❝ Forbidden ❞ || Michaeng

By _xYoungOnce

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❝ Aveces las sensaciones prohibidas son las mejores ❞ ⚘ Aclaraciones en el primer capítulo ¡! ⚘ Mención de... More

𓏲 Prólogo
𓏲 Capítulo 1
𓏲 Capítulo 2
𓏲 Capítulo 3
𓏲 Capítulo 4
𓏲 Capítulo 5
𓏲 Capítulo 6
𓏲 Capítulo 7
𓏲 Capítulo 8
𓏲 Capítulo 9
𓏲 Capítulo 10
𓏲 Capítulo 11
𓏲 Capítulo 12
𓏲 Capítulo 13
𓏲 Capítulo 14
𓏲 Capítulo 15
𓏲 Capítulo 16
𓏲 Capítulo 17
𓏲 Capítulo 18
𓏲 Capítulo 19
𓏲 Capítulo 20
𓏲 Capítulo 21
𓏲 Capítulo 22
𓏲 Capítulo 23
𓏲 Capítulo 24
𓏲 Capítulo 25
𓏲 Capítulo 26
𓏲 Capítulo 27
𓏲 Capítulo 28
𓏲 Capítulo 29
𓏲 Capítulo 30
𓏲 Capítulo 31
𓏲 Capítulo 32
𓏲 Capítulo Final
𓏲 Extra O1
𓏲 Extra O2
𓏲 Extra O3
𓏲 Extra O4

𓏲 Extra O5

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By _xYoungOnce

Mina y Chaeyoung

Chaeyoung cerró con fuerza la puerta de su habitación tras ella con mucha molestia, tiró su mochila a lado mientras se quejaba consigo misma en voz baja. Sabía que sentirse de esa manera era algo muy impropio de ella, pero desde hace un tiempo que ya no podía evitarlo, y hacer un berrinche estando ella sola, le parecía mucho mejor que hacer algún tipo de drama frente a las demás personas en la universidad porque eso sería demasiado vergonzoso e incómodo en muchos sentidos.

Se despojó de su ropa y se dio una ducha, buscando sentirse más tranquila de esa forma. No quería seguir pensando en nada más que en su momento a solas.

Desde que entró a la universidad, su situación no había cambiado mucho; sus padres seguían sin estar mucho tiempo en casa y convivían más que todo el fin de semana, así que todavía pasaba sola algunas veces ya que la mayoría del tiempo, Mina le hacía compañía, pero en ese momento, quería pensar en cualquier cosa que no sea Mina, porque si se enfocaba en eso, volvería a molestarse y otra vez tendría esa incómoda sensación de celos que tanto odiaba.

Miró la hora en su reloj, aún tenía mucho tiempo antes de que sus padres llegaran, así que en su propio afán de desviar su atención a otra cosa y olvidar el horrible día que tuvo, decidió poner en práctica su manera favorita de pasar las tardes, especialmente ahora que Mina y ella no habían tenido sexo ni ningún tipo de contacto más allá de unos castos besos desde hace un poco más de un mes; y es que las cosas se habían puesto tensas y no parecía que fueran a resolverse pronto.

Sin vestirse todavía, se dirigió hacia una de sus gavetas en donde tenía muy bien guardados sus juguetes, rebuscó entre sus cosas y sacó lo que necesitaba, se recostó sobre su cama y utilizó a Mina como su mejor motivación, porque a pesar de lo que estaba sucediendo entre ellas, no había persona a la que deseara más que a ella, su cuerpo reaccionaba de manera inmediata cuando de su novia se trataba.

Eso no podía cambiar.

Mina salió de su facultad con la esperanza de encontrarse con Chaeyoung esperándola fuera de su salón, pero una gran parte de ella estaba segura de que eso no iba a suceder, no después de esa pequeña discusión que tuvieron antes de entrar a clases. No comprendía muy bien el por qué, su novia se sentía molesta últimamente con ella, siempre trataba de que las cosas se mantuvieran tranquilas para evitar discusiones, pero Chaeyoung insistía en estar molesta

Suspiró cansada y acomodó su mochila sobre su hombro, salió de su edificio en dirección a la casa de su novia, con suerte, la encontraría ahí porque ni siquiera estaba respondiendo sus llamadas. Durante todo el camino, se esforzó en encontrar la raíz del problema, dándole vueltas a todos los eventos sucedidos en esos últimos días, hasta que recordó una frase en específico que lo hizo entender todo.

''Mejor vete con Lisa, hablamos cuando tengas tiempo para mi''

Chaeyoung estaba celosa. Cuando le dijo eso, no había comprendido del todo, no entendía qué tenía que ver su compañera de clases con todos sus problemas, pero recién cayó en cuenta de que tal vez, Eunha si era un tanto sugerente cuando estaban juntas.

Todo tenía sentido ahora. Quizás había sido una total despistada, nunca creyó que a los ojos de Chaeyoung, el trato que tenía con sus compañeras de clase era demasiado cercano a tal punto de llegar a sentirse de esa forma; no podía ver a nadie que no fuera su novia, pero tal vez, estaba dejando que se sobrepasaran con ella sin siquiera darse cuenta. Suspiró sonoramente, estacionándose frente a su hogar, dejó sus cosas dentro de su auto y se dirigió directamente hacia la casa de los Son. Tocó la puerta repetidas veces al cerciorarse de que Chae estaba en casa, había visto las ventanas de su habitación abiertas, así que era seguro estaba ahí.

Un par de minutos después, fue recibido por un Chaeyoung vistiendo únicamente una bata de baño, frunciendo el ceño

— ¿Qué haces aquí?— fue lo primero que la rubia dijo al encontrarse con su novia— ¿No dijiste que saldrías con Lisa?— se cruzó de brazos, aún sin dejarla pasar.

— ¿Podemos hablar bien antes de iniciar otra discusión?— preguntó con tranquilidad, tratando de no alterar más a la menor que ya se veía un tanto irritada

Chaeyoung suspiró y simplemente se dio la vuelta, dirigiéndose escaleras arriba hacia su habitación, escuchando los pasos de Mina tras ella luego de cerrar la puerta principal.

— No sabía que estabas celosa de Lisa— Mina entró a la habitación, viendo como el menor se limitaba a ordenar su cama.

— Claro— murmuró lo suficientemente audible para el mayor, sonando con sarcasmo.

— Chae— suspiró, irritándose por la poca atención que su novia le estaba dando, ignorándola, caminando de un lado a otro como si no estuviera ahí— ¡Chaeyoung!— la detuvo, sosteniendo su brazo. Chaeyoung la miró con ojos desafiantes, pero no se apartó— Deja eso y hablemos.

— Habla entonces— dijo con más tranquilidad— Te escucho.

Mina soltó con suavidad el brazo de la menor, buscando la manera de empezar a dar una explicación que ni siquiera había pensado todavía, pero ya estaba ahí, nerviosa bajo su mirada, así que debía solo decirlo.

— Lamento que nuestra relación se pusiera tensa por mi culpa, realmente no me había dado cuenta de lo sugerente que podía llegar a ser Lisa.

— ¿No te habías dado cuenta?— rió con sarcasmo— Parece un maldito chicle, no respeta ni siquiera cuando estoy cerca, y tú no haces nada más que hacerle caso, no le pones límites— se sentó en la orilla de la cama sin apartar la mirada— Todo el tiempo tocándote y hablándote en ese tono tan asqueroso.

— No volverá a pasar, de verdad no lo había notado— dijo con arrepentimiento, tomando asiento a su lado con la esperanza de que no se alejara— Prestaré más atención a eso, pero ya no sigas molesta conmigo.

— Es que no es tan simple, Mina. No me molesta que tengas amigas, y lo sabes— sonó desanimada, sintiéndose un tanto avergonzada por su comportamiento, pero no podía evitarlo cuando era demasiado evidente que la compañera de su novia buscaba algo más a pesar de que sabía que estaban saliendo— Es solo que ella me pone de los nervios. ¿Te has dado cuenta de que ni siquiera pasamos tiempo juntas desde que empezaron a ser cercanas? Ni siquiera te quedas a dormir conmigo— hizo un puchero, jugueteando con sus dedos con cierto nerviosismo— A veces siento que ya no me quieres tanto como antes, siento que he dejado de gustarte y por eso solo dejas que esa tipa se te acerque de esa manera— murmuró con tristeza. Había estado guardando eso por más de un mes, y por fin decirlo en voz alta le quitaba un peso de encima, pero al mismo tiempo, era como aceptar esa realidad que era dolorosa.

— Chaeng...— inevitablemente, su pecho dolió. Amaba a Chaeyoung, la amaba más que a nadie, y el solo hecho de haberle demostrado lo contrario en algún momento, la hacía sentir como una idiota— Me sigues gustando mucho, lamento hacerte dudar al respecto, de verdad lo siento— tomó sus manos y sobó el dorso de estas— Prometo que todo va a mejorar, ¿Si? No volverás a sentirte así.

Chaeyoung sonrió cortamente, todavía no muy convencida porque nada le aseguraba que eso sería cierto, pero confiaría en ella, lo que menos deseaba era que toda su relación terminara por un problema así.

Mina atrajo el cuerpo de la menor y dejó un simple beso en sus labios con un toque de timidez debido a que no sabía cómo tenía que actuar hasta ese punto, durando solo algunos segundos con los que Chaeyoung quedó totalmente inconforme, sin embargo, no dijo nada al respecto, detenerse a pensar en que hace mucho, Mina no la besaba como debía solo lo haría sentirse peor, pero no podía evitar la reacción automática de su cuerpo con solo la presencia del mayor en su habitación.

Claro que tenía muchas ganas de tener sexo, tenía muchas ganas de sentir a su novia, y si Mina no tenía la iniciativa, entonces lo haría ella, dejando de lado el hecho de que no estaba del todo convencida con la manera en la que se supone que sus desacuerdos se habían resuelto.

Apartó cualquier incomodidad e hizo que Mina se recostara, tomándola por sorpresa, más no se quejó en lo absoluto. Se posicionó sobre ella y bajo la atenta mirada de la mayor, comenzó a acariciar su abdomen. Un jadeo abandonó los labios de Mina cuando sus uñas comenzaron a acariciar su piel, sumergiéndose en el mar de sensaciones que había extrañado, sintiéndose como si fuera la primera vez, su cuerpo demasiado sensible ante las caricias de la menor. No recordaba cuando fue la última vez que estuvieron juntas de esa manera, pero estaba segura de que había pasado mucho tiempo.

Con un poco de desesperación, Mina llevó sus manos al nudo de la bata que tenía puesta la coreana, desamarrándola hasta que la prenda empezó a caer por sus hombros, dejándola expuesta poco a poco. Chaeyoung no se quedó atrás tampoco, quitando rápidamente la ropa de Mina hasta dejarla en su ropa interior, sintiendo contra su piel desnuda su humedad

Chaeyoung gimió en respuesta ante las caricias que Mina había empezado a hacer, cayendo en cuenta segundos después que estaba perdiendo el control de la situación solo con esa acción. Sus sentidos despertaron cuando sintió que Mina buscaba ponerse sobre ella, pero esos no eran sus planes por el momento, por lo que tomó sus muñecas y las presionó contra la cama, dejándole en claro con ese gesto que no iba a dejarse dominar tan pronto.

— Deja de moverte tanto— ordenó en voz baja antes de besar su cuello, pegando su cuerpo al suyo, estremeciéndose al contacto de su piel

Mina asintió sin protestar, dejándose llevar, sumisa ante los toques de su novia sobre su cuerpo. Gimió fuerte al sentir el toque directo de los dedos de la menor sobre su húmedo centro, moviéndose y masturbándola con lentitud, aumentando la velocidad a medida que los segundos pasaban. Quiso detenerla, no quería correrse de esa manera, pero tampoco se sentía capaz de detenerla, el placer que estaba sintiendo era tan bueno que no quería romper esas sensaciones. Chaeyoung detuvo sus movimientos y apartó su ropa interior con agilidad, retomando su acción cuando estuvo totalmente desnuda. Mina volvió a gemir con satisfacción, los labios de Chaeyoung besando y lamiendo su cuello, besando su mandíbula de vez en cuando, su mano libre pellizcando sus pezones mientras la tocaba con la otra.

Su orgasmo llegó de golpe, logrando que su espalda se arqueara y su piel se erizara, sus gemidos audibles en toda la habitación solo hicieron que Chaeyoung se sintiera orgullosa de la reacción en su novia. Mina rodeó con sus brazos el cuello de la menor y la acercó con la intención de besarla, aún con los efectos de su orgasmo recorriéndola, pero Chaeyoung se apartó, dejándola sorprendida e irritada

— ¿No vas a besarme?— se elevó sobre sus codos al notar que Chaeyoung había bajado de su cuerpo en total silencio.

— No— respondió con simpleza, ignorando sus enormes ganas de hacerlo, pero debía mantenerse firme, si Mina apenas la besaba, ella también haría que la deseara.

Mina estaba confundida, Chaeyoung nunca actuaba de esa manera, sabía lo mucho que le gustaba ser besada y jamás se lo negaba. Suspiró sonoramente y volvió a recostarse, buscando una respuesta lógica entre sus pensamientos, pero cayó en cuenta de que Chaeyoung no se había corrido, lo cual, también la pareció extraño que simplemente se haya apartado ya que fue ella la que empezó.

Estuvo a punto de decir algo más cuando sintió el peso de Chaeyoung de nuevo sobre su cuerpo, sacándola de sus pensamientos para enfocarse únicamente en ella y su coqueta sonrisa. Intentó elevarse para poder ponerla bajo su cuerpo, pero Chaeyoung puso su en su pecho, empujándola contra la cama.

— Déjame ayudarte a correrte— pidió la mayor tras soltar un suave jadeo. Quería hacerla disfrutar también, sabía como atenderla, pero no se lo estaba permitiendo.

— No he terminado contigo, Mina, así que solo hazme caso — esbozó una corta sonrisa antes de iniciar una hilera de besos húmedos que empezó en su cuello, bajando por sus clavículas, torso, abdomen y finalizando en su vientre, deteniéndose un momento en esa zona tan sensible— ¿Qué pasa, Sharon?— preguntó con sus labios sobre sus muslos internos, besándolos sutilmente— ¿Por qué no dices nada?

Mina no estaba prestando mucha atención, su mente se enfocaba solo en el hecho de que su adorada novia la haría correrse por segunda vez con caricias y besos sobre su cuerpo, ¿Cómo es que había perdido el control?

— Chaeng...— gimió con voz ronca cuando la menor abrió sus piernas inesperadamente, dejándola expuesto ante sus lujuriosos ojos.

Chaeyoung sonrió con suficiencia al notar que la japonesa no se estaba oponiendo en lo absoluto, demasiado excitada para detenerla. Mina estaba ansiosa por lo que pasaría a continuación, ni siquiera había notado que ese era su plan, porque las pocas veces que Chaeyoung había tomado el rol de activa durante el sexo, había sido hablado con anterioridad para asegurarse que era un acuerdo mutuo, pero en esta ocasión, Chaeyoung solo había tomado esa iniciativa sin consultárselo, y lejos de sentirse molesta, se encontraba demasiado emocionada y excitada, un poco desesperada por seguir.

La rubia observó la suplicante mirada de la japonesa, dándole el pase libre para empezar a tocarla como deseaba. Es cierto que no le había preguntado, pero también estaba consciente de que Mina le pediría parar en caso que no quisiera seguir, sin embargo, parecía demasiado necesitada.

Mina sintió la incomodidad al principio de los dedos de Chaeyoung haciéndose paso dentro de ella, haciéndola quejarse por lo bajo por no estar tan acostumbrada a ese tipo de contacto. Pero eso solo fue al principio, porque unos minutos después, sus caderas se movían involuntariamente contra la mano de su novia que. No podía ni recordar las veces que estuvo a punto de acabar durante todo ese tiempo, siendo interrumpida en cada ocasión, sintiéndose tan débil y sumisa ante Chaeyoung.

Cuando fue suficiente, Chaeyoung sacó sus dedos, ignorando las quejas de la mayor. Abrió su cajón y de este sacó su nuevo juguete, el cual compró pensando en esta situación, y es que no se trataba de nada menos que un strap on de doble penetración. Así que tomó el pequeño bote de lubricante que tenía a un lado y puso suficiente sobre ambos miembros de plástico, mientras se lo colocaba y soltaba un jadeo al sentirlo dentro. Separó un poco más las piernas de su novia y se posicionó entre ellas, alineó el miembro de plástico en su entrada y se introdujo suavemente, atenta ante cualquier negación por parte de Mina, sin embargo, en su expresión solo se notaba el placer que estaba sintiendo por ser penetrada.

Chaeyoung sonrió con egocentrismo y movió su pelvis, siendo lenta al principio para acostumbrarla a tenerla dentro, pero con el pasar de los segundos, se le estaba dificultando un poco no moverse con fuerza debido a que también se encontraba demasiado excitada al tener el miembro dentro suyo y la perfecta sensación de disfrutar al mismo tiempo que su novia.

— Muévete, Chaeng— pidió en un jadeo la extranjera, rodeando con sus piernas el cuerpo de la rubia.

Y eso fue suficiente para que Chaeyoung no detuviera sus fuertes y profundas embestidas. Los gemidos inundaron la habitación, escuchándose las pesadas respiraciones. Mina estaba fascinada, nunca se encontró en esa posición pero jamás olvidaría lo bien que se sentía.

Muy inmersa en el placer, no pudo procesar en qué momento Chaeyoung la había movido hasta quedar sobre ella, montándola con rapidez con las manos de la mayor sobre su cintura, presionándola fuertemente para mantenerla firme con cada embestida que la hacía sentir cada vez un poco más cerca de su propio límite. Se inclinó sobre su cuerpo hasta quedar cerca del rostro de Chaeyoung, buscando sus labios con desesperación mientras gemía, pero Chaeyoung volvió a apartarse, impidiéndole de nuevo que la besara.

Mina se frustró, estaba empezando a molestarse.

— No intentes besarme— dijo con voz fuerte la coreana, hundiéndose de nuevo dentro de su novia con fuerza, causando que Mina gimiera más alto. Repitió ese mismo movimiento unas cuantas veces más hasta que Mina se apartó sin haberlo previsto, luciendo realmente irritada — ¿Qué haces?— preguntó, pero un gemido ahogado salió de su garganta cuando las manos de Mina abrieron de lado a lado sus piernas, quitándole el juguete con habilidad

— Deja de jugar conmigo— dijo con rudeza, besando su cuello, colocándose ella misma el juguete, acción que confundió a Chaeyoung— Ahora me toca a mi— sonrió ladina

Claro que estaba disfrutando que su linda novia se hiciera cargo de ella, pero el hecho de que Chaeyoung no quisiera besarla la estaba desconcertando, ella jamás le había negado ningún beso, y sentir que se los estaba rechazando, solo la hacía sentir como si solo fuera simple sexo, y no, la amaba demasiado para que fuera solo eso.

Así que era su turno de tomar el control.

— Sabes, Chaeng, es divertido cuando quieres tener el control sobre mi y sé que fácilmente puedes obtenerlo— movió dos de sus dedos por los pliegues húmedos de Chaeyoung, estremeciendo a su novia — Pero detesto cuando no me das lo que quiero

— ¿D-De qué hablas?— su voz tembló, sintiendo su piel erizarse ante los toques en su cuerpo.

Tal vez a Chaeyoung no le importaba, pero a ella no le gustaba sentirse rechazada con algo tan simple. Durante el sexo, los besos significaban algo importante porque los besos lo hacían sentir íntimo, especial, no como si fuera alguien más a quién solo buscaba para algo de un rato, y aunque sabía que Chaeyoung no la veía como cualquiera, seguía siendo una fea sensación.

Sin previo aviso, empezó a introducir uno de sus dedos dentro de Chaeyoung, pero este entró sin problema alguno. Frunció el ceño e intentó introducir un segundo dedo, entrando también con facilidad. Rió por lo bajo, entendiendo completamente la situación.

Su linda novia había estado tocándose y jugando consigo misma.

— Así que... ¿Estuviste tocándote antes de que viniera?— preguntó, viéndola a los ojos con una ceja alzada.

— S-Si— jadeó, los dedos de Mina moviéndose dentro de ella— No hemos t-tenido sexo d-desde hace m-mucho— gimió, abriendo más sus piernas de manera inconsciente.

Mina estaba de acuerdo con eso, y de cierta forma, sabía que era su culpa por haberse distanciado sin darse cuenta. No tenía excusas, pero estaba dispuesta a enmendar toda su relación.

Sacó sus dedos del interior de Chaeyoung y se acercó a besarla.

Chaeyoung intentó apartarse, pero fracasó enormemente tan pronto sintió la suavidad de los labios de Mina sobre los suyos, de verdad había extrañado ese tipo de contacto. Quiso mostrarse fuerte y decidida, pero su orgullo era un chiste, así que respondió el beso con la misma intensidad, dejando que sus lenguas se enredaran de manera desordenada. Mina sonrió en medio del beso, era inútil seguir negándose a algo que ambas deseaban, y Chaeyoung le demostró lo mucho que amaba besarla también, aferrándose desesperadamente a su cuerpo para acercarla más, buscando explorar mucho más su boca sin importar que sus dientes chocaran de vez en cuando.

Mina aprovechó esa distracción para entrar de una sola vez en la menor, llegando lo más profundo que pudo. Su labio inferior fue mordido fuertemente por los dientes de Chaeyoung ante la inesperada embestida que las hizo jadear de satisfacción a ambas. Gruñó gracias al placer que tener el control le proporcionaba, recibiéndola tan bien como siempre.

— Hazlo duro, Minari— pidió con voz suave, besando sus labios una vez más con demasiada pasión y profundidad.

Mina obedeció al instante, dándole a su novia lo que tanto deseaba, lo que sus cuerpos pedían casi a gritos por la falta de intimidad entre ambas. No podía creer lo mucho que se estuvo privando, tener sexo con Chaeyoung siempre era algo especial, algo más allá de solo lo placentero, llenando su pecho de tantos sentimientos que la hacían feliz, haciéndola sentir enormemente afortunada.

Siguió embistiendo con fuerza y rapidez, encontrando su punto débil en cuestión de segundos. La expresión de Chaeyoung demostraba lo bien que lo estaba haciendo, motivándola a seguir moviéndose dentro de ella. Sin dejar de embestir, agarró el interior de sus piernas y las posicionó sobre sus hombros, llegando más profundo en esa posición.

Chaeyoung no sabía de donde sostenerse, su respiración se tornó pesada mientras hacía puño las sábanas en sus manos, deleitándose con cada sensación en su sudorosa piel. Sintió la boca de Mina pasearse por sus piernas, mordiéndola levemente con cada pausada embestida dentro de ella, haciéndola sollozar de placer.

— Lo haces tan bien...— logró decir, cerrando sus ojos para darle paso a esa familiar sensación que solo la llevaría a su objetivo.

— ¡Mierda!— gimió, echando la cabeza hacia atrás cuando sintió las uñas de Chaeyoung clavándose en su abdomen sorpresivamente. Supo que lo hizo a propósito cuando la vio reír con sus dientes mordiendo su labio inferior— Cariño, si sigues haciendo eso voy a correrme justo ahora— le susurró, bajando las piernas de la menor.

Chaeyoung sonrió, viéndola con un toque de adoración que Mina logró notar.

Sin salirse del cuerpo de Chaeyoung, Mina jaló su brazo e hizo que se levantara hasta quedar sobre ella, Chaeyoung se aferró a sus hombros, escondiendo su rostro en el hueco de su cuello, besándola dulcemente mientras hacía movimientos circulares sobre las caderas de Mina aún dentro de ella.

— Haré que te corras— susurró sobre su oído la mayor, obteniendo una pequeña risa de su parte.

— ¿Qué esperas?

Sin dar respuesta alguna, Mina empezó a moverse dentro de ella otra vez, siendo más certera esta vez, yendo más profundo. Chaeyoung clavó sus cortas uñas en su espalda nuevamente en su afán de aferrarse para no caer hacia atrás. El brazo de Mina rodeó su cintura, poniendo la fuerza suficiente para sostenerla firmemente.

— Voy a correrme— logró decir en un débil susurro en su oído

Mina asintió, llevando sus labios hacia el cuello de la coreana para dejar algunos besos y mordidas que solo la estimulaban para llegar a su límite. Y fue cuestión de unas cuantas embestidas más para que Chaeyoung soltara un fuerte gemido que anunció el intenso orgasmo que sacudió su cuerpo completo, dejándola sin fuerzas y con un escalofrío que recorrió toda su espalda, sin embargo, todavía no era el final.

Cortas embestidas seguían haciéndola gritar debido a la sobre estimulación; Mina no se había corrido todavía, por lo que seguía dentro de ella, haciéndola gemir agudamente.

— Tranquila, amor, estoy cerca— dijo la mayor, rodeando con sus brazos el cuerpo de Chaeyoung mientras ejercía más fuerza, hasta que luego de unas cuantas embestidas más, logró llegar a su orgasmo junto a un fuerte gemido que fue a parar a los labios de su novia mientras la besaba con fuerza

Chaeyoung adoraba esa sensación de sentirse satisfecha, por lo que se quedó en esa posición por un corto tiempo, dejando que Mina decidiera salir de ella hasta que estuviera totalmente segura de que había terminado.

Mina alejó un poco el cuerpo de su novia para encontrarse con su mirada, apartó los cabellos que caían sobre su sudorosa frente y besó sus labios con lentitud, con cariño y dulzura, demostrándole lo mucho que la amaba con ese gesto. Chaeyoung podía sentir las emociones fluir en su pecho, sintiéndose tan a gusto, como si Mina fuera la droga perfecta para mantenerla tranquila

— Debemos vestirnos, mis padres vendrán en un rato— dijo Chaeyoung, dejando cortos besos en todo el rostro de Mina que no apartaba la mirada.

— Te amo, Chaeyoung— sobó su mejilla, recostándola lentamente sobre el colchón— Lamento si te hice creer que te quiero menos o algo así, eso nunca va a pasar.

— Está bien— asintió, sobando la mano de Mina que seguía en su mejilla— No quiero más discusiones.

— Lo sé, yo tampoco— besó su frente, soltando un suave suspiro.

— Te amo, Minari.

Mina dejó un corto beso en sus labios y se levantó con la intención de quitarse el juguete y buscar algo con que limpiarse ambas. Minutos después, ya se encontraban abrazadas sobre la cama viendo una película, Mina sobando el cabello de su novia que no dejaba de aferrarse a ella como si fuera una enorme almohada, quedándose dormida poco a poco con el sonido de la televisión de fondo.

Sabían que su relación no era perfecta, tendrían muchos altos y bajos que, de alguna manera, debían superar. Quizás ella no midió las consecuencias de sus acciones, no puso la atención necesaria para cuidar su relación, y aceptaba su error por dejar que alguien más se entrometiera. Terminar con Chaeyoung era una opción que no pasaba por su mente, y se aseguraría de no cometer más errores a pesar de que eso era imposible, pero, de eso se trataba ¿no? De enfrentar las dificultades de la mejor manera hasta donde pudieran, porque por más que se amaran, sabían que habían errores que simplemente no se pueden arreglar, y esperaba con todas sus fuerzas no tener que llegar hasta ese punto.

Desde siempre, Chaeyoung fue su chica especial. Fue su chica especial desde que decidieron ser mejores amigas bajo la inocencia de la edad en la que se conocieron, porque no importaba cuanto tiempo haya pasado o cuanto tiempo tenga que pasar, Chaeyoung era dueña de un espacio muy grande en su corazón, siendo parte de su vida desde hace mucho tiempo, dándose ese cariño que empezó sin ninguna intención de por medio hasta convertirse en lo que eran ahora.

Porque su amor con Chaeyoung, era el más épico.




N/A: Y con este termina el último extra 🤍 ¡Muchas gracias por leer! Ya la historia tiene 131k de lecturas lo cual es una locura.

Traté de adaptar la obra lo mejor que puede ya que al ser dos chicos en la versión original, el smut fue mi peor pesadilla, pero espero haber hecho lo mejor para que ustedes lo disfrutaran.

Quiero agradecerles también porque vi que recomendaron la historia por tiktok, muchas gracias a todos lo que hicieron videos recomendándola, lo aprecio <3

Muchas gracias nuevamente y disculpen la demora 💘

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