*Flashforward*
El llanto de un bebé rompió el silencio de la noche. Lloraba con fuerza, mientras sus pequeños pulmones daban el máximo de sí mismos y soltaba hipidos cada poco. Algunas lágrimas caían sobre sus rosadas mejillas mojando su almohada y esto sólo hacía que el niño llorara aún más.
Pero esto no duró mucho. A los pocos minutos sintió como unos fuertes brazos le cogían con delicadeza y le sacaban de la cuna en la que dormía. El bebé fue poco a poco dejando de llorar, mientras apoyaba su cabecita en el hombro de su padre que se mecía de un lado a otro.
-Ssh tranquilo, pequeño -susurró Harry mientras acariciaba su espalda-. Como sigas llorando así despertarás a tu hermana. Y no queremos eso, ¿verdad?
El niño respondió hipando de nuevo, mientras su padre le tumbaba en el cambiador para revisar su pañal. Pero al parecer esa no era la razón de su llanto, y el ojiverde no tardó en saberlo por la manera en la que su hijo comenzó a chuparse el dedo pulgar.
-Tienes hambre, ¿eh?-habló otra vez el chico de rizos sabiendo que no obtendría respuesta-. Está bien, vamos a darte de comer.
Cogió al bebé de nuevo y cargó con él escaleras abajo, intentando hacer el menor ruido posible para no despertar a nadie en la casa. Se adentró en la cocina y, mientras con un brazo sostenía al niño, con el otro se dedicaba a preparar el biberón. Intentaba darse prisa antes de que su hijo comenzara a llorar de nuevo, pero realmente no era bueno en aquello debido a su poca práctica.
Cuando por fin consiguió su objetivo y hubo comprobado que la leche no estaba demasiado caliente, se dirigió al salón y se sentó en la mecedora con el bebé en sus brazos. El pequeño se tomó el biberón hambriento, mientras el sueño podía de nuevo con sus ojitos y estos se cerraban poco a poco. Harry esperó a que estuviera dormido completamente para llevarle de vuelta a su cuna.
Le acostó con cuidado de no despertarlo y le arropó con la manta. Después fue a ver a la otra bebé, que se encontraba durmiendo plácidamente abrazada a su osito de peluche. La arropó también para que no pasara frío y se quedó mirándola por unos segundos. La pequeña tenía el pelo rubio y los ojos celestes. Cada vez que la veía no podía negar su parecido físico con Louis, ambos tenían los mismos rasgos de la familia Tomlinson.
Sonrió viendo dormir a sus dos angelitos y regresó de vuelta a su cama para seguir durmiendo. En cuanto se metió otra vez entre las sábanas, el sueño pudo con él y se quedó dormido mientras abrazaba con su brazo al chico al que más amaba en el mundo entero.
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Hello lovely readers!! Aquí estoy de nuevo con la segunda parte de "El Secreto de Louis Tomlinson" :)
Probablemente no entendáis mucho el prólogo pero, como pone al principio, es un flashforward (salto al futuro). Es decir, esta escena es más o menos un año después del accidente.
En esta segunda temporada van a pasar cosas que probablemente nadie se espera jaja Intentaré no haceros sufrir mucho (? Y si quereis dedicaciones sólo debéis comentar. Le dedicaré los capítulos a los que sean más originales.
Bueno, nada más que añadir. Here we go! xx
-Faty