Cuando me vio acercarse, el Serafín se puso visualmente ansioso. Tal vez ella no pensó que yo la iba a hacer primero, el masaje, quiero decir. Sin embargo, no usé a Ely para dar ejemplo... mi esposa recibiría un trato especial, y yo iba a ser mucho más amable con Gabriel.
"Déjame todo a mí, te vas a sentir fantástico", le aseguré, echando un pequeño vistazo a su cuerpo debajo de la bata de ducha. Para un ángel, tiene un cuerpo bastante pecaminoso...
"Sí, por favor, hazme sentir bien, Ray", dijo.
"Ara, redacción~" Hasshaku-sama se rió, pero Gabriel no entendió la insinuación. No te preocupes, Gabriel, la castigaré más tarde por ti y por mí.
Este ángel es tan torpe que no puede elegir sus palabras correctamente. No tenía la intención de tocar su cuerpo. En cambio, le di la vuelta sobre su espalda y me sumí a la mesa, metí en seiza y puse su cabeza en mi regazo.
En lugar de usar mi energía solo en mis manos como de costumbre, la extendí por mis piernas y supe que ella la sintió cuando sus ojos se abrieron ampliamente, mirando a los míos desde esta posición.
"Esto se siente..." Ella comenzó.
"¿Bien? ~"
"Increíble..." Ella terminó y puse mis dedos a lo largo de su cabello dorado, tocando su cráneo y sorprendido de cómo se sentía su cabello, era casi tan suave como el pelaje de Yasaka.
Fue cuando Amaterasu se dio cuenta de la reacción de Gabriel de que sus cejas entrecerraron un poco, el Serafín no mentía, lo estaba sintiendo.
Gabriel nunca gimió, sus ojos se cerraron mientras acariciaba suavemente su cráneo, la parte posterior de su cabeza, sus hombros y su cuello, variando en presión. Me limitaba a realizar la misma tarea, bromeando con algunos puntos de presión y centrándome principalmente en su cabeza.
"Eres tan lindo, Gabriel... Me encanta tu pelo".
Sus ojos se abrieron y la vista que me estaba dando ahora era completamente diferente.
"Eres..."
"¿Soy?"
"P-Padre..."
"¿Eh?"
Su mano se extendió hacia adelante y acarició mis mejillas con un tacto suave y cálido, considerada, pacífica y casi santa... fue increíble lo pura y destacta que vio. La chica se rió y se puso un dedo en los labios antes de que un pensamiento se transmitiera directamente a mi mente.
'Manus Septem Dierum'.
Mi shock se extendió en forma de una pequeña onda de choque de aura por la habitación, incluso Yasaka pensó que algo estaba pasando con mi repentina reacción. Se suponía que era sagrado, pero ella lo sabe... ¿cómo lo sabe?
'Gabriel...'
'Lo sabría en cualquier momento... No me lo podía perder. La herramienta que me creó. Mi padre nos creó a todos los ángeles con él. Esa herramienta milagrosa. ¡Experimentándolo de primera mano así, no hay manera de que no lo sepa...! Por favor, ¿podríamos hablar más tarde?'
'...'
'Lo entiendo, Ray. Es un secreto, no se lo diré a nadie por ahora, ni siquiera a mi hermano... esta herramienta ha sido anhelada por los dioses que rivalizaron con mi padre durante miles de años, fue anhelada por los demonios, si las palabras de que la tienes salieran, tu vida ya no sería pacífica. No soy tu enemigo, confía en mí'
No sabía si podía confiar en ella, desde el principio, alguien tan torpe como ella no habría llegado a la conclusión de que este poder tiene que mantenerse en secreto, ella habría ido directamente a decírselo a su hermano. Lo que significa que no es tan tonta como se ha estado comportando.
Ni siquiera me refiero a cuando dice que su padre lo usó. Ahora mismo, cuando quiero hablar con Ely sobre esto, está durmiendo...
'Está bien...'
'Por favor, cuando estés masajeando a Lady Grayfia, restringe un poco tus poderes. Aunque los demonios no fueron creados por el Padre... los viejos demonios que han librado la gran guerra contra los cielos deberían poder tomar una pista y ella es una de ellas', me aconsejó Gabriel.
Cuando se dio la vuelta, la primera que estaba acostada boca abajo mirándonos sospechosamente fue Grayfia. No sé si puedo confiar en Gabriel o no, lo que sé es que ciertamente no puedo confiar en Grayfia.
No confiarías en un diablo en vez de en un ángel, puedes llamarlo racismo, pero para mí, es de sentido común.
Continué la terapia durante media hora, para entonces Gabriel se había derretido en mis dedos y estaba profundamente dormida, al igual que Ely, pronto los llevaría a su habitación, pero primero, había dos personas más con las que tratar.
Yasaka me miró mendigando, pero simplemente le di unas palmaditas en la cabeza: "Espera y sé obediente, valdrá la pena".
"Sabes que te necesito hoy más que cualquier otro día..."
"Y me tendrás".
Hoy Yasaka estaba más impaciente que nunca, pero oye, fuiste tú quien me puso en esta situación. Iba a prestar toda mi atención a ella y a Ely, pero tuvo que idear a su "charla de chicas", que no era más que un alarde de las habilidades de su amado maestro.
Era su forma de decirles: mira lo que me dan todos los días.
"¿Finalmente te vas a dignificar para tocarme?" Amaterasu tenía bastante curiosidad ahora después de ver la reacción de Gabriel.
"Espera un poco más, mi diosa".
"Fufu~ tú y yo tenemos todo el tiempo del mundo, cariño~" Ella se sintió cómoda mientras caminaba hacia Grayfia, esta última me miró expectante para saber en qué posición la iba a poner. Sería injusto darle al diablo un trato diferente, pero debido a la advertencia de Gabriel, decidí hacer algo diferente para Grayfia... solo un masaje tradicional sueco y un amasado, en particular... su cintura y medias.
"Uhm~" Ella gimió, cerró los ojos, exhaló profundamente y apoyó todo su peso en la cama.
"Te levantas mucho, ¿no?
"Es mi trabajo como criada estar lista para las órdenes de mi maestro".
"Pero dudo que esa sea la razón de tus tensiones, dado que eres un demonio" En comparación con la pura Gabriel, Grayfia se sintió mucho más tensa, sus músculos estaban mucho más tonificados y... maldita sea, tiene un buen culo. No quería echar un vistazo a una mujer casada con hijos, también parece que respeta bastante a su marido.
Eso no le impidió acostarse en esta cama sin ropa interior, disfrutando de mis manos.
"Ray-sama..."
"¿Uhm?"
"Has... crecido... desde la última vez que nos vimos".
"Gracias~"
"Estaba bastante ansiosa de que ambos nunca se pusieran en contacto conmigo, estábamos atentos, pero no queríamos ser intrusivos".
"Pensé que si tenías el poder de mantener ese incidente en secreto, seguramente también tenías el poder de hacer un seguimiento de nosotros".
"Sí, pero nos estábamos volviendo bastante ansiosos... Lo estaba".
"¿Tú?"
"Es por eso que planeé algo... una inversión en un proyecto de investigación japonés que parece estar navegando en el mercado".
"... oh mierda".
"Hice todos los procedimientos necesarios para que Reina-san fuera la investigadora principal y esperaba que te llevara a Tokio, donde nos reuniríamos".
"El líder del equipo mencionó que era una empresa estadounidense".
"La familia gremory tiene vínculos en todo Estados Unidos y Europa, no fue una tarea difícil".
"Parece que los demonios estaban más interesados en ti de lo que esperabas", comentó Amaterasu con una ligera sonrisa, tiene razón, no pensé que Grayfia tiraría de todas esas cuerdas en el fondo.
"¿Por qué no vienes directamente a mi puerta?"
Ella soltó un ligero gemido y luego cambió de posición incluso antes de que yo le preguntara, dándose la vuelta y acostada sobre su espalda, "La parte delantera, por favor..."
"Se".
"Pensé que eso sería demasiado directo... Te di mi número, pero nunca llamaste... aparecer en tu puerta habría sido inapropiado. En cambio, prefería un ambiente alegre, casualmente encontrarías a la joven señorita en Tokio y pasearías con ella en Akihabara, luego casualmente me conocerías a mí y a Sirzechs-sama mientras paseábamos a nuestro hijo también, y podríamos tener una conversación más pacífica... una coincidencia en lugar de una forzada".
"¿Y me estás diciendo esto porque...?"
"Ojalá pudieras confiar en mí y ahora que nos hemos conocido aquí, dentro de una semana en Tokio, si nos volviéramos a ver... lo encontrarías sospechoso".
"Eres increíblemente perspicaz, Grayfia..."
"Gracias, Ray-sama..."
"¿Estás disfrutando de esto?"
"Nunca me han masajeado antes, se siente relajante..."
Ya que ella va a ser honesta, entonces yo también podría ser un poco más honesto. Puse mucha más potencia en mi poder, lo mismo que usé con Gabriel. Sus reacciones fueron instantáneas e incluso más fuertes de lo que podría haber anticipado.
"¡Ahn~!"
Sus piernas comenzaron a temblar y ella instintivamente sostuvo mis manos que habían estado amasando su abdomen.
"E-Eso fue..."
"Mi servicio, este es un masaje piadoso, Grayfia".
"Fue tan intenso... por favor, continúa" Ella soltó mis manos y en su lugar se aferró a la cama de masaje como si fuera un salvavidas mientras continuaba, no sé... o no reconoce el aura de Septem Diebus o está demasiado absorta en la experiencia como para importarle.
"T-Tan bueno... Pensé que era un truco, pero Ray-sama, eres realmente un terapeuta".
"A tu servicio".
Durante la siguiente media hora, le mostré a este diablo lo que era el cielo real... su reacción fue, con mucho, la ingle brotaba y no parecía sentir vergüenza en ese sentido. Sin embargo, Grayfia era competitiva... a diferencia de Ely y Gabriel, se negó a ser noqueada, quería que ese momento significara el final de la terapia, pero ella se negó a bajar. En cambio, parecía volverse más audaz, quitándose la toalla y permaneciendo desnuda frente a mí. No con una intención seductora...
Era solo el deseo puro de cualquier mujer a la que masajeara que me tocaran directamente los dedos, sin impedimentos. Cuanto más lo disfrutaba, más se molestaba con esas prendas... la única razón por la que Gabriel no lo sentía fue porque deliberadamente hice algo domesticado por Gabriel, el ángel puro.
Para Grayfia, el diablo, no me contuve.
"Maestro, creo que debería haberse hecho hace mucho tiempo~" Hasshaku-sama había estado disfrutando de verme manipular sus mentes, pero se estaba volviendo tan impaciente como Yasaka.
"Mi turno" Incluso Amaterasu ya estaba impaciente, ya que había tardado más de lo necesario con Grayfia. La criada de pelo plateado no expresó una palabra, en su lugar, solo me miró como si comenzara por una extensión, pero no tuve el lujo.
La hice sentarse y volver a ponerse su bata de ducha, "Tu tiempo se ha acado", dije, pero me incliné hacia adelante para susurrar.
"Pero puedes venir a mí si quieres más, en cualquier otro momento en el que te sientas estresada".
"¿Puedo?"
"Por un sacrificio mínimo, eso es~"
Me gusta, pero no puedo darle preferencia.
Grayfia suspiró y sus ojos parecían perder ese entusiasmo anterior, volviendo a su frío yo, se levantó de la cama, pero se tambaleó al segundo siguiente con un chorro de jugos corriendo por sus muslos, la ayudé, sosteniendo inconscientemente su trasero, o tal vez conscientemente.
El hecho es que estaba cautivado, no solo por su cuerpo, sino también por su respuesta a mi terapia.
"No me importa si lo haces" Me susurró, un par de alas de diablo se manifestaron en su espalda y salió de la habitación, volando... aparentemente no podía caminar.
Miré a Amaterasu y vi a la diosa, desnuda, esperando a que la honrara.
"He esperado lo suficiente, Osiris".
"No esperarás más, diosa mía".