Salí de la oficina luego de dejarlo dormido y me acerqué a Melissa.
- Está inconciente, creo que tiene que ser llevado a una habitación, a una camilla mejor dicho. ¿Qué pasó con el sheriff? - Le pregunté.
- Esta dirigiéndose a la casa de Sean. Parrish y Lydia descubrieron cadáveres en un sótano...
- ¿Lydia..? Ah, claro. Banshee. - Entendí.
Luego de eso le conté lo que me dijo Sean y ella dijo que lo va a pasar a los informes, luego llamaría al sheriff. Caminamos hasta la entrada, estaba a punto de irme cuando vemos que en la recepción estaba hablando Scott y que a su lado Stiles,ambos cargaban a Liam. ¿Qué rayos...?
- ¿Scott? ¿Stiles? - Le preguntó su madre con cara de sorprendida.
- Ah... hola mamá...
- ¿¡Qué rayos hicieron?! - Les pregunté furiosa, no lo podía creer.
- ¡Hey! ¿Qué te hace pensar que fuimos nosotros? - Exclamó indignado Stiles.
- Fueron ustedes... - Respondió Liam con dolor, pude ver que su pierna se encontraba con una forma rara. Creo que se le rompió o torció.
Me acerque con cara de enojada mirando a Stiles, escuche que de fondo Melissa llamaba a una silla. Stiles retrocedió un poco, estaba haciendo esfuerzo en mantenerlo de pie. Le saqué el brazo de Liam del hombro y me lo puse yo.
Liam se resistió pensando que no lo podría cargar, pero lo hice fácilmente, me mandó una mirada de desconcierto y dolor por su pierna. Lo llevé rápido, pero suavemente, a una silla.
- Luego me cuentas que te hicieron estos dos idiotas ¿si? Te juro que los golpearé, fuerte. - Le dije con una sonrisa fácil. Él me la devolvió y me miró con ojos de enamorado. Pobre...
Vi como Melissa, se lo llevaba a hacerle una tomografía y al darme vuelta veo a Stiles verme enojado y a Scott avergonzado.
- ¿Qué le hicieron? - Le pregunto cruzada de brazos.
- Estábamos jugando al lacrosse... me enfadé y lo hice sin querer, no medí la fuerza. - Scott estaba avergonzado, verlo así me hizo ablandarme y relajarme.
- ¿Qué te traes con él de todos modos? ¿Te gustan los niños acaso? - Stiles lo dijo con tal veneno en la voz que me enfadó.
- ¡No idiota, y si lo hiciera no sería tu problema, tienes tu novia así que encárgate de ella! - Cuando dije la palabra ''novia'' Stiles hizo una mueca y miró avergonzado a otro lado.
Esperé por unos segundos a que me respondiera pero no lo hizo. Scott nos miraba a los dos asombrado. Luego Stiles miró el reloj que estaba en recepción y habló.
- Tengo que irme. Prometí ayudar a Malia a estudiar... - Y se fue sin mirar atrás.
Le miré alejarse enojada y incrédula. ¡¿Cuál es su problema?! ¡Me hace una escena de celos y luego se va... con ella! Pero lo que más me dolió fue el saber que no iban a estudiar. Nadie hace un arreglo con una chica, menos si es un chico y una chica, para ''estudiar''. Es solo una excusa, una palabra clave, para el sexo.
Él viene y me trata como si fuera... algo para él pero al final del día tiene a Malia a su lado... y esa maldita idea exprimió mi corazón.
- Tranquila, puedo oler tus celos y rabia... - Me dijo Scott. Me había olvidado que él seguía aquí.
- ¿Scott? Me olvidé que estabas aquí, ¿qué haces todavía aquí por cierto?
- Quería ver como estaba, no le puedo dejar así... - Vi sus ojos. Había culpa.
- Scott, ¿sabes que no fue tu culpa verdad? Si hubieras usado la fuerza de lobo no se habría roto una pierna o doblado, la pierna hubiera volado al otro lado del campo...
- Sí pero si no me hubiera importado tanto un estúpido puesto en lacrosse no hubiera estado herido tampoco... - Murmuró mirando al suelo.
- Scott, tu mismo dijiste en mi presencia que no puedes culparte por tus errores.
- No, le dije a Araya que no podía matarte por unos errores, porque si no todos estaríamos muertos. - Habló con una sonrisa triste.
- Da lo mismo, yo te digo esto ahora, no te puedes culpar por un error... no hay nada de malo querer algo para ti mismo una vez. No te culpes por favor, porque si te culpas tú por una pierna rota entonces yo tendría que suicidarme por mis muertes... Alpha, capitán de lacrosse... no importa de todos modos, porque sigues siendo humano.
- Gracias Vanessa y sé que tu.. pasado no es el mejor. Pero sé que quieres cambiarlo y eso es lo que importa. - Me dijo con seguridad.
- Scott... hay veces.. hay veces... - No pude continuar porque se me hizo un nudo en la garganta.
- ¿Qué?
- Hay veces que no me veo digna de estar con ustedes. Ustedes son.. maravillosos, incluso Malia con su odio hacia mi. Ustedes salvan vidas, se ayudan y ayudan a los demás. Pueden soportar la tortura, la muerte, por sus amigos y no les importa el riego para salvar a los que aman. Encontrar personas así... seres sobrenaturales así, no es algo de todos los días. Y al ver que no me dejaron sola con el berserker peleando... no sé que sentí. ¿Por qué tomar el riesgo por alguien como yo? Apenas nos conocemos, no saben de lo que soy capaz ni saben de mi pasado. Fuiste el primero en confiar en mi, incluso Laura Hale, la mujer que me hizo controlarme en luna llena, no confiaba en mi del todo. Me ayudó para que no muriera mas gente, no por mi. Pero tu... defendiste mi vida en México... ¿por qué?
- Por que todos necesitamos ayuda, Vanessa... En México vi que ibas a ayudarnos a encontrar a Lydia, en vez de salir corriendo por tu vida, y cuando estaba siendo electrificado, no te fuiste tampoco, viniste a ayudarme junto con Malia y Stiles. Puedo ver en tus ojos cuando peleas que estas dispuesta a matar, pero pude ver también que tienes la idea de cambiar. Pude ver miedo de quedarte sola, eso es algo que me pasó una vez. Sé que no te tienes mucha fe, pero yo tengo la suficiente para los dos. Y si quieres, puedes formar parte de mi manada, ya demostraste varias veces ser digna de ello al salvarnos a todos alguna vez.
Los ojos se me llenaron de lágrimas, hace demasiado tiempo no lloraba... tanto que no me acordaba como se sentía.
- Gracias Scott. - Él solo asintió con una pequeña sonrisa.
Nos dirijamos a sentarnos en unas sillas y esperar.
- ¿Y... qué pasa con Stiles?
- ¿Que pasa con qué? Es Stiles.
- Vi como se miraban y olí los celos de Stiles cuando ves a otro chico...
- No pasa nada Scotty, él tiene a Malia... - Agaché la cabeza para que no vea mi cara mientras lo decía.
- Sí, él tiene a Malia, pero lo conozco hace mucho tiempo para ver que también le gustas. Tal vez no tanto como ella porque no te conoce mucho pero vi que siente algo por ti. No soy tonto.
No, él no lo era. Y sé que Stiles siente cosas por mi, pero no podía ser. Él ya tiene a Malia, que es mucho mejor que yo. Aparte de que no puedo poner en peligro a Stiles, estoy segura que Kate me tiene en su lista negra.
O en su lista de personas por matar mejor dicho, y si sabe que Stiles es una debilidad, lo matará a él primero.
- Él está con Malia, es lo mejor para todos. Y no creo que Malía lo deje ir tan fácil tampoco... ella me odia.
- No creo que te odie, creo que quiere pero no puede. Aparte de que está celosa, claro. Ella se dio cuenta de que Stiles siente algo por ti, y tiene miedo de que ese algo se agrande, lo suficiente para que él la deje y esté contigo.
- No se que me vio Stiles... - Y era verdad lo que decía, era linda, sí. Pero esa belleza estaba opacada por mi registro.
- ¿De que hablas? Eres hermosa, valiente, sabes defenderte, eres buena en el fondo, y él vio lo mismo que yo, lo mismo que te deja ser parte de la manada.
- Sé que soy atractiva, pero no soy tan buena para él como lo es Malia, no entiendo porque se fijó en mi teniéndola a ella. Se aman.
- No, Stiles no la ama. La quiere y mucho, pero no la ama. No llevan mucho de conocerse, Malia estuvo con él cuando nadie estaba, y por eso la aprecia. Honestamente no creo que la deje de querer nunca, pero amarla no lo hace todavía. Y ahora menos, ya que estas tu. Si él la amara, no había visto lo que nosotros vimos en ti y le hubiera atraído tanto.
- ¿Estas diciendo que sabes por qué le gusto? ¿Entonces por qué no te fijaste tú en mi?
Él de repente se puso tímido y miró al piso.
- Lo hiciste, pero no te importó... porque amas a alguien más.... - Dije con una sonrisa. Lo estaba avergonzando.
- Sí, eh...
- ¿Es Kira, verdad?
- ¿Como lo supiste?
- Porque como tú, no soy tonta. Vi como se miran y déjame decirte que me encantan ambos. Hacen linda pareja.
- No somos... bueno, no somos pareja. - Dijo por lo bajo.
- Bueno, ¿¡y por qué diablos no?! - Me enojé un poco.
- Hey tranquila, solo... nunca lo aclaramos, nos besamos unas veces pero no aclaramos nada... - Decía mientras agachaba la cabeza triste.
- Tienes que decírselo.
- ¿Decirle qué?
- Que la amas, tonto... Ella es una chica hermosa y estoy segura que alguien más le echó el ojo. Tienes que demostrar que es tuya. Ella te quiere, lo vi en sus ojos cuando te mira. Y más por la escena que hicieron en México, deberías haberla besado por cierto... - Él se rió por lo bajo.
- Eso mismo me dijo Breaden en la cueva.
- Deberías haberla escuchado. Y ahora deberías escucharme a mi.
- Lo haré, gracias Vanessa.
Nos sonreímos con simpatía. Hasta que escuché algo que no me gustó en la habitación de Liam.
- Está rota ¿verdad?
- Definitivamente vas a necesitar rayos X -'Le dijo un hombre, el médico.
- Está rota y es mi culpa... - Replicó desanimado Liam.
- ¿Quieres decirme que pasó?
- Fui contra dos juniors... Uno de ellos era el capitán del equipo.
- Hmm... ¿Recuerdas lo que siempre decimos? - Scott cerró los ojos con dolor y pena. Le puse una mano en el hombro para darle fuerza.
- Juega con inteligencia, no te compliques... ¿estás enojado conmigo? - Le preguntó al doctor luego de un tiempo, me parece que son familia.
- No, por supuesto que no. Tu mamá debe estar enfadada conmigo por introducirte al lacrosse, pero deberíamos esperar los rayos X antes de ponernos nerviosos. - Su padrastro. Liam dijo que su padrastro le enseñó a jugar lacrosse. - Y créeme que tengo más derecho de estar nervioso que tú. Todavía no se ha acabado. Espera los rayos X. - Un hombre atractivo de color salió de la habitación del chico.
Sin darnos cuenta Scott y yo nos habíamos estado acercando a la habitación de Liam, así que cuando salió, actuamos con ''normalidad''. Scott recibió una llamada de Lydia, no me preocupé hasta que escuché a Scott calmarla. Dijo que Sean estaba en el edificio.
- ¿Estuviste aquí antes de mi verdad?
- Sí, yo interrogué a Sean... él no es humano Scott...
- ¿¡Qué?! ¿Por qué no nos dijiste? ¿Dónde está? ¿Qué es?
- ¡Tranquilízate Scott! ¡Poniéndote nervioso no logras nada! - Vi como se tranquilizaba. - No les dije porque, por si no se dan cuenta, llegaron con un Liam con la pierna rota. Sean es un wendigo. Pero está dormido ahora, lo mandé a dormir...
Me detuve al escuchar un grito inhumano decir ''Yo solo tengo mucha hambre''.
Sean estaba despierto.
Corrí junto con Scott por la escalera de incendios hasta el piso de Sean, no podía esperar el ascensor. Llegamos al piso empujando la puerta. Sean estaba agarrando a la madre de Scott de los pies. Me transformé por completo por la rabia y rugí, al mismo tiempo que Scott.
Nos acercamos los tres para pelear.
Le di una patada a la cabeza que lo mandó al piso, al otro lado de Melissa. Así que lo dejé aturdido para Scott. Dejé la pelea para agarrar a Melissa de los hombro y levantarle, estaba temblando y viendo a su hijo luchar. Yo volví a la normalidad excepto por los ojos y las garras.
- Melissa escúchame, tenemos que salir de aquí. Tenemos que llevarte a un lugar seguro. Ven conmigo, yo te protejo. - Ella solo asintió, la ayudé a levantarse y se obligó a tranquilizarse, era una mujer fuerte.
Sean en un momento se fue corriendo y Scott vino a revisar a su madre.
- ¿Estas bien, mamá? - El no había vuelto a la normalidad, seguía en su forma de lobo.
- Estoy bien, vayan por él...
- ¿Esta segura? - Le pregunté.
- Sí, vayan por ese hijo de perra... - Sonreí a su comentario y salí corriendo detrás de Scott.
Íbamos por la escalera de incendios cuando escuchamos el grito de alguien sufriendo. Y ese no era Sean...
Nos miramos con Scott para luego ir trepando por las escaleras al ruido. Cuando llegamos a la azotea vimos a Sean agarrando del cuello a Liam.
- ¡Retrocedan! - Gritaba fuera de si Sean.
- No, sea lo que sea no necesitas hacer esto... podemos ayudarte. - Le respondió Scott.
- No, no pueden.
- Déjame ayudarte... - Le pidió Scott.
- Los wendigos no necesitamos ayuda...- Le respondió Sean con frialdad. Yo le rugí al ver sus intenciones. Scott me puso una mano en el brazo para detenerme. - ¡Necesitamos comida!
Scott y yo atacamos, Scott fue a ayudar a Liam y yo fui a atacar al wendigo. Él me atajó antes y me tiró al otro lado de la terraza, dejándome por un momento aturdida. Para cuando regresé en sí, escuché el grito de Liam, pero no un grito que se aleja al caer.
Me acerqué por detrás y agarré al wendigo que peleaba con Scott para que dejara de agarrar a Liam.
Agarré al wendigo por detrás y ayudé a levantar a Liam. Cuando me di vuelta, por un sonido de que alguien cortó algo, vi a Sean de espalda tirado en el suelo. Muerto.
Pero lo que me llamó la atención fue que tenía un hacha en la espalda. Y de repente alguien tomó esa hacha. Era un hombre.
Estaba alejándose y cuando se dio vuelta, la parte en la que debería estar su boca... no había nada. No había un solo rastro de que tuviera boca, era una imagen bestial. Se fue tranquilo, dándonos una señal de silencio con su dedo.
Escuché a Liam quejarse de algo, me di vuelta y vi el porqué. Scott lo había mordido, había creado a un beta.
Y en ese momento recordé las palabras de Araya.
''Si alguna vez me entero de que mordiste a un inocente, entonces yo voy a tocar tu puerta...''