EXTRACTO I: HARRY STYLES
Posterior al primer diagnóstico del especialista que atendía a la amiga de Louis la sala de espera se sumergió en un abatido silencio, nadie pudo decir más que implorar en pensamiento que tanto la madre como el bebé estuvieran bien, a salvos.
El repentino silencio profundo y extraño de Louis que se encontraba a su lado llamó su atención, eso seguido de un golpe en su hombro y una presión en su costado, extrañado giró lentamente la cabeza capturando una imagen que no esperó; el rostro de su secretario presionado contra su hombro y todo el resto de su cuerpo contra el suyo, podría haber pensado que el cansancio lo agotó mandándolo a dormir, pero esa idea quedó descartada cuando observó la forma compleja en la que respiraba y del cómo su rostro se veía rojo y humedecido. Algo no estaba bien.
"¿Louis?". Llamó como primera reacción, pero nada sucedió. Oyendo las alarmas de emergencia en su cabeza levantó su mano tocando su barbilla; ardía, al igual que el jodido infierno y lo que indicaba que su falta de respuesta se debía a su absoluta inconciencia. Por primera vez en mucho tiempo sintió temor. "Louis, Louis...". Se giró por completo hasta él tocando por primera vez su rostro en su intento de hacerlo reaccionar pero nada sucedió, la fiebre lo tenía envuelto. "¡Una enfermera, necesito ayuda!". Su grito alarmante generó que los presentes se giraran asombrados hacia él.
"¡Louis!". La morocha Cindy fue la primera en correr hacia ellos. "¿Qué le pasó?"
"No lo sé, llamen a un enfermera". Su exigencia desesperada seguida de la del resto capturó la atención de una enfermera que rápidamente se acercó.
"¿Qué sucede?"
"Perdió la conciencia, está ardiendo en fiebre". Le informó intentando quitarle el cabello húmedo del rostro.
"Tráigalo por acá, lo atenderemos de inmediato"
Harry actuó de forma inmediata, agarró el cuerpo de su secretario estilo nupcial y rápidamente lo llevó hasta la sala indicada por la enfermera, pese a la preocupación sentida no puedo evitar pensar que era la primera vez que sostenía un cuerpo de esta forma y que en especial, el cuerpo de Louis se sentía demasiado liviano y frágil.
"Recuéstelo aquí". La enfermera apuntó una de las camillas mientras se movía con rapidez dentro de la sala preparando las cosas necesarias.
Siguiendo lo indicado lo dejó con cuidado sobre la camilla, esperando que el movimiento lo trajera de vuelta, sin embargo, Louis continuó inconsciente.
"Por favor, ayude a nuestro Louis". Cindy entró de forma abrupta a la habitación provocando que la enfermera la mirara no contenta.
"Por favor señores, retírense de la habitación, necesito tratar a solas al paciente". Ella ordenó estableciendo una intravenosa en el brazo de Louis.
"No me iré, me quedo con él". Harry sentenció rápidamente estableciéndose al otro lado de la camilla para no interrumpirla en su trabajo. Desde su espalda sintió la pesada mirada de la amiga de Louis sobre él.
"Saldré"
Las palabras lo llevaron a girarse hasta la chica, ella lo miraba profundamente, como si le estuviera diciendo "estoy dejando lo más importante para mi contigo, cuídalo". Entonces ella articuló afirmando toda su percepción.
"Cuídalo por favor, estaré esperando afuera"
Asintió con seguridad regresando la mirada a Louis.
Una vez que solo fueron tres dentro de la habitación la enfermera se relajó un poco, estableció el fonendoscopio sobre el pecho de Louis, escuchó un momento y luego rápidamente tomó una máscara de oxígeno colocándola sobre su rostro. La acción lo alarmó toda vía más, cada uno de sus músculos dolieron de la peor forma ¿cómo su estado de salud había empeorado tanto en tan poco tiempo?.
"Tranquilo, le estoy brindando oxígeno debido a la obstrucción en sus vías respiratorias". Ella formuló leyendo la reacción de su cuerpo. "¿Sabe si estuvo expuesto a un cambio abrupto de temperatura, mayormente frío?"
Su mente trabajó inmediatamente recordando desde que lo vio por primera vez en la mañana hasta que se fue, justo en horas donde la lluvia se desató. De repente todo tenía sentido. "Sí, él estuvo expuesto al fío y a la lluvia el día de hoy"
La enfermera exhaló mientras negaba. "Su sistema de defensa no está bien, es joven, debería estar en mejores condiciones pero evidencio agotamiento, no se está y lo están cuidado bien"
Las palabras generaron una mala sensación en él, Louis siempre había lucido saludable a su alrededor, esto era inesperado.
"Aquí va a estar bien, la fiebre comenzará a bajar, solo permitan que descanse". La enfermera formuló antes de caminar a la puerta. "Informaré su estado a los demás cercanos"
Una vez que ella estuvo fuera de la habitación, Harry se movió hasta la pared a un lado de la camilla de Louis, dejando apoyada su espalda sobre ella mientras sus ojos lo miraban. Jamás lo había visto así, tan indefenso, vulnerable, era una imagen que de repente rompía toda su concepción sobre él porque siempre había sido fuerte a su alrededor, la persona encargada de asegurarse de que estuviera bien, pero ahora aquí estaba, completamente desvalido.
La garganta pareció cerrársele, aún más cuando recordó la conversación que había tenido con su madre durante la hora del almuerzo.
"El hijo de mi amiga es encantador, deberías darle una oportunidad"
Harry había resoplado fastidiado. "¿No he sido lo suficientemente claro respecto de mis intereses? No estoy interesado en nadie, no es algo que me interese, además sabes perfectamente que no permito el contacto físico, me hace sentir incómodo y eso es un impedimento bastante grande"
Su madre había alzado una de sus cejas, mirándolo como si supera algo desconocido para él.
"Lo último no es cierto, tu sí permites el contacto físico con alguien, una persona que ha estado contigo mucho tiempo, que te conoce tanto que eso llevó a ganarse tu confianza, tanto como para que todos sepan que sin él no funcionas bien, entonces... ¿no crees que eso dice bastante?"
Las palabras inesperadas para él habían provocado que todo su cuerpo reaccionara en tensión, sin poder creer lo escuchado ¿cómo se le ocurría pensar en Louis? era su secretario, por dios. Que lo quisiera con alguien no implicaba que considerara a cualquier cercano.
"No puedo creer que estés hablando de Louis, mi secretario, eso es demasiado madre"
"¿Por qué demasiado?". La ceja de su madre se había mantenido arriba. "Louis al igual que tu es un ser humano, no es un robot, que sea eficiente con todo lo que hace no significa que no sienta emociones, difícilmente puede que te hayas dado cuenta pero Louis es un chico sensible, delicado, extremadamente bondadoso, eso sumado a su tremenda belleza, debería estar con alguien". Sus ojos se clavaron en los suyos sin pestañear, haciéndole saber su intención. "Y a ser por como tu cuerpo se relaja con él y permite el contacto físico, déjame decirte que eso es un mensaje bastante claro"
El pecho pareció inflársele, el corazón le había latido con demasiada rapidez, completamente sorprendido de sus palabras, pero también algo ansioso porque repentinamente su cerebro trabajó trayendo a su mente una serie de imágenes en las que su cuerpo había orbitado hacia él, tan cerca y cómodo, como esa mañana en la que mientras escuchaba la lluvia caer y veía sus ojos zafiros, su cuerpo se acercó tanto a él como para poder robarle todo el aire.
La garganta se le había cerrado, tanto como atorarse un poco porque no tenía sentido, su madre estaba jugando con su cabeza.
"Que sienta confianza con él no significa que lo quiera como algo más". Sentenció contra todo lo demás.
Su madre había resoplado cruzándose de brazos, luego negó con la cabeza y formuló por última vez. "Espero que no sea demasiado tarde cuando te des cuenta de que podrías haberlo intentado con él, porque Louis no estará toda la vida a tu lado, cubriendo mayor parte de tus necesidades y lo que ha gatillado que no tengas el interés de buscar alguien más, él en cualquier momento puede cansarse de esta vida en la que tú eres todo, quizás al igual que muchas personas tendrá la necesidad de ser amado, cuidado y querrá conformar una familia que le involucrará gran parte de su tiempo y tú no calzarás en ese mundo, no de la forma que él te ha permitido hasta ahora y te has acostumbrado"
Con ese último recuerdo en mente sus ojos se ancharon mientras miraba el cuerpo vulnerable sobre la cama, de repente encontró sentido a algunas palabras de su madre en el repentino comportamiento de su secretario el último tiempo, en la vez en que se molestó con él cuando aseguró que ambos irían justos al evento de la empresa y le cuestionó indignado si es que acaso alguien podía invitarlo, en su repentina conexión y llegadas tardes al trabajo después de reunirse con Eithan Collins de 31 años y de profesión ingeniero en administración de empresas, llevando un año exacto trabajando en su empresa; Sí, lo había investigado, era necesario después de verlo acercarse a alguien que sabía todo de él y que podía tomar provecho de eso.
"Louis no estará toda la vida a tu lado, cubriendo mayor parte de tus necesidades y lo que ha gatillado que no tengas el interés de buscar alguien más, él en cualquier momento puede cansarse de esta vida en la que tú eres todo, quizás al igual que muchas personas tendrá la necesidad de ser amado, cuidado y querrá conformar una familia que le involucrará gran parte de su tiempo y tú no calzarás en ese mundo, no de la forma que él te ha permitido hasta ahora y te has acostumbrado". Las palabras volvieron a repetirse en su mente ¿acaso Louis estaba buscando todo eso? ¿por eso ahora tenía acercamientos con ese Eithan?. La garganta se le cerró repentinamente ante la pura idea, siempre habían sido ellos dos, un tercero en el tablero de juego no parecía nada agradable y eso sin duda no estaba bien.
Durante el resto de la hora siguiente no pudo hacer más que mirar el cuerpo de Louis, preguntándose cuáles podrían ser sus actuales pensamientos.
No fue hasta un par de horas más que la fiebre de Louis bajó logrando que su cuerpo se estabilizara, estaba aún débil pero permitieron llevarlo a casa, solo necesitaba descansar y tomarse los medicamentos.
FIN DE EXTRACTO
Cálido, suave, esas fueron las primeras palabras que llegaron al cerebro recién despierto de Louis, soltando un pequeño sonidito sus ojos lentamente comenzaron a abrirse; un techo alto de un blanco impecable y con un hermoso candelabro fueron las primeras cosas que le llamaron atención, que le hicieron saber que no estaba en su hogar sino en el de su jefe, había dormido muchas veces en esta habitación de invitados como para no reconocerla.
La tos repentina que sacudió su pecho obligó a su cuerpo a sentarse sobre la cama, de inmediato los músculos le dolieron, incluso en los lugares más recónditos.
"Mmm". Quejumbroso se llevó una mano al pecho, hacía años desde que no se sentía tan mal.
Le costó recuperarse, pero cuando lo hizo las alarmas se encendieron en su mente, recordándole que había alguien que podía estar pasándola mucho peor. Alarmado movió su cabeza hasta el velador en la búsqueda de su celular, favorablemente lo encontró ahí por lo que inmediatamente se arrastró sobre la cama para poder tomarlo. Una vez activado se encontró con un montón de mensajes, pero solo uno capturó toda su atención; el de Christina.
«No te vayas a volver loco cuando despiertes, con mi bebé estamos fuera de riesgo, solo necesitamos descansar, al igual que tú, sé lo que pasó así que no te atrevas a salir de la cama solo para venir a verme, necesitas recuperarte y ponerte fuerte también, por favor escúchame y quédate en casa, si vienes a verme estaré realmente molesta. Descansa amigo, nos vemos pronto. Un beso y abrazo»
Un peso enorme dejó su corazón, saber que estaban bien era todo lo que necesitaba. La tos terminó volviendo justo en ese momento, cuando el cuerpo se relajaba los síntomas eran peores. Quejumbroso apoyó la cabeza sobre la almohada mientras intentaba procesar todo lo ocurrido en un par de horas, recordaba vagamente su estadía en el hospital, cuando la enfermera le dio el alta permitiendo que se fuera a casa, a SU casa, no a esta ¿por qué Harry lo había traído aquí?.
Con la tos en medio empujó las cálidas frazadas hacia atrás, aquello le permitió percatarse de su atuendo, llevaba la ropa ligera y fea del hospital, eso lo hizo sentirse aún más enfermo, no le gustó. Luego de sentarse en la orilla de la cama con sus pies sobre la alfombra miró el resto de la habitación, estaba cálida debido a la calefacción tenue, Harry debía de haberla encendida para él, pero no lo suficiente para afectar aún más su salud, además de eso se percató de la muda de ropa perfectamente doblada sobre el tocador, eso jamás estaba ahí así que eso también significaba que la había preparado para él.
Sintiéndose agradecido se paró de la cama para poder cambiarse el pijama, los pantalones le quedaron relativamente bien, pero el hoodie lo hizo sentir invadido en Harry, todo le decía que le pertenecía a él, desde el tamaño que lo arropaba por los muslos hasta su aroma tan limpio y reconocible. Luego de cambiarse no hizo mucho por su rostro, estaba enfermo por lo que nada cambiaría el hecho de que su piel estaba demasiado pálida y sus labios rosas algo agrietado.
Soltando una penosa exhalación, se colocó las pantuflas y salió de la habitación, como siempre la casa estaba mayormente en silencio, a excepción de que esta vez algo acompañó el cantar de los pájaros y eso fue el sonido de lo que parecía ser una cuchara golpeándose contra una olla.
Se dejó guiar por ese sonido por lo que prontamente estuvo en la cocina donde sorpresivamente se encontraba su jefe de espaldas a él revolviendo una olla, para su sorpresa, vestía de ropa deportiva de marca, parecía ser una escena de película, donde el típico hombre protagonista se veía malditamente hermoso haciendo cualquier cosa. Internamente resopló porque ni siquiera en esta maldita realidad podía ser el otro protagonista.
Se hubiera quedado mirándolo una vida, pero lamentablemente su condición de salud le arruino el momento, entonces tosió provocando que Harry se girara de inmediato hacia él. Se miraron en silencio y sin moverse, pareció un minuto completo en donde nada más que ellos dos tuvieron sentido. Louis se sorprendió al encontrar en esos ojos verdes brillantes lo que pareció ser cuestionamiento, mientras lo miraba de arriba abajo un montón de palabras, preguntas parecían llegar al cerebro siempre tan controlado de su jefe, y sea lo que fuera, era evidente que no lo esperaba porque el resto de su cuerpo pareció tornársele rígido.
"Buenos días". Decidió romper con el momento.
Harry volvió a reaccionar moviéndose hacia adelante, más cerca de la isla. "Buenas tardes querrás decir"
Su ceño se le frunció ¿tarde? ¿qué hora era? no se había percatado de ello cuando tomó su celular. "¿Qué hora es?". Preguntó acercándose a él.
El hombre mayor miró hacia el reloj de cocina. "Una y media"
El rostro se le llenó de sorpresa, jamás dormía tanto, ni recordaba cuando fue la última vez que tuvo un largo dormir. "Oh por dios, es demasiado, lo siento"
Harry negó con la cabeza. "Estás enfermo, debes descansar". Dicho esto, se giró hasta la estufa encendida donde se encontraba una olla. "¿Cómo te sientes ahora?"
La tos que lo invadió le dio parte de su respuesta. "No voy a negarlo, me duele el cuerpo, como si me hubiese pasado un carro por encima"
Harry chasqueó la lengua antes de volver a mirarlo. "Deberías volver a acostarte, necesitas descansar"
Sacudió la cabeza. "Ya estuve acostado lo suficiente". Lentamente comenzó a acercarse a él, tanto como para chocar su costado, sus ojos curiosos miraban directamente la olla con caldo. "Está cocinando". Dijo algo sorprendido.
Harry giró la cabeza hacia él, sin importar lo cerca que estaban. "Caldo para los enfermos, el mejor remedio". Sus ojos volvieron a la comida. "Le pedí la receta familiar a mi madre"
La reacción en su cuerpo fue automática, un río cálido pareció correr todo su torrente sanguíneo, cosquilleando por todos lados, haciéndolo sentir cuidado. El que le demostrara que se preocupaba por él significaba mucho.
"Gracias". Su barbilla bajó un poco, ocultando el evidente sonrojo.
"Vamos a comer, siéntate porque está listo". Harry apagó el fuego para luego agarrar dos recipientes.
"¿Algo en que pueda ayudar?". Miró hacia la enorme isla notando que los cubiertos ya estaban ahí.
"No, solo siéntate"
Asintió sentándose en el banco mientras tosía un poco.
"Come para que puedas tomar tus medicamentos". Harry dejó el recipiente de comida delante de él para luego acercarle desde la isla un sobre blanco de papel con medicamentos dentro. La sensación de sentirse cuidado aumento.
"Gracias". Sonrojado ajustó el recipiente de comida delante de él, olía maravilloso.
Harry se sentó frente a él con su propio recipiente.
Tragar la comida fue algo dificultoso por el dolor que sentía en la garganta, pero de igual forma pudo disfrutarla, sabía muy bien.
"Está delicioso, gracias". Confesó mientras sus labios se curvaban en una sonrisa que tuvo el efecto de hacer que Harry se la devolviera.
"Es la primera vez que la preparo, mamá me guió por videollamada". Sonriente y algo orgulloso, Harry pareció relajarse sobre el banquillo.
"Ella debe de haber estado feliz, le encanta hacer cosas con usted"
"De hecho parecía estar más frutada, tengo mi propia forma de cocinar, me gusta jugar con los sabores"
Asintió sabiéndolo perfectamente. "Pero esta no es cualquier comida, es una receta familiar y debiese hacerse tal cual"
Harry lo miró con una ceja alzada. "¿Ustedes están conectados mentalmente? ella dijo los mismo"
Sonrió por completo. "Es la ley de las tradiciones, pensé que lo sabía"
El hombre elevó sus hombros. "Pero bueno, la comida quedó bien". Se llevó la cuchara a la boca. "Come el pollo también, necesitas ponerte fuerte"
Asintiendo obediente comió para darle en el gusto, luego de eso se quedaron en silencio por breves minutos. Él aún sentía demasiada inquietud sobre su estadía en esta casa.
"Yo... no quiero ser grosero pero necesito preguntar por qué decidió traerme aquí y no me dejó en mi casa, probablemente tenía planes para hoy por lo que lamento ser una carga"
"No lo eres". La sentencia vino enseguida, como si hubiese dicho algo completamente inadecuado. "Te traje porque necesitabas cuidado y sé que no te habrías tomado el tiempo de reposar"
Sus mejillas se calentaron porque en parte tenía razón.
"Tu mamá me ha preguntado por ti, deberías hablarle"
Los ojos se le abrieron de par en par. "¡¿Mi mamá habló con usted?!". Chilló sin poder creerlo.
Styles asintió mientras masticaba todo tranquilo. "Hablé con ella después de traerte aquí, le prometí que descansarías y que obviamente tu hablarías con ella cuando despertaras"
"Dios...". Sintiéndose sin aire estableció la mano sobre su frente, sabía perfectamente lo intensa que se ponía su madre cuando uno de sus retoños se enfermaba, ella no debía de haberlo dejado tranquilo. "Siento todo esto, en especial si mi madre fue intensa con usted"
"No lo fue, despreocúpate, solo háblale"
Asintió obediente. "Lo haré una vez que termine la comida"
Comió el resto del almuerzo entre la tos que se desataba, su cuerpo continuaba doliéndole.
"Te estoy dando libre el lunes". Harry le dijo parándose del asiento para poder llevarse los recipientes al lavadero. "El miércoles tenemos la sesión de fotos para la revista y el viernes es la fiesta, tienes que recupérate para eso"
Sus labios se tornaron en una mueca porque por más que no le agradara la idea él tenía razón, necesitaba estar sano.
"Okay, gracias". Se paró del asiento jugueteando con las mangas del hoodie.
"Debes volver a descansar, necesitas reposo". Harry le dijo volviéndose hacia él.
Asintió. "Tengo que volver a casa, iré por mis cosas antes de llamar a un taxi". Dicho esto se giró para poder regresar al dormitorio.
"No lo hagas"
Sus piernas se detuvieron al instante por lo que se giró hacia él con una expresión entre sorprendida y confusa ¿a qué se refería con no? ¿que no se fuera o que no tomara un taxi?. Su expresión debió de presionar a su jefe ya que alzó una mano tocándose de forma nerviosa la nuca.
"Me refiero a que te llevaré, tomate tu tiempo"
El corazón se le aceleró, corrió verdaderamente a kilómetros. "No tiene que hacerlo, estaré bien"
Harry se cruzó de brazos. "No aceptaré un no como respuesta". Dicho esto se alejó de la cocina rebuscando sus pertenencias.
Sin más nada que cuestionar retomó su rumbo hacia el dormitorio.
Minutos más tarde caminó hasta el estacionamiento donde se encontraba su jefe parado, esta vez complementaba su atuendo deportivo con una gorra que lo hizo lucir aún más atractivo.
"¿Listo para ir?". Le preguntó quitándose las manos de los bolsillos.
"Vamos"
Una vez de camino se relajó sobre el asiento, el sol lo alcanzaba por lo que su piel se sentía siendo abrazada. Soltando un cálido suspiro giró la cabeza inconscientemente hacia su jefe, inmediatamente se quedó perdido en el momento, en lo guapo que se veía conduciendo con una mano y con ese atuendo todo deportivo. Algo en este momento se sentía tan doméstico, tan cálido porque ¿no es así como lucían muchas de las escenas románticas? es decir; un día sábado conduciendo por las calles soleadas con la persona que amas. Tan hermosamente triste porque prontamente ya no volvería a ver algo parecido.
No fue hasta que Harry giró la cabeza y lo miró curioso que debió de apartar la mirada, justo hacia los bolsillos del hoodie ya que su celular comenzó a sonar.
"Madre". Respondió al mirar el identificador.
"Hijo ya estoy cerca de tu casa"
Su ceja se alzó. "No pensé que vendrías"
"Por supuesto que sí, mi bebé está enfermo". Ella argumentó rápidamente. "¿Ya vienes a casa?"
"Sí, estoy en camino"
"Okay, nos vemos aquí"
"Nos vemos". Cortada la llamada exhaló.
"¿Tienes planes?". Harry consiguió su atención rápidamente.
Negó con la cabeza. "Solo mamá"
"Vendrá a consentirte". Los labios se le curvaron en una pequeña sonrisa.
"Madres". Se encogió de hombros. "Y usted debería ir a ver la suya, no fue muy apropiada la forma en que terminó la cena la pasada noche"
"Eso no es nada". Dijo con su mirada indiferente sobre las calles.
"Solo digo que vaya a pasar tiempo con ellos, no se quede solo en casa"
Harry giró la cabeza y lo miró, tan profundo, tan penetrante como para robarle el alma. "¿Te preocupa que este solo?"
El pulso se le aceleró, tanto como para dolerle porque si se trataba de la familia prefería que estuviera con ellos, pero si se trataba de una pareja no quería que estuviera con nadie más que él, no quería ser egoísta, simplemente dolía demasiado imaginarlo con alguien. Dejó de mirarlo porque estaba seguro de que de seguir viendo sus ojos iba a confesar la segunda verdad. "Simplemente... algunas veces es mejor estar acompañado"
Luego de sus palabras se generó un silencio completo, cada uno inmenso en sus propios pensamientos.
Llegaron a su casa en menos tiempo de lo pensado, su madre ya estaba ahí apoyada contra el capot de su auto por lo que sonrió, incluso teniendo una copia de llave ella siempre respetaba su privacidad.
"Hey". Saludó bajando lentamente del vehículo.
"Ohh mi bebé". Ella se movió rápidamente hasta él abrazándolo con sus brazos cálidos y protectores. "Siento no haber estado ahí para ti"
"Tranquila, todo pasó muy rápido, ahora estoy bien". Retirándose del abrazo le sonrió antes de mirar a su jefe. Su madre rápidamente dio un paso hacia atrás mirando hacia Harry.
"Señor Styles". Caminó hacia él estirando su mano.
"Señora Tomlinson". Styles de devolvió el apretón.
"Gracias por haber cuidado de mi hijo". Ella puso su otra mano sobre él en un acto gentil. Louis estuvo a punto de intervenir sabiendo que podía ser demasiado para él, sin embargo, su jefe no se retiró, ni siquiera lució incómodo.
"Está bien, no se preocupe". Le brindó su mejor sonrisa, aquella que siempre dejaba al mundo encantado. "Es un agrado verla"
"Igual, por cierto, está muy guapo"
Las mejillas de Louis se encendieron inmediatamente. "Mamá, por favor". Su llamado de atención conllevó que ella finalmente retrocediera.
"Ehh bueno ¿almorzaron? ¿quieren que les cocine algo?"
Ambos negaron al mismo tiempo.
"Ya comimos". Logró informarle antes de que la tos lo ahogara.
"Debes entrar y volver a la cama, la humedad de aquí no te hará bien". Harry fue el primero en intervenir.
"Es cierto hijo, vamos adentro"
Asintió sabiendo que necesitaba volver a acostarse.
"Bien, me retiro, cuídate y nos vemos el martes". Harry lo miró directamente.
"Nos vemos". Asintió remojándose los labios.
"Señora Tomlinson, cuídese". Tan cordial como siempre estiró su mano hacia ella.
"Cuídese también, no se enferme como ni niño"
Harry asintió con una pequeña sonrisa antes de caminar hacia su vehículo, sus ojos y cuerpo no se movieron de él hasta que estuvo lejos de su visión.
"Estará bien". La mano de su madre sobre su brazo le recordó que no estaba solo. "Vamos cariño"
Girándose entró a su casa, debía de aprovechar descansar lo más posible.
El día sábado terminó yéndose, se recuperó bastante así que para el día domingo finalmente pudo reunirse con sus amigos, ver a Christina en buenas condiciones es todo lo que su corazón necesitaba en ese momento para estar tranquilo.
"Realmente nos asustaste ese días". Bob formuló mirándolo a él. "Primero Christina, luego tú, fue sorpresivo"
"Lamento haberlos asustados". Se disculpó algo apenado.
"Hay otra cosa que también fue sorpresiva y esa fue la reacción de tu jefe". Cindy articuló dejándolo con la guardia baja. "Él enserio se preocupó por ti, siempre pensé que su cabeza solo podía estar en su propio trasero así que fue bueno ver lo contrario"
Su corazón voló hacia las nubes, el que sus amigos reconocieran algo como eso era especial, había vivido demasiado tiempo a su lado sin saber que realmente podía preocuparse por él.
"Él se portó muy bien conmigo". Informó acomodándose en el sofá.
"Correspondía que lo hiciera, le has servido por años". Christina se pasó la mano por su gorda barriga.
Todos asintieron al mismo tiempo, Louis reconoció en sus expresiones que tenían muchas más cosas para decir pero que prefirieron guardar, quizás era lo mejor después de todo.
***
Louis estuvo recuperado por completo para ese día miércoles de la sesión de fotos y entrevista, así que ahora estaba ahí, probándose el traje de diseñador luego de haber pasado por maquillaje.
"Gracias". Le dijo a la estilista una vez que finalizó de acomodarle un traje formal y de color negro, se conformaba por un pantalón ajustado, chaqueta y una camisa parecida a la ceda abotonada hasta el cuello, el traje había sido diseñado a su medida porque le quedaba perfectamente, no habiendo nada que criticar.
Conforme con como lucía se giró hasta su jefe que se encontraba colocándose su corbata de color azul oscuro, las asistentes se encontraban a su lado con las partes del traje y luciendo algo frustradas por no poder hacer su verdadero trabajo, ayudarlo a vestirse por completo y por supuesto, de tocar a uno de los hombres más guapo del último tiempo.
Bastante acostumbrado a ver esas expresiones decidió hacerse cargo como siempre, incluso si sus propias asistentes se enojaban por arrugar su traje.
"Déjeme con eso". Llamó la atención de Harry al tocar su brazo para girarlo hacia él. Harry lo hizo enseguida, se enfocó por completo en él, mirándolo de arriba abajo con unos verdes brillantes intensos, inevitablemente se sintió nervioso.
"Te ves bien"
Sus nervios explotaron, llegando a sus pómulos tan reveladores de información.
"Gracias". Logró formular por encima de todo el nerviosismo, sus manos ahora algo sudorosas se movían por su cuerpo arreglándole la corbata y camisa, de reojos podía sentir la mirada de las mujeres cuestionando cómo lo hacía para poder tocarlo.
"¿Te sientes nervioso por todo esto?". Harry le preguntó mientras él tomaba el chaleco sin mangas para ponérselo.
"Un poco sí". Con cuidado le abrochó cada uno de los botones. "Sabe que no estoy familiarizado con las fotografías y esas cosas"
Harry asintió. "Solo intenta relajarte, eso lo hará más rápido"
"Lo intentaré". Exhaló antes de finalizar el atuendo colocándole la chaqueta. "¿Abrochada o desabrochada?"
Harry empujó la cabeza hacia un lado no convencido, luego se giró un poco para poder mirarse al espejo.
"Debería dejarla abierta señor, actualmente se utiliza mucho así". Una de las estilistas no tardó en comentar.
"¿Qué opinas tú?". Harry estableció toda su atención en él, como si ni hubiera nadie más cerca.
"Prefiero cerrada, se ve más ordenado, más usted". Expresó con toda sinceridad, no pretendía invalidar las opiniones de las profesionales, solo estaba diciendo lo que creía.
Harry asintió enseguida, sin pensarlo dos veces. "Abrochada entonces"
Una vez que su jefe estuvo completamente listo, impecable, el director ejecutivo de la revista se les acercó llevándolos al set, tranquilamente les explicó que iniciarían con Harry, luego con él y al final una sesión conjunta.
Louis esperó sentado a un lado del set, sus ojos sin poder pestañear de lo que era Harry en la sesión fotográfica, su postura segura, esa mirada penetrante, cautivadora, todo lo hacía parecer majestuoso. Inmediatamente sonrió cuando el fotógrafo le gritó que lo hacía fantástico.
Transcurrieron varios minutos antes de que su jefe terminara y el fotógrafo lo llamara al centro. Inmediatamente se sintió nervioso, sus piernas se volvieron torpes lo que era bastante ridículo porque a lo largo de su carrera profesional le había tocado hacer cosas realmente difíciles y el que estuviera ahí precisamente no significaba nada.
"Saldré un momento, tengo que llamar a Paulo". Harry le dijo parándose frente a él, sus ojos lo miraban con demasiada cautela. Louis lo había aprendido a conocer lo suficiente como para saber que su llamada tenía que ver con él, con el hecho de que lo quería dejar solo para no ponerlo más nervioso.
"Okay". Musitó antes de verlo salir.
"Bien señor Tomlinson, partiremos con la sesión, sitúese por aquí"
Lo que vino después no fue tan malo, gracias a la amabilidad del equipo lograron terminar antes de lo previsto.
"Perfecto, bien hecho señor Tomlinson". El set aplaudió justo antes del retorno de Harry.
"¿Fue tan malo?". Su jefe se acercó a él con una ceja alzada.
Sus pómulos se volvieron algo más rojizos. "No tanto"
Styles sonrió. "Me alegra". Luego de esas palabras las maquilladoras se acercaron a ellos para poder retocarlos.
"Las siguientes fotos en conjunto las realizaremos en este set". El director apuntó hacia donde se encontraba el enorme ventanal del edificio, el espacio estaba ambientado en una elegante oficina. "Esto será bastante rápido, solo les tomaremos fotos uno al lado del otro así que manténganse relajados". Él les dijo antes de ayudarlos a situarlos, tomaron una con Harry sentado detrás del escritorio y él a su lado, luego ambos parados frente al escritorio, Louis se sintió en todo momento bastante nervioso, Harry era demasiado bueno en esto.
"Perfecto, se ven maravillosos". El hombre tomó un par de fotos más antes de bajar la cámara. "Me gustaría hacer las últimas fotos frente al ventanal así que ajustaremos las luces, dennos un momento"
Asintiendo ambos lentamente comenzaron a caminar hasta el enorme ventanal que dejaba al descubierto la ciudad, se pusieron uno frente al otro mientras miraban el paisaje, el mar lograba verse a lo lejos.
"Algunas veces pienso que sería genial cambiarnos de edificio"
Las palabras de su jefe generaron que apartara los ojos de la ciudad para mirarlo.
"Un lugar cerca de la costa sería genial, una vista incomparable". Styles continuó con su vista a lo lejos.
"Es cierto, pero sería más complejo para los trabajadores desplazarse hasta allá"
Harry giró la cabeza hasta él, sus ojos verdes lucían completamente brillantes mientras lo miraba. "Siempre tan preocupado por los trabajadores"
Encogiéndose de hombros levantó un brazo llevando su mano derecha a la corbata torcida de Harry. "Así debería ser siempre". Ajustó la tela suave con tranquilidad o hasta que escuchó el disparo de una cámara fotográfica, la que los llevó a dejar de mirarse y percatarse nuevamente en el fotógrafo que los enfocaba con el lente de la cama, evidentemente los había estado fotografiando sin ambos darse cuenta.
"Comenzaremos". Él les dijo con obviedad.
Aclarándose ambos la garganta ajustaron sus propias ropas antes de retomar la sesión fotográfica.
Un vez que las fotos estuvieron hechas fueron llevados a unas habitaciones más cómodas y privadas, se presentó la periodista que llevaría a cabo la entrevista y entonces inició con Harry, Louis se mantuvo en la habitación supervisando que no preguntara nada inadecuado. Afortunadamente la conversación durante esos minutos se mantuvo bastante protocolar, abordando netamente lo empresarial, dando Harry consejos de orientación para otros que quisieran hacer surgir sus empresas.
"Antes de finalizar esta entrevista no puedo evitar preguntar algo que ha estado en la mente de muchas personas". La entrevistadora se ajustó en su asiento con su mirada fija, concentrada en Styles. "¿Qué debe de tener alguien para llamar finalmente la atención de Harry Styles? actualmente es catalogado como uno de los hombres más guapo, pretendientes no le deben faltar, pero jamás se le ha visto acompañado, entonces ¿qué se necesita para llegar ahí?"
La respiración de Louis se enganchó, al mismo tiempo que Harry se removía en su asiento y fijaba la mirada en él, en el pasado cuando hacía eso significaba que le estaba preguntando si debía contestar o no, pero en este preciso momento de su vida, cuando su corazón estaba tan pesado, lleno de sentimiento, no pudo descifrar esa mirada, no pudo hacer más que quedarse congelado mirándolo.
Harry volvió a concentrarse en la mujer mientras se tocaba la barbilla.
"Plantearlo de esa forma lo siento incorrecto porque es como si hubiera algo malo en la gente y no es así". Harry argumentó tan claro, imperturbable, como si continuara hablando del trabajo. "Si no estoy con alguien no es porque la gente no esté a mi altura o algo así, simplemente es mi decisión, estoy cómodo con la vida que tengo"
Las palabras lo hundieron un poco más en su miseria ¿cómo podía sentirse tan cómodo con su vida actualmente, sin tener a alguien que le pudiera brindar abrazos, besos o simplemente una palabra cariñosa?. Sus ojos bajaron al piso mientras su corazón le pedía que no fuera tan duro con él porque meses atrás él estaba en la misma situación, viviendo su supuesta vida cómoda, vida que terminó por explotarle en la cara cuando se dio cuenta de lo mucho que lo quería... Harry solo tenía que enamorarse por primera vez, eso lo cambaría todo.
Sus pies dieron un paso hacia atrás, luego otro, hasta que estuvo lejos de la habitación, por primera vez estaba dejándolo solo en un espacio de trabajo, se sentía extraño, pero debía aprender a lidiar con eso porque prontamente daría la vuelta para siempre.
Diez minutos más tarde estuvo sentado en la misma silla de Harry y únicamente con la entrevistadora frente a él, la entrevista iba bien, aunque el último tramo lo sintió más personal.
"Es evidente que su función en la empresa y para su jefe ha sido relevante, se sabe que ha pasado por muchas cosas, que no cualquiera soportaría, sin embargo, eso hace preguntarnos ¿tiene un límite? ¿qué podría hacer cambiar la actual vida del secretario Tomlinson?"
Cada palabra lo tomó por sorpresa, el que preguntara algo que se relacionaba tanto con su actual situación daba un poco de miedo. Al menos no tenía que analizar mucho la pregunta.
"Creo que al igual que muchas personas lo consideran, cuando el corazón dice algo con tanta fuerza es mejor oírlo, puede ayudar a tomar un camino"
La mujer inclinó la cabeza hacia un lado expresando confusión. "¿Quiere decir que un motivo para dejarlo todo podría relacionarse con los sentimientos, el amor?"
Su rostro se obligó a no delatarlo, necesitaba mantenerse lo más en autocontrol posible. "Actualmente solo puedo decir que no seré joven toda la vida, la fuerza que tengo ahora en el trabajo probablemente no la tendré después y en una relación con cualquier persona se necesita dedicación y tiempo, aspectos que actualmente no tengo por completo"
"Debe haber un complemento, sin duda". Ella finalmente pareció entenderlo. "¿Le gustaría casarse? lo pregunto porque parece que en esta industria el enfoque está en otras cosas"
Sonrió casi de forma melancólica. "No pienso mucho en casamiento, en estos tiempos es difícil tomar esa decisión, no muchos se atreven, sin embargo...". El corazón le latió un poco al pensar en ser abrazado, sostenido y besado por alguien que lo quisiera de vuelta. "Sin duda me gustaría estar con alguien"
La mujer soltó un sonido de arrullo. "Aparecerá alguien, usted es guapo, inteligente, amable, todo lo que alguien desea"
Sonrió sonrojado, deseaba que fuera así.
Finalmente la sesión de fotos y la entrevista terminaron yéndose, al igual que el resto del día, últimamente las horas estaban pasando demasiado rápidas y temió, realmente temió no poder dejarlo todo después de la fiesta. Ahora el corazón lo sentía mucho más pesado.
***
Lo prometido está aquí, un pequeño POV de Harry, no será el único así que esperen el resto.
Gracias nuevamente por todo el apoyo y Feliz navidad🎄nos vemos el sábado próximo. #Stef