ADVERTENCIA:
El lemon en este episodio tiene un toque diferente al que puedes estar acostumbrado/a.
Por favor si eres sensible o te incómodas con facilidad te recomiendo no leer.
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~Otoño con sabor a sal~
Helado de maíz
Viernes 19: Día de la fiesta de B.I .
Jimin había pasado los últimos días en la casa de jungkook y aunque suene extraño no habían tenido intimidad. Jungkook había trabajado mucho estos días y llegaba muy cansado a su casa luego de las clases.
Así que simplemente cenaba y se iba a dormir con los mimos de Jimin.
Las cosas con Yeonjun iban de mal en peor. Se había vuelto más insistente, lo perseguía a todos lados y no paraba de tirarcele encima, tanto que hasta la profesora se había dado cuenta de la incomodidad que el chico comenzaba s presentar para el grupo. Así que le advirtió que si continuaba haciendo eso lo expulsaría de la clase.
Yeonjun se había disculpado con su típica sonrisa y había prometido no hacerlo más pero esto obviamente había sido mentira. Pues el chico continuaba sin dejarlo respirar.
Peor aún cuando había aparecido con el cabello rosa y le había preguntado que si ahora le gustaba, al tener su cabello como el de Jimin.
Jungkook le había dado una cachetada y le había dicho que ni se le ocurriera compararse con su novio otra vez pues el nisiquiera le llegaba a los talones a Jimin.
Yeonjun simplemente había reído y le había dicho que jamás se rendiría, que haría que jungkook fuera suyo. Todo esto lo había gritado en el medio de la clase así que la profesora lo había sacado del salón y le había dicho que no volviera nunca más.
Esto había sucedido el miércoles y para sorpresa de todos Yeonjun no se había aparecido el jueves en el salón pero su en las afueras de la escuela para seguir a jungkook y descubrir dónde vivía Jimin. Lo peor es que lo había conseguido.
Todo esto con el simple propósito de enviarle un sobre a Jimin el cual había sido puesto en el buzón de los Park el Jueves por la noche para que fuera recogido en la mañana.
Jimin estaba completamente ajeno a todos los acontecimientos que estaban ocurriendo en la vida de su novio pues jungkook no le había contado, además de que había hecho hasta lo imposible porque el menor no se acercara a la escuela en su tiempo de clases.
Jimin no veía nada raro tampoco pues jungkook sabía ocultar bien sus sentimientos y solo demostrar su amor por Jimin, así que las preocupaciones del día martes habían desaparecido de su cabeza.
Por otra parte su nidito de amor había comenzado a cobrar vida otra vez cuando en la mañana de hoy, viernes. Jimin se había levantado con muchas ganas de "animar" a su compañero. Ya había sido suficiente abstinencia para él.
Se había subido sigilosamente sobre las caderas de jungkook quien aún dormía boca arriba. Su erección matutina estaba ahí pero no lo suficientemente despierta para el gusto de Jimin así que comenzó a mover sus caderas sintiendo al instante como se volvía más duro bajo el.
Miró unos segundos el abdomen de jungkook y cuando volvió a mirar su rostro se sobresaltó un poco pues jungkook lo estaba mirando completamente serio.
Los ojos grises brillante se habían tornado oscuros y poco a poco una sonrisa macabra fue apareciendo en el rostro de Jeon borrando cualquier rastro de sueño.
Entonces Jimin supo que había firmado su sentencia de muerte.
De un movimiento jungkook lo cargó en sus caderas y se levantó de la cama rumbo al baño. Jimin enredo sus brazos alrededor del cuello de su novio y lo miró con una sonrisa.
— Creí que estaba soñando pero resulta que mi algodón de azúcar se estaba frotando sobre mi...
— kookie no lo digas de esa forma...
— Como quieres que lo diga? Quieres que te diga que estabas tan caliente que te dió morbo frotarte contra mi polla mientas yo dormía.
Jimin se sonrojo como tomate ante las palabras de su novio. No esperaba que fuera tan directo y pervertido. Jungkook interpretó el silencio de Jimin como un si así que sonrió y comenzó a lamer y chupar el cuello del menor. Jimin solo podía soltar jadeos.
— sujetate bien.
Dijo jungkook en un susurro soltando las piernas de Jimin para quitarse los pantalones y el boxer quedando completamente desnudo.
Jimin solo traía unas pequeñas bragas de encaje que había comenzado a usar desde que descubrió que a jungkook le gustaban tanto.
Pero a jungkook lo que más le gustaba era arrancarlas de su cuerpo justo como ahora. Jeon metió su mano bajo el delgado hilo entre los glúteos de Jimin y de un fuerte tirón lo arrancó de su cuerpo.
Jimin lo miró sorprendido por su movimiento, estaba a punto de protestar pero jungkook azotó sus glúteos así que solo atinó a gemir. Con la mirada de ambos conectada se metieron bajo la ducha de agua tibia y jungkook volvió a besar sus labios.
Jimin correspondió mientras sentía el jabón ser esparcido por su cuerpo. Jungkook lo estaba bañando? El quería acción, no un baño.
— Jung-Ah!!
Acababa de recibir un fuerte azote y una mirada enojada por parte de jungkook.
— acaso dije que dejaras de besarme?
Jimin no dijo nada más y volvió a besar a su novio mientras sentía sus glúteos ser masajeados. Un dedo jabonoso se coló en su entrada y luego otro. Jimin siseó pues el jabón comenzaba a arder.
— Kookie arde...
— Shhhh .... Luego no lo vas a sentir....
Jimin decidió confiar en su novio y dejar que este lo tocara a su gusto. Los dedos se movieron en su interior sacándole gemidos.
Luego fue jungkook quien siseó pues Jimin acababa de rasguñar con fuerza sus hombros luego de que el se adentrarse de una en el pelirosa. Aunque en cierta forma lo merecía por hacerlo sin avisar.
Jimin había soltado un fuerte gemido ante la intromisión y jungkook solo podía mirarlo con adoración. Comenzó a mover sus caderas con rapidez sin despegar su mirada de su rostro, no quería perderse las expresiones faciales de su bebé.
Las mejillas coloradas, los labios pomposos y rojos, su boca abierta babeante y sus ojitos perdidos solo le recordaban que esa era su escena favorita y que no quería dejar de verla nunca.
— mierda te vez tan hermoso~ — gruñó jungkook.
Jimin ni siquiera podía formular palabras, estaba tan perdido en el placer que su novio le daba que todo a su alrededor parecía estar envuelto en una bruma.
La pared del baño fue remplazada por la meseta de la cocina y el menor ni siquiera sabía en qué momento había llegado ahí. Jimin estaba acostado sobre ella mientras que jungkook lo seguía embistiendo.
Los chasquidos de las pieles resonaban en todo el lugar. En ese momento ambos se habían olvidado de todo de Yeonjun, del trabajo y de la universidad. Solo eran ellos dos.
De repente jungkook tuvo una idea algo loca y detuvo sus movimientos. Jimin lo miró agitado preguntándose porque se había detenido.
— Por qué te detienes?
— De repente me dieron ganas de comer helado. Ese rico que me trajiste.
Entonces Jimin recordó que el miércoles le había traído una caja llena de helado de maíz a jungkook. Pero aún sin entender lo miró con una ceja levantada.
— estás jugando acaso? No vez lo que estamos haciendo?
Jungkook no dijo nada y simplemente se fue a la nevera a por un helado. Abrió la envoltura bajo la atenta mirada de Jimin y saco la figura helada en forma de mazorca de maíz.
Algo en la mirada de Jungkook hizo a Jimin ponerse en alerta. Esperaba que no fuera lo que él estaba imaginando.
— Jeon...?
— Shhh... Será divertido....
— No! Jungkook ni se te ocurra acercarte con eso, sucio pervertido!!
Jimin cerró sus piernas bloqueando su entrada pero jungkook las abrió de un facial movimiento y comenzó a adentrar el helado.
— Está helado sácalo!!!!
— no. Pienso comerlo de aquí...
— eso es muy sucio!!!! Cómo se te ocurre!!!!
— no me das asco...— relamió sus labios y luego lamió alrededor del agujero que tenía la mazorca semi-incertada.
» Me he comido tu culo muchas veces, si me dieras asco no lo habría hecho nunca. Además estás limpio, te limpié en la ducha....
— mierda tenías todo esto preparado?! Eres un enfermo!
— De hecho se me ocurrió justo ahora...— le da una mordida al helado que sobresalía pues no lo había metido completamente.
» lo del jabón fue para entra más fácil en ti.
Jimin suspiró rendido. No entendía como su novio podía ser tan sucio y pervertido algunas veces y tan dulce otras.
Pero de cierta forma la situación le daba algo de morbo. El lo sabía, estaba igual de enfermo que Jeon. Lo supo aún más cuando sus pezones picaron y terminó tocándolos y dejándose llevar por sus más primitivos instintos.
Jungkook sonrió satisfecho y continuó comiendo mie tras veía s su novio tocarse. Cuando el helado se acabó relamió sus labios bajo la atenta mirada de Jimin y volvió a introducirse en el. Un escalofrío recorrió su cuerpo cuando sintió el ahora helado interior del menor.
Pero no sé preocupo pues luego de dos embestidas ya estuvo caliente otra vez y volvió a dejar a Jimin jadeando y explotando como champagne.
Cuando pasaron al sofa las caderas de Jimin se movían por si solas con descontrol. Su apetito por el sexo era incontrolable al igual que el de su novio, solo que Jimin sabía ponerse límites. Cuando el sexto orgasmo llegó y otra vez su cuerpo fue llenado por su novio Jimin suspiró exhausto sobre el pecho de Jeon.
Jungkook repartió caricias sobre el cuerpo de su novio y suspiró cuando aquellos pensamiento que rondaban su cabeza desde hace días comenzaron a llegar otra vez. Tenía que contarle a Jimin.
— Jimin, amor tengo algo que contarte...
— Claro amor, que sucede?
Dijo el pelirosa mirando ahora a jungkook. Pero cuando este estaba punto de hablar unos fuertes toques resonaron en toda la sala alertando hasta a Bam quien había comenzado a ladrar.
Jungkook y Jimin se miraron extrañados pues no esperaban visitas. Entonces la mente de jungkook hizo click y un temor comenzó a invadirlo.
¿Y si Yeonjun había descubierto dónde vivía?
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¿Tu quién crees que sea?
😏