ATENCIÓN!!!! El siguiente capítulo contiene escenas para mayores de 18, no es la gran cosa porque tiempo al tiempo, pero quiero avisar y evitar historias. Así que leer bajo vuestra responsabilidad. Las escenas "subidas de tono" iniciarán después de que aparezcan estos tres emojis 🍋🍋🍋. Además el capítulo es más largo de lo habitual. Disfrutad.
SUPER MARATÓN 9/13
HyunJin seguía embriagado en la maravillosa cercanía con su Omega, ignorando el ritmo acelerado de la canción de BTS de fondo y comenzando a tener sentido que se balancearan con parsimonia cuando comenzó a sonar una canción de TXT.
Las grandes manos del Alfa dando caricias de palmas abiertas a la pequeña espalda de JeongIn tenían al menor ronroneando junto a lo placentero que era inhalar en cada respiración el aroma de HyunJin. Su mejilla derecha apoyada en el pecho amplio y fuerte del mayor se restregó con vehemencia y cariños.
HyunJin soltó una risa baja que logró escuchar al tenerlo cerca de su oído. JeongIn, que seguía en la ligera nube del alcohol y la movido por la compañía y risita bonita de su Alfa, elevó su rostro hasta que ambos se miraron a los ojos. El Omega rompió la distancia entre ambos hasta pegar sus labios con dulzura.
HyunJin correspondió encantado el beso cuando el menor comenzó a mover sus labios con tonos nada tímidos y jugosos. Para el momento en que tenían sus labios ya húmedos, JeongIn sacó su lengua con valentía hasta hacer presión entre los labios del mayor y colarla en la boca ajena. HyunJin se separó de golpe
-No Innie. -Susurró alejándose más de él. El Omega se avergonzó, sintiéndose ligeramente humillado y rechazado, bajó su cabeza viendo de nueva cuenta sus pies.
Pérdido en su incomodidad repentina tan solo se dejó guiar por el mayor fuera de la sala donde seguía sonando la música y gritos de los demás. JeongIn sintió el frío de la noche rodearlo cuando salieron a la calle y comenzaron a caminar unidos por sus manos entrelazadas.
Tal vez había cometido un error, tal vez su Alfa no quería sus besos o había sido irrespetuoso al tener él la iniciativa. Tal vez se había equivocado y HyunJin se había enfadado con él.
Al entrar a una nueva casa el menor seguía lamentándose y no elevó el rostro hasta que, al ingresar en una habitación, el aroma en exceso a lima y menta le golpeó haciendo ronronear como cachorrito a su lobo interior.
Estaba en la habitación de su Alfa, algo que llevaba tiempo y confianza lograr ya que invadidas su territorio, pero allí estaba JeongIn; jugando con sus manitas y volviendo a ver al suelo cuando la pesada mirada del Alfa cayó en él.
-Ten. -Le tendió algo de su ropa. -Entra al baño y cámbiate. -JeongIn obedeció temiendo hacer enfadar más al mayor y se cambió de ropa viéndose al espejo. Era obvio el rechazo del Alfa cuando vio su rostro sonrojado y esos ojos aguados además de sus frenillos en los dientes.
Aguantando la congoja salió del baño al cuarto para encontrarse de frente con el Alfa.
-Cachorro, iba a tocar porque tardabas mucho. ¿Estás bien? -JeongIn asintió no siendo creíble cuando comenzó a llorar de golpe en silencio. El pecho del mayor se contrajo por el susto. -Bebé. -Le llamó arropándolo contra su pecho. -¿Por qué lloras? ¿Qué pasa? -JeongIn dudó sin responder, pero el tono preocupado le hizo hablar.
-Lo siento Alfa, lo siento si he hecho mal al besarlo...yo... -HyunJin se apresuró a tomar su rostro y elevarlo para conectar sus miradas. Con suavidad pasó sus pulgares retirando las lágrimas cristalinas del menor.
-No he querido que nos besáramos allí porque no quiero que nadie vea tu preciosa carita cuando hacemos algo tan íntimo. -Susurró acercando sus rostros hasta rozar sus narices, el cálido aliento del mayor rozando sus labios. -Eres mi Omega y me encanta que me tengas la confianza para besarme o abrazarme mi príncipe.
JeongIn soltó una risita rota deteniendo sus lágrimas de pena y cambiándolas a unas de alegría. Con la euforia burbujeante de esa declaración volvió a besar al Alfa, sintiendo esta vez al instante como correspondía e invadía su boca con parsimonia. Sus lenguas dando el primer toque que fue delicioso y que provocó chispas a su ser mientras sus lobos aullaban en sincronía.
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HyunJin sujetó con fuerza sus caderas apretándolo más sus cuerpos y el menor rodeó su cuello a la par que ladearon sus cabezas para intensificar el beso. Era tan embriagador la mezcla de sus aromas, la dulzura empalagosa de JeongIn y la frescura cítrica de HyunJin demostrando en su esencia las ganas de más, de sentir más, de fundirse más.
JeongIn apretó sus manos en la nuca del Alfa a la par que este los conducía a la cama y dejaba de forma delicada al menor en el centro de esta con facilidad gracias a su fuerza innata. Una de las piernas de HyunJin se coló entre las del menor por la postura cercana y finalmente, el beso demoledor que ninguno quería romper no aún les faltara la respiración, se detuvo con un gemido del Omega al, el muslo del mayor, rozar su miembro.
HyunJin miró con adoración la boquita del menor ligeramente abierta inhalando con fuerza, sus finos labios rojos y ensalivados por la mezcla de ambas salivas y el hilo de la misma que unía sus bocas. Bajó su vista al cuerpo que lucía mucho más pequeño vestido con esa camiseta y pantalón de deporte suyo; era maravilloso saber que su Omega olería a él y portaba su ropa.
Los ojos de JeongIn se abrieron y captó el instante justo en que HyunJin miraba con las pupilas dilatadas su pene semi erecto y como, determinado, llevaba una de sus manos al pequeño bulto para tocarlo sobre la tela.
-Hyung... -Gimió quedado el menor con las mejillas, cuello y orejas rojas. Era tan vergonzoso, le ponía muy nervioso, pero cómodo y a la vez excitante...se sentía tan bien ser tocado y estar aprisionado bajo el cuerpo de su mayor.
-Shhh. -Susurró de cuenta nueva sobre sus labios y viendo directo sus ojos. -¿Me detengo? -Preguntó haciendo un poco más de presión en sus caricias a la intimidad del menor. JeongIn negó frenético y se sostuvo ahora a los hombros de HyunJin. -¿Te has tocado alguna vez Omega? -El cuestionado volvió a negar mordiendo su labio inferior cuando quiso gritar ante la corriente de placer en su interior, sus piernas se abrieron más por instinto y HyunJin no perdió la oportunidad de colarse entre ellas.
HyunJin dejó de acariciar el miembro ya duro de su mejor, sintiendo el propio doler ante la imagen lasciva. Llevó su mano derecha al su mejilla ahuecándola y sosteniendo su peso con su brazo izquierdo. Viéndose a los ojos comenzó un ligero vaivén que hacía rozar sus penes sobre la tela de sus pantalones.
Los jadeos de ambos se fueron intensificando con la presión dura que sentían y mandaba estragos de placer a sus centros, JeongIn comenzó a gemir y sentir sus manos picar. Quería ver a su Alfa, su bello rostro y ese lunar que adoraba bajo su ojo izquierdo. Con delicadeza retiró su largo cabello rubio hacia atrás y entrelazó sus manos tras su cabeza como pinza al cabello sedoso.
HyunJin sonrió apresando los labios ajenos con mordidas, succiones y lengüetazos a la par que intensificaba las falsas embestidas. JeongIn ahogaba sus gemidos en la boca ajena sintiendo su trasero empapado por el lubricante natural y elevando sus piernas hasta rodear con ellas las caderas del mayor. HyunJin gruñó mordiendo con fuerza su labio inferior y se sujetó con ambas manos del cabezal de la cama.
Sus lenguas jugaban fuera de sus bocas, de forma observan y haciendo sonar chasquidos a la par que la cama rebotaba contra la pared cuando HyunJin comenzó a ser constante, rudo y ejercer presión con su duricia en el trasero del menor. Bastaron unos minutos así para que JeongIn se retorciera gimiendo alto y curvara su espalda al llegar al orgasmo. Alargando el placer de su Omega, HyunJin siguió rozándose hasta llegar a su propio clímax.
-¿Estás bien? -Preguntó con la respiración agitada el mayor, bajando de sobre su cuerpo y tumbándose a su lado. JeongIn solo logró asentir, sabía que su voz saldría con temblores pues su cuerpo aún estaba agitado. -Ven. -Pidió abriendo sus brazos y recibiendo al instante el cuerpo ajeno ente ellos mientras reposaba su cabeza de lado sobre su pecho. HyunJin comenzó a dar mimos y caricias a su cabello, su nuca, sus orejas y su espalda. -Buenas noches mi príncipe. -Susurró sobre su coronilla antes de besarla.
-Buenas noches mi príncipe. -Repitió cansado y sacando una enorme sonrisa al mayor.
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Nota: El primer "encuentro sexual" de nuestro bebé debía ser sencillo y cute, sorry babys... Ya habrá tiempo de más 😏😘