Lynn
—¿Puedes venir conmigo? —me pregunta Halle.
A veces me pregunto como es su vida, porque siempre encuentra la manera de estar donde yo estoy, estoy empezando a pensar que no es casualidad.
—¿Cómo entraste al colegio? ¿y tus clases?
—Tenía que buscar algo en la oficina de mi papá —me dice y me mira— ¿vas a venir conmigo?
—No conozco a tus amigos, además ¿no sé supone que vas con Chad?
Sí, porque al parecer aún no han terminado.
—Yo quiero que me acompañes, te voy a mostrar a mis amigos, no son muchos, pero son leales, y nos divertiremos.
—Le diré a mis padres —le digo al final aceptando, ella me abraza y deja un beso un mi mejilla.
—Es en dos días, no te olvides Lynn, iré contigo si o si, estás avisada.
***
Estaba llegando tarde a la casa. El día de la fiesta de la amiga de Halle coincidía con uno de mis partidos, casi me da tiempo para bañarme y vestirme.
—Ya estoy casi lista —le digo al teléfono— me estoy haciendo la coleta.
—¡No! —ella chilla y yo río— no pensé que fuera tan difícil verte sin coleta.
—Estoy lista en pocos segundos.
Admito que Halle tuvo que venir a mi casa ayer para buscar algo decente que ponerme ya que al parecer llevar mis camisas deportivas no estaban para la ocasión.
—Hola —le sonrío cuando veo el Uber afuera. Me toma de la mano y nos adentramos en el carro.
—Que linda te ves, hasta parece que te eligió la ropa una chica con buenos gustos —me sonríe ella con sarcasmo.
—Ni tanto —murmuro y ella ríe dándome un pequeño golpe con la manos.
Al llegar a la casa de la chica que hizo la fiesta nunca pensé en que fuera una fiesta grande.
—Dame tu mano, para no perdernos —me dice y toma mi mano para entrelazarla de una vez.
Entramos a la casa dónde parecía haber más gente, pero al menos se puede caminar tranquilamente.
—Allá están mis amigas —me murmura y nos acercamos a ellas.
—¡Tú debes ser Lynn! —me dice una rubia— yo soy Mabel, ella es Megan, ¿quieren algo para beber?
—Nosotras iremos por algo —responde Halle antes de poder decir algo e irnos a la cocina— ¿qué quieres?
—Te aseguro que nada de alcohol, mañana tengo que entrenar.
—¿Nada? —me pregunta y siento sus ojos posarse un brillo.
—Nada —le aseguro.
—De acuerdo —ella asiente y toma una cerveza y me da una coca cola— si quieres algo más ya me dices.
Asiento y en eso vemos que a la cocina entra Chad.
—Hola —sonríe él y se acerca a Halle poniéndole su brazo en sus hombros— ¿hace cuánto llegaron?
—No mucho —le responde ella y siento la incomodidad en el ambiente— bueno, nos vemos luego, Lynn y yo vamos con las chicas.
Ella se aparta de él y toma de mi brazo para salir de la cocina.
—¿Ves como actúa? —me pregunta.
—Se supone que deben actuar, él no sabe que yo sé todo —le digo y ella suspira.
Las chicas estaban sentadas en un sofá y sillones haciendo un circulo. Como todo este ambiente es totalmente nuevo para mi yo solo voy donde Halle me indica.
—Si alguien te ofrece una bebida no se la aceptes ¿okay? —me advierte y asiento cuando nos sentamos en el mismo sillón.
—Y Lynn, ¿cuál es tu hobby? —me pregunta una de las amiga de Halle, la cual ya se me olvidó su nombre.
—Práctico muchas cosas, por lo general fútbol y béisbol.
—¿El papá de Halle es tu entrenador? —me pregunta la otra amiga. Yo asiento— ¿y no tienes novio?
—No, no tengo pareja —respondo un tanto incómoda.
—Tampoco le pregunten mucho su vida —dice Halle riendo— Megan está en ballet conmigo, es esa amiga que te conté, en cambio Mabel juega voley.
—Hace tiempo que no juego voley —le digo a Mabel.
—Debemos jugar un día en la playa —me sonríe ella— le diré a Halle y jugamos un día.
—Yo no sé jugar —dice Megan y antes de decir otra cosa se acerca un chico al grupo el cuál nunca he visto— Lynn, él es mi novio, Mason.
—Oye, yo te he visto jugar —me dice él sonriendo— eres la mejor en el equipo del entrenador Carson, por cierto Halle, salúdame a tu papá.
—¿Juegas fútbol de hombres, no?
—Si, pensé que te ibas a unir a nosotros esta temporada, el entrenador dijo que rechazaste la oferta.
—Nunca me dijeron para unirme a su equipo —le digo.
—Que extraño —murmura el chico— pero bueno, ven conmigo un momento Megan.
Ellos dos se van y Mabel luego se queda revisando su celular hasta que le llega una llamada, por lo que me dijo tiene pareja en alguna parte del país.
—Ven —ella me toma de la mano y nos levantamos— a veces las fiestas son buenas, a veces son malas, nunca se puede saber cuando lo es.
—Es como una reunión —le digo y ya estamos en el patio. Es muy grande así que nos sentamos cerca de unos árboles.
—Ven, siéntate —me dice y me siento a su lado— ¿alguna vez te ha gustado alguien pero no estás segura si de verdad te gusta o solo es atracción?
—Casi nunca.
—Hagamos preguntas para conocernos —me sonríe y asiento— por cada que no quieras responder debes beber.
—De acuerdo, empieza tú.
—¿Por qué te pusieron tu nombre?
—Mi papá se llama así, yo lo veo como un nombre unisex —le respondo— tu nombre es mil veces mejor que el mio, es muy tú, va contigo.
—¿Conmigo? ¿Cómo así?
—Es que te miro y la verdad que el nombre de Halle te queda muy bien —le sonrío— tu cabello es lindo, tienes linda piel, linda cara, tratas a la gente com cariño, una Halle me da esas vibes.
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ando de vacaciones, así que si no publico mucho ya saben
-luv