Nueve días sin M.
Querida Mae:
Tú eras de letras,
yo era de ciencias.
Las palabras nunca
fueron lo mío.
Y, por eso,
te las dejo a ti;
conjuga la
primera persona
del pretérito
perfecto compuesto
del indicativo
del verbo querer.
¿Lo has hecho?
Perfecto,
ahora rellena:
Te _ _ _ _ _ _ _ _ _ demasiado.
Todavía lo hago,
de hecho.
Todavía,
¿era
adverbio de tiempo,
no?