Entre los chicos, comenzaron a hablar sobre estupideces, bromas y retos que habían hecho.
—¿Recuerdas el bofetón que le diste a Cameron luego de verte en bikini aquella vez en tu habitación?—dijo Nash. Todos comenzamos a reír. Un leve ardor en mis mejillas seguramente las tiñó de un rojo.
—No fue en bikini—saltó Cameron mirandote de manera divertida—Era en ropa interior.
Una oleada de '¡Ooooh!' y saltos desenfrenados entre los chicos hizo que me tapara la cara de verguenza. Retiraste las manos de tu rostro y le tiraste un almohadón a Cameron. El te sonrió (foto en multimedia). Y dijo:
—Valió la pena.