--Mi nombre es No. Mi signo es No. Mi número es No. Tu necesitas dejarlo ir, tu necesitas dejarlo ir. Necesitas dejarlo ir --canto como loca mientras limpio la casa
¿Por qué?
Por pendeja, podría ser.
No. Por qué la señorita Peregrine me invitó a ir con los demás y ella a un paseo por la isla. Pero yo no tengo ganas, así que me pidió que si ne iba a quedar al menos limpiará la casa un poco. Y, obviamente, nunca puede faltar la música. Últimamente me ha gustado mucho escuchar musica, es una forma de escapar de mi realidad donde ya no están ni Abe ni Mark, y tampoco está mi novio, con quién, por cierto, sigo en malos términos. Al menos ya no es tan incómodo.
--Todas mis chicas escuchen --canto mientras lavo los platos, lo último en mi lista--. Si ese chico no se rinde. Lame tus labios, y mueve tus caderas --bailo sensualmente, después de todo estoy sola en cada--. Chica todo lo que tienes que decir es: Mi nombre es No, mi signo es No, mi número es No. Tu necesitas dejarlo ir, tu necesitas dejarlo ir. Necesitas dejarlo ir --termino con los platos y tomo el trapo de limpiar para hacer algo mientras termina la canción. No me gusta dejarlas a medias--. ¡Mi nombre es No! ¡Mi signo es No! ¡Mi número es No! Tu necesitas dejarlo ir, tu necesitas dejarlo ir, necesitas dejarlo ir --tomo aire--. Gracias de antemano, no quiero bailar <Nop> No necesito tus manos sobre mi. Si quiero un hombre, entonces voy a conseguir un hombre. Pero nunca es mi prioridad. Estaba en mi zona, antes de que llegarás. No quiero que te tomes esto como algo personal. Estoy como: No a la ah, no a la ah, a la no, no, no. ¡Todas mis chicas escuchen! ¡Si ese chico no se rinde! ¡Lame tus labios y mueve tus caderas! ¡Chica todo lo que tienes que decir es:...! ¡Mi nombres es No! ¡Mi signo es No! ¡Mi número es No! Tu necesitas dejarlo ir, tu necesitas dejarlo ir, necesitas dejarlo ir --sigo cantando mientras muevo las cosas y me aseguro de limpiar bien. Creo que empezaré a quedarme sola más tiempo, esto me está gustando--. Me siento: intocable. Me siento: intocable. Me siento: intocable. Me siento: No a la ah, a la no, no, no. Me siento: intocable.
--¿Intocable? --lanzo un grito al escuchar otra voz. Más rápida que la luz me volteo y veo a Enoch mirándome atentamente desde el marco de la puerta. Me sonrojo--. ¿Así te sientes? --se burla.
--¿Que haces aquí? --pregunto poniendo pausa a la canción.
Enoch se acerca a mí.
--Ese collar es nuevo --mira atentamente el relicario que cae entre mis pechos--. No lo había visto, es lindo.
--Responde la preguntó, Enoch --lo miró con suspicacia--. De suponía que estaba sola aquí.
--No, me quedé también --me sonrió, mientras se pasea por la cocina para tomar algo del refrigerador.
--Bien, estaré en mi cuarto, si necesitas algo --me estire para tomar mi grabadora que estaba en la mesa junto a Enoch, el no se inmutó ni en lo más mínimo.
--Lo siento --suelta de la nada--. Se que lo que hice es horrible, y tú no merecías eso. Y ya me disculpé con Mark, así que dime: ¿Que puedo hacer para que me perdones?
--La humillación que sentí. Estaba tan humillada, insinuaste que Mark y yo teníamos algo frente a todos. Y aunque se que no es así.... Simplemente me sorprendió, creí que habías cambiado.
--Y lo hice, Lya, tu me cambiaste --se acerca a mí--. No quiero perderte.
--No se siente correcto --murmuro mirando a otro lado.
--Solo piénsalo, por favor, yo te.... --lo mire sorprendida, iba a decirlo--.... Yo te quiero mucho.
--Yo también lo hago --beso su mejilla para irme--. Lo pensaré --la aseguro.
¿Que vas a pensar? Si solo tienes que decirle: te perdono y ya, wey.
No están sencillo. Aún duele.
Todos herimos a las demás personas sin si quiera saberlo. A menos el reconoce su error.
Tienes razón.
Subí a mi cuarto sin mucho ánimo, ahora el saber que estoy con Enoch, sola, en la casa, cuando unos días antes habíamos acordado que después de que todo pasara tendríamos sexo. Y ahora ni siquiera nos hablamos. Ni un poco.
Deje el relicario en la caja con sumo cuidado, no quiero que se rompan. También tomo una toalla, y camino al baño. La de los tatuajes dijo que tenía que lavarlos con mucho cuidado aún cuando no me dolieran. Así que me los lavo cada tres días. Por qué si duele un poco.
Entre al baño y cerré con seguro, no quiero tener la clásica escena de libros donde el chico entra al baño justo cuando la chica se bañando. No, ni loca.
Me despoje de mi ropa, sintiéndo la mejor sensación cuando al fin me quite el bra. Baje con cuidado mis bragas, y metí toda mi ropa al sesto de ropa sucia, Escondiendo la interior entre las otras.
Corrí la cortina y entre, abrí la llave, y espere por el agua. Era fría, pero así me gusta.
Siento las gotas mojando todo mi cuerpo, y un escalofrío recorre todo mi cuerpo. Es relajante al menos. Deje escapar un suspiro, y comencé a tallar mi cuerpo con mi esponja privada.
Una vez limpio mi cuerpo cerré la llave, para tomar un poco de shampoo, y llenar todo mi pelo de el. Empecé a tallar mi güero cabelludo con fuerza, para evitar la caspa. Una vez listo, enjuague mi pelo, y volví a cerrar la llave, tome el pomo de crema para los nudos, y me la embarre en el pelo, en la parte de abajo. Una vez listo, volví a lavarme el pelo.
Salí de la ducha cerrando la llave por tercera vez, toma la toalla y la enrede en mi cuerpo, otra vez el escalofrío al sentir mi piel desnuda rozar con la tela de la toalla. Abrí la puerta y salí por el pasillo dejándola abierta, si puedo, siempre suelo bañarme cuando no ahí nadie.
Entre a mi habitación con cuidado, y cerré la puerta. Busque mi ropa holgada y cómoda, e decidí no usar bra, ya fue mucho por un dia
Una vez lista y cambiada me recosté en la cama, pensando que hacer. Podría leer en la pequeña biblioteca, aún tengo algunos libros que no he leído. O también puedo salir al jardín. O hornear algo. Podría hacer cualquier cosa, supongo.
Alguien toca la puerta.
--Pase --grito. Estoy tirada en la cama en posición de estrella, y con la mirada perdida en el pecho
--¿Estás bien? --pregunta Enoch, mirándome con preocupación.
--¿Desde cuándo tocas? --le regrese la pregunta evadiendo la otro. Mi voz sonaba distante y aburrida, es uno de esos días donde simplemente te sientes desanimado, sin ganas de hacer nada. Al menos ya nada.
--Supongo que desde ahora --suspira resignado--. No contestaste mi pregunta.
--¿Te parece que estoy bien? --levanto una mano y me señaló. El niega--. E ahi tu respuesta. --vuelvo a mirar el techo, como si fuera lo más asombroso del mundo. Enoch se sienta a mi lado, no me muevo--. ¿Necesitas algo, Enoch?
--No sabes cuánto extrañas algo asta que deja de pasar ¿No? --susurra melancólico. No digo nada--. ¿Me seguirás ignorando?
--No te ignoro, simplemente no tengo nada que decirte --le respondo aún mirando el techo.
--Pues yo tengo mucho que decirte.
--Te escucho....
No dice nada. Y yo tampoco hago por hacerlo, realmente no estoy de humor para nada, y solo quiera que regresen los niños para distraerme con Horace. Le prometí que haríamos ropa para los demás.
--¿Quieres salir conmigo? --pregunta de la nada
--¿Que?
--Si. Déjame arreglar esto.... ¿Mañana a las 7?
Sonrió ligeramente. No habíamos te ido una cita formal desde la vez que me pidió ser su novia.
--Si, mañana a las 7 --confirmo. Enoch sonríe y se inclina sobre mi para besarme. No me quitó, al contrario, tomo su cuello.
El beso es lento, lleno de sentimientos, pero sobre todo lleno de añoranza, ambos extrañamos estar juntos. Enoch acaricio mi mejilla, y lentamente se fue levantando, asiendo que yo tambien lo haga
--Asi que... ¿También me extrañabas? --se burla de mi
--Oh, cállate, maldito fanfarrón --le dio un golpe en el brazo--. Al menos empezaremos el bucle de buena forma
--Si, empezaré el bucle con mi novia --toma mi mano.
--Ya es algo --asiento sonriéndole.
•••
Los niños y la señorita regresaron justo a tiempo. Salimos e hicimos exactamente lo que nos dijo. Nos pusimos mascaras de radiación. Lo que nos asusto, pero nos aseguro que estaríamos bien. La lluvia empezó a caer. Y oímos claramente como los aviones se acercaban.
Nos asustamos. El avión paso por arriba de la casa, y dejo caer la bomba, la música que la señorita Peregrine puso se pauso, y empezó a ir para atrás, junto con el agua, y la bomba, y el tiempo. El día paso frente a nuestros ojos, asta llegar a la noche del 2 de septiembre.
--Listo, aremos esto todos los días a la misma hora ¿Entendido? —asentimos todos.
Nos quitamos las máscaras, y poco a poco entramos a la casa.
—Ahora a cenar, mañana empezaremos con las tareas diarias.
A ver, primero que nada me tiran las trincheras
*Las tiran*
Dije que todas, si te veo a ti
*La tira*
Ahora los cuchillos, si, ya se los vi
*Los sacan*
Nononono, a mi no me hacen pendeja, tiren también el hacha, pinches Fives
*Tiran las hachas*
Gracias :) se les quiere.
Mu been, ahora les explico: me bloqueé. Ya, esa es la explicación :P
Por cierto, si han leído los libros de Harry y los invito a leer mi nueva historia basada desde el quinto libro.
Resumen:
"Caliope Lost, no tenía idea que su vida se vendría abajo el dia que un grupo de Mortifagos llegaría a su casa y acabaría con su familiar. Ahora, ella y su hermano pequeño se irán a vivir con sus tutores legales: Los Weasley."
Está basada 100% en el libro, y desde el quinto. Y el Harry X Tu, osea Caly.