-Las personas que atentaron contra lo más valioso de mi vida? Y que asesinaron a uno de mis hijos? Por mi hagan lo que quieran, hace mucho que dejé de sentir algo bueno por ellos.
-Con luz verde, adelante entonces!- exclamé.
Llamé a nuestros abogados, se entabló la demanda contra los Lee, SungMin tuvo que asistir a los juzgados a pesar de que traté de evitarlo, era necesario.
Pasamos un par de momentos amargos ya que los Lee intentaron pelear la custodia de SungHyun alegando éramos padres prematuros... muy jóvenes. Las cosas no ayudaron mucho cuando en plena corte me arrojé sobre el padre de Min golpeándolo hasta que los policías me sometieron, el muy imbécil se atrevió a decir que SungMin había atentado contra nuestros hijos logrando perder a uno de ellos, lo que logró que min se alterara, no lo soporté y me lancé sobre el, para mi fortuna tuvo que ser hospitalizado porque según desvié su mandíbula por el golpe y perdió unas cuantas piezas dentales, me hubiera gustado perdiera más que eso.
Fue difícil pero gracias a que el empleado de los Lee, Kangin declaró junto con su amigo el doctor que atendió a Min en su embarazo y el doctor de los Lee, también algunos otros empleados se atrevieron a declarar a favor de Min, como era de esperarse mis padres usaron toda su influencia.
El caso se ganó, los Lee tenían 2 opciones: Ir con una condena de 30 años a prisión por varios delitos, o despedirse del 40% de su fortuna.
No estuvimos muy conformes, pero al menos cualquiera de las 2 opciones acabaría con ellos, total todo el país se enteró de su horrible y enfermizo trato a su hijo y nietos.
Ahora SungHyun cuenta con una buena fortuna que lo respalda ya que Min y yo decidimos que lo dejaríamos en una cuenta bancaria para proteger su futuro, nosotros le daríamos todo, pero tampoco podíamos confiarnos.
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Ya había pasado más de un mes desde que el caso se ganó. Min había regresado a mi lado, se puede decir que seguíamos siendo novios, claro está que no podía dejarlo así.
Con ayuda de mis padres, organizamos una cena e invitamos a todos nuestros familiares. Le dije a SungMin que era para festejar el cumpleaños de Yesung (el cual ya había pasado pero el no tenia porque saberlo aún).
Al ser una noche especial, teníamos que vestir especial.
-Será algo muy elegante?
Preguntó mientras el diseñador le tomaba medidas en la espalda para hacer el traje. Nuestro SungHyun también se luciría esa noche.
La noche llegó unos días después. Había cerca de 200 personas, todos familiares y amigos. Todo mundo sabía el real motivo del evento pero se les pidió discreción. No lo hacían muy bien ya que todos sonreían ansiosos y veían a SungMin para murmurar entre ellos.
Cerca de las 10 pm las luces del recinto se apagaron, en las mesas de los invitados brillaba la tenue luz de las velas que recién se habían encendido rodeando los centros de rosas rosas, dando un toque de ensueño y romántico al lugar.
Todos enmudecieron, tomé de la mano a SungMin y lo llevé al centro del salón en una pista pequeña justo en medio de todos los invitados, una suave luz blanca apuntó hacia nosotros, SungMin apretó su agarré y me miró, su mirada casi podía leerse un "qué diablos está pasando"? miró a su alrededor, todos sonreían y quienes eran parejas se tomaban de las manos y se abrazaban.
-Desde la vez primera que te vi entrar al salón de clases... -dije tomando un micrófono para ser escuchado- me cautivaste. Pero mi corazón fue arrebatado cuando me sonreíste y te sentaste frente a mí.
Decidí que tenías que estar en mi vida y fue como me acerque a ti y nos hicimos amigos, tu forma de ser, tu sonrisa, tu dulzura... terminó por conquistar hasta mi último rincón. Te pedí que fueras mi novio. Aceptaste y creí que me habías hecho el hombre más feliz del mundo... no era tan cierto, sí lo hiciste pero eso fue tiempo después cuando le diste a mi vida un nuevo significado... -miré en dirección a mi madre quien en sus brazos cargaba a nuestro hijo y SungMin miró también a su dirección- me has concedido la dicha del ser padre, me falta mucho por aprender pero daré lo mejor de mí, para que a mi hijo y los que vengan nunca les falte nada, y a ti, protegerte como el tesoro más preciado de mi vida y amarte hasta mi último suspiro, incluso más allá. Me has dado los años más felices... pero no quiero que termine.
SungMin llevó sus manos tapando su boca mientras un par de lágrimas corrían por sus mejillas... sabía lo que venía.
-Mi familia sabe por lo que has pasado, o parte de ella... por eso los he reunido aquí... esas personas te han hecho mucho daño y sé que es muy duro para ti, por eso mismo te pido... que abandones el nombre Lee...
Me arrodillé frente a él y tomé su mano...
-Para tomar el nombre Cho.
-Oh Kyu!!- dijo al ver que del bolsillo de mi saco saqué un anillo de compromiso.
-Lee SungMin... quieres ser casarte conmigo?
-Acepto Kyu!! Acepto!!
Se tiró sobre mí y me besó, sentía sus lágrimas mojar mi rostro, me levanté abrazándolo por la cintura y alzándolo a mi altura quedando él a unos centímetros del suelo.
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Sonaba de fondo una hermosa canción [White love story - As one ] él rodeaba mi cuello mientras yo le tomaba de la cintura y le cantaba al oído. No había dejado de llorar desde que aceptó mi propuesta.
-Prometo hacerte la persona más feliz del mundo y compensar con creces por lo que has pasado...- dije al terminar la canción y besar su frente.
-Estar contigo es suficiente recompensa, Kyu. Pero si quiero pedirte algo que realmente quiero que cumplas y yo te ayudaré...
-Pídeme lo que desees amor.
-Él es el otro amor de mi vida- dijo mirando SungHyun- él representa mi amor por ti y tu amor por mi....
-Así es...
-Así que te pido que como hasta hoy lo has hecho.... Protege nuestro amor.
Esa noche todo mundo aplaudió al recibir el "sí". Recibimos muchas felicitaciones y todos prometieron regresar para nuestra boda, definitivamente ese fue uno de los días más felices de mi vida... porqué aún venían más.
Fin?
Gracias por leer! <3