4 años después
El reloj sonó a las 6:00 a.m. en punto y lo apagué, totalmente fastidiada. Apenas lo hice, me quedé dormida de nuevo. No sé cuánto tiempo pasó hasta que me levanté porque alguien estaba saltando en mi cama y llamándome.
-¡Mami! ¡Mami! ¡Mami! ¡Despierta que vas a llegar tarde al trabajo!
Era mi hija: Andrea Grey.
-Cinco minutitos más, pastelito y ya bajo.
En eso, siento que ella baja de la cama y alguien tira de las sábanas con fuerza.
- ¡MEREDITH CAROLINE GREY, YA SON LAS 7:00 a.m., LEVANTATE DE UNA VEZ!- Era mi mamá.
Me levanté tan rápido que casi me caigo de la cama, provocando la risa de mi hija.
Me dirigo a la ducha a tomar un baño rápido. Al bajar, junto con mi mamá y mi hija, veo que soy la única de mi grupo que estaba ahí.
-¿Y los demás?- pregunto
Mi mamá me mira con cara de molesta y me comienza a decir.
- Derek y Mark se fueron más temprano y Alex se fue hace unos minutos. Tú eres la única que falta, así que apurate en tomar el desayuno. Me gustaría quedarme con mi nieta hoy, pero tengo que apoyar al Mercy West. Yo la paso a recoger después de la cirugía.
Sí, mi mamá ya no trabaja más en el Seattle Grace, se retiró hace poco para escribir libros, pero apoya en otros hospitales.
Tomo mi café y me llevo unos panqueques para más tarde.
- Vamos hija, vamos al trabajo de mami, chao ma. Andrea, despídete de la abuela- digo cargandola y agarrando su maleta, en donde ya habían puesto una caja de jugo, agua, algunas frutas y algo de comida.
- Adiós abue, salva las vidas de las personas- dijo mi hija
-Chau, pequeña, chau Mer- la escuché decir.
La subi al carro y le puse su cinturón de seguridad. Cuando me subí al asiento de conductor, voltee a chequear que todo estaba bien. Encendí el carro y me dirigí al hospital. Felizmente el tráfico jugó a mi favor y llegué a tiempo. Lo estacione, salí y fui a sacar a mi hija, las cosas de ella y las mías. Al entrar la llevé a la guardería y de ahí a cambiarme. Hoy comenzaba uno de mis sueños: volverme cirujana en el hospital donde trabajó mi mamá y darle un futuro mejor a mi hija.