Estaba a punto de atardecer...
Me recoste en la plaza esperando, no, eso no era, trataba de encontrar algo que me haga cambiar de opinión, una razón, un motivo tal vez, pero no encontré ninguno...
Así que solo atine a sentarme y ver como desaparecía el sol, el cielo empezaba a tornarse de un naranja encendido y de rojo, yo solo podía pensar que sería la última vez vería un atardecer así, una vez más sentía que iban caer lágrimas pero mi orgullo no me lo permitía pero dentro de mi pensaba: "Pronto ya no estaré, que importa dejar caer más lágrimas"
Sentía el correr del viento agitando mi ropa, no había llevado chaqueta y sentía el frío muy dentro de mí, estaba a punto de volver a casa cuando...
- ¿Jaseth? ¿Eres tú?
- ¡Era ella! Tanto tiempo buscándola, aún sin verla... "sabía bien que era ella" ¡Su voz! Sabía que era muy tonto "¿Emocionarse por una persona que había visto solo una vez?" Pero no, yo sabía que no solo era eso, había algo más, algo que aún no entendía pero que todo dentro de mí explotaba por entender, volví mi rostro para mirarla, aunque tenía mucho de que viera en lo que me había convertido pero de pronto hubo algo que hizo que me olvidara de todo ¡Esos ojos! Mientras yo seguía estupefacto, ella me miraba con extrañeza y aún sentí en su mirada la pena de verme así, decidí no seguir mostrando mi debilidad y forcé una sonrisa y no oculte mi emoción- ¡Daniela!
- Sabía que eras tú - Sonrió con autosuficiencia -
- ¿Como? -Por un momento la miré extrañado, mi aspecto había cambiado totalmente, mi cabello, que dicho sea de paso era muy largo cuando la conocí ya no estaba, además que me encontraba mucho mas delgado, no le encontraba sentido a que me reconociera de espaldas.
- Tienes un lunar en el cuello -Sonrió - Lo vi la última vez... - Y paró, entendí totalmente porque-
- ¡Oh! Eso era ¿Sabes? Eres la primera persona que lo nota -Dije sonriendo con melancolía, pero vi como lágrimas caían por su rostro.
- Yo... Lo.. Lamento, yo debí... -Seguía llorando y le costaba seguir hablando-
-Lleve mis dedos a sus labios y sonreí- Gracias, si no hubise sido por ti, habría muerto pero...
¿Porqué desapareciste? -Por mucho esfuerzo que hice el dolor al preguntarlo era evidente-
- Yo... Quise, quería volver pero... No pude.. Quería saber como te encontrabas, pero no pude y acabo de volver, algo me decía que estarías acá... pero yo.. yo no quería -Y siguió llorando esta vez se cubrió el rostro son sus manos.
-Esta vez hice un gran esfuerzo por ponerme delante de ella, tomé sus manos y las cubrí con las mías- ¡Gracias! De verdad, yo entiendo.
-Ella sorbió sus lágrimas y se limpió los ojos y tomó mi mano- Al verte puedo entender porque sufres ¿Sabes,
cual es el mejor remedio? -Puso sus dedos en mi frente sonriendo.
- ¿Cuál? -Pregunté también sonriendo-
- Suspiro un momento y luego se acerco a mi oído y con un susurro puede oír- Soñar.. -Pude sentir su sonrisa en mi oído-
Un calor comenzó a crecer dentro de mi, pero esta vez en forma de ira ¿Soñar? No, yo ya no podía, cuando obtuve esta estúpida enfermedad se acabaron esos sueños para mí, mis sueños ahora eran una pesadilla cada noche yo... Soñaba, soñaba que era libre, que podía volar, soñaba que podía ser feliz... Pero no, cada día me levantaba en la cama ¡Más débil, que el día anterior! Y cada día era lo mismo. No, los sueños solo servían para hacerte perder la realidad, quería llorar pero no delante de ella, así que una vez más me aparte con el dolor en cada parte del cuerpo.
- Lo siento, me tengo que ir -Esta vez no pude fingir una sonrisa en mi rostro- Ya.. es tarde.
Caminé lo mas rápido que pude, esperando dejar de una vez todos estos sentimientos «JA ¿Soñar?» Volví a repetirme, ya no volveré a tener sueños. Ya había salido la luna, fue tan raro, esa sensación, Era... "¿Luna llena?" Al mirarla sentía como si me estuviese llamando, por alguna razón eso confirmo mi decisión.
Estaba a punto de doblar la calle y llegar a mi casa cuando...
- Espera, por favor -Era ella de nuevo sonaba angustiada, no entendí como me había alcanzado tan rápido, es mas ni la había sentido acercarse-
- Lo siento estoy apurado -Dije con sorpresa, no entendía porque pero sabía que no quería decir esas palabras, aún si seguí caminando en dirección opuesta-
- "Si pudieses creer, si confiaras en medio de la oscuridad" ¿Recuerdas? Si tan solo... - Comenzó a decirlo como si rogase algo - Si tan solo creyeras... Si tan solo confiaras podrías volver... ¡Podrías volver a recuperar tu vida! ¿Porque...? ¡¿Porque te rindes?!
- Esta vez levante yo mi voz - ¿Volver a confiar? ¿Volver a tener esperanza? Tú... ¡Tú no sabes lo que es levantarse sin vida! La vida no es... ¡Ha pasado mas de un año! La vida no es solo sufrimiento y tristeza.
- Pero forma parte de ella, vivir es darte cuenta de que puedes superar -De repente sonó como un susurro- Yo lo sé... lo que es querer algo y no poder tenerlo, conformarse con esperar y he resistido... He comprendido que ni la muerte en vida puede superarlo, cuando de verdad amas algo... Yo he esperado... ¡Lo suficiente, para decirte que eres estúpido al creer que no vale la pena vivir!
- Simplemente no la escuché - Eso creés tú, pero yo... Ya no puedo más -Lloré con impotencia- Ya no hay vida para mí... Lo escuché... Cuando el doctor decía que no resistiría, esta vez no se trataba de voluntad, mi cuerpo ya no aguanta más y yo no puedo seguir aferrando a mi familia, lo siento. Adiós.
- "So.. Somos infinitos" -Dijo como un susurro-
- ¿Qué? -Volví mi rostro a verla, otra vez sus ojos verdes y otra vez ese calor en mi- Tal vez lo seamos -Dije- Iré a descubrirlo -La miré y sonreí por ultima vez.
- Te estaré esperando -Dijo como un grito ahogado- No entendía porqué, si sólo nos habíamos visto dos veces pero parecía que separara mi alma.
Dentro de mí me respondí « Y yo iré a buscarte » Lo dije con total seguridad y no entendía el porqué pero decidí que sin importar que no dudaría de mi decisión.
Cuando entré a casa mis padres ya habían regresado, seguro mi hermano llegaría en la madrugada, otra vez mi corazón comenzó a dar un vuelco con cada recuerdo ¿Daniela? Solo dos veces me bastaban para mantenerme así, dudando de mi decisión "No, es lo mejor... Para todos" Solo me quedaba esperar a Benjamin, así que dedique el resto de la noche preparando todo para cuando se enteraran, había dejado una carta con indicaciones para mi hermano donde le pedía que abriera ese diario, era lo único que podía dejar para mi familia antes de irme, esperaba realmente que eso les ayudara a superarlo, cuando mi hermano llegó le dije que me escaparía "Como en los viejos tiempos ¿Recuerdas?"
- Claro, pero solo era yo el que lo hacía ¿A donde irás?
- A visitar un viejo escondite con Benjamin, ya tu sabes - Le di un guiño de ojo sonriendo-
Lo abracé antes de intentar hacerme el dormido, intente retener las lágrimas pero no podía ellas brotaban sin poder contenerme.
- Jaseth, no importa lo que vallas a hacer siempre seré tu hermano, te ayudaré no te preocupes.
Yo seguí inmóvil tratando que no descubra como me retorcía por dentro, pensando que al final se sentiría culpable, aunque sé que él entendería.
Sonó la ventana a medianoche, yo ya sabía quien era, Edward, mi hermano, aún dormía.
Me levante tomé mi mochila y corrí a bajarme por el árbol que había junto a mi habitación.
Adiós mamá..
Adiós papá..
Adiós Edward..
Intente parar las lágrimas, pero no pude, Benjamin me ayudo a bajar sin decirme una sola palabra.
Solo había una palabra en mi cabeza. Adiós...
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Hola a todos ^^
Sé que estos capítulos son muy tristes ¿Alguna vez han conocido alguien así?
Espero que le halla gustado, no soy Emo ni nada parecido en realidad soy alguien muy positivo, pero hubo un libro me dejo un concepto muy marcado "Para descubrir la verdadera felicidad de tener algo, uno debe experimentar el peor dolor de sentir que lo ha perdido todo" - El conde de MonteCristo- ¿Alguno lo ha leído? Si no, se los recomiendo es buenísimo.
Chicos, me gustaría saber si les ha gustado y es mas me encataría saber que opinan, Como les dije ahora seré mas consecuente y si por ahí alguno lo ha leído después de tiempo lo lamento pero les recomiendo que lo vuelvan a leer para que sientan eso que siento yo al escribirlo, muchísimas Bendiciones a todos.