AVISO DE CONTENIDO EXPLÍCITO +18
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En el camino a casa de Dwight, mientras contaba varias de mis anécdotas de mis viajes, pensé que seguramente este chico querría tener... Ya saben... Conmigo.
Tiene poco tiempo que regresamos en secreto, pero no me sentía completamente segura de querer hacer algo de nuevo tan pronto. Además, desde que terminamos me he dejado de tomar mis anti conceptivos.
Mis sospechas se confirmaron cuando noté que Mose no estaba, la mesa estaba puesta para una agradable y romántica cena de... ¿Venado? Y no había más luz que la de las viejas veladoras y la olla cociendo sopa de betabel. El venado en particular es afrodisiaco, por cierto.
Dwight me atendió muy lindamente, como un caballero. Después de la cena, me llevó al cuarto Irrigación para que me quedara a dormir. No me negué, pero sí pude notar que Dwight quería llevarme a la cama, literalmente.
Dwight: ¿Estás muy cansada?
Mar: Sí, bastante.
Dwight: Yo podría hacerlo todo, sabes que no tengo problema con eso.
Mar: Ahm, gracias, pero...
Dwight: Según mi última reseña en Trip Advisor, esta es la cama más cómoda que hay. Quiero que tengas la mejor experiencia posible.
Mar: Dwight, ¿no crees que es muy pronto?
Dwight: Al contrario, ha pasado mucho tiempo. Eso me recuerda, preparé un nuevo mix para esta noche.
Se levantó y fue por un tocadiscos. Puso un disco rojo que decía en plumón negro "Romantic x Mar", y empezó a sonar esta canción:
Dios... Dwight sí que es persuasivo. La melodía y la letra de esta nostálgica canción me hicieron sentir como en las nubes. Tan perfecta para reflejar el tiempo que había pasado y se nos había hecho eterno.
Dwight: Ven, bailemos.
Tomé su mano con intriga. Las luces estaban apagadas, sólo la luz de la luna que entraba por la ventana nos alumbraba.
Me recosté en su pecho para movernos al ritmo de la música. Ese fue un buen tiro por su parte. Hasta quería llorar de la emoción.
Dwight: Mar, cuando te fuiste me di cuenta de lo perdido que estaba sin ti. Fue dolor, tortura y destrucción. Hiciste un agujero en mí, tal como la mejor barrena.
Me alegra saber lo que es eso, muy propio del vocabulario rural de Dwight. (Es un mecanismo para hacer agujeros para postes).
Seguimos balanceándonos al ritmo de la música unos minutos. Cerré los ojos y disfruté el momento.
"No puedo creer que me esté haciendo temblar, como si apenas fuera una niña enamorándome del hombre que robó mi primer aliento" pensé.
Dwight: Mírame *toma mi rostro y me hace voltear a verlo* Siempre voy a amarte, Mar Johnson. Te dije que siempre estaría para ti, sin importar si tú quisieras escapar.
Mar: Sí, ¿cómo lo sabías?
Dwight: No... No tengo idea. Tú me has hecho creer en el destino y las casualidades.
Mar: Sip, en eso creo yo.
Dwight: Sé que no fue una casualidad que llegaras a mi vida. Ahora no quiero estar con nadie más que tú.
Sonreí y mis ojos le transmitieron el cariño que siento en mi corazón. Acaricié su cabello, sus mejillas y sus labios con mis dedos. Lo había logrado. Quería estar con él.
Me besó tiernamente. Parecíamos estar en una película vieja, de esas románticas que me encantan.
Cuando terminó la canción, le siguió una música instrumental de saxofón muy sugerente. Ya estaba lista y ansiosa.
Me senté en la cama, palpé las sábanas y le hice un gesto para que me acompañara. Se sentó un momento, luego pasando a tomarme del cuello y acercarse para besarme con muchas ganas.
Con sus manos fue desabotonando mi blusa. Yo lo ayudé a desnudarme destrabando el sujetador y tirándolo al piso. Realmente el atuendo de hoy era perfecto para que me lo quitara, inconscientemente lo compré para eso. Para que me lo arrancara y lo dejara en el suelo de su cuarto.
Él también se quitó el chaleco y la camiseta, quedando con el pecho descubierto, el cual toqué con una sonrisa. Había extrañado verlo así, me ponía muy caliente. Adoro sentir su piel y su pelo en pecho.
Se puso encima de mí y yo lo rodeé con mis brazos en sus hombros, no quería dejar de besarlo. Como un animal en celo, Dwight mordió mis labios provocándome un gemido, hizo para abajo mi pants y mis pantaletas, las aventó y pasó a devorar mis senos mientras los acariciaba.
Dwight: Llevo tanto tiempo esperando esto.
Bajó su mano hasta mi parte baja, estimulando con delicadeza.
Dwight: Quiero que te vengas tú primero. Viviré para complacerte.
Cerré mis ojos y me dejé llevar por lo que sea que Dwight estaba planeando hacer. Debo decirles que realmente sí que sabe deleitar a una chica. Hasta me preocupa lo bien que hace efecto su magia.
Besó mi piel como si fuera el tesoro más preciado. Comenzó en mi ombligo y terminó en mis pies, sin dejar de acariciarme. Le encanta estimular mis sentidos.
Me quitó los zapatos, me dejó completamente desnuda. Él tiró los suyos con un movimiento rápido.
Después de estar un rato comiéndome y provocando mis quejidos de placer, logré llegar. En cuanto se dio cuenta, empezó a desabrocharse el pantalón para pasar a lo bueno. Parte de mí aún dudaba.
Mar: Dwight, Dwight, espera.
Dwight: Vamos, sé que lo deseas.
Mar: O sea, sí, pero... Tengo algo que confesar.
Dwight: ¿Confesar?
Mar: No he tomado mis anti conceptivos, Dwight.
Dwight: ¿Y? Mucho mejor, ya es hora de traer mi descendencia.
Mar: *seria* No bromees con eso, Dwight Schrute.
Dwight: Bueno, me vengo afuera, ¿sí? Sólo déjate llevar.
Mar: *suspiro* Ok.
Me giré para quedar de rodillas y de espaldas en la cama a su vez que él se acomodaba para penetrarme. Es su posición favorita y yo también la disfruto demasiado. Así es como logra dominarme, yo adoro ser su sumisa.
Dwight: Así me gusta. Ahora hagamos ruido, que se escuche en todo el condado.
No había olvidado cómo Dwight se pone salvaje a la hora de hacer el amor, pero sí que el sentimiento era distinto. Esta vez era con más ganas, con más pasión, con más emociones.
Dwight se movió con fuerza dentro de mí, cada vez más rápido. Me daba nalgadas de vez en cuando, no se contenía para gemir ni yo tampoco. Estábamos disfrutando como nunca.
De pronto, se puso a levantar mi pierna como intentando acomodarla de una forma extraña.
Mar: Ahm, ¿qué haces? ¡Sigue!
Dwight: Perdona, quiero probar algo nuevo.
Mar: Hmmm, ¿quieres que improvise los gemidos?
Dwight: No, eso no.
Mar: Entonces sólo sigue como sabes hacerlo.
Dwight: S-sí madame.
No me gusta que interrumpan mi antojo de ninguna forma. Si me va a dar placer, tiene que hacerlo a su modo y nada más. ¿A quién trata de imitar? ¿Acaso estuvo buscando posiciones en internet? Surrealista.
Continuó un poco en esa posición hasta que se cansó y cambiamos de lugar. Ahora quedó sentado y yo encima de él, moviéndome para disfrutar su miembro dentro de mí.
Dwight: Te mueves tan bien que lo detesto.
Mar: Ya sé, te fascina.
Dwight: Me gustas demasiado, Mar Johnson.
Mar: Y tú a mí, Dwight.
Dwight: Eso, di mi nombre.
Mar: Dwight.
Dwight: ¡Más!
Mar: ¡Dwight!
Dwight: ¡Fuerte!
Mar: *gemido* ¡Dwight!
Con su bello nombre en mis labios, moviéndome cada vez más rápido e intenso, me vine por segunda vez. Me frustraba que él se estuviera conteniendo, no había terminado todavía.
Mar: ¿Cómo te atreves? ¿Te estás conteniendo?
Dwight: ¿Yo? Claro que no.
Mar: Ajá, seguro. Pues esto te va a enseñar.
En ese momento se me ocurrió hacer algo que no había intentado. Me agaché y procedí a satisfacer a Dwight estimulando con mis manos y boca. Para algunas chicas podría ser denigrante, pero yo me sentía excitada al complacer a mi hombre. Se había portado bien y quería recompensarlo.
No pudo contenerse más y terminó sobre mis pechos con una larga exhalación. Acabamos muy exhaustos y sudados, pero bien satisfechos como nunca antes.
Lo miré desde abajo y él tomó mi mentón para verme, con la cabeza inclinada hacia un lado, sonriendo sorprendido por mi desempeño.
Dwight: Eres inolvidable, Mar Johnson. Mi hermosa dama.
Le sonreí de regreso y bajé la mirada, intentando que no viera cómo me sonrojaba. Tomó mi mano para ponerme de pie y lo abracé para sentir su calor.
Mar: Te extrañé como no tienes idea.
Dwight: Y yo a ti. Pregúntale a quien quieras, estuve mal sin ti.
Acaricié su mejilla y luego me tiré a la cama. Se había hecho de noche, yo ya quería descansar.
Él me acompañó aunque la cama era algo pequeña, pero no me quejé. Puso sus brazos alrededor de mis hombros para abrazarme, acarició mi piel con cariño y delicadeza.
Dwight: ¿Sabías que me gustas más que el dinero?
Mar: ¿En serio? ¿Alguien tan ambicioso como tú? Eso es nuevo.
Dwight: Jaja, no te burles. Lo digo en serio. Sin ti mis ventas cayeron mucho, ahora hasta Andy me supera.
Mar: Te recuperarás, siempre lo haces.
Dwight: Contigo sí. Ahora que te tengo otra vez, ya no me falta nada.
Mar: Owww ❤
Dwight: ¿Te sientes bien? ¿No tienes más hambre? ¿Sed? Aún me quedan 2 botellas de vino de betabel, por si quieres ponerte intensa para celebrar tu regreso.
Mar: Jaja, no Dwight, mañana trabajamos.
Dwight: Mmm, cierto.
Nos quedamos en silencio unos momentos. Yo empezaba a quedarme dormida en sus brazos, pero él tenía otras cosas en mente.
Dwight: Mar, dime por qué te fuiste. ¿Cómo te sentías? ¿También estabas muriendo?
Mar: *suspiro* Sí, Dwight. Fue muy duro. Sentí que había perdido al amor de mi vida. Pasó el tiempo y no te olvidé.
Dwight: Yo soñaba que me perdía en un bosque y esperaba que me buscaras. Estaba tan perdido sin ti.
Mar: El subconsciente es poderoso. Muchas veces refleja nuestros sentimientos e ideas más profundas.
Dwight: Sí, es verdad.
Mar: No te preocupes, ¿sí? Ahora estamos bien y seguiremos así mientras te portes bien.
Dwight: Ok, ok. Me portaré bien, milady.
Mar: Eso.
Dwight: ¿Puedo acariciarte hasta quedarnos dormidos?
Mar: Sí, Dwight. Descansa, mañana será otro día.
Dwight: Buenas noches, Mar querida. Que tus sueños sean tan lindos como tú.