—¿Sólo trajiste a Yun-soo? ¿Qué hay de Se-hun y Tae-soo?
En respuesta a la pregunta de Kang Jin-han, el presidente Kang Hak-joong sostuvo a Yun-soo cerca de sus brazos. Dijo el presidente Kang Hak-joong mientras veía a Yun-soo bostezar y fruncir su pequeña boca como si quisiera tomar una siesta.
—Los envié a los dos a pasar el rato.
—¿Es así? Debido a Yun-soo, probablemente no tuvieron suficiente tiempo para estar juntos, pero debieron haber estado emocionados.
—Podrían quedarse en casa como la última vez.
La última vez, después de que el presidente Kang Hak-joong se llevara a Yun-soo, le preguntó a Tae-soo cómo pasaban su tiempo y le dijo que en casa. Cuando lo vio actuar como si eso fuera suficiente, recordó que no tenían mucho tiempo para tener citas.
Bueno, Kang Se-hun ha vivido una vida centrada en el trabajo y Tae-soo no fue diferente. Así que aunque se hayan estado viendo con frecuencia, es difícil imaginar cuánto han salido desde que Tae-soo se quedó embarazado.
—Si saben que están perdiendo el tiempo, de alguna manera lo pasarán bien.
El presidente Kang Hak-joong meció el cuerpo de Yun-soo hacia adelante y hacia atrás para ayudarlo a dormir bien. Kang Jin-han vio eso y sonrió en secreto. No era ningún secreto que había traído a Yun-soo con él porque era adorable, pero también lo hacía a propósito para que pasaran tiempo juntos.
—Yo…
Fue Park Han-soo, quien había estado callado hasta ahora. Se acercó con cautela y dejó su celular frente a ellos.
—Parece que lo estás pasando bien.
Cuando el presidente Kang Hak-joong y Kang Jin-han miraron la foto en el celular, mostraron reacciones similares pero diferentes.
El presidente Kang Hak-joong resoplaba y Kang Jin-han se reía como si fuera divertido.
Gestionar los derechos de imagen de Kang Se-hun también es una de las tareas del secretario Park Han-soo, que lo descubrió mientras buscaba.
Se adjuntó una breve explicación de cómo vio a Kang Se-hun en las redes sociales y una foto de ellos detrás. Parece que la foto fue tomada con cuidado, pero se reveló claramente que los dos estaban vestidos de manera diferente a lo habitual. Tae-soo, que vestía un traje cómodo, mostraba su encanto al máximo, mientras que el director ejecutivo Kang Se-hun, que exudaba una atmósfera difícil de abordar, llevaba un oso en la espalda.
***
Entraron en un bar poco iluminado, donde los focos eran la única fuente de luz. En cuanto sus ojos se adaptaron a la oscuridad, Tae-soo se acercó a una mesa de pie y agarró a Kang Se-hun del brazo.
—Si hubiera sabido que vendríamos aquí, habría usado un traje.
Todos iban bien vestidos y la ropa de Kang Se-hun fue la que más se destacó. Tae-soo suspiró y Kang Se-hun miró a su alrededor.
—No creo que la ropa importe.
—Bueno, eres muy guapo y tienes una gran vibra.
Tae-soo respondió rápidamente. Lo decía porque le molestaba. Por supuesto, Kang Se-hun se veía genial con cualquier ropa que usara. Podría ir a un bar en jeans y no parecer fuera de lugar.
Excepto que no esperaba estar aquí y tener un oso en la espalda.
—Al verte decir eso, creo que estoy realmente bien.
Kang Se-hun miró su ropa e intentó acercarse al espejo de cuerpo entero. Tae-soo lo bloqueó apresuradamente.
—¿Cómo me veo yo?
—Tú también llamas mucho la atención.
Kang Se-hun respondió medio en broma. Es una venganza por ponerle una camiseta de oso y no decírselo hasta el final. Tae-soo cree que no se dará cuenta, pero secretamente le miraba la espalda y se reía, así que se enteró.
—¿No encajamos los dos en este lugar?
Tae-soo ladeo la cabeza y jugueteó con su ropa.
—…No lo creo.
—Sé lo que estás pensando.
Kang Se-hun amablemente se inclinó y le susurró al oído a Tae-soo, quien no entendía lo que decía.
—Porque eres el más atractivo.
Mientras Kang Se-hun sonreía y se alejaba, Tae-soo se frotó la oreja.
—No respires antes de susurrar. Me sorprendiste.
Murmuró que creía que su oído se estaba mojando, pero no fue su respuesta relajada habitual.
Creo que fue por la ubicación, pero había otra razón. Kang Se-hun reprimió la risa cuando vio el rostro de Tae-soo reflejado en la luz. No creo que hayan encendido las luces rojas, pero tiene la cara roja.
—¿Y por qué liberas tus feromonas? No eres el único, todos lo hacen.
Tae-soo miró a su alrededor y miró hacia otro lado. Al ver esa expresión, Kang Se-hun se tragó las palabras que le vinieron a la mente en lugar de decirlas. Si decía que era como un niño en un parque de atracciones por primera vez, sabía que Tae-soo se emocionaría.
—¿Nos sentamos allí?
Cuando terminó la visita turística, Tae-soo fue a donde quería ir y eligió el asiento en la barra en lugar del sofá. Kang Se-hun siguió a Tae-soo a paso tranquilo.
En ese corto período de tiempo, Tae-soo, que revisó el menú, le preguntó a Kang Se-hun si había elegido una bebida.
—¿Qué te gustaría beber, hyung?
—Estoy bien.
Tae-soo estuvo a punto de preguntar de nuevo, pensando que no quería beber nada, pero el camarero le tendió un vaso.
—On the Rock estará listo para usted.
Kang Se-hun no dijo una palabra mientras añadía hielo en el vaso y servía whisky.
Luego, cuando sirvió el cóctel y los bocadillos que pidió, Tae-soo miró los vasos alternativamente en silencio.
—Eres un cliente habitual.
Tae-soo de repente se dio media vuelta y miró hacia atrás. Mientras lo miraba, preguntándose qué estaría pensando, Tae-soo se enderezó y estableció contacto visual.
La forma en que lo miraba, con las cejas arqueadas y los ojos bien abiertos, era como si le estuvieran acusando.
—¿Cuánto tiempo llevas trabajando aquí?
¿Trabajar?
Kang Se-hun arqueó las cejas ante la pregunta inesperada.
—Mira allá. Esa persona estaba sentada detrás de mí antes, pero movió su asiento. Y esa persona estaba claramente sola, y ahora está con otra persona. Si te gusta alguien, este es el lugar para ir y seducirlo.
No llevaba mucho tiempo en el bar, pero entendió rápidamente la situación.
—¿Cuándo viste eso?
A estas alturas, Kang Se-hun se había relajado y bebía el whisky a sorbos, mientras Tae-soo bebía su cóctel con cara de disgusto.
—Hyung debe haber sido muy popular aquí. Es obvio incluso sin mirarlo.
—Tae-soo. Creo que sólo has bebido un sorbo, ¿pero ya estás borracho?
Kang Se-hun colocó el dorso de su mano sobre la frente de Tae-soo para ver si tenía fiebre. Hizo lo mismo con Yun-soo, pero esta vez Tae-soo chasqueó la lengua como si no estuviera satisfecho con otra cosa.
—Viniste aquí para estar celoso de mí. Es así. Eso es.
—Sólo vine aquí para disfrutar de un tiempo a solas.
Cuando la conversación tomó un giro extraño, Tae-soo intentó corregirle, diciendo que no era Kang Se-hun. Kang Se-hun sacudió la cabeza con una risa superficial al leer su insatisfacción expresada abiertamente.
—Hay otro lugar al que voy a menudo además de este.....
Kang Se-hun, quien vio que la mirada de Tae-soo se volvía aguda, habló.
—Debería llevarte allí también. Es lindo que estés celoso.
—¿Te estás vengando?
Kang Se-hun está devolviendo los celos debido a su amistad con Gong Hae-chan.
Tae-soo miró los bocadillos y calmó sus celos. Desde el momento en que entró pensó que algo estaba fuera de lo común. Al igual que las feromonas que flotan suavemente, Kang Se-hun también liberó sus feromonas con más soltura de lo habitual. Y al observar a las personas que se movían de un sitio a otro, era un lugar donde las personas instantáneamente hacían contacto visual y se hacían cercanos.
No es que no vaya a bares, pero hace tiempo que no viene y lo notaba diferente.
—¿Deberíamos irnos si no te gusta?
—No. Disfrutemoslo.
Sólo mirando el ambiente, no estuvo mal. Más bien, como era un lugar único, había algo sutilmente emocionante en él.
Como ha pasado un tiempo desde que estuvieron juntos, solo necesita concentrarse en Kang Se-hun y tener una conversación adulta.
*
El bartender, que llevaba más de tres años trabajando en el bar, conocía las caras de todos los clientes habituales. Sólo porque fueran clientes habituales no significaba que conociera su información personal. No importa lo que hicieran o cuáles fueran sus familiares, la razón por la que venían a este bar era para beber y divertirse.
Aunque a veces venían solos a tomar una copa, éste era un lugar en el que no era raro que alguien entrara solo y saliera en pareja. Así que el bartender se aprendía las caras de los clientes habituales pero no profundizaba en quiénes eran. En cambio, ha sabido identificar sus necesidades, atenderlas y desaparecer en un segundo plano.
Entonces, ¿cómo recuerdas a tus clientes habituales? No debes limitarte a mirarles la cara como si la estuvieras memorizando.
Era importante recopilar información a través de sus voces, conversaciones e intereses. Gracias a esto, el bartender volvió a reconocer hoy a sus clientes habituales, preparó whisky y se fue a una distancia adecuada.
El hombre del traje sostenía el queso.
—Mirando esto…
Él sonrió, como si pensara que el queso cortado en trozos pequeños era lindo. Al principio, parecía mayor debido al traje que revelaba las líneas de su cuerpo, pero su piel suave y sus ojos de aspecto juvenil hacían imposible adivinar su edad. Cuando está inexpresivo, parece tener veintitantos años, pero cuando sonríe, parece más joven. Es difícil saber su edad, pero en términos de ambiente era el mejor entre sus clientes habituales.
—Compraré queso tierno para Yun-soo. Dado que le han salido sus dientes inferiores, intentaré alimentarlo lentamente.
—Si le gusta el queso, puedes mezclarlo con calabaza dulce para hacer un bocadillo, o hay una manera de hacer pan de queso, así que intentaré hacerlo.
—Excelente.
El bartender, que había estado escuchando la conversación de los dos mientras limpiaba los vasos, parpadeó.
《¿Queso… tierno?》
Pensó que eran personas que se conocían o una pareja, pero la conversación le pareció algo extraña.
—¿Pero sabías que Yun-soo se da vuelta mucho ahora cuando duerme?
Esto es lo que dice el cliente habitual que lleva el oso mientras acaricia la mejilla de la persona que lleva el traje y le da una mirada dulce….
—Ni siquiera he mordido el otro lado.
El bartender fingió no oír y miró hacia otro lado. Ninguno de los conocimientos que había acumulado mientras trabajaba era aplicable a la pareja que tenía delante.
……¿Son un matrimonio y no una pareja?