-Estás babeando, límpiate -se burló Angelica.
La miré mal pero no dije nada, sabía que tenía razón pues justo en ese momento Nil había cruzado mi camino, sin saber todos los sentimientos que despertaba en mí. Un amor a primera vista, que se remonta 3 semanas atrás, al primer día de clase de mi 9° grado, en la ceremonia de bienvenida, me pidieron decir unas palabras, pero al momento de recitar aquellas cuatro líneas que tanto había ensayado, fui interrumpida abruptamente con el sonido de las grandes puertas del auditorio al abrirse, un joven de piel bronceado y grandes ojos café apareció tras las puertas.
Era obvio que llegaba muy tarde, la sala se llenó de murmullos y risas y el muchacho guió su mirada hacia el escenario donde sus ojos se encontraron con los míos, en ese instante una corriente eléctrica me atravesó. Caí bajo un embrujo que algunos llaman amor a primera vista.
Aquí estoy tres semanas después sin ni haberle dicho hola.
Decidí que me acercara a él y me haría su amiga, pero cada vez que se acerca mi cuerpo y mente se paralizan, creo que incluso dejó de respirar y decir algo en esas condiciones se vuelve una tarea imposible.
-Volvamos al salón -le digo a mi amiga cuando Nil sale de mi rango de visión.
-Si no te apresuras a hablarle, perderás para siempre la oportunidad -dice Angelica con un matiz de decepción en su voz. Empiezo a arrepentirme de haberle contado.
Hoy es viernes, si no logro hablarle a Nil en lo que queda de día, tendré que esperar hasta la próxima semana. He estado memorizando lo que le voy a decir, ensayo las líneas como si fuera un libreto e imagino todas sus posibles respuestas para responder en consecuencia.
En el último tiempo libre de la tarde, tan solo 15 minutos, me armo de valor y me decidí a hablarle, pero cuando estoy a escasos metros de distancia sus amigos lo rodean y me es imposible acercarme.
Vuelvo con Angelica sintiéndome derrotada, ella me ofrece un caramelo que llevaba en uno de sus bolsillos para consolarme.
Doy por perdida la última oportunidad del día para hablarle a Nil.
Al día siguiente despierto un poco malhumorada, pero mi familia tenía organizado un día de campo que con suerte me haría sentir mejor, puse todo de mi parte para disfrutar de la salida familiar pero mi mente estaba en cualquier otro lugar.
Decidí ir a caminar sola para aclarar mis pensamientos, camine sin un rumbo fijo, de forma distraída hacia dónde me llevarán mis pies.
Como si mi deseo se hubiera hecho realidad, allí estaba él, fundido con la naturaleza, rodeado de árboles con la brisa despeinando su cabello, una alucinación, fue lo primero que pensé.
Pero sus ojos encontraron los míos y cálidos como un atardecer, lo supe; me había vuelto visible, el no solo me veía, me estaba observando, una ligera sonrisa se dibujó en sus labios.
En un reflejo automático sonreí en respuesta.
-¿Eres la chica del auditorio? -el sonido de su voz llegó a mi, hipnotizándome, habiéndose incapaz de procesar de forma rápida lo que decía.
-Uhmm... si... -dije de forma torpe.
-Mi nombre es Nil, vamos en el mismo grado -Se acercó extendió su mano.
Pero yo estaba paralizada como estatua. Hoy no estaba lista para tener esta conversación, el nerviosismo se apoderó de mí.
-...Ciby -respondí después de mucho tiempo y estiré mi mano para estrechar la suya.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Hola soy Gaby, la autora y les doy la bienvenida a esta novela.
Esta obra no tiene pretensiones mas que narras el descubrimiento del amor, las relaciones y el crecimiento de una adolescente cualquiera.
Todos los capítulos tendrán mas o menos la misma extensión y estaré publicando juiciosamente los Lunes y Jueves (al menos lo voy a intentar con todas las fuerzas de mi Kokoro)
Sin mas que decir, nos leemos por aquí. xoxoxo