"Juicio"
Narra Asteria
- Queremos su sangre...queremos ver morir a todos los reyes y futuros gobernantes de los cuatro reinos – dice el hombre enmascarado
Noto de reojo como Zander comienza a crear una bola de aire en su mano derecha esperando el momento perfecto para atacar hasta que la risa del hombre nos hace verlo.
- No se preocupe, solo vengo a dar el mensaje como me lo ordenaron – comenta
- ¿Quién te lo ordenó? ¿Qué más te pidieron? – pregunto
- Mis labores terminaron, así que no me harán hablar, me llevaré esto a la tumba – dice
Frunzo el ceño confundida hasta que el hombre acerca el cuchillo a su cuello cortándoselo, abro la boca viendo la sangre salir y rápidamente él cae hacía atrás.
Dirijo mi mirada a mis amigos que parecen igual de asombrados y asustados que yo, menos Katrien que camina a la ventana para ver hacia abajo. Meira abraza a su novio queriendo borrar esa imagen de su cabeza mientras yo me vuelvo a sentar analizando sus palabras.
- Yo...iré a informar – comenta Koa guardando su espada la cual había sacado y camina a la puerta
- Por la ventana – habla mi prima haciendo que la veamos
- ¿Cómo así? – pregunta Zander confundido
- ¿Hay ventanas en secciones de la galería verdad? – pregunta ella Balderick y él asiente – Por ahí están entrando y saliendo, él amarró una soga en la ventana de aquí arriba para poder llegar aquí, no veo a otro pero pueden estar en cualquier parte – comenta cerrando la ventana y haciendo un hechizo de seguridad
Me acerco a otra al igual que Zander haciendo el mismo hechizo para evitar otro evento como lo recién sucedido. Mylo también informa este dato de las ventanas a los soldados de afuera quienes se hacen cargo de darle la noticia a nuestros padres que sé que no tardarán en aparecer.
Al terminar de poner la seguridad regreso a mi lugar en el sillón y justo como lo imaginé, la puerta se abre de golpe dejando ver mis padres quienes ven el lugar con preocupación. Me levanto mientras ellos caminan hacia mí.
- ¿Están bien? – pregunta mamá
- Si, solo, analizando lo sucedido – admito
Dirijo la mirada a mis amigos y todos están con sus padres quienes le preguntan lo mismo que a mí.
- ¿Qué fue exactamente lo que dijo? – pregunta papá
- Queremos su sangre, queremos ver morir a todos los reyes y futuros gobernantes de los cuatro reinos – repito esas palabras
La imagen del cuchillo cortando la piel vuelve a mi mente, agito la cabeza tratando de olvidarlo pero en vez de algo bueno, viene la sensación del dolor de estómago luego de ser envenenada, el dolor de mi cuerpo que sentía a pesar de estar supuestamente dormida y las horribles visiones que tuve. Sí, también puedo ver el futuro como mi abuelo Nale por medio de sueños.
Mamá parece saber que estoy pensando y me abraza con ternura mientras papá acaricia mi cabeza como si pudiera quitar las imágenes de mi mente para luego darme un corto beso en la frente con ternura.
- Entonces, si esa es la amenaza, todos corremos peligro – comenta la reina Cristal
- ¿Qué les dijeron? – pregunta la reina Esmeralda quien venía con nuestros padres pero estaba esperando
- Que nos quieren muertos a todos los reyes y herederos – comenta Dúghall
- Pero eso no tendría que involucrar a los Stewart, Katrien está siendo atacada sin razón – dice Axel II
- Si hay razón - comenta mi mamá viendo a mis tíos
- Como siempre pasa, en caso de que mi esposa y yo lleguemos a morir, el trono pasa Asteria pero si a ella le pasa algo, el reino por ley le tendría que pasar a cualquier familiar cercano elegido por nosotros, en este caso escogimos a Catina para luego seguir con Zander o Katrien cuando mi cuñada muera – responde mi padre haciendo que ambos primos abran la boca
- Nunca mueran se los suplico – dice Zander asustado, apenas puede aceptar su título como príncipe no sé cómo reaccionaría con uno de rey
- Entonces eso hacen, atacaron al último heredero para luego subir hasta llegar a los reyes, lo mismo piensan hacer con nosotros pero en mi caso atacan directamente a mi hijo porque no hay nadie más que pueda heredar el trono – comenta el rey Dúghall
- Esa debe ser la idea principal, pero por lo visto hoy se desviaron, atacaron al azar – dice mi mamá
- Deben estar desesperados, no lograron matar a los jóvenes así que actuaron sin pensar – habla la reina Cristal
- Puissance du Nord – dice la reina Esmeralda de golpe – No pudieron con nosotros hace años, así que volvieron para atacar desde nuestros hogares para luego poder quedarse con los reinos
- ¿Veinte años después? – pregunta Axel
- Eso creo, es el único enemigo en común que tenemos todos, hace años envío hombres para atacarnos sin que nos diéramos cuenta y no hizo nada en cuanto nos unimos, tal vez lleva años armando un mejor plan o simplemente se le antojo invadirnos – responde la reina
- El mal se detendrá por un tiempo – susurra mamá llamando mi atención
La veo confundida y parece estar pensando o recordando algo, miro a mi padre quien también la mira preocupado, supongo que también la escuchó, pero a diferencia de mí, él sabe que significa. Regreso la vista a mamá quien ve a papá fijamente.
- Entonces debemos suspender los eventos – sugiere el rey Axel
- Puede que ese sea también su objetivo, arruinarnos las celebraciones por la alianza, si dejamos las actividades, ellos sabrán que van ganando – vuelve hablar la reina Esmeralda
- Por un lado tienes razón pero tampoco es bueno arriesgarnos así, ahora no han matado a nadie sin embargo no deseo estar presente en algún funeral – comenta mi padre
- Es cierto, menos en la de nuestros hijos – habla la reina Cristal
- Tienen razón, pero nos han atacado afuera y dentro de mi castillo, quien asegura que no irán a los hogares de cada uno, sigamos con las actividades solo mejoremos la seguridad – insiste el Dúghall apoyando la idea
- Por el momento no hay nada programado, veamos cómo se desarrollan los siguientes días y dependiendo de que pasé toman una decisión – sugiere mi tía
- Es buena idea – responde mi mamá con un tono de voz diferente que hace que la vean pero nadie pregunta
Mientras los reyes hablan de los planes de investigar con su gente, sigo viendo a mi mamá quien parece bastante preocupada por algo, al mismo tiempo al pegarme a su pecho siento su corazón latir con mucha rapidez lo cual me preocupa ya que por herencia, tiene riesgo a tener problemas cardíacos.
Al terminar la conversación, nos piden que hagamos nuestras maletas ya que al salir el sol todos regresaremos a nuestros reinos donde esperemos estar seguros.
.......
Al día siguiente...
Trato de concentrarme en el libro que tengo en mi mano evitando lo más que puedo, dormir, no quiero cerrar los ojos, no quiero soñar. Parece que desde que me envenenaron el dormir es una tortura, las visiones que durante mi vida han sido alegres y positivas, ahora son todo lo contrario, imágenes oscuras, negativas y horribles.
Levanto la mirada viendo a mi mamá quien duerme en el hombro de papá mientras él lee y acaricia su cabello. Mi tía le tuvo que dar una poción a mamá ya que su corazón estaba muy intranquilo, así que con eso la relajaron hasta quedarse dormida, lo cual es milagro, con lo activa que es, rara vez duerme en el día.
Suspiro preocupada sin entender porque ella estaba tan mal, traté de preguntar pero no obtuve respuesta, simplemente una sonrisa con las palabras "Todo está bien mi niña" sin embargo, sé que eso fue una mentira de su parte.
Regreso mis vista al libro tratando de volver a concentrarme en la trama pero por más que lo intento mis ojos no me ayudan y termino perdiendo la batalla contra el sueño...
"Abro de nuevo mis ojos apareciendo en un lugar algo oscuro, dándole un toque tenebroso e inquietante. Se me hace conocido el patrón del piso pero no logro descifrar donde estoy exactamente.
Camino lentamente tratando de buscar algo que me ayude a identificar este espacio pero sigo sin entender que está pasando, de pronto veo a una mujer parada, no puedo ver con claridad su rostro solo sé que me ve fijamente. Bajo mi mirada a sus manos las cuales tiene agarradas con grilletes pero cuando la miro con más atención, veo que sostiene la flor con la que me envenenaron.
Quiero preguntarle por qué me lastimó pero no puedo hablarle, la voz no sale de mi boca, ella sigue viéndome fijamente hasta que un hombre aparece detrás de ella. Inesperadamente el hombre rodea el cuello de ella con una cadena que une los grilletes de sus manos ahorcándola. La mujer se mueve, sin parar tratando de soltarse pero no puede, él parece ser más fuerte.
- No....por favor....ayuda...- pide la joven con dificultad
A pesar de lo que me hizo intento caminar hacia ella pero mis piernas no se mueven, pareciera que estoy pegada al piso. La mujer me mira mientras agoniza del dolor, hasta que el hombre aprieta más su cuello el cual truena haciendo que la joven deje de moverse...
- Lo...lo siento...lo siento...- escucho los sollozos del hombre quien comienza acariciar sus cabeza con delicadeza hasta que la suelta dejándola caer al piso
Mi cuerpo tiembla al ver sus ojos abiertos de la mujer, la forma en que me ven llenos de miedo por morir, vuelvo a ver al hombre que ahora tiene una daga en sus manos y me ve directamente.
- Si tu hubieras muerto no tendría que haberla matado...es tú culpa...- comienza a caminar hacia mí queriendo atacarme y aunque lo intento no puedo moverme
A pocos centímetros de mí levanta el cuchillo y pero este nunca me toca ya que de pronto sale volando chocando con una pared, en cuanto su cuerpo cae sale un gran charco de sangre de su cabeza. Me doy cuenta que he sido yo ya que ambas manos las tengo extendidas al frente, así que lo más probable es que lo haya tirado con el elemento aire.
Miro ambos cuerpos confundida, no entiendo que pasa, no sé a qué se refiere este sueños o mejor dicho esta predicción, nada es claro solo escucho varias voces repetir la frase
Es tú culpa...
No entiendo... ¿Qué hice? ¿O qué no hice? ¿Debería haber muerto? ¿De qué soy culpable?
Abro los ojos de golpe dando un salto mientras el libro en mis piernas cae al piso del carruaje.
- Ya... ya mi niña...solo fue un sueño – dice mamá sentada a mi lado mientras acaricia mi cabeza
- Todo está bien mi princesa – habla papá agachado enfrente mío
- ¿Dónde...estamos? – pregunto confundida ya que el carruaje está detenido
- Hemos llegado a nuestro reino – responde mamá
- ¿Qué has soñado mi niña? – pregunta mi padre preocupado – Susurrabas que era tú culpa, no entiendo...no has hecho nada malo o hay algo que debamos saber – dice con ternura
- No...no que yo sepa, no era un sueño normal, era una visión...tal vez haré algo, no lo sé...quisiera contarles pero no puedo – digo con pena y ambos asienten comprendiendo
- Lo sabemos mi niña, no te preocupes, recuerda que sin importar que hagas o que pase, siempre cuentas con nosotros – dice mi mamá con cariño haciéndome sonreír
Ella me abraza y yo le correspondo apretándola con fuerza, escucho su corazón el cual parece aun tranquilo lo cual hace que me sienta bien, mi mamá se preocupa mucho por los demás que a veces se le olvida cuidarse a ella misma.
Abren la puerta del carruaje así que mi padre es el primero en bajar, luego lo sigue mamá al soltarme y finalizo yo siendo ayudada por él. Al estar afuera del carruaje abrazo también a mi padre con fuerza, el no poder decirles mis sueños me afecta porque no puedo expresar mis preocupaciones pero al mismo tiempo sé que es prohibido, así que no me queda de otra que callarme sin embargo, lo que no puedo decir con palabras lo expreso con gestos, me alegra que mis padres sean de las personas que aceptan este tipo de comunicación y que no me fuercen a decir algo que simplemente no puedo.
Él me da un tierno beso en mi frente con cariño antes de que nos soltemos, avanzamos hacia la entrada del castillo donde ya están mis tíos con mi prima y Zander quien parece saber que algo tengo ya que me observa con atención, a veces pareciera que él siente lo mismo que yo.
Mis padres avanzan con mis tíos, Katrien los sigue pero Zander y yo nos quedamos parados en la puerta.
- ¿Qué pasa mi querida estrella? – pregunta
- Otra visión y no de la bonitas – respondo y él acerca su mano retirando un cabello rebelde
- Tranquila, ya volverán las buenas, recuerda que si necesitas algo para dormir solo debes decirme – comenta y sonrío agradeciendo
Ambos nos quedamos en silencio viéndonos pero no es un momento incomodo, todo con Zander se siente bien, no necesitamos palabras para estar bien y eso se debe al gran amigo que él es, creo que nunca tendré a alguien en mi vida que me comprenda tanto como él.
- ¡Zander! ¡Zander! – escucho unos gritos femeninos
Ambos volteamos a ver encontrándonos con una joven pelirroja que camina rápidamente hacía nosotros, veo su rostro y noto un moretón en su ojo izquierdo mientras su labio inferior está roto. La reconozco, es Scarlett, es de las jóvenes que siempre llegan a los eventos de los refugios, además, según los rumores, sé que también es la "amiga" de Zander.
- ¿Qué te pasó? – pregunta mi amigo cuando ella se detiene, hace una reverencia antes de responder
- Anoche nos atacaron, unos cinco hombres entraron al burdel, parecían clientes normales, uno de ellos quiso a Odette quien ya volvió al trabajo, pero echaron a todos los demás en cuanto ella bajo, supimos que eran malos en ese instante, la señora Dahlia los amenazó, nosotros tomamos armas para defendernos pero aun así el hombre que tenía a mi amiga la comenzó a golpear, todas la defendimos, algunas recibimos golpes pero no nos rendimos hasta que la soltaron...Dijeron que si Odette y las demás testificábamos quemarían el lugar...- respira profundamente mientras cierra sus puños con rabia
- Dijeron que calladas nos veíamos más bonitas- termina
- Comprendo...pero sabes que eso no es cierto, sé que esa amenaza las asustó a todas pero las protegeremos, tenemos a los hombres, podemos hacer el juicio cuando quieran, las esperamos o si no puedo pedirle a los reyes que tomen sus testimonios de manera privada, eso vale también...- habla Zander con rapidez notablemente preocupado por la situación pero Scarlett niega deteniéndolo
- Oye, buscaremos a quienes las atacaron, ellos no quedarán libres – digo llamando su atención
- Lo sé princesa...- responde amablemente y luego mira a mi amigo – No es necesario la protección ni las reuniones privadas, intentaron callarnos pero eso solo nos enojó más...
Miro detrás de ella viendo al grupo de mujeres caminar hacia nosotros, miro a la señora Dahlia abrazando a otra joven que tiene más golpes por lo que supongo que es Odette, todo el grupo se detiene detrás de Scarlett. Miro sus rostros pero no veo ni un solo rastro de miedo, solo veo furia.
- Queremos el juicio, ahora – dice la pelirroja con seguridad y sonrío al verlas a todas asentir
- ¿Están seguras? – pregunto
- Si su majestad, admito que la idea del juicio me aterraba...- habla Odette – Pero el ver a todas mis amigas peleando por mí, la valentía que tuvieron me hicieron tomar valor...no me quedaré callada...no más – asegura y asiento comprendiendo, me giro viendo a unas doncellas que se han acercado
- Por favor llévenlas a una sala, denles comida, agua o lo que sea que necesiten, en lo que se prepara el juicio, trátenlas bien, son nuestras invitadas – pido y las doncellas asienten – Voy por mis padres, tú llévalas – le aviso a Zander quien asiente en lo que camino
- Asteria...- me llama y lo miro – gracias – dice con una sonrisa que correspondo antes de seguir con mi camino
Logro hablar con mis padres quienes se encargan de preparar todo, reúnen a los del consejo, quienes por suerte estaban en el castillo, y los llevan al salón de reyes donde también llevan a las jóvenes. Entramos los tres juntos y todos hacen una reverencia en lo que avanzamos por el lugar, miro alrededor observando a los presentes. Noto que ya han traído a los acusados pero han tapados sus ojos para que no intimiden a las chicas.
Mis padres se sientan en su lugares, mi padre del lado izquierdo y mi mamá a su lado derecho como siempre. Normalmente me tendría que quedar abajo o a un lado de los tronos pero mis padres cambiaron eso acostumbrándome siempre a estar en medio de ambos, aunque aún no tenga el poder de ellos, aseguran que tengo derecho a dar mi opinión mientras también aprendo a ver cómo manejan ellos estas situaciones.
Como siempre, alguien es el encargado de leer la denuncia que se ha hecho, la víctima, los nombres de las testigos y los nombres de los acusados más el cargo por el que están ahí. Miro a los hombres del consejo quienes prestan atención a cada palabra para estar al día, sonrío cuando mi mirada se detiene en la única mujer del consejo, mi tía Catina, ella fue invitada por el resto de los hombres luego de ser testigos del gran trabajo que ella ha hecho en sus proyectos propios.
La primera en ser llamada es Odette quien con nervios se para en medio del lugar, mira al lado derecho del salón donde están el hombre que la lastimó y noto como sus ojos se llenan de lágrimas, pero toma valor antes de dar su testimonio. Comienza a narrar lo sucedido desde su perspectiva y mientras el relato avanza su voz tiembla más hasta quebrarse, al escucharla no puedo sentir más que una mezcla de rabia con tristeza por lo que sufrió, a veces uno quisiera evitar todas estas situaciones e incluso he visto como mi mamá y mi tía han luchado por tratar de acabar con esto, pero cada vez que aparece una joven con una denuncia parecida, uno siente que es una lucha de nunca acabar.
- Ay pobrecita la ramera, no aguantó y eso que me hizo falta – habla el hombre de la cicatriz en cuanto ella termina de narrar
- Te recomiendo quedarte callado, si no quieres que mis hombres se encarguen de eso – habla mi padre con seriedad
El de la cicatriz solo se ríe por lo cual mi papá le hace una señal a los comandantes quienes asienten, mi tío Eramus le da un golpe en la mejilla mientras el tío Grabhán usa su rodilla para golpear la entrepierna del hombre que cae de rodillas quejándose del dolor. Noto a mi padre sonreír de lado y sé perfectamente que ha disfrutado ver eso.
- Lamento la interrupción Odette y no sabes cuanto me duele saber lo que te ha pasado... – Habla mamá - Si mi magia me lo permitiera, desearía proteger a cada mujer y niña de este reino de bestias como esas, pero lamentablemente aún siguen lastimándolas a pesar de los esfuerzos que se hacen
- No se preocupe su majestad, no es su culpa y gracias por sus palabras, aunque usted no lo crea sus esfuerzos han hecho efecto como por ejemplo en las jóvenes, estoy segura que las siguientes generaciones lucharan como usted lo hace por nosotras – responde Odette haciendo sonreír a mi mamá
- Odette, ya sabemos que el responsable está aquí presente, pero requiero que lo señales para que quede confirmado ante los del consejo y sea escrito para el registro – le pide mi papá amablemente y ella asiente antes de señalar al acusado
Proceden a llamar a las testigos quienes cuentan las versiones de los hechos y se aseguran de señalar a cada uno de los cómplices que las retuvieron. Los demás antiguos cazadores no dicen nada, ni siquiera se defienden porque saben que es un caso perdido para ellos.
- Bueno, esta no es mi parte favorita pero es parte del juicio, este es el momento para que alguno de los acusados se pueda defender justificando sus acciones – dice papá viendo a los hombres pero nadie habla ni siquiera el de la cicatriz
- Ja... ¿Enserio ninguno? – pregunta mamá y todos niegan – Bueno, supongo que eso es todo, le daremos unos minutos al consejo para que nos den su veredicto
- No es necesario mi reina – habla el representante del consejo levantándose – Hemos hablado brevemente y no es necesario pensar mucho, además, una situación tan importante como está no debe ser atrasada – comenta
- Esta bien, gracias por esto... ¿Cómo declaran a los acusados? – pregunta mi padre
- A todos los encontramos, culpables de los cargos correspondientes...- responde – además una persona ha sugerido un castigo considerable para el violador y todos apoyamos esto, así que les aconsejamos que se aplique la condena "ojo por ojo" creada por la difunta reina Aurora, que en paz descanse, además de los años que ustedes decidan
- Creo saber quién ha sugerido ese castigo – comenta mamá viendo a mi tía que sonríe satisfecha
Mis padres se ven entre sí y ambos asienten estando de acuerdo con esto, se levantan al mismo tiempo mientras traen a los acusados al frente donde les quitan las vendas de sus ojos.
- Como escucharon, todos ustedes son declarados culpables, a ti...- habla mi padre viendo al de la cicatriz – Se te condena con la ley del "Ojo por ojo" más cadena perpetua
- No entiendo la ley esa – habla el hombre confundido
- O es fácil, te daré un ejemplo...si tú le quitas la mano a una persona, se te quita la misma mano, tú golpeaste y violaste a una joven...- explica mamá riéndose al ver la cara de pánico del hombre – oh tranquilo, en tú caso lo que se hará será unos buenos golpes más castrarte, sin anestesia ni nada y si sobrevives, pues vivirás encerrado por el resto de tú vida
- No...se lo suplico – dice el hombre asustado y mamá baja las gradas hasta quedar frente a él – No me lastimen...
- Me pregunto cuántas veces dijo esas palabras Odette y tú no le hiciste caso...No vamos a tener piedad por la vida de una persona cuando esta no tuvo piedad por la vida de una inocente – responde con seguridad – Llévenselo
Los soldados se lo llevan mientras este pelea por soltarse, sigue gritando y suplicando piedad por su vida pero como dijo mamá, por más que lo intente no será perdonado. Mamá vuelve a su lugar mientras mi padre habla.
- A los cómplices, por el hecho de haber apoyado esto y no haber acusado al principal responsable se les condena con 50 años de prisión, estos años pueden ser reducidos si alguno nos dice los nombres de los hombres que atacaron a la jóvenes para callarlas, de lo contrario, espero que disfruten su larga estadía en el reino – habla papá
Otros soldados comienzan a llevarse al resto de los antiguos cazadores quienes no luchan por ser soltados, los observo irse pero noto que uno de ellos sé me queda viendo, puedo notar en su mirada sus deseos de decir algo hasta que sale del lugar.
- Odette...todo acabó – habla mamá a la joven quien está llorando mientras las demás la abrazan con fuerza – Puedo saber qué harás ahora con tú vida
- Pensaba en volver a trabajar pero...no puedo...no creo...necesito cambiar todo ¿Será que hay un lugar en el refugio "Flor de loto"? – pregunta ella
- Siempre hay un lugar linda – responde mi madre – Gracias a todas por ser valientes y fuertes, nos aseguraremos de que estén a salvo, recuerden que siempre cuentan con nosotros...- le dice a las demás jóvenes quienes asienten – Llévenlas a una sala, mi cuñado y sobrina harán el favor de curar sus heridas, Odette, mi asistente Cylia hará el favor de llevarte a recoger tus cosas para llevarte al refugio, lamento no poder acompañarte pero tenemos otro asunto que resolver
Frunzo el ceño confundida pero no digo nada, todas las mujeres hacen una reverencia antes de retirarse. Zander quien estaba ahí apoyándolas las acompaña, hasta que se detiene de golpe en la puerta viendo que entran a una mujer que también tiene una venda en sus ojos y viene con sus manos encadenadas. No es necesario que me expliquen quien es, lo sé perfectamente.
- Si no quieres estar aquí, no hay problema hija – habla mi padre y niego levemente
- Estoy bien, en este caso soy la víctima, tengo que estar aquí – respondo segura
Mis padres asienten antes de volverse a sentar, guían a la joven al centro del lugar donde la empujan suavemente hasta que queda de rodillas. Empiezan a leer sus datos y la razón por la cual está aquí, ella parece nerviosa, sus manos se mueven inquietas pero no la culpo, yo también estaría aterrada de mi juicio por envenenar a una princesa.
- ¡Por favor quiero hablar con los reyes! – se escucha un grito masculino afuera que llama nuestra atención
- ¿Qué pasa? – pregunta mamá
- Uno de los cómplices suplica entrar ahora, dice que dará los nombres de los hombres que golpearon a las mujeres anoche – comenta mi tío Eramus entrando
- Estamos en otro juicio, hablaremos con él después y dependiendo de su información se reducirá su condena – habla mi padre con seriedad
- Él no quiere reducción de condena...- habla el tío Grabhán – Dice que dará la información a cambio de ver a su hermana ahora
- ¿Hermana? ¿Aquí? – pregunto confundida y ambos comandantes señalan a la acusada que está hincada en el centro quien suelta unas lágrimas mientras escucha los gritos de su hermano mayor afuera
- Esto es curioso – dice mamá viéndola – Que entre – Ordena
En cuanto entra el joven, este se suelta de los soldados para correr hacía su hermana hasta quedar hincado a su lado, a cómo puede la pega a su pecho en su intento de abrazarla. La mujer comienza a llorar al sentir a su hermano quien la regaña con su voz rota.
- ¿Qué has hecho? No tenías que involucrarte con ellos – le dice él
- Lo...lo siento...no me dieron opción – responde ella y en ese instante comprendo que no me enveneno con intención, la obligaron hacerlo
- ¿De qué están hablando? – pregunta mi padre
- Deseo anotar los nombres de mis cinco compañeros que atacaron a las víctimas para callarlas...yo...yo no quería estar involucrado en esto, no sabía que iríamos a ese burdel, me dijeron que celebraríamos en una taberna - explica el hombre con rápides
Uno del consejo le pasa una hoja y pluma al joven quien con manos temblorosas anota los nombres finalizando con su firma para que quede como prueba. Al terminar regresa lo entregado antes de volver abrazar a su hermana quien llora en su pecho.
- Si no querías terminar involucrado en esto ¿Por qué no los entregaste antes? – pregunta mi mamá confundida pero el hombre no responde
- Hermano diles...por favor...- suplica la joven pero él niega así que ella se aleja de su pecho – Porque si los entregaba antes, podían arrestarlo y no podría cumplir la orden que le dieron los hombres que están amenazando con matarlos
- ¡Cállate! – le grita el hermano
- Tú hiciste un juramento para trabajar con ellos, yo no y mira dónde estoy – le responde ella con rabia mientras retiran la venda de sus ojos
- Así que trabajas para los enmascarados ¿Qué te ordenaron? – pregunta mi padre
- Le ordenaron matar a la princesa Asteria, la idea era alejarla del palco, apuñalarla y dejarla en el corredor hasta que la encontraran...pero...como lo arrestaron, esos hombres me buscaron, me obligaron a terminar el trabajo de mi hermano pero no puedo usar armas...así que lo hice a mi modo, no quería lastimarla princesa...era su vida o la de mi abuela quien...quien ha muerto...porque el veneno no funcionó – responde ella entre sollozos
- ¿Qué? No...no, dime que no... ¿La mataron? – pregunta el hermano
- Sí...por tú culpa ¡Por qué entregaste tú vida a ese hombre para hacer todo esto! – le grita ella
- ¿Qué hombre? – pregunto tratando de analizar toda esta información
Ambos hermanos se miran entre sí, ambos conocen al encargado de los ataques que han sucedido en estos días, ellos sabe que quiere y las razones de su venganza, si es el rey de Puissance du Nord, sabremos al fin con quien nos enfrentamos y como defendernos.
- Oye...- hablo comenzando a dirigirme a ellos y miro a la joven – Dinos el nombre, sé que tú no quieres estar involucrada en esto, sé que no querías envenenarme, te obligaron...di el nombre y...haré que eliminen los cargos, serás libre
- Asteria – habla mi madre seriamente y la veo
- Ella también es una víctima, no quería lastimarme – le digo antes de regresar la vista a la mujer – Por favor...dime el nombre...tienes otra oportunidad
- Ni te atrevas – le dice el hermano y ella lo ignora mientras se levanta
- Tú juraste serle fiel a él y a su objetivo, yo no – le dice simplemente mientras avanza hacia mí – El responsable de los ataques es...
De la nada el hermano usa la cadena que unen sus grillete y la rodea en el cuello de su hermana ahorcándola. La mujer se mueve tratando de soltarse pero no puede él es más fuerte, los guardias nos rodean ordenándole que la suelte pero el hombre no obedece. En este instante reconozco el momento, es lo que soñé cuando veníamos, sé lo que pasará, sé el final de esta historia pero tal vez puedo cambiarla
- No....por favor....ayuda...- pide la joven con dificultad
Hago el intento de caminar hacia ella mientras agoniza del dolor pero no logro nada ya que su hermano aprieta más su cuello el cual truena haciendo que la mujer deje de moverse. Mi cuerpo vuelve a temblar al igual que en el sueño, los ojos de la joven han quedado abiertos mientras me ven directamente.
- Lo...lo siento...lo siento...- dice el hermano comenzando a sollozar mientras acaricia la cabeza de su hermana con delicadeza hasta que la suelta dejándola caer al piso
- No... ¿Qué has hecho? Ella podría haberse salvado... ¿Tanto es tú fidelidad a ese hombre que ella mencionaba? – pregunto furiosa caminando al cuerpo de la joven y me arrodillo a su lado
Dos soldados toman al hombre quien solo suelta varias lágrimas viendo el cuerpo de su hermana.
- ¡¿Por qué?! ¡¿Qué quieren?! – grito con más rabia
- Queremos su sangre, queremos ver morir a todos los reyes y futuros gobernantes de los cuatro reinos – responde casi en un susurro
- Esa respuesta ya la sé, dame otra – ordeno parándome quedando casi enfrente de él
- Si tu hubieras muerto no tendría que haberla matado...es tú culpa...- responde al igual que en mi sueño – Mi abuela no hubiera muerto, ella no estaría aquí...tú debiste morir... ¡Yo debí matarte! – me grita con rabia queriendo atacarme
- ¡Llévenselo ahora! – grita mi padre
Los solados comienzan a luchar por sacarlo pero él no se rinde, sigue intentando soltarse. Noto como logra golpear a los dos soldados y le quita con habilidad la daga a uno. Rápidamente sé lo que va a hacer, el hombre sin dudar camina hacia mí queriendo atacarme y en vez de defenderme como en el sueño, me paralizo, podría usar mi magia pero no puedo.
Escucho las voces de mis padres a lo lejos pero no reacciono, el joven levanta el cuchillo sin embargo este nunca llega a lastimarme ya que él sale volando chocando con la pared para luego deslizarse hasta caer al piso donde la sangre sale de su cabeza como en mi visión.
Cierro los puños con fuerza y frustración. ¿Por qué no pude reaccionar? Estaba a punto de matarme. Tuve que hacer algo pero no pude, tal vez un lado mío no quería que la imagen de mi sueño se repitiera pero otro sabía que debía detenerlo, sin embargo, no lo hice.
Volteo a ver a mi mamá quien tiene las manos levantadas mientras su ojos brillan, ella es la que ha tirado al hombre.
- Asteria ¿Qué pasa? ¿Por qué no has reaccionado? – pregunta mi padre acercándose para revisarme
- No quería que esto pasara...o no lo sé...yo...– intento dar una respuesta lógica pero no puedo decir nada
- Mi niña – mamá pone sus manos en mi rostro para asegurarse de que esté bien
- Esto lo vi en mi visión, esto iba a pasar pero quise evitarlo, tal vez si él me lastimaba algo cambiaría – digo
- Sé que esas pesadillas te atormentan pero no puedes tomar decisiones así, no puedes arriesgar tú vida de ese modo – dice ella muy preocupada
Volteo a ver ambos cuerpos en el suelo y tiemblo por la situación. Normalmente soy más valiente y fuerte como mamá me lo ha enseñado pero no entiendo porque estoy así ahora, es como si el haber sido envenenada, mato algo dentro de mí.
- Hija, ve a tú habitación – ordena papá y asiento aún confundida por todo
- Descansa, nosotros nos haremos cargo – dice mamá dándome un tierno beso en la frente
Avanzo alejándome lo más pronto posible del lugar, no deseo seguir viendo como mis visiones se hacen realidad, no deseo que lo demás que he visto sea real, solo deseo volver a mis sueños bonitos.
Pasó enfrente de una sala donde se escuchan voces femeninas por lo que supongo que son las jóvenes, decido seguir mi camino hasta que la voz de Zander me detiene.
- ¿Qué pasó? – pregunta y lo veo confundida
"- ¿Cómo sabe que pasó algo?" – me pregunto mentalmente
- Se nota en tú rostro y acabo de leer tú mente – responde
- Deja de meterte en mi cabeza – digo
- Sí...algo pasó – asegura y suspiro frustrada
- En resumen, hay dos personas muertas en el salón de reyes como vi en mi visión, casi muero yo, no pude defenderme, no supe cómo reaccionar, estoy tan confundida, no entiendo que me pasa y deseo ir a dormir – respondo
- Ah...gran explicación – dice sarcásticamente ganándose una mala mirada – Ya, tranquila...ven aquí – extiende sus brazos y camino hacia él para abrazarlo con fuerza – No sé exactamente qué pasó pero sé que lo que te hicieron dejó una marca en ti que nunca olvidarás, pero tranquila, todo pasará y estarás bien
- Gracias, por apoyarme, especialmente en mis días malos – digo
- Ay mi querida estrella, no pude protegerte antes pero me aseguraré de estar siempre para ti cuando no te sientas bien – me da un corto beso en mi cabeza con ternura
Sonrío levemente antes de levantar mi cabeza y ver directamente esos ojos grises que siempre están conmigo cuando más lo necesito. Mi corazón late con fuerza al verlo con atención y descubrir que es más atractivo de lo que esperaba.
"- Asteria ¿Qué estás pensando?" – me regaña mi conciencia
Bajo la cabeza retirando mi mirada mientras mis mejillas se sonrojan de los nervios por mis pensamientos y los cuales no habían aparecido antes. Definitivamente muchas cosas raras me están pasando.
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------Hola
Este fue el capítulo 9 de "Los Cuatro Reinos". Espero les haya gustado.
Como pudieron ver, los hombre enmascarados desean ver morir a los reyes y gobernantes. Los cazadores que atacaron a las jóvenes del burdel fueron sentenciados y no podrán hacerle daño a nadie (Ojalá así fuera en la vida real pero bueno :/ que podemos hacer ).
También vimos el juicio de la joven que envenenó a Asteria y entendimos porqué la lastimó, fue obligada por los enmascarados más un hombre del cual aun desconocemos su nombre pero sin duda parece que está reclutando a muchas personas para su propósito. ¿Sera venganza o solo deseo del poder? ¿Quién podrá ser el culpable de todo? ¿ Ustedes sospechan de alguien?
Muchas gracias por leer. Nos vemos el jueves con un nuevo capítulo donde veremos un par de momentos algo tiernos.
L@s quiero mucho. María Renee