- Daryl, ¿Puedes calmarte?
Hablé, mientras seguía observando por la ventana de la camioneta, no era necesario que lo mirara para saber que estaba inquieto.
- Es solo una revisión, eso no quiere decir que ya vaya a nacer. -le expliqué, tratando de calmarlo un poco.-
El soltó un gran suspiro.
- Lose mujer, pero insisto que deberíamos traer a Siddiq, con nosotros en lugar de estar viniendo a Alexandria. Sería más seguro para ti y nuestro hijo.
Lo miré con una leve sonrisa.
- ¿Quieres secuestrar a Siddiq? -le dije aguantado una pequeña risa.-
Daryl, me miro por un momento y después volvió a mirar hacia el camino.
- Tal vez. -confeso.-
Me reí.
- Daryl, por favor, tranquilízate.
Él rio un poco también y comenzó a asentir con su cabeza.
No paso tanto cuando pudimos ver nuevamente los altos muros de Alexandria frente a nosotros, las puertas se abrieron dándonos paso y cuando estuvimos una vez dentro, nos bajamos de la camioneta.
Solia venir a una revisión con Siddiq, por mi embarazo ya que por ahora no teníamos médico en el santuario.
Entramos a la enfermería y enseguida lo vimos.
Siddiq, estaba con Enid, ella había comenzado a aprender algo de medicina para poder ayudar y eso era algo genial.
Las miradas de ambos se posaron sobre nosotros y una gran sonrisa apareció en sus rostros.
- ¡Hola! -nos saludo Enid, mientras se acercaba y nos daba un pequeño abrazo.-
- Pero si es mi paciente favorita! -dijo Siddiq, mientras se ponía frente a nosotros.-
Yo sonreí.
- ¿Como les va?
Pregunté.
- Todo marcha bien. -contesto Enid.-
- Excelente. -dije.-
Siddiq, me guío hacia donde solía atenderme siempre y antes de que comenzara el sonido de la puerta abriéndose se escuchó tomando nuestra atención.
Rick, había entrado junto con Daryl.
- Hola Rick. -salude.-
- ¿Como te encuentras? -me pregunto con una leve sonrisa.-
- Estoy bien. -asegure.-
Rick, asintió feliz.
- Quién parece que se va a desmayar es Daryl.
Hablo de pronto Siddiq, quién estaba viendo algo divertido y preocupado a la vez a Daryl.
Todos excepto él, nos reímos pues en verdad se notaba nervioso y algo pálido incluso.
- No es gracioso. -se defendió.-
- Cada vez está más nervioso, no lo culpo. -dije dejando de reír.- Pero te recomiendo que te escondas cuando nos vayamos, porque tiene planeado secuestrarte.
Ellos volvieron a reír.
- Bien, venía a saludarte ___________, y en lo que tú estás aquí, quiero que Daryl me ayude en unas cosas pero...
No hizo falta que terminara porque sabía lo que diría.
- Ve con él Daryl, estaré bien. -le dije.-
Daryl, no parecía muy seguro sobre si hacerme caso o no, pero le insistí con la mirada y con eso bastó para que accedería a ir con Rick.
- Bien. -solto resignado y se acerco a mi.- Ya vuelvo.
Dijo y después dejo un pequeño beso en mi frente.
Ambos hombres se fueron dejándome con Siddiq, que después de preguntar porque Daryl lo quería secuestrar, comenzó a revisarme.
- Bien, todo parece estar en orden y eso es bueno porque ya es cuestión de que en cualquier momento pueda nacer.
Me explico.
- Espero que así sea porque las contracciones duelen como un demonio. -me queje.-
Siddiq, rio un poco.
Comencé a levantarme pero en eso una de las mencionadas contracciones se hizo presente pero está dolía cien veces más que las anteriores. Por inercia tome el brazo de Siddiq, quién me miro preocupado.
- ¿_________? -me hablo.- ¿Que pasa?
Iba a hablar, pero otra contraccion llegó y solo hizo que me aferrara más a su brazo.
En eso entendí lo pasaba.
- Ya viene. -dije entre quejidos.- El bebé, ya va a nacer!
Volví a quejarme pues en verdad el dolor comenzó a expandirse por todo mi cuerpo.
- De acuerdo! Tranquila. -comenzo a decirme, mientras me ayudaba a recostarme bien en la camilla.- Inhala, exhala.
Comencé a hacerlo con la esperanza de que el dolor disminuyera, pero no fue así.
- ¡Ah carajo! -solte con dolor.-
Siddiq, se apresuró a sacar y organizar todo lo que necesitaba para comenzar, mientras llamaba a Enid a gritos desesperados.
No tardo mucho cuando ella entró rápidamente desconcertada.
- ¿Que ocurre?
- El bebé ya viene, necesito que me apoyes! -le dijo Siddiq.-
Enid, me miro y yo solo seguía tratando de controlar mi respiración como me había dicho Siddiq.
- Ah....bien, ¿Que hago?
Pregunto nerviosa.
- Primero sal y dile a alguien que vaya por Daryl, debe estar con Rick.
Enid, salió de prisa y juro que no tardo ni diez segundos cuando volvió.
- Okey __________, vamos a empezar, ¿Si?
Yo solo asentí repetidas veces.
El parto comenzó.
Siddiq y Enid, estaban haciendo todo lo posible, mientras yo sentía como cada parte de mi cuerpo dolía con solo tratar de respirar.
- ¡Puja _________!
Lo hice.
La puerta se abrió de golpe y vi como Daryl, entraba y se acercaba rápidamente hacia mi para tomar mi mano.
- Aquí estoy, aquí estoy nena.
Decía repetidas veces, mientras acariciaba mi cabeza y el agarre en su mano se volvía fuerte y reconfortante para mí.
- ¡Una vez más __________!
Hablo Siddiq.
Con todas mis fuerzas puje y sentí claramente una calma instantánea recorrer mi cuerpo.
- ¡Eso es! -chillo Enid, de emoción.- Ya está, ya nació.
Anunció.
- Lo hiciste bien cariño. -me dijo, volviendo a besar mi frente y sin soltar mi mano aún.-
Solté un gran suspiro de alivio y deje caer mi cabeza hacia atrás, pero la volví a levantar cuando escuché como empezaba a llorar mi bebé.
Siddiq, lo tomo con cuidado y lo envolvió con una manta.
Se acerco a nosotros con una sonrisa.
- Es una niña.
Él me la paso y con extremo cuidado la tomé en mis brazos.
Daryl, estaba atónito, pero era cuestión de solo mirarlo para ver lo feliz que estaba, mientras miraba con bastante amor a nuestra hija en mis brazos.
Volví a mirar a mi bebé y pase mi mano por su pequeño rostro con delicadeza, como si temiera que con cualquier movimiento fuera a quebrarse.
No podía explicar la felicidad que estaba sintiendo por tenerla al fin en mis brazos junto al amor de mi vida al lado.
- Hola mi cielo. -dije, mientras seguía detallando aquel rostro tan precioso.-
Voltee a ver a Daryl, quién seguía con esa mirada de amor.
- Mira, el es papá. -comencé a acercarla hacia él.- Vamos.
Daryl, la tomo con mucha delicadeza y la observó con ese brillo en su mirada, detallandola por completo, mientras una sonrisa cálida se hacía presente en su rostro.
- Hola...-le dijo él sin dejar de sonreír.- Hola pequeña cazadora.
No pude evitar soltar una pequeña risa al igual que Siddiq y Enid, quienes seguían ahí mirándonos felices.
Él volvió a quedar a mi lado y me volvió a pasar a nuestra hija.
- ¿Cazadora? -le dije.- ¿Enserio Dixon?
Él rio un poco.
- ¿Que? -solto inocente.- No está mal.
Rodé los ojos, mientras sonreía divertida.
- Bien. -hablo Siddiq, tomando nuestra atención.- Daryl, sal un momento en lo que termino de curar a __________, yo te avisaré cuando puedas volver a entrar.
Daryl, asintió.
Volvió a dejar un suave beso en mi frente y después con sumo cuidado, dejo uno en la frente de la pequeña cazadora, que ya había calmado su llanto y ahora estaba muy tranquila en mis brazos.
Daryl, me miro y juro que pude ver como aquel brillo en sus ojos que siempre me había gustado, se había hecho más intenso ahora.
- Te amo. -me dijo.-
Sonreí más feliz que nunca en mi vida.
- También te amo.
Él salió de la habitación, Enid, cargo a mi bebé y Siddiq, comenzo a terminar de curarme.
Nuevamente tenía a mi hija en mis brazos, sentía que no podía dejar de verla ni un segundo, me parecía que era lo más hermoso que había visto en toda mi vida.
El sonido de la puerta nuevamente se escuchó y vi como entro Daryl, pero esta vez venían los demás con él.
Carol, Rosita, Rick, Michonne y la pequeña Judith.
Ellos entraron y sonrieron llenos de ternura al verme con mi hija en mis brazos.
Carol, fue la primera en acercarse para verla mejor.
- Es preciosa. -me dijo.-
- Muchas felicidades a los dos. -nos dijo Rick.-
- Gracias. -dije.-
Todos vimos como Judith, aunque nerviosa, comenzó a acercarse a nosotros para poder verla.
- ¿Cuando podré jugar con ella? -pregunto en su inocencia.-
Algunas leves risas se escucharon por nuestra parte.
- Para eso aún le falta un poco más pequeña. -le dije.-
Judith, asintió para después volver hacia Rick y Michonne.
Vi como Siddiq, había vuelto y este entro.
- Deberás quedarte por lo menos una semana aquí en Alexandria, para estar al pendiente de tu recuperación y sobretodo de la bebé.
Me dijo.
Mire a Daryl, quién rápidamente asintió con su cabeza dándole la razón a Siddiq.
- ¿Estarás bien en el santuario tu solo? -pregunte dudosa.- No podemos dejarlos solos.
Vi como él dudo en responder, pues una cosa era estar ahí juntos y otra estar él solo ahí, además conociendolo sabía que no quería irse de aquí.
- Yo puedo hacerme cargo.
Hablo de pronto Carol y nosotros la miramos.
- Pero tu estás en el reino con Ezequiel. -le dije.-
- Él lo va a entender, además no será por mucho tiempo solo en lo que te recuperas adecuadamente para poder volver. -aseguro.- Además, es importante que el padre este presente en los primeros momentos y sabemos que ni amarrado lo sacamos de aquí ahora.
Eso nos hizo reír un poco, pues tenía razón.
- ¿Estás segura? -le pregunto Daryl.-
Ella asintió sin dudar.
- Ya me he quedado algunas veces, no será nada del otro mundo.
- De acuerdo. -dije.-
Carol, sonrió.
- Gracias. -le dijo Daryl.-
Siddiq, volvió a hablar.
- Muy bien, no tardarán en alistar tu habitación y después te pasaremos a ella.
- Si está bien. -dije.-
Finalizado ese tema, la voz de Rosita, se escuchó.
- ¿Y bien? -dijo.- ¿Ya tiene nombre?
Daryl y yo nos miramos por un momento y después él hablo.
- Cazadora. -contesto él.-
Ellos rieron un poco al igual que yo.
- ¿Porque no me sorprende? -le dijo Carol.-
Volvimos a reír.
- No, ya enserio. -insistió Rosita.- ¿Cómo se va a llamar?
Mire nuevamente a Daryl y supe que él me daría a escoger el nombre para nuestra pequeña cazadora que ahora dormía plácidamente en mis brazos.
La observe por un momento y después pase mi mirada hacia los demás quienes seguían esperando ansiosos.
- Bueno...
Comencé a decir con una sonrisa en mi rostro.
- Les presento a Claire Dixon.
Años después
Fui consiente de como las grandes puertas de Hiltop comenzaron a abrirse, pero aún asi seguí mi camino hacia el remolque donde me estaba quedando, pero en cuanto escuché unos ladridos me pare en seco.
- ¡Perro!
Exclamó feliz mi hija al verlo llegar y comenzo a acercarse al animal.
La felicidad inundó su rostro, porque sabía lo que significaba la presencia de perro aquí.
Mire a Claire por un momento, su cabello castaño se notaba más claro por la luz del sol y sus pequeñas manos acariciaban con alegria a perro quien movía animadamente su cola por recibir tanto afecto de la pequeña y este también parecía estar feliz de verla.
Pocos segundos después el sonido de una moto que conozco muy bien, se escuchó y fue ahí cuando lo ví llegar.
Inevitablemente el corazón se me acelero.
- ¡Papá!
Grito aún más feliz mi hija, cuando vio a Daryl, comenzar a bajarse de su moto quien no tardó nada en notar su presencia y sonreírle.
- ¡Ahí está mi pequeña cazadora! Ven aquí linda.
Observé como ella sin dudar ni un segundo comenzo a correr en su dirección y aunque con sus pequeñas piernas le era un poco complicado ya que no daba pasos tan largos, eso no la detuvo para llegar con él y abrazarlo fuertemente. Daryl, la levantó en sus brazos, mientras la estrujaba suavemente al abrazarla y comenzaba a dejar ciertas caricias en su cabeza.
Sonreí al ver tal escena.
Me comencé a acercar a ellos y fue ahí cuando su mirada se encontro con la mía.
- Hola Dixon.
Salude con una sonrisa, pues en verdad disfrutaba ver cómo Claire, era feliz en los brazos de su padre.
- Hola. -me saludo con la misma sonrisa.-
Mi mirada se desvío a una de sus manos y sentí como mi corazón dió un brinco al ver que aún tenía el anillo en su dedo.
Había pasado tanto.
Él pareció notar mi mirada en su mano y sobre todo en el anillo, lo mire nuevamente y él me sonrió de una forma más cálida, más amorosa, que eso sin duda solo hizo que mi corazón se acelerara un poco más.
Ninguno dijo nada.
Mi hija volteo a verme con esa linda sonrisa en su rostro, mientras seguía aferrada a su papá en ese abrazo.
No pude evitar fijarme en sus ojos que eran idénticos a los de Daryl y tenían ese mismo brillo que tanto amaba aún.
- ¡Ven mamá!
Me dijo estirando una de sus manos hacia mi para que me unirá al abrazo, sin dejar de sonreír.
Solté una pequeña risa.
- Que risueña eres. -le dije, mientras me acercaba a ellos para abrazarlos.-
Claire, coloco su pequeño brazo encima de mis hombros para acercarme más a ella.
Note como Daryl, la miro por un momento y después poso su mirada en mi aún con esa sonrisa, para después hablar.
- Idéntica a ti mujer.
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Holaaa lindas personitas! Les he traído este extra que me estuvieron pidiendo mucho en el extra anterior y pues obviamente no se los podía negar✨❤️
Oficialmente tenemos a Claire Dixon o la pequeña cazadora, ambos me gustan sinceramente✨✨
Espero les haya gustado y lo hayan disfrutado❤️
¡LES TENGO UN AVISO!
Acabo de publicar el primer capítulo de una nueva historia, espero le puedan dar una oportunidad así como se la dieron a esta historia, les dejaré el link por si gustan leerla, de igual forma la pueden encontrar en mi perfil✨
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Besoos, chaooo❤️✨
Ig:duran_monss