Los Romanov #2: Traición

By yaani97

220K 18.6K 1.9K

"No pienses,no dudes, solo.. actúa. Esas son las palabras que nos han metido en la cabeza desde que hemos l... More

Prólogo
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Nota del autor
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Nota del autor: Grupo
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo 44
Capítulo 45
Capítulo 46
Capítulo 47
Capítulo 48
Capítulo 49
Capítulo 50
Capítulo 51
Capítulo 52
Epílogo
Aclaraciones y continuación de la historia

Capítulo 11

4.5K 424 32
By yaani97


CHRISTOPHER (P.D.V)

Abrí los ojos lentamente y tuve que volver a cerrarlos debido a la luz.

Volví a intentarlo y esta vez no me dolió tanto. 

Miré a mi alrededor para descubrir donde estaba, pero ¿exactamente qué era lo que estaba esperando? seguía en el mismo sitio en el que me había estado despertando durante todos los días desde que me habían cogido. No sabía cuanto tiempo llevaba aquí dentro.

Me dolía la cebeza horrores. Bueno, todo me dolía horrores. Parecía que una puta demoledora me había pasado por encima, pero no había sido ninguna demoledora, había sido Helena. ¿Por qué? esa era una gran pregunta para la cual no tenía respuesta.

- ¿Te duele algo?

Tanto la pregunta, como la voz al oírla tan cerca, me asustaron tanto que por poco caí de la cama. 

- Eh, cuidado, que te caes -Rió.

Miré a mi izquierda y me encontré con una chica rubia de profundos ojos azules. Me recordaba a alguien, pero no conseguía descubrir a quién.

Me abrió un ojo y me alumbró con una luz, y luego lo mismo hicieron con el otro ojo.

- ¿Quién eres? -Hasta hablar me dolía.

- Soy la chica que ha estado cuidando de ti desde que te dieron esa tremenda paliza -Susurró mirando la aguja que tenía clavada en el brazo.

Nisiquiera me había dado cuenta. Tenía una aguja clavada en el brazo conectada con una bolsa colgada por encima de mi. A mi alrededor habían varios monitores que marcaban mis constantes vitales y tenía una algo metido en la nariz, que suponía que era para ayudarme a respirar. Pero rápidamente me lo quité. 

- ¿Dónde estoy? -Pregunté mientras me intentaba incorporar en la cama, pero no pude evitar soltar un gritito de dolor. Me dolía todo.

Antes me había equivocado, no estaba en el mismo lugar en el que había estado todo este tiempo. Esta era una habitación distinta, parecida a la de un hospital.

- Estás en una sala de recuperación. Te dieron una paliza bastante fuerte, tenías contusiones por todo el cuerpo y bastantes heridas en la cabeza. Has tenido bastante suerte de que no te hayan matado. 

¿Había estado a punto de morir?

- ¿Cómo de grave era? -Pregunté con miedo aun sin mirarla, solo mirando todo lo que había a mi alrededor. Llevaba demasiado tiempo en aquella habitación viendo lo mismo todos los días, ver algo distinto me parecía casi un sueño.

- Te pegaron muchas patadas en la cabeza. Llevabas una semana en coma; cuando te trajeron prácticamente no podías respirar,aunque a las pocas horas empezaste a hacerlo por ti mismo de nuevo. Tienes dos costillas rotas y será mejor que no hagas movimientos bruscos con la cabeza. 

La rabia y el dolor empezaron a hervir dentro de mi. ¿Una semana en coma?¿Helena me había dejado una puta semana en coma?¿qué cojones le pasaba a esa maldita loca?

- ¿Dónde estoy? -Volví a preguntar.

- Sabes perfectamente donde estás, Christopher, ¿por qué la pregunta? -Nisiquiera había visto a Natasha entrar en la habitación.

La chica me dio una mirada llena de pesar y salió de la habitación rápidamente sin mirar a Natasha.

- Me diste un susto de muerte, pequeño. ¿Una semana en coma por una paliza? pensaba que eras más fuerte que eso.

La miré fijamente y esperaba que notase el odio que desprendían mis ojos.

- Eres un asco de persona, no sabes cuanto te odio -Susurré sin apartarle la mirada.

Si me quería matar que me matase, ¿qué me quedaba? Helena me odiaba, porque si no lo hiciese, no me hubiese dado aquella paliza.. ¿y los demás? es posible que estuviesen muertos. Ya nada me quedaba.

- ¿Por qué tanto odio, pequeño? -Rió sentándose a mi lado en la cama y agarrándome la mano izquierda. De un momento a otro comenzó a apretarme la muñeca.

La máquina a mi lado comenzó a pitar descontroladamente porque mis pulsaciones estaban subiendo rápidamente. Estaba acojonado.

- ¿Por qué tanto odio, Christopher?¿a caso no te he dado la mejor de las eduaciones?¿no te he brindado una familia cuando no tenías a donde ir? te acogí, Christopher. Los acogí a todos, y así me lo pagan. Rebelándose contra mi, obligándome a hacerles daño cuando jamás he querido que ustedes sufrieran.

Me iba a partir la mano.

De un momento a otro la soltó y me sonrió angelicalmente. Esta mujer estaba loca.

- ¿Nos acogiste? ¡nos alejaste de nuestras familias, maldita loca! -Susurré lleno de furia.

Rápidamente me metió un cachetón y me apretó el cuello con fuerza.

- Pensaba que ya habíamos dejado todo eso atrás. ¿Qué es esta maldita rebelión que están haciendo contra mí?¿creen que pueden ganar? yo los entrené, ustedes son mis malditos peones, ustedes son mi jodida creación. Ustedes son mis máquinas de matar, yo soy el Dios de todos y cada uno de ustedes; no oses amenazarme porque cada una de las personas que adoras morirán antes que tu y te obligaré a verlo.

- Ya no queda nadie que me importe, me has alejado de todos y encima Helena me odia.. ¿crees que tengo miedo de lo que puedas hacer? estoy hasta los cojones de ti,Natasha. He estado todos estos años intentando serte fiel, intentando ser la perfecta creación como tu dices. He actuado sin dudarlo un momento, como tu misma nos enseñaste a todos. Pero eso se ha acabado, si tengo que morir, lo haré, no tendré problema con ello. Pero moriré peleando,maldita loca de mierda -Grité.

Me pegó un puñetazo en la nariz y esta comenzó a sangrar. La máquina de las pulsaciones se había vuelto loca, no dejaba de dar pitidos.

- Conozco cada paso de ustedes, cada pensamiento, cada intención. Yo soy el aire que respiran,malditos estúpidos. Son unos chicos de dieciocho años que creen conocerlo todo ¿pero sabes qué? yo conozco más. Yo sé más. Puede que ustedes sean seis, pero yo no estoy sola y aunque lo estuviese, créeme que no me haría falta nadie más para acabar con todos y cada uno de ustedes, a la vez si es necesario. 

Se alejó de mi y se acercó a la puerta, pero antes de salir, se volvió para hablarme.

- Dime Christopher, ¿cómo piensan tu y tus amigos luchar contra mi, si primero tendrán que pelear entre ustedes? -Sonrió.

Comencé a temblar preso de la rabia. ¿Por qué no había acabado conmigo ahora que podía?me había dejado claro que los demás también estaban vivos y que se estaban rebelando.. ¿entonces?¿por qué cojones seguíamos vivos?¿qué mierda tenía esta mujer preparado para nosotros?¿y Helena?¿qué le había pasado?¿estaba de su parte ahora?

Tenía que salir de aquí cuanto antes. Tenía que reunirme con ellos cuanto antes.

??? (P.D.V)

- ¿Qué pasó?

- Se están rebelando. Todos se están volviendo contra Natasha, incluso el que parecía ser el más fiel.Cuando la guerra estalle, lo cogeré y vendrá conmigo. No pienso dejar que lo alejen de nosotros otra vez.


Continue Reading

You'll Also Like

172 91 48
Una chica que está feliz junto a su novio. Un insidente en una noche un secreto que no quiere decirle. El cual causara su separación. Qué pasara des...
644K 38.7K 29
Cuando el cura dijo: Hasta que la muerte los separe. Nadie me advirtió que la muerte vendría en forma de una secretaria piernas largas y cabello cast...
73.1K 4K 35
Isabella, una hermosa chica de diecisiete años que se siente especialmente decepcionada al llegar a su último año de escuela sin conocer el maravillo...
963K 5.6K 7
Las personas rotas pueden romper a quien trata de repararlas... - Puedo causarte mucho daño- murmuró el boxeador - Tomaré el riesgo- respondió ella v...