Los días habían pasado y después de una mala noche para todos donde algunos no pudieron conciliar el sueño al parecer el más afectado el Coronel Mustang que se preocupaba el doble por sus hombres y su pequeño amado. Así que dedico toda la noche a acompañar a Hughes en la búsqueda de información, visiblemente estaban agotados pero aún con fuerzas para seguir.
Las acciones de Roy tenían muy confundido y pensativo a Edward -"¿Por qué el Coronel a estado muy preocupado por mí? no entiendo que es lo que le sucede ¿porqué actúa de esa manera?..."
La reunión dio inició
Roy se encontraba en la silla de su escritorio con sus manos cruzadas cubriendo su rostro, Hughes con papeles en mano, el resto del equipo se encontraban de pie frente al escritorio en fila listos a recibir órdenes de sus jefes.
Hughes: Ayer durante la noche nos reunimos con Roy y buscamos expedientes con información sobre los nombres que mencionó Bido, y aunque no encontramos datos de Dante o Ling Yao si encontramos una posible información sobre Codicia.
Havoc: ¿Encontró información de donde podremos encontrarlo?
Roy: No en específico, pero parece que hay indicios que al sujeto le encantan los eventos sociales y que es organizador anónimo de esos eventos.
Breda: Ósea que en pocas palabras le gustan las fiestas, ¿y ahora que, acaso tendremos que buscarlo en cada fiesta que se organice de aquí en adelante?
Hughes: No precisamente.
Fuery: ¿Tienen algún plan Señor?
Roy: Por su puesto, sabiendo que le gustan las fiestas investigamos todos los eventos sociales a organizarse próximamente y a sus organizadores, buscamos información sobre ellos, y encontramos uno muy sospechoso ya que su organizador es anónimo, ese fiesta se realizara en una mansión muy lujosa, además que los fondos que los patrocinan tienen origen desconocido.
Hughes: Esta va a ser el 23 de diciembre, al parecer es una celebración de cumpleaños y es una fiesta muy elegante y lo mejor de todo es que se realizara no muy lejos de aquí!
Havoc: ¡Rayos Coronel! ¿como se enteró de todo eso?
Roy: Tengo influencias - Decía a la vez que soltaba una carcajada un poco engreída.
Ed soltó un suspiro de molestia por lo engreído que puede ser el Coronel.
Hughes: No seas engreído Roy!
Roy despejo su garganta y se dirigió a sus subordinados.
Roy: Todo parece bien... pero todavía hay un detalle a discutir, por lo exclusivo del evento, mis contactos solo consiguieron una entrada para una pareja... ¿alguién tiene alguna idea para poder entrar?
Fuery: ¿Por qué no solo entramos?
Hughes: Porqué en primer lugar... nos mataría porque es un evento privado y habrán guardias fuertemente armados, así que si pueden usen la cabeza y busquen una manera de entrar.
En ese momento solo hubo silencio, todos comenzaron a acomodarse en sillones y sillas para poder concentrarse a encontrar una buena idea.
Hughes cerró sus ojos mientras Roy giro la silla y dirigió su vista a la ventana.
Pasaron varios minutos sin que alguno dirigiera palabra alguna, muchas ideas rondaban en la cabeza de cada uno, hasta que de repente alguien rompió el silencio.
Havoc: ¡Ya se! ¡Se me ocurrió algo!
Hughes: Muy bien, di nos tu idea.
Havoc: Podemos disfrazar a el Coronel Mustang para que se haga pasar por un multimillonario y que el comente tener un trabajo para ellos y si el líder Codicia se encuentra allí que haga contacto con él, así podremos saber más detalles de la organización y claro como es una invitación de pareja tendrá que ir acompañado de una hermosa mujer para llamar la atención, bueno al menos en las películas siempre llevan una mujer, creo que solo lo hacen por protocolo.
Luego de que Havoc terminara de hablar hubo un pequeño silencio en el que todos quedaron asombrados y luego gritaron.
¡Es una Gran idea!
Breda: Al fin tienes una buena idea, Pensé que con tanto cigarrillo se te había quemado el cerebro, Ja Ja Ja...
Havoc: ¡Imbecil!
Hughes: Pero olvidan un pequeño detalle muy importante.
Roy: ¡¿De donde pretenden sacar a esa hermosa mujer?!
Falman: Eso es verdad, y también recuerden que no podemos contratar a una mujer porque nadie más puede saber de nuestra misión.
Breda: No pensaste en eso genio - le miraba con enfado.
Havoc: ¡Oigan que acaso quieren que piense en todo!
Todos inclinaron sus cabezas en señal de decepción excepto Hughes y Roy que seguían pensando, regresando otro silencio. Pasaron varios minutos hasta que Hughes se le ocurrió otra idea.
Hughes: ¿Y qué tal ... si uno de nosotros se disfraza de chica?
Todos levantaron sus cabezas exaltados por lo que habían escuchado gritando al unísono
¡¿Qué?!
Fuery: ¡Qué está diciendo Señor! ¡no cree que está exagerando!
Hughes: Por como estan las cosas, tampoco podemos involucrar a nadie más, esos sujetos son muy peligrosos, y lo menos que queremos es que civiles se involucren y resulten heridos o en el peor de los casos muerto, así que tenemos que hacer todo lo posible por nuestra propia cuenta valiéndonos de lo que disponemos.
Falman: Tiene toda la razón, Pero a pesar de eso, ¿quién sería el que se tendría que disfrazarse de mujer?
Y todos comenzaron a verse los unos a los otros.
Havoc: ¡Yo paso!! Soy muy varonil para eso!
Breda:¡Dejate de tonterias hay muchas chicas que se ven rudas, no pongas excusas!
Havoc: Quieres callarte Breda.
Falman: Yo no tengo ningun rasgo femenino - Expresaba levsntando su mano.
Mientras todos buscaban escusas para evitar ser disfrazados una idea cruzó por la mente de Hughes creciendo en él una sonrisa descarada.
Hughes: ¿Y que les parece Ed?
Al oír la propuesta de Hughes Roy giro la silla rápidamente observando a Hughes muy sorprendido mientras los demás dirigieron su mirada a Ed y lo imaginaron vestido de mujer, era perfecto, Ed estaba atónito por la propuesta de Hughes, todos empezaron a asentir con la cabeza, luego de un breve instante Ed reacciono.
Ed: ¡Q- qué! Qué clase de tonterías están diciendo, y porque todos me miran así.... ¿Eh? - Señalba mientras miraba a todos con cara amenazante. -¿Porqué yo tengo que ser la novia del Coronel? - Con gran enojo señalaba con el dedo a Roy.
Hughes: ¿Eh, y por qué no? si eres bien parecido y tienes rasgos bien definidos- Decía palpsndo el cuerpo del rubio - sin mencionar que eres el más joven, además ya tienes el cabello largo nos
ahorraremos la peluca.
Ed: ¡Están locos!
Hughes: Pero eres perfecto, sera más creíble que una linda y joven chica de tu estatura y conflección física acompañe a un millonario en lugar de una señora como nos veríamos cualquiera de los demás!
Al decir esto los demás molestos gritaron - !Oye no estamos tan viejos!
Havoc: ¡Pero aun así me parece una excelente idea!
Havoc: ¡Edward es prefecto para este papel!
Roy: ¡Esto es muy absurdo! Porqué tiene que ser precisamente él - decía frustrado señalando a él rubio con el dedo.
Hughes: ¿Pero qué tiene de malo? acaso quieres que te repita los porqué... Él es perfecto para el papel y ya. Lo digo yo y yo estoy acargo de esta misión! ¿Acaso tu no crees que haría un buen papel como tu novia?
Roy: No, no lo creo - Decía mientras giraba su rostro en dirección contraria a Hughes.
El rubio se sorprendió de las palabras de Roy la actitud que estaba tomando por él le estaba fastidiando en gran medida.
Ed: ¿Qué diablos dice Coronel? quiere calmarse, soy yo el que hará el ridículo ¿porque actúas como si el ofendido fueras tú?
Roy: ¡Qué dices! ... ¿acaso te gusto la idea? - Al decir estas palabras Roy soltó una sonrisa sínica que hizo molestar al chico.
Ed: ¡No!... por supuesto que no quiero hacerlo, pero no tenemos otra opción más que cooperar por el bien del equipo, y también que si puedo evitar que alguien más salga herido haciendo esto pues lo haré, así que, ¡ya deje de actuar como un tonto! Así que no hay remedio que más que soportarnos.
Hughes: ¿Enserio lo harás?
Ed: ¡Rayos Hughes ya te dije que si lo haré!
Roy no podía dejar de verle con gran asombro, ver de nuevo esa gran determinación que Ed podría mostrar ante todos solo podía pensar "Una vez más me demostraste lo fuerte que eres" trazando así una pequeña y discreta sonrisa.
Hughes: Bien ya está decidido, pondremos en marcha este plan. Empezaremos por asignar tareas a cada uno.
Roy: Pues ni hablar, tendré que soportar a una pequeña molestia disfraza.
Ed muy colérico y saltándole una vena por lo molesto que estaba - ¡Qué estas queriendo decir grandísimo idiota! ¡A quién le dices tan pequeño que podrías confundirlo con una semilla en el suelo!
Pero su riña se detuvo al darse cuenta de la mirada que el Coronel tenía, no podía explicarse del todo, pero podía percibirse que ocultaba una gran alegría en esa pequeña sonrisa que le estaba mostrando. Hughes observaba atentamente a la pareja sintiéndose muy feliz porque poco a poco Roy volvía a sonreír.
Havoc: Lamento interrumpir, pero debemos continuar con esta misión.
Ed: ¡Ehh! ¿Que rayos dices? ¿interrumpir que?
Havoc: Nooo, nada, nada - Decía con un tono sarcástico.
Hughes: Muy bien, ya sabemos lo que tenemos que hacer! así que pónganse a trabajar.
¡Si Señor! Gritaron todos muy felices, al terminar de dar la orden Roy alzo la vista para ubicar a Ed se encontraba hablando con Havoc seguía discutiendo con el rubio mayor, No podía apartarle la vista él solo quería seguir viéndolo, Hughes notó esta situación se acercó a Roy despacio y sigiloso, al estar cerca de él dibujo una sonrisa pícara en su rostro y le susurró al oído.
Hughes: Ve que te espera.
Después de decirle estas palabras le dio un fuerte empujón asustando a Roy.
Roy: ¡Q- que dices!
Hughes solo le sonreía, Roy abrio completamente sus ojos entendió lo que Hughes estaba queriendo decir, se acercó a donde discutían los dos rubios, al acercarse al chico este tomo su mano.
Ed: ¿Qué diablos le ocurre Coronel?
Roy. Tienes que ensayar, a partir de hoy eres mi novia secreta.
Ed: ¡Eh!
Roy detuvo el paso frente a Ed puso sus dedos enmedio de sus cejas enmarcadas por un fuerte seño fruncido - Primero tienes que cambiar ese rostro rudo que tienes.
Ed: ¡Que tratas de hacer gran tonto! - decía con una pequeña voz sin verle a los ojos.
Roy: ¡Lindo! como segunda lección sera en tu forma de caminar, es fácil, solo recuerda a quien debes interpretar.
Ed: Una... linda y joven millonaria.
Roy: Así es, por lo tanto debes actuar educada y elegante, así que una manera de hacerlo es tratar con estos libros ... en tu cabeza - Roy colocaba en la cabeza del rubio una pila de unos 3 libros, pero estos siempre caían.
Ed: ¡Aaaah! ¡Oye no puedo!
Roy: Sigue intentando.
Ed: ¡Agh!
Ed continuaba acomodando los libros junto a Roy cada vez que estos caían por la falta de equilibrio, el joven alquimista seguía haciendo lo posible para tratar de mejorar en cada intento, aunque fueron muchos en los que él fallaba, siempre se levantaba y lo intentaba aún más decidido que la última vez.
Roy: Rayos eres todo un desastre, lo hemos intentado casi todo el día y aun no lo haces bien.
Ed: ¡Oye hago lo que puedo, además te quisiera ver en mi lugar grandísimo bastardo!
Roy dio un suspiro.
Roy: Ven te ayudaré - Este se acercó, arregló su flección que estuviese más recta, acomodo sus hombros y su cabeza, el rostro de Ed estaba lleno de un rojo carmesí cada vez que el Coronel tocaba alguna parte de su cuerpo, comenzaba a sentirse nervioso.
Roy: ¡Bien! Ahora camina lento.
Dio unos pasos y al muy corto tiempo de avanzar Calleron los libros.
Roy: Bien hecho, esta vez diste más pasos, eso es un gran avance.
Ed: ¡Si! Creo que comienzo a entender como va esto - Continuó practicando por una hora más hasta que por fin. - ¡Lo logre! ¡Me fue muy difícil pero lo hice! - Quien no tardo en caer agotado al suelo por todo el trabajo que hizó en todo el día.
Roy: ¡Lo ves! si te esfuerzas siempre lo lograras Acero.
Ed: Si eso ya lo sé.
Havoc: ¡Felicidades chicos! Buen progreso, aunque... ahora deberían ensayar tomados de las manos, porque es lo que hace una pareja - Este comentario sorprendió a todos e hizo sonrojar a la pareja mencionada.
Hughes se puso de pie y con una gran sonrisa con picardia en su rostro - Me parece muy buena idea.
Roy sudaba frío mientras que Ed se sonrojaba aun más y el resto del equipo sonreía gustosos por ver si eran capaces de una simple acción como era tomarse de las manos.
Roy: No creo que sea necesario ensayar algo así.
Hughes: Pero que dices, ambos actúan muy fríos y si alguien no les da ese empujoncito ustedes mismos no lo harán.
Roy: Aun así no creo que sea necesario.
Hughes: Deja de perder el tiempo quejándote Coronel Mustang, solo ¡Házlo!
Roy muy tímido todavía comenzó a extender su mano un poco temblorosa en dirección al chico para que él la tomara, al mismo tiempo Ed voltea su rostro en otra dirección por lo apenado que se sentía toma muy despacio la mano temblorosa del Coronel, lo cual le sorprendió pero aun así no tenía el valor de verle.
Hughes: ¿Qué hacen estos dos, se toman de la mano sin contacto visual? ¡Pues que clase de pareja son! - Hughes algo molesto se acercó a ellos, tomando el rostro de ambos los giró para que se vieran a los ojos mientras él sonreía dulcemente - ¡Ven no es difícil!
Ambos se perdieron en la mirada fija del otro y durante ese breve momento empezaron a sentir como comenzaba a emanar el calor de la mano del otro, era una sensación agradable que por alguna extraña razón que el rubio no podía comprender se sentía muy nervioso pero al mismo tiempo muy tranquilo, el corazón de cada uno comenzaba a latir aceleradamente casi que casí podían escucharse, los nervios estaban a flor de piel en cada uno, se habían perdido en la intensa mirada del otro, Roy no podía dejar de ver esos ojos dorados llenos de brillo, calma y sinceridad, que lo tranquilizaban y al mismo tiempo hacían que se agitara ocurriendo esa misma sensación para Edward como sentía que esos ojos negros fuertes llenos de poder y determinación indagaban en su alma.
Havoc: ¡Ooh miren se ven muy tiernos!- Estas palabras hicieron despertarlos de su mundo de hadas que habían creado, muy avergonzados soltaron sus manos y apartaron sus miradas.
Havoc: ¡Oh! Se me acaba de ocurrir algo General Hughes! para que se acostumbren a estar juntos, el Coronel debería acompañar a Edward a su casa tomados de las manos durante todo el camino! No le parece una excelente idea - En definitiva se estaba vengando de su Coronel de muchas que le debía.
Los ojos de Hughes se llenaron de un brillo emoción, esa idea le parecía sumamente interesante y muy conveniente para su amigo.
¡Pero que disparates dices, mejor cierra la boca Havoc! - Exclamaron molestos
Aun así Hughes mantenía ese brillo en sus ojos y una sonrisa en su rostro - Me parece que es una gran idea! Hay que hacerlo.
Roy y Ed estaban visiblemente molestos por lo que les estaban obligando a hacer se dieron mutuamente la espalda y cruzando sus brazos gritaron al mismo tiempo. - ¡No claro que no lo haré!
Hughes: No es una petición, es una orden, ¿acaso se les olvida quien esta acargo aquí? - Su rostro lucía aterrador y lleno de seriedad.
A lo que ambos no tuvieron más opción que aceptar, respondiendo muy molestos - ¡De acuerdo!
Hughes: ¿Cómo dijeron no los escuche?
Y ambos tomaron una postura más firme- ¡Si Señor!
El día había terminado logrando así un progreso considerable en el entrenamiento de Ed al tratar de lograr convertirlo en una elegante señorita.
Hughes: ¡Excelente trabajo a todos! Descansen, nos vemos mañana, y ustedes dos - Señala amenazante a la pareja - si me doy cuenta de que no van tomados de las manos, sabrán de que soy capaz cuando estoy molesto... Bueno nos Vemos mañana chicos! -Terminó despidiendose con una sonrisa.
Así uno por uno el equipo se fue retirando excepto la pareja del rubio y el peligro, los cuales no se atrevían a salir por la orden que habían recibido.
Roy: ¡Qué se cree ese grandísimo idiota ordenándome hacer esto!
Ed: Pues si no quieres no lo hagas, yo mejor me voy a casa- Mencionaba el rubio ya todo esto era absurdo para mientras caminaba con paso firme hacia la puerta dejando atrás a Roy.
Roy: ¡Espera!
Ed detuvo sus pasos al oír su voz y Roy corrió deteniéndose frente a él mirando sus dorados ojos, le ofreció su mano para que la tomara.
Roy: Vamos.
Ed aunque sorprendido y un tanto nervioso acepto tomar su mano sintiendo la suavidad y el calor de ese momento notando que de nuevo la mano del Coronel esta un poco temblorosa, sintió un suave tirón que le daba el de cabello negro para emprender la marcha hacia su casa.
Mientras caminaban juntos tomandos de la mano Roy miraba fijamente hacia el frente y mientras pensaba - "No puede ser, como es que me meten en este tipo de situaciones... como sea, debo admitir que estoy muy felíz por esto"
Ed le dió un pequeño vistazo de reojo "¡Tengo que calmarme! ¡solo es un entrenamiento! ¡Tranquilízate!" Pero sus pensamientos se vieron interrumpidos al escuchar la voz de Roy y volvió a dirigir su vista hacia él.
Roy: ¿Que crees que estaría pensando ese tonto de Hughes para obligarme de ir de la mano contigo?
Ed: ¡Pues disculpa que te moleste qie se yo y no una elegante jovencita como las que acostumbras, sabes yo tampoco estoy comodo con esto, grandísimo bastardo!
Estas palabras le ocasionaron mucha gracia a Roy ver refunfuñar a Ed es adorable y divertido.
Roy: Vamos tranquilízate Acero, era solo una broma, en realidad ... se siente agradable estar así contigo...
Estas palabras tan sorpresivas hicieron que Ed se pusiera mucho más nervioso, sus mejillas se fueron sonrojando más y más trato de tranquilizarse.
Ed: N-No entiendo lo que dices ahora, hace un momento te molestaba la idea tonto.
Roy: Supongo que tienes razón... ¡ya llegamos Ed!
Al llegar al Hotel donde se hospedaba el chico, se quedaron un momento en la entrada, pero Ed lentamente trata de soltar la mano de Roy
Ed: ¡Hasta mañana Coronel!
Se despedía sin verle a la cara para dirigirse a la entrada pero Roy hace llamar la atención del de trenza.
Roy: ¡Acero!...
Ed solo detuvo el paso sin girar para verle, solamente estaba atento a que diría.
Roy: ¡Solo quería decirte... Gracias, gracias por aceptar hacer esto!
Ed: Pues que puedo hacer, soy parte de tu equipo, o no.
Roy solo sonreía al escuchar esto.
No se dijo más y ambos tomaron caminos apartes.
Al llegar Ed a su cuarto se detuvo un momento enfrente de la puerta antes de abrirla, tratando de calmar a su corazón que no dejaba de latir con fuerza y sentir un leve dolor su estomago, tomo el pomo de la puerta y la abrió.
Ed: ¡Ya llegue Al!
Al: ¡Bienvenido hermano!
Ed: ¡No puedo creerlo!
Al: ¿Qué cosa hermano?
Ed: ¡Seré la novia del Coronel! - Dejando salir un gran suspiro de cansancio para tirarse a la cama con los brazos extendidos.
Al: ¿Qué cosa? ¿que acabas de decir?... - Preguntaba el joven con sorpresa sin entender a que se refería.
Ed: ¡Eh! ... je je je... - Reía nerviosamente - Disculpa no te e contado todo, a los demás se les ocurrió la brillante idea de que el Coronel actué como un millonario, y... yo... Yo como su elegante novia para hacer según ellos el cuento más creíble, y todo porque a ese sujeto le gustan las fiestas, ¡esos malditos cobardes me tiraron todo el cargo a mí!
Al: ¡Ja ja ja... ahora entiendo todo! Pensé que el Coronel y tú... ya sabes... ja ja ja... - reía nerviosamente.
Ed: ¿Qué el Coro el y yo qué? - Preguntaba viendo a su hermano un poco molesto.
Al: Solo pensaba... se ven bien juntos.
Esto hizo que Ed se sonrojara
Ed: ¿J-juntos de que forma lo dices Al?
Al: Solo olvidalo Hermano, eres un caso perdido.
Al en su maypría de veces acompañaba a Ed en las misiones que el Coronel Mustang le encargaba, así que normalmente Edward llegaba a su oficina y recibía indicaciones de su misón, de entre tantos encuentros Al pudo notar como el Coronel observaba a su hermano, como se escapaba una sonrisa ocacional, al principio tenía sus sospechas pero al fin comprendió todo, el Coronel estaba enamorado de su hermano desde ya hace mucho tiempo, aunque claro Edward no entendería esa clase de señales, en temas del amor el es muy despistado.
Edward se encontraba recostado en su cama pero con todo lo que había pasado, le era difícil poder conciliar el sueño así que se levantó de su cama y se dirigió al baño.
Mientras Ed se duchaba pensaba en aquella sensación que tuvo en el momento en que el Coronel y él cruzaron miradas cuando este le rescató de aquel disparo y el caminar tomados de la mano con él lo hizo sentir extraño.
Ed: ¿Qué me sucede? ... ¿porqué me siento de esta manera, con solo verlo? - decía mientas recordaba aquellos ojos negros que le hipnotizaban.
Roy había regresado a su casa encontrándose en la misma situación del rubio, perdido en sus pensamientos, perdido en sus emociones y sentimientos, el inmsomnio hacía de las suyas y cada recuerdo vivido con su joven amado se colaba en la menta de Mustang al igual que se arraigaban a su corazón.
Continuara....