minutos tarde" dije antes de lanzarme en la cama.

"Bien, ya casi termino" movió sus rizos hacia un lado. "¿Quieres hacer algo cuando llegue del trabajo?"

"¿Llegarás tarde?"

"Algo..."

"Entonces no, estoy cansado del viaje, si llegas tarde probablemente me encuentres dormido" no dijo nada al principio, podía escucharlo moverse frente al espejo.

"Bien, duerme" tomó sus cosas y se encaminó a la puerta. "No me esperes despierto, no es necesario."

Escuché la puerta cerrarse y rodé los ojos con molestia.

"Ña, ña, ña, llegaré tarde" hice un muy fracasado intento por fingir su voz. "Ña, ña, ña, no me esperes despierto. Ña, ña, ña, no es necesario."

Lancé una almohada a través de la habitación.

"Nunca es necesario realmente" me acomodé en la cama y me estuve tranquilo hasta que me quedé dormido.

Cuando me desperté ya era de noche, las cortinas estaban abiertas, tapaban la vista de la hermosa ciudad después de un pedazo de mar que tenía prácticamente a mis pies y había viento entrando.

Quité mis zapatos y me puse de pie para estirarme.

La puerta de la habitación se abrió y la sombra de Harry entró por el pequeño corredor, las luces del lugar seguían apagadas y no podía distinguir su rostro con claridad.

"Hola, Lou" saludó y lanzó su saco a la silla.

"Hola" murmuré con mi voz todavía ronca por estar recién despierto.

"¿Estabas dormido?"

"Lo estaba, sí" tallé mis ojos. "¿Bebiste?"

"Un poco, vengo casi sobrio" había un toque divertido en su voz.

"Esa es una buena noticia" reí por lo bajo. "¿Y Freddie?"

"Él está donde debe estar, en su habitación" respondió serio.

"¿Por qué hablas de esa forma cuando menciono a Freddie?" me senté en la orilla de la cama.

"No es sólo con Freddie" caminó hacia mí, "me molesta que cualquier sujeto joven se te acerque."

"Ya somos dos" reí cuando ya estaba prácticamente sobre mí.

"¿También te molestan los jóvenes cerca de mí?" torció sus labios en una sonrisa, asentí. "¿Por qué habría de ser así?"

"Por tus gustos por los cuerpos pequeños" puse mis manos en sus hombros, recostándome en la cama y atrayéndolo conmigo.

"Eso es falso, el único cuerpo pequeño que me gusta y me hace perder la cabeza, es el tuyo" bajó su cabeza para acercar su rostros y besarme.

El beso duró realmente poco de forma lenta y queda, pronto sus labios se sintieron hambrientos sobre los míos y sus manos empezaron a descubrir una vez más, mi cuerpo.

Me recostó por completo en la cama y sacó mi playera por encima de mi cabeza, bajó su rostro por mi cuello, dejando un camino de húmedos

jeans, deshaciéndose de él para continuar su camino hasta que la única prenda en mí eran mis rosas bragas. Me tomó de los costados y me arrastró más a la cima de la cama, acomodó una de sus rodillas entre mis piernas y me hizo abrirlas para él entrar completamente ahí. Quitó la camisa de su cuerpo y continuó besándome en los labios mientras estimulaba mi miembro.

"Papi-i" jadeé cuando su dedo se acercó a mi entrada, dentro de mis bragas  había todo un problema, desde mi obviamente, erecto miembro hasta Harry interrumpiendo en mí.

Siguió con la estimulación sin vacilar ni un poco hasta que después de un rato estuve listo para él, sacó el pantalón de sus piernas y la ropa interior, buscó el preservativo y se sentó con la espalda en la cabecera de la cama. Gateé hasta su regazo y lamí su vientre, su ombligo y seguía descendiendo hasta su pene, estaba más que caliente y parecía querer explotar. Tomé la base y me llevé la punta a la boca, probando las primeras gotas que de ahí salían, luego comencé a meterlo todo en mi boca, rozando con mis labios su sensible piel cada vez que entraba y salía de mí.

Subí la mirada a la suya y sus ojos llenos de perversión se volvieron mi nueva religión, continué bombeando sin dejar su mirada, retándolo a hacer más. Enderezó la espalda por segundo y supe que estaba a punto de llegar, cosa que no era mi actual propósito, dejé ir su pene de mi boca y me senté en su regazo, con mis manos acaricié su pecho y me detuve en sus anchos hombros, levanté ligeramente la cadera y con una mano alineé su duro pene a mi entrada y corrí el látex por su longitud, entonces bajé muy lentamente, en medio de jadeos y ojos presionados por la invasión. Él tomó mi cintura y me ayudó a subir y bajar una vez que estuve cómodo con él dentro de mí, los movimientos se fueron haciendo más agiles y rápidos, su cadera se movía al ritmo de mi cuerpo y sus manos nunca se movieron de su lugar.

"Gatito" murmuró, se enderezó de su lugar y alcanzó mis labios en un beso rudo, tomándolo todo.

Unas embestidas más, y ambos llegamos.

Nuestras respiraciones encontradas de acompasaron como único sonido en la habitación, acaricié su pecho de nuevo, encontrándome con su collar en el camino, lo tomé entre mis dedos y jugué unos segundos con él hasta que sentí que salí de mí, causándome un leve dolor de abandono.

"Eres el más lindo de todos" susurró, acarició mi mejilla y ésta se coloreó de rojo.

"Tú también eres lo más hermoso" dije contra sus labios y los juntamos en otro beso.

Lo sentí sonreír y me rodeó con sus brazos para acomodarme junto a él en la cama, abrazándome y dejando su frente pegada a la mía.

Me levanté de la cama una vez que sentí a Harry dormir a mi lado, tomé el pantalón deportivo que Harry llevaba en la maleta y me metí en él, caminé a la ventana abierta y salí al balcón. La ciudad estaba dormida, con apenas unos movimientos en sus calles, las personas especiales aún conducían de noche. Me quedé recargado en el barandal del balcón, viendo el paisaje, era una costa donde los veleros ya estaban allí, descansando de navegar.

La puerta de la ventana se abrió más y Harry salió detrás de mí, haciendo una escena parecida a las de Las Vegas, donde él salía de la habitación después de haber estado juntos. Me abrazó por detrás, pasando sus brazos hacia en frente y recargó su barbilla en mi hombro desnudo.

"Me gusta esto" murmuró en mi oído.

"¿Mi trasero?" reí y él me apretó contra sí.

"También" tomó mis manos y jugó con ellas. "¿Te gusta la vista?"

"Rara vez no disfruto una vista" suspiré.

"De verdad, me gusta todo esto" repitió.

"¿Qué? Especifica."

"Estar a tu lado, estar en una bonita ciudad" acarició mi hombro con su barbilla.

"También me gusta" asentí, porque también me gustaba estar a su lado y muchísimo más si podía estar en un hermoso lugar.

"Yo a veces-" se detuvo a sí mismo.

"¿Qué?" me giré para verlo.

"No, olvídalo. Estaba..., yo sólo-

"¿Qué, Harry?"

Se veía nervioso y eso era muy poco usual en él.

"Estuve pensando mucho en nosotros" empezó, yo no sabía que en ese entonces, había sido bueno detenerlo antes de que dijera aquello. "Pensé en cómo te conocí, en cómo hemos seguido juntos, y me pregunté cómo era posible todo entre nosotros. Y de verdad es increíble que yo mismo me haya aceptado finalmente esto-

"¿Esto, qué?" arrugué la frente, tratando de entender lo que decía.

"Louis, yo tenía miedo a enamorarme. Yo nunca pensé que enamorarme fuese tan bueno, luego llegaste tú y mi idea del amor cambió. Así que gracias" sonrió con las mejillas rojas. "Es un placer estar enamorado de ti, Louis."

De pronto todo se volvió frío, parecía como si el clima de la ciudad hubiese descendido a cero grados, y sentía toda la sangre en los pies.

Los ojos de Harry seguían sobre los míos, aun sonriendo, esperando por mi respuesta, había una chispa en sus orbes verde, era más que obvio que querían hacer conexión con los míos, él quería ser correspondido, él quería que mis ojos brillaran por la misma razón que lo hacen los suyos.

"Eh- yo... creo que-" me fue imposible que mi lengua no se trabara con las palabras.

Su sonrisa dudó un poco, pero la mantuvo aun cuando bajé la mirada.

"Harry- yo-

"Te amo" dijo claramente, sus facciones se oscurecieron y aflojó su agarre en mí, "eso era básicamente lo que pensé, y- y lo que quería decir."

Había esperanza en sus ojos, un poco, y se rompió una vez que pasé saliva y cerré los ojos con fuerza.

"Me voy a dormir" dijo muy serio, soltó sus brazos y me dejó lentamente, bajó su rostro y entró en la habitación, la puerta del baño se cerró de golpe tras él.

Así que, papi se enamoró de mí.

•●•

Por la mañana Harry ya no estaba en la cama cuando yo desperté, por la noche yo había entrado y me había quedado dormido, esperando a que Harry saliera del baño para dormir, lo sentí acomodarse a mi lado por la madrugada pero eran las nueve de la mañana y él no estaba a mi lado.

Me estiré y entré a bañarme, tomándome mi tiempo para reflexionar y tener un buen baño.

A estas alturas podía creer que las palabras de Harry anoche no habían sido más que un absurdo sueño, o una pesadilla. Pero se sentía tan real y tan falso a la vez.

Sacudí mi cabello para secarlo por completo, y dejé la toalla de lado, pasé el cuello de mi playera por mi cabeza y estuve listo. La puerta de la habitación se abrió y cerró rápido y los pasos avanzaron rápido por el corredor hasta que Harry estuvo a mi vista, llevaba unos jeans ajustados y una gran sudadera como si estuviese haciendo frío, su rostro parecía el de un sujeto con resaca, sus ojos tenían marcas debajo y estaba pálido.

"Tenemos que volver a Richland" dijo, levantando la mirada a penas un poco de la pantalla de su móvil para verme sin ninguna expresión.

"¿Por qué?"

"Niall no aparece por ningún lado, Zayn me llamó recién, nadie sabe nada de éste chico desde ayer por la tarde, creo que Zayn lo iba a llevar a cenar y él tan sólo no estaba en su casa" empezó a decir, abrió su maleta y comenzó a guardar su ropa.

"¿No era que Zayn también vino aquí?" pregunté.

"No, al final él no vino porque quería pasar tiempo con Niall-" se detuvo y me miró fijamente. "¿Cómo es que tú sabes que Zayn también tenía viaje?"

"Eh- yo-, lo supuse" me encogí de hombros.

"¿Tú no sabes algo?" preguntó.

"¿Cómo sabría algo si estoy aquí?"

"¿Mensajes de texto?" preguntó divertido, cerró la maleta.

"No he hablado con nadie desde ayer, ni mensajes ni llamadas" lo seguí con la mirada.

"Pues el chico no aparece y Zayn está realmente molesto..., contigo, es como si él supiera algo que yo no" se encogió de hombros.

"¿Qué insinúas?" me crucé de brazos.

"Que tal vez Niall y tú son aún más cercanos de lo que yo pensaba" dijo sin dudarlo.

Apreté el mentón, evitando la molestia de responderle, simplemente busqué mi ropa por toda la habitación y llené mi maleta. Tan pronto como estuvimos listos, Freddie vino con nosotros y el chófer nos llevó al aeropuerto.

"¿Puedes dejar tu teléfono?"

"No."

Continué marcando al número de Niall pero la línea siempre se iba al buzón de voz, le mandé mensajes pero no había respuesta.

Tomamos el vuelo y en el camino no hice más que plantearme los posibles lugares en los que mi amigo podría estar. Harry también se mantuvo callado todo el vuelo, sumergido en sus propios pensamientos.

Al llegar, bajamos del avión y lo primero que noté, o más bien, al primero que noté, fue a Zayn, el moreno estaba en el estacionamiento, esperándonos con unas gafas solares puestas en su rostro y ropa deportiva. Caminamos hasta él.

"Espero que no sepas en serio dónde mierda está Niall, porque si más tarde descubro que tú lo sabías" empezó a decir en cuanto estuvimos cerca, él incluso se enfrentó a mí con su dedo índice señalándome, "no va a ser bonito-

"Zayn, ya" Harry se interpuso. "Louis no sabe dónde se metió Niall y es punto final."

"Más le vale" acomodó las gafas en el puente de su nariz y subió a su auto, tomando su rumbo.

Bajé la cabeza, aguantando las ganas de llorar.

"Hey, ignora a Zayn, supongo que no sabes dónde está Niall, no pasará nada" me sujetó de los hombros y me guió al auto. "Lo encontraremos."

Asentí, no muy convencido.

La mano de Harry no se alejó de la mía en toda la trayectoria a mi casa, haciéndome sentir seguro una vez más, acariciaba mi dorso y lo besaba de vez en cuando. No había nadie en casa cuando llegué, me despedí de Harry con un beso en la mejilla y entré a casa.

Suspiré apenas cerré la puerta y subí las escaleras con algo de pereza. Nuestras pequeñas vacaciones se arruinaron, había querido pasar unos buenos momentos con él en tan linda ciudad, obviamente la razón de todo no es algo estúpido y realmente esperaba que Niall estuviera bien, que hubiese alguna loca razón para esconderse, de hecho, esperaba que se estuviera escondiendo y nadie le hubiese hecho daño.

Abrí la puerta de mi habitación y la cerré, lanzando mi maleta a una esquina del cuarto, me lancé sobre la cama y cubrí mi rostro con mi mano, aun pensando en Niall y Harry enamorado. Ninguna de las situaciones habían sido mi intención y de ambas me sentía culpable.

"Hola."

Del puro susto, reparé de la cama hasta el suelo.

"Mierda" murmuré, tocando mi espalda.

"Uy lo siento, no era mi intención asustarte" asomó su cabeza por la orilla de la cama.

"Maldito Niall" me levanté lentamente porque el dolor se interpuso.

"Lo siento" rio.

"Eres un idiota, ¿sabes que todos te están buscando?" me senté a su lado sobre el colchón.

Lucía demacrado, los ojos profundos y sus mejillas se veían más delgadas que nunca.

"Lo sé, lamento interrumpir tu momento con Harry" dijo serio.

"Está bien" palmeé su hombro, "¿Cómo rayos entraste aquí?"

"Tus padres rara vez dejan cerrado con llave la entrada, deberían asegurarla, cualquier loco podría entrar" reímos.

"Me preocupé por ti. ¿Estás bien?"

Parpadeó y mordió su labio, buscando una respuesta, finalmente bajó la mirada y negó con la cabeza mientras cerraba los ojos para aguantar las lágrimas.

"No" susurró, ladeé la cabeza y lo abracé por los hombros, recargándolo a mi lado para dejarlo llorar en mi hombro. "Estoy tan jodido."

"No digas eso, Ni-

"Lo amo y no hay otra manera de-, tan sólo quiero ser algo para él" se acomodó más cerca de mí, "quería ser algo para él."

"Lo puedes ser-

"No" sacudió la cabeza repetidas veces, "no puedo, ya no, estoy seguro de que él puso su corazón en otra persona y yo tan sólo- yo tan sólo ya no seré nadie, no seré nada más que alguien con quien desquitar las ganas de follar."

Acaricié su cabello y besé su frente.

"Tú no sabes eso."

"Lo sé, él tiene otra persona" moqueó. "Y él es su novio, ¿puedes creerlo?"

Suspiré y retuve las lágrimas de mis ojos.

"A él lo llevará al cine, lo tomará de la mano en todas partes, lo llevará a casa de su familia para presentarlo, le regalará flores, lo dejará en la puerta de su casa sin la intención pícara de entrar y tener sexo con él porque con su novio esperará hasta la noche de bodas" sollozó.

"¿No te estás precipitando?"

"¡¿Por qué todos me dicen eso?!" se puso de pie y tapó su boca para sollozar una vez más. "¡Todos piensan que estoy demente! ¡No lo estoy! ¡Estoy seguro de que con él querrá formar una familia!"

"Niall, no sé qué decirte-

"Lo quiero matar" susurró en medio de un fuerte sollozo. "Te juro, Louis, lo quiero matar. Quiero matar al estúpido que se hace pasar por el amor de su vida."

"Tienes que tranquilizarte y dejar de hablar por hablar."

"Todos estarían tristes si dejo de hablar por hablar, Louis, ellos no saben de lo que soy capaz" moqueó.

"Estás hablando idioteces, Ni" le aseguré y mi móvil comenzó a sonar.

"Responde, es Zayn" señaló el móvil en mi mesa de noche.

Corrí y acepté la llamada.

"¡Abre la maldita puerta!"

"Zayn, por favor-

"¡Te lo dije! ¿Verdad que te lo dije? ¡Si sabías que Niall estaba en tu casas pudiste decirlo, hijo de puta!"

"No-

"¡Mis bolas! ¡Abre la puta puerta antes de que la derribe!" y colgó la llamada.

"¿Le llamaste?" le pregunté a Niall, asintió.

"Le mandé un mensaje."

"Me va a matar" susurré. "Vamos con él, está tan furioso que sí lo creo capaz de derribar la puerta."

"Es pura palabrería, él no lo haría" rio en medio de las lágrimas.

Lo empujé hacia la salida, lo arrastré por las escaleras y abrí la puerta corriendo, tan pronto estuvo abierta la entrada, Zayn se dejó ir sobre mí.

"¡Te lo advertí! ¡Siempre supiste que él estaba aquí! ¡No creas que por ser de Harry no te voy a moler a golpes por idiota!"

"¡Ya, Zayn!" Niall corrió a nuestro lado y tomó de los hombros a Zayn.

"¡Déjame, Niall! ¡Voy asegurarme que éste cabrón no se vuelva a meter en nuestros asuntos!"

"Ya, Zayn, deja a mi chico en paz" al voz tranquila de Harry vino de la entrada y se acercó rápido a nosotros. "Zayn, déjalo ir."

El moreno dudó unos instantes y me soltó de golpe, dejándome caer en el suelo de costado.

"Niall, vamos" gruñó y el rubio lo siguió lentamente, aun llorando.

Me incorporé en el suelo y miré a Harry en el recibidor. La cara de decepción en su rostro fue una de las peores cosas en mi vida.

"Pensé-" movió la mano hacia mí, restándole importancia en un movimiento de desdén. "Olvídalo, Lou."

"¿Te vas?"

"Tengo que ir a casa de mi madre, Lisa está esperando" respondió por lo bajo.

"Adiós, papi."

Se quedó viéndome fijamente y caminó a la puerta, justo cuando pensé que no iba responder y antes de salir, se giró para verme.

"Nos vemos mañana, gatito" y cerró la puerta.

N/A: gracias por los leídos, están siendo unos lectores geniales :)

Si alguien lo notó, cambié la edad de Louis, al principio tenía quince pero para evitar o reducir problemas con las reglas de Wattpad, decidí cambiarla. En lugar de tener quince y cumplir dieciséis, ahora tenía dieciséis y cumplió diecisiete. En algunos de los capítulos anteriores probablemente se me haya pasado cambiarla pero ya cambié la mayoría.

Jacky, se va.

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