The Red Steam Revolution

By HjPilgrim

6.7K 681 314

EL AMOR PUEDE CAMBIAR EL DESTINO DEL MUNDO. Rusia está en guerra tras la muerte de la familia imperial. El Ej... More

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37

Capítulo 21

88 14 6
By HjPilgrim

—¿Qué... qué has hecho?

Ivana se encontraba frente a Aleksey con rostro preocupado y ojos húmedos. "¿Qué he hecho?", pensó recíprocamente. ¡Lo había besado! Había sido algo que no había podido evitar. "¿Cómo podía luchar contra las hermosas palabras que lleva diciéndome continuamente?". Después de tantas emociones, Ivana se había dejado vencer ante ellas y había hecho lo que siempre había deseado hacer.

—No... no sé.

—¿Por qué me haces esto? —preguntó contrariado—. Soy el prometido de tu hermana.

—Lo... lo siento... No pretendí... Fue algo involuntario.

—No, no. Esto es mi culpa. No lo pude ver.

—No es tu culpa, Alyosha. Es mía. Me sentí feliz de que estábamos a salvo. No pensé claramente...

—Ivana, estás enamorada de mí —afirmó Aleksey sin un rastro de duda—. Había actitudes que no supe ver. Probablemente yo mismo las alenté.

No había nada qué decir ni qué hacer. Si hubiera sido más observador, se habría dado cuenta de lo que pasaba en Ivana sin que hubiera sido necesario llegar al beso.

—Y ahora que lo pienso bien, cuando estábamos en la posada durmiendo juntos, me dijiste... me dijiste...

—Te amo —confesó Ivana.

—No me merezco esto, Ivana.

—¿Me lo merezco yo, entonces?

¿Cómo podía decir algo así? ¿Tan feo había sido besarla? ¿Acaso ella no era digna de ser amada como lo era Yuliya? ¿No podía aspirar a que alguien sintiera algo más por ella que amistad? ¿Tan despreciable era estar a su lado? "Yo también necesito sentir que soy especial. Él me lo dijo. ¿Era mentira?".

—¿Merezco ver como mi vida se derrumba por mi culpa? ¿Cómo tú te vas a casar con mi hermana, rompiendo mi corazón? ¿Cómo ella desaparece mientras nosotros no sabemos si está viva o muerta? ¿No puedo ser yo, por una vez, la afortunada?

—Por supuesto que te mereces ser feliz, pero yo sigo siendo el prometido de Yuli. No puedo entenderlo, Ivana. No sólo me estás haciendo daño a mí, se lo estás haciendo a ella.

Los recuerdos explotaron en la cabeza de Ivana. Aquella noche en la que habían discutido. La víspera de su desaparición. No era felicidad lo que llenaba el comedor, de suelo de maderas húmedas y sucias, sino resentimiento y tristeza.

—¿Qué te pasa Iva? ¿No te alegras por mí? —preguntaba Yuliya mientras la contemplaba con sus hermosos ojos azules, ahora húmedos por la traición.

—Sí, sí me alegro.

—Entonces, ¿por qué me dices que no vas a ir a mi boda? Eres mi familia. Mi mejor amiga. ¡Te necesito allí!

—No puedo ir, porque no quiero que te cases con él —espetó arrepintiéndose de inmediato de haberlo dicho.

—¿Por... por qué? ¿Piensas que Alyosha pueda ser un hombre malo? Nunca te simpatizó. Me acuerdo...

—Estoy enamorada de él.

Aquella revelación había dejado fría a Yuli. Esta vez no pudo aguantar sus lágrimas prorrumpió en un llanto desconsolado. "Tenía que hacerlo. Tenía que decirle la verdad".

—¿Preferirías que yo no me casara con él para que tú sí lo hicieras? ¿Qué yo sufriera para que tu fueras feliz?

—No es así.

—Dime, ¿cómo es? Otra vez tienes que salir y quererlo todo para ti. Estaba muy equivocada en pensar que podía confiar en ti. Sigues siendo la misma niña egoísta de siempre.

—¡Yo no quise enamorarme de él!

—¿Cómo puedes amar a quien no conoces? —reprochó Yuli—. Sólo lo has visto apenas un poco cuando iba a buscarme. Jamás hablaste con él, no sabes lo que le gusta o lo que no, sus sueños... ¡Nada!

—Te olvidas de que sí lo sé. Tú no dejaste nunca de hablarme de él.

—¡Yo te lo conté porque eras mi amiga! ¡No para que te encapricharas con él! ¿No hay suficientes hombres en Krasnovishersk que me lo quieres robar?

—¡Yo no elegí amarlo!

—Pero si estás eligiendo abandonarme y hacerme daño.

—Por favor, chicas vamos a tratar de resolver esto. Mañana es un gran día para todos —intervino Olga tratando de calmar a sus hijas.

—¡No es un gran día para mí! Será cuando entienda que yo jamás podré ser feliz. Desde que papá murió, poco a poco he ido perdiéndolo todo. Los sueños, la vida y la felicidad. Si no fuera por Aleksey... ¡Por qué te tuvo que elegir a ti! ¡Por qué padre tuvo que morir y no fuiste tú!

Una bofetada de Olga en el mismo sitio en el que había sido bofeteada varias veces durante aquel día calló a Ivana. Había hablado más de la cuenta y lo sabía. Se odiaba por saber que realmente en un segundo había deseado en verdad que padre fuera quien estuviera vivo y no Yuli.

—¡Iros las dos al infierno! —exclamó Ivana mientras se daba la vuelta y salía corriendo de la casa.

No le quedaba duda alguna que ella había atraído a esa bestia de metal que había destrozado su casa horas más tarde. Aquellos negros pensamientos que rumió el tiempo que estuvo fuera, llorando por el desamor, la desolación de volver a perder a alguien que amaba.

Cuando regresó, buscó una bolsa de viaje donde guardar todas sus posesiones, que no eran muchas, e irse para siempre de Krasnovishersk. "No tiene sentido que después de hoy me quede", pensó.

Un temblor, cuya potencia fue en crescendo, la alertó que algo malo estaba por ocurrir. Unos sonidos mecánicos y olores a aceite quemado precedieron al derrumbe del techo de su casa. La bestia infernal introdujo su gigantesca zarpa y agarró a Yuliya, mientras Ivana, atrapada por una viga no podía hacer nada por evitarlo.

Su deseo se había convertido en realidad. El Diablo había ido a buscarlas. Lloró y gritó perdón hasta que un trozo de madera cayó sobre su cabeza y la dejó sin sentido. Lo siguiente que recordaba era despertarse al lado de Alyosha. Era como una pesadilla que engañaba a todos con la forma de un dulce sueño.

Ahora las palabras de Aleksey le recordaban todo el daño que hacía días llevaba haciendo. Había tratado de redimirse ayudándolo a encontrar a Yuli. Aunque en el fondo de su corazón, lo hacía porque quería seguir a su lado y vivir esa aventura que los había involucrado a los dos. "Era mi sueño. Mi maldito sueño".

—No podemos seguir juntos, Ivana. Esto no puede continuar.

—Por... por favor...

—Yo seguiré hasta Ekaterimburgo y rescataré a Yuli sin tu ayuda. Tú vuelve a Krasnovishersk. Allí, seguramente puedas estar para despedirte de tu madre.

—No me dejes tú también, Aleksey —rogó tirada en el suelo sobre sus rodillas con ríos de lágrimas manando de sus ojos—. Por favor, no me queda nada.

—Lo siento, Ivana —Aleksey sacó varios rublos y se los dejó en la mano—. Con esto, podrás pagar a algún mercader que te deje en tu casa.

Aleksey se dio la vuelta y se marchó por una esquina mientras Ivana caía sobre el césped llorando afligida por todo el dolor que había ocasionado. "Perdón, perdón, por favor. Perdón".

Mientras caminaba hacia la estación de trenes de Perm, Aleksey le daba vueltas y vueltas al beso de Ivana. ¿Por qué había tenido que hacerle eso? Ahora estaba confundido. ¿Había sido demasiado cariñoso con ella? Pero era lo que realmente sentía por Ivana. "La quiero como a una hermana", trató de convencerse.

Desde el primer momento en el que había comenzado su búsqueda por Yuli, algo había cambiado entre ellos. Aquella brecha que los había separado se había ido reduciendo hasta que el beso le hizo darse cuenta de que se había acercado demasiado. "¿Por qué me tiene que pasar esto? ¿Por qué ahora?", se reprendió.

—Tengo que rescatar a Yuli —dijo en voz alta—. Ella es mi prometida. No Ivana.

Había sido muy simpática con él. Le había hecho olvidar por un momento que se encontraban en la empresa triste y difícil. Había estado para él cuando había necesitado ayuda. Lo había animado cuando estaba a punto de desesperar. "¿Lo hizo realmente por Yuli? ¿O por conquistarme?".

¿Cómo podía ser imparcial? ¿Cómo podía dejar de lado que había arriesgado su vida para salvarlo del ejército rojo? Era más fácil fallar y ser apresado que salir de allí sanos y salvos. Si no hubiera sido por ella, él estaría muerto. ¿Era justo pagarle de esa forma?

—¿Por qué me hiciste esto? —se preguntó mientras se apoyaba contra una farola de gas y derramaba las primeras lágrimas en mucho tiempo.

¿La amaba a Yuliya? O era Ivana realmente a quién su corazón necesitaba. "No puedo traicionar a Yuli de esta manera. No cuando me necesita tanto", pensó.

Tenía que dejar a Ivana atrás. Tenía que alejarla de él. La soledad lo ayudaría a pensar en frío. Porque si la tenía cerca, iba a querer responder al beso. Y eso era algo que no podía ocurrir. "Ni ahora, ni nunca".

Continue Reading

You'll Also Like

370K 15.5K 36
Elena ama leer tanto como ser animadora, su sueño más grande es ser escritora, para ella su vida era perfecta, pero todo eso cambia en su último año...
15.3K 1.6K 11
¿Qué te dirías a ti misma si pudieses enviar cartas al pasado? Si quieres ver algunas ideas, estas son las cosas que quisiera decirme.
31.2K 1.9K 48
El amor es como el fuego: pasional, ardiente y capaz de quemarte. Arderemos en llamas cuando amemos de verdad. Vas a sentir fuego entre tus venas cua...
35.1K 2.9K 7
Dios te hizo perfecto, Perfecto para amar, Para sentir, Para vivir y para ser amado. Te dio una vida, Para respetarla, Para vivirla, Para sentirla. ...