Narra Chris:
Me levanté por unas risitas, abrí los ojos vi a Drew y a Megan, riéndose a los pies de la cama.
-De qué se ríen?- pregunté entre dormido, sólo hizo falta ver los marcadores en sus manos para entender lo que habían hecho, salté de la cama y me miré en el espejo del baño.
-Megan!- grite al ver mi reflejo, tenía remarcado el ojo del moretón, imitando un parche, un bigote francés, sin mencionar las estrellitas con corazones y la palabra idiota escrita en mi frente.
-Hey! Drew también a sido- dijo cuándo me vio salir del baño, no hacía falta que tuvieran cuernos para saber que eran unos diablos.
-Ella tuvo la idea- dijo mi sobrino señalando a Meg.
-Traidor- dijo ella, y ambos salieron corriendo mientras yo les perseguía.
No me esperaba que ella hubiera puesto a todos mis sobrinos en mi contra. Cuando salí de la habitación, Cole y James me tiraron agua con sus pistolas y salieron corriendo, mientras que Kent me arrojaba purpurina en todo el cuerpo e imitaba la acción de los demás.
-Megan voy a matarte!- grité, mientras bajaba corriendo la escalera, ella me esperaba con una cámara en la planta baja y cuando me vio aparecer, sacó una foto.
-Esto ira directo a Twitter, si es que no haces lo que te decimos- dijo ella amenazante junto a mis cuatro sobrinos.
-Acaso estas extorsionándome?- pregunté cruzándome de brazos.
-Podría decirse que si- dijo ella con una sonrisa.
-Sí, haznos caso perdedor!- grito Cole.
-Tu cierra la boca, o le diré a tu madre- el niño me sacó la lengua y se escondió detrás de Megan.
-Entonces aceptas?- preguntó Meg.
-No me queda otra opción, así que sí- dije rindiéndome -Qué quieren que haga?-
-Primero que te bañes, y luego que nos lleves a comer a McDonald's- cuando Megan término de decir esto, los niños comenzaron a gritar que los llevará y así fue, luego de bañarme fuimos todos al shopping. Según Meg los demás se habían ido a la playa y nos habían dejado a cargo de los niños por ser los últimos en despertarnos. Luego de comer los llevamos a los juegos y comimos helados, cuando volvimos a la casa los demás ya habían llegado y rieron cuando les conté lo que los diablillos me habían hecho.
-Eso explica porque están tan hiperactivos-dijo Carly refiriéndose a los niños, eran las 12 de la noche y no dejaban de correr.
-Mi culpa, no debí darle tantos caramelos- dijo Scott frotándose la cabeza.
-Quién se ofrece a dormir a las bestias?- dijo Shanna con cansancio.
-Yo- dijo una Megan divertida, se levantó de su silla y tomó un cable que conectó a la televisión y luego a su celular -Chicos quieren ver explosiones?!!!!- gritó haciendo que todos pusiésemos cara de horror y ella nos giñara un ojo con tranquilidad.
-Estas segura porque yo creo que...- ella me cayó con un "yo sé lo que hago". Los niños bajaron corriendo y se tiraron al sillón, mientras gritaban un gran sí.
Megan le dio play y en la pantalla apareció un constructor que le ponía dinamita a una antigua casa y les preguntaba a los niños que si querían verla explotar, por supuesto ellos dijeron que si y el constructor, dijo que para eso debían hacer silencio y caso a sus padres, los chicos asintieron como si el hombre pudiera verlos. Luego de esto la casa explotó en mil pedazos y Meg paro el vídeo, los niños fueron caminando con sus madres y le pidieron por favor que los llevarán a dormir.
_Primero, de dónde sacaste ese vídeo? Segundo, eres la encantadora de bestias desde ahora en más- dijo Lisa con una sonrisa, mientras sus hijas me agradecían.
-Soy la mayor de 8 primos varones, tenía que aprender a controlarlos de alguna manera- dijo riendo, cada vez me gusta más.
Esta vez mi madre y yo nos quedamos limpiando.
-Hace cuánto tiempo estás enamorado de Megan- soltó mi madre como si nada.
-Qué? Como es que tú sabes eso? Tanto se nota?- dije preocupado, Meg tenía la fama de ser "la novia en fuga", cada vez que ella veía que la cosa se ponía sería, salía corriendo.
-Soy tú madre, eso me convierte en un superhéroe- dijo mi mama con una sonrisa -Y hasta un ciego podría darse cuenta de lo que te pasa con ella, sobre todo cuando la miras-
-Me está volviendo loco- le dije en un ataque de sinceridad.
-Me doy cuenta de ello, nunca te habrías peleado por alguien que no fuera muy importante para ti- ella seguía lavando la vajilla, mientras me hablaba.
-Así que el moretón fue lo que me delato- dije negando con la cabeza.
-No, lo que te delato fue la manera en la que la miras, es igual a la que tu padre me da- dijo ella con una media sonrisa, mientras me tiraba el pelo hacia atrás en un intento de peinarlo -Creó que encontraste a la correcta-
-Lo sé, pero no sé si ella piensa igual que yo- le dije algo triste.
-Bueno, en todo caso, has lo que hizo tu padre para conquistarme- dijo algo seria.
-Y qué es lo que él hizo?- ella me miró con una sonrisa.
-Me insistió hasta que me harte y acepté salir con él- dijo haciéndome reír.
-Lo tendré en cuenta- mi madre tenía razón, no dejaría que Meg se me escapará.
Cuando subí y entré a la habitación, la encontré durmiendo destapada, ella siempre tenía calor, esa era otra de las razones por la que la amaba, ya que cuando tenía frío siempre contaba con su calor.
Me acosté a su lado y la vi dormir, parecía un ángel. Tarde o temprano ella iba a ser mía, estaba seguro de ello.