Miedo. [#Wattys2016]

By LibrosAdicta

16.5M 818K 191K

Alice es una chica, ¿cómo decirlo? muy insegura. Es la típica chica buena, con un trabajo (casi mediocre), a... More

Adelanto:
Capítulo 1.
Capítulo 2.
Capítulo 3.
Capítulo 4.
Capítulo 5.
Capítulo 6.
Capítulo 7.
Capítulo 8.
Capítulo 9.
Capítulo 10.
Capítulo 11.
Capítulo 12.
Capítulo 13.
Capítulo 14.
Capítulo 15.
Capítulo 16.
Capítulo 17.
Capítulo 18.
Capítulo 19.
Capítulo 20.
Capítulo 21.
Capítulo 22.
Capítulo 23.
Capítulo 24.
Capítulo 25.
Capítulo 26.
Capítulo 27.
Capítulo 29.
Capítulo 30.
Capítulo 31.
Capítulo 32.
Capítulo 33.
Capítulo 33. (Parte 2)
Capítulo 34.
Capítulo 35.
Capítulo 36.
Capítulo 37.
¡Booktrailer!
Capítulo 38.
Capítulo 39.
Capítulo 40.
Capítulo 41.
Capítulo 42.
Capítulo 43.
Grupo WhatsApp:
Capítulo 44.
Capítulo 45.
Capítulo 46.
Capítulo 47 |Final|
¡Nueva novela!
Miedo.
Noah

Capítulo 28.

285K 14.8K 3.1K
By LibrosAdicta

Pov's Alice.

Quedo tirada en el suelo con el corazón latiendome demasiado rápido.

Sus labios estaban tan cerca, que solo tenía que acercarme un poco para tenerlos sobre los míos.

Me levanto aturdida y observo como Steph se acerca al saco.

¡No! ¡Otra vez no!

-Bien, niñata. Seguiremos el entrenamiento, ¿o ya te has cansado? -Sonríe burlón.

Niego con la cabeza.

No le daré el gusto de que me vea cansada.

Propino un golpe al saco pero achino los ojos debido al daño que sube desde mi empeine hasta la rodilla. Ni siquiera me quejo pero tengo que cerrar los ojos para no marearme por el dolor.

-Te he dicho que así no -Espeta Stephen.

Siento su presencia a mi lado y me tenso cuando siento sus manos muy cerca de mi trasero. Levanta mi pierna y coloca el empeine mirando al techo.

-Ahora sí -Dice y se separa. Puedo respirar correctamente cuando lo hace.

Sigo practicando las patadas hasta que siento dos manos posarse en mi trasero. Abro los ojos mientras me doy la vuelta.
Un hombre frente a mí me mira de arriba a abajo haciéndome sentir asco. Cuando veo que sus manos intentan ponerse en mi cuerpo de nuevo, lanzo una patada que da justo donde quería: en la rodilla. Se dobla y sin saber muy bien que hacer lo empujo con la punta del pie. No consigo mucho pues él se incorpora muy rápido y camina hacía mí.

Corro hacía Stephen y me pongo tras de él.

-Esta tía es dura de pelar -Escucho la voz grave del hombre.

-Sí, puede ser muy dura en todos los sentidos -Doy un golpe en su hombro mientras retuerzo su camiseta en mis manos.

Me siento como una cría.

-¿Tienes miedo de un tío cachondo y no te asusta ir con uno que en cualquier momento puede ser tiroteado? -Abro los ojos y me pongo frente a él, percatandome de que el hombre se ha marchado.

-Tú no serás tiroteado -Musito frunciendo el ceño.

-Eso tú no lo sabes -Sonríe y en un autoreflejo me aparto cuando observo su pierna aproximarse a mí.

-Deja de intentar darme una patada -Mascullo molesta.

-Necesito saber si has aprendido bien el primer tema.

-Pues claro, ¿o acaso no te acuerdas de la patada que te he dado antes? -Sonrío victoriosa.

-No cantes victoria, niñata -Responde.

Lo ignoro mientras sigo con la práctica.

No sé cuanto tiempo pasa, tal vez minutos pero a mí me parecen horas, hasta que Stephen me coge de los hombros y para mis movimientos.

-Ya ya, no querrás romperte algo en la primera clase -Dice él y sonríe- Descanso para ti, niñata. Ahora me toca a mí.

Camino hasta mi mochila y saco una botella de agua, bebo todo el contenida de un trago y suspiro cuando acabo.

Genial, mañana estaré destrozada. Pienso rodando los ojos.

Cuando miro al frente no veo a Stephen, por lo que me alarmo y comienzo a buscarlo con la mirada. Lo encuentro hablando con un hombre en lo alto del cuadrilátero. Me acerco curiosa y me quedo apoyada en una columna, observándolo perfectamente desde aquí.

Su cuerpo está en una postura relajada mientras mueve sus labios al hablar. Verlo en ropa de deporte me ha hecho darme cuenta de que puede sorprenderme. Pensaba que cuando lo vi sin camiseta no podía estar más sexy, pero en verdad si que puede.

Me sorprendo al ver que ese tal Derek también se encuentra ahí, con unos guantes de boxeo.

Oh no.

Steph se coloca otros guantes en sus manos, que forman puños, uno en la altura de la barbilla y el otro a la altura del pecho.

De repente una preocupación invade todo mi ser. No quiero que le hagan nada, yo, no lo soportaría. Ya lo vi inconsciente y con una bala incrustada en su brazo y fue lo peor. No sé porqué, soy incapaz de verlo mal.

Comienzan a pelear y el primero en lanzar un golpe es Derek. Él es más rápido que Stephen por lo que puede darle sin ningún tipo de problema. Hago una mueca cuando de la nariz del chico de tatuajes brota sangre. Él se la limpia con brusquedad intentando golpear a Derek, aunque lo logra, no consigue ni siquiera provocarle un rasguño.
Cuando todo parece la derrota para el chico de tatuajes, un despiste de Derek indica todo lo contrario. Él queda pegado al suelo boca arriba mientras Stephen prepara su puño para golpearlo.

¿Será capaz?

Oh vamos, es de Stephen de quien hablamos. No tiene piedad.

Sin saber que hacer y viendo que nadie intenta pararlos, al revés, un grupo de hombres se encuentra rodeandolos en la parte inferior del cuadrilátero, intento pasar y colarme. Cuando lo hago me posiciono frente a Stephen y lo miro con el mentón alto.

-¡Déjalo! -Exclamo sintiendo la vergüenza infiltrarse en mi cuerpo.

-Vete de aquí, niñata -Gruñe.

Niego con la cabeza.

-Si tan fuerte te crees, pelea conmigo -Trago saliva arrepintiendome de inmediato de mis palabras.

Los gritos que se escuchaban en el gimnasio dejan de oírse al momento. Todo queda sumido en un silencio demasiado incómodo.

-¿Qué? -Pregunta frunciendo el ceño.

-Lo que olles -Pronuncio casi en un susurro.

Cuando él comienza a caminar hacia mí, yo retrocedo hasta chocar con la cuerda que bordea todo el cuadrilátero.

Su mirada me dice que está enfadado, muy enfadado. Puedo deducir que no estará acostumbrado a que lo desafíen. Y es normal, ¿quién en su sano juicio amenazaria o desafiaria a un hombre que lleva una navaja cada vez que sale a la calle?

Desde luego yo no, pero justo ahora lo estoy haciendo...

-¿Por qué haces esto? Eres una maldita entrometida, niñata -Masculla con los puños apretados.

-No quería que le pegaras. No puedes ir pegando a la gente, así porque sí -Su pecho queda tan cerca de mí que mis pechos lo rozan.

-Tú no puedes decirme que hacer y más querer defender a ese estúpido-Escupe con ira en su mirada.

Tiemblo de puro miedo al pensar en qué será capaz de hacer. No quiero pensar que me desnudará frente a toda esta gente.

Siento como su mano alcanza mi trasero y después, me eleva sin ningún esfuerzo. Me coloca como un saco de patatas y sale del cuadrilátero haciéndose paso entre la gente. Yo mientras pataleo y grito pidiendo que me baje.

Cuando me baja tengo que cerrar los ojos un momento para no marearme. Luego lo miro enfadada y molesta por haberme llevado así.

-¿Pero qué te pasa? -Pregunto alzando las cejas y perdiendo la cordura.

-No, qué te pasa a ti. ¡Estoy harto de todo lo que tenga que ver contigo! En verdad, eres un jodido grano en el culo.

Me da un vuelco al corazón al escucharlo. No era consciente de lo que pensaba de mí.
Abro la boca sorprendida y a la vez decepcionada por sus palabras.

Asiento y sonrío negando con la cabeza, aguantando unas lágrimas dispuestas a salir pero que retendré cueste lo que cueste.

-Lo siento, no sé porqué tuve que pedirte esto. Ha sido una tontería por mi parte -Trago saliva, guardandome todas las palabras que querría soltarle.

No debería molestarme, pero lo hace y más de lo que pensaba.

Intento irme y salir de donde quiera que me haya llevado pero antes de que pueda hacerlo, su mano agarra mi brazo.

-¿Por qué no me dejas en paz, Stephen? -Pronuncio en un susurro al percatarme de los cerca que nos encontramos.

Mis labios de repente se encuentran secos por lo que paso mi lengua por ellos. Los ojos de Stephen caen a mi boca.

Gruñe y de un momento a otro, siento como sus suaves y carnosos labios sellan los míos con fuerza. Abro los ojos cuando me aprisiona entre la pared y su cuerpo, haciendo fuerza en su agarre en mi brazo, provocando que gima pero no de placer, sino de dolor.

Cuando consigo quitármelo de encima, escabullendome de entre sus brazos, alzo la mano y golpeo su mejilla, cerrando los ojos en el momento.

-¡¿Cómo puedes besarme después de decirme todo eso?! ¡Y de esa manera! -Exclamo resignada y ofendida.

-Pero si lo estabas deseando. Llevas todo el puto día provocandome -Contesta sobandose las sienes con la mano derecha y sin apenas inmutarse por mi cachetada.

-¿Qué? ¿Yo? -Abro los ojos sorprendida.

-No finjas que no sientes la tensión sexual que hay entre nosotros. Porque desde luego que es bien grande -Espeta cruzándose de brazos.

Por mucho que quiera negarlo, sé que no puedo. Hay algo, tensión o química que hace que quiera verlo cada día más y más. La verdad, no sé que me pasa, nunca había estado en esta situación con un chico por lo que me siento toda una novata.

-Será mejor que... -Conecto mis ojos con los suyos y luego agacho la cabeza- ...adiós.

° ° °

Al día siguiente decidí no presentarme pues aún estaba dándole vueltas a lo que Stephen me dijo. Sé que tiene razón pero no es como si me atrajese para acostarme con él. ¿No? Pues claro que no.

Sin embargo al segundo día sí que fui, ya que para algo había pagado el primer mes. Estaba dispuesta a entrenar yo por mi cuenta, no iba a dejar que el chico de tatuajes estropeara mis planes.

Entré al establecimiento con un poco de desconfianza, pues sin la "protección" de Steph, estoy segura que no va a ser lo mismo. Pero yo, estoy más que dispuesta a utilizar lo aprendido contra cualquiera que intentara tocarme un pelo.

Todo el sitio está tal y como lo recordaba: con olor a sudor mezclado con desodorante de hombre.

Sujeto la mochila en mi hombro derecho, mientras avanzo intentando no ser vista.

-¡Anda! Alice -Derek.
Tenía que ser él. Hundo los hombros y sin girarme aún, carraspeo incómoda.

-Hola Derek -Siento su presencia a mi lado.

-¡Pero si hablas! -Exclama sonriendo.

Muestro una sonrisa falsa.

-¿Hoy no vienes con S? -Pregunta.

-¿Quién?- Digo distraída.

-Stephen.

-Ah no, no sé donde está -Mascullo.

-Mejor, no dejaba que me acercara -Contesta.

Pero que chico más raro.

-Bueno, Derek voy a entrenar... -Digo caminando hacia el mismo lugar en el que hace dos días me encontraba con el chico de tatuajes.

-¿Quieres qué sea tu entrenador? -Pregunta y yo me quedo callada, dudosa- ¡A partir de ahora te entrenaré yo! - Exclama.

-No no, dejalo yo puedo so... -Me interrumpe.

-Una chica tan guapa como tú necesita a un caballero que la socorra y ese seré yo.

Como si él fuera un caballero, pienso irónica.

Después de intentar espantarlo y salir fallida en el intento tengo que morderme la lengua y aguantarme.

-Stephen te enseñó mal -Dice mirándome serio.

Yo simplemente me encojo de hombros mientras golpeo el saco de nuevo.

-Creo que él sabe lo que hace, por eso le pedí ayuda -Espeto defendiendolo, aunque en verdad no se lo merezca.

-Oh, hasta lo defiendes -Sonríe burlón y se acerca a mí.

La mano de Derek intenta posarse en mi hombro y yo la bloqueo cogiendo su muñeca.

-No la toques- Pronuncia una voz tras de nosotros y que es demasiado conocida para mí.

-Ah, hola S - Dice Derek sonriendo.

Literalmente suspiro por puro alivio al saber que él se encuentra aquí.

-Vete de aquí Derek- Masculla Stephen y por el tono que usa puedo saber que se encuentra apretando los dientes.

-Me voy porque sé que te aprecia demasiado, el muy estúpido- Espeta.

Al escuchar sus palabras siento un cosquilleo en mi espalda.

Los dos permanecemos callados tiempo después. Él sólo asentía cuando hacía algo bien y negaba cuando estaba mal. Esta situación me estaba poniendo nerviosa y era realmente incómoda. Pero por más que quiesiera cambiarla sé que su orgullo no lo permitiría.

-Se acabó- Dice de forma neutral.

Asiento y después de cambiarme me lleva a casa comportándose de la misma forma que antes.

* * *

¡Hola!

Siento tanto la tardanza, pero esque últimamente estoy más ocupada que antes

¡Espero que os guste el capítulo!

¿Qué pasará con Steph? O más bien, ¿qué le pasa? Que raro...

Bueno, si queréis saber más esperad al próximo capítulo ^ ^

Gracias♥

Atte: Lucy.

Continue Reading

You'll Also Like

21.3M 981K 72
-Oye tú mocosa, ¿Tu madre no te ha enseñado a ser mas dulce?- mal dicho Dawson con mi madre no. -Claro que me ha enseñado a ser dulce, ¿Quieres ver l...
30.8M 1.9M 72
LIBRO DISPONIBLE EN PAPEL POR EL EQUIPO PENGUIN RANDOM HOUSE, GRUPO EDITORIAL. ENTRA AQUÍ PARA SABER EN QUÉ PAÍSES PUEDES ENCONTRARLO Y TAMBIÉN A DÓ...
9.9M 683K 52
GANADORA DE LOS WATTYS 2016 EN LECTURAS VORACES -No vas a verlo más. -¿Por qué? -pregunté con la mirada baja. -Porque eres mía...
5.1M 425K 51
Nunca me había imaginado con un chico. Hasta que apareció él. [Basado en hechos reales]