PoV Genesis:
Gracias al cielo mis hermanos no se enteraron de que estuve con Nathan.
¿Cómo es que de un día para el otro una persona puede cambiar tanto?
Mi cabeza iba a explotar si seguía dándole vueltas al asunto, pero es que no podía sacarme de la mente la historia de Nathan y el hecho de que también le conté mi historia al bobo.
"Creo que le gustas al sexy playboy" es verdad Nathan era un playboy y tal vez había inventado toda esa historia, y yo como una tonta caí en su juego y le conté mi secreto. Estoy frita.
Por suerte mañana sería viernes y no lo vería por dos días, eso era un alivio.
Me metí a la ducha y dejé que como siempre el agua lavara mis problemas por lo menos por un rato. Salí y me puse mi pijama.
Estaba por dormirme, y mi celular suena. Un mensaje.
“Que descanses hermosa, te veo en la escuela Nathan.”-
¿Qué le ocurre a este chico? Tiene algo mal en la cabeza.
Me dejé caer en mi cama y me dormí profundamente. No quiero despertar nunca más, Nathan dió vuelta mi mundo por completo.
Cuando llegué a Londres no esperaba tener que lidiar con todo esto. No quiero que me pase lo mismo que con Chris en Canadá, eso no tiene que pasar nunca más, el pasado es pasado, y ya pasó.
La alarma de mi celular me despertó y abrí los ojos como un hermoso zombie con cabello rojizo
—Maldito despertador — gruño mientras me pongo de pie.
Me cambié y baje a desayunar, no había nadie
— ¿Y mamá? — pregunta Alex entrando a la cocina
—Ni idea — confieso. Veo que sobre la isla en la cocina había una nota
“Hijos, me fui un poco más temprano, voy a llegar tarde esta noche. Genesis, que tus hermanos no se marchen sin desayunar, un beso. Los amo” dejo la nota y empecé a preparar el desayuno
—Mamá no confía en Sam y en mí — dice Alex acomodándose el cabello
—Las mujeres mandan, niño — respondí orgullosa
—Pero eres menor que nosotros — protestó y caminé hasta él, me miró confundido
—In-ma-du-ro — digo despacio y beso su cabello.
Después de varios intentos Alex logró despertar a Sam, y lo llevamos a desayunar.
Al terminar lo cepillamos los dientes y salimos rumbo a la escuela.
Al llegar Dina estaba con Ryan, Lily y Jack.
Me saludaron todos
—Emm...- comienza a decir Lily
— ¿Todo bien? — añade Jack
—Si, ¿qué les ocurre? — pregunto confundida
—Nada — Dina mirando al piso, me crucé de brazos enojada.
No me engañas amiga, estás ocultando algo
— ¿Qué ocurrió ayer? — pregunta Ryan, malditos idiotas
— ¿Qué ocurrió con qué? — pregunto intentado hacerme la inocente.
Dina me miraba y sabía que ella sabía la verdad. Para mi suerte, el timbre sonó y salí prácticamente corriendo a clases.
Veo a Nathan hablando con su amigo. Pasé rápido al salón pero no logré evitarlo
—Hola hermosa — dice con voz grave… tan masculina
"Voy a derretirme" babosa
"Por un chico así, si señorita" ashh.
Me miraba con esos ojos hermosos que no reflejaban egocentrismo en realidad ahora era como si de verdad me quisiera
"Seamos realistas, es buen actor" es verdad, Nathan no era honesto.
Me zafo de su agarre y entro al salón. Me senté con Lily ya que nos tocaba la misma clase
—Más tarde tengo que contarte algo — me susurra la morocha
—Bien — respondí y después de eso solo nos enfocamos en la clase y solo eso.
Fue realmente aburrido, pero bueno la escuela no es divertida.
Hora tras hora iba cruzando a alguno de mis amigos y a la pasada con mis hermanos, Alex y Amina se veían muy lindos juntos. Me alegra mucho que mi hermano sea feliz con una chica tan linda como ella.
Y llegó la hora del almuerzo. Fue ahí cuando me reencontré con Lily
— ¿Qué tenías para decirme? — le pregunto a ella en la fila de la cafetería
—Ayer, estuve extorsionando al amigo de Nathan, y creo que no es como Lowered — dice algo sonrojada
—Cam y Nathan son mejores amigos, pero la verdad es que son polos opuesto — respondí y sus ojos se iluminaron.
Fuimos a nuestra mesa y ya estaban todos esperándonos, pero alguien me jala del brazo
— ¿Qué ocurre Jack? — exclamo sorprendida. Jack no era así
—Ayer no terminé de decirte lo que tenia para contarte — que extraño
—Bien, ¿qué sucede? — pregunto sin rodeos
—Soy gay — ¡oh wow! es raro que sea la segunda vez que alguien salga del clóset, pero tengo que apoyarlo
—Increíble — sonrío para darle a entender que lo apoyaba
—Gracias — responde tímidamente
—Alza la cabeza orgulloso de lo que eres — le digo y volvió a sonreír
—Gracias Genesis — añadió
—Ven, vamos a comer — le digo y él asiente.
Dos chicos se declaran homosexuales, eso es realmente increíble, buena suerte para ellos.
Mis hermanos y Amina llegan y se sientan con nosotros
—Muero de hambre — confieso y ataqué mi bandeja de comida.
Al terminar tuvimos que volverá a clases.
Nathan estuvo molestándome durante toda la clase de literatura. Me tiraba papelitos con notas en el interior, muchas de ellas románticas.
Estaba escribiendo cuando escucho una increíble noticia
—Alumnos voy a salir unos minutos, pero dejaré a un adulto para que no hagas desorden — ¡genial minutos libres!
— ¡Súper! — exclama Lily
— ¡Genial! — añadí. De pronto Lily es arrastrada por Cam y Nathan se sienta junto a mí
— ¡Lily! — digo casi con un grito
—Tranquila hermosa, ella está en buenas manos — dice señalando a mi amiga quien era llevada por Cam en brazos hasta su banco.
Me crucé de brazos y comencé a jugar con mi cabello
"¿Por qué estas nerviosa?"
No estoy nerviosa, es sólo que no me siento cómoda junto a Nathan.
De pronto una voz chillona hace que levante la mirada para encontrarme con una zorra con todas la letras mirándome de manera muy fea
— ¿Se te ofrece algo? — cuestiono despreocupada, escuché a Nathan reír a lo bajo
—Él es mi chico perra —
"Oh no, eso sí que no, esta bruja de plástico. ¿Acaba de decirme qué?".
Me levanté de mi banco realmente furiosa
— ¿Cómo me llamaste maldita zorra de plástico? — se sorprendió ante mis palabras
—Es mío — repitió mascando un chicle igual que una vaca
—No veo tu nombre escrito en ninguna parte — digo y Nathan se pone de pie
—Kira, ya es suficiente — sentencia muy autoritario
—Pero cosita, todas saben que eres mío — dice la muy perra y por poco se saca la minifalda extra corta que tenía puesta
—No soy tuyo Kira, así que veré ahora — le ordena haciendo una seña igual que a un perrito. Me fulminó con la mirada y se fue a su lugar con sus zorras amigas.
Nathan vuelve a tomas asiento y me mira sonriente
—Está muy celosa — le resto importancia y mientras me siento
—No es mi problema que esté caliente con todos y cada uno de los chicos de Londres — sonrió ante eso y se acerca jugando con unos papeles.
Acercó una mano hacia la mía, comenzó a jugar con mis dedos hasta que terminó entrelazando nuestros dedos y nuestras manos quedaron unidas.
Podía sentir como mi corazón intentaba salir de mi pecho, nuestras manos estaban unidas y podía sentir lo cálido que eso se sentía.
Estaba petrificada, no sabía que hacer. Hasta que la puerta se abrió y me sacó de mis pensamientos
—Bien alumnos continúen con esta actividad — de inmediato solté su mano y me puse el doble de roja que un tomate.
El timbre sonó. Tomé mis cosas y salí más rápido que flash. Pero como saben flash y yo no somos iguales, por lo que él logró atraparme y me metió en un salón vacío
—Nathan, mis hermanos están esperándome, y si no me ven van a venir a buscarme — me tomó de la mano y me acercó a la ventana donde podía verse hacia la calle. Sam se iba con sus amigos y Alex con Amina
"Malditos traidores" miro a Nathan preocupada.
No hay escapatoria, ¿verdad?.
"Lamento informarte que estas frita. amiga, suerte " Exagerada
"Vas a perder tu virginidad con Nathaniel Lowered, en la escuela" sobre el escritorio de la profesora.
Nathan caminaba hacia mí y yo tenía los brazos cruzados demostrando que no le tenía nada de miedo, aunque tenia más miedo que la primera vez que vi el juego del miedo cuando era pequeña
—Yo no muerdo — me dice con esa voz ronca
—No estaría tan segura — respondí y sonrió de forma única.
De pronto choqué contra la pared, miré y sí, era la pared.
Me di la vuelta y lo tenía a Nathan justo frente a mí. Puso sus brazos a cada lado de mi cabeza. No tengo escape.
Comencé a respirar más rápidamente y cuando alzo la mirada me encontré con esos ojos esmeralda hermosos. Se mordió el labio inferior
"Si no te controlas va a darte un orgasmo en medio de la escuela, Genesis".
Bajé la cabeza y con una mano él hizo que alzara la cabeza para volver a mirar esos ojos que me contemplaban
"Esto es casi irreal" parece una escena de una película no de la realidad.
Se acercó y unió nuestros labios en un suave pero profundo beso, mientras nuestras bocas se movían como una sola.
Con una mano me tomó de la cintura y con la otra sostenía mi cara y acariciaba mi mejilla con su pulgar.
El beso se volvió más profundo cuando abrí mi boca dándole paso a su lengua
¡Nathan si que besaba como los dioses!.
Nos separamos por la falta de aire y lo vi sonreír de manera muy dulce.
Volvió a unir nuestros labios y esta vez me cargó haciendo que pusiera mis piernas alrededor de su cintura.
Me sostuvo y me dejó sentada sobre el escritorio sin apartarse se mi boca ni por un segundo. Estaba en en paraíso.
"Genesis es suficiente, a la realidad chica, a la realidad" era verdad. Nathan acabó el beso y quedamos frente con frente. Continuaba mirándome de esa manera tan bonita
—Si no me detenía iba a hacerte mía sobre el escritorio — dice casi en un susurro. No me salía nada, estaba sin palabras
Tomó mi mano y me sacó del salón
—Vamos hermosa, te llevo a tu casa — seguía sin poder decir nada.
Me subí a su moto y me aferré a su cintura. No me mal interpreten, es que Nathan conducía muy rápido y voy a caerme
—Tranquila hermosa, voy a ir despacio — no me había dado cuenta de que me había aferrado muy fuerte.
Cuando llegamos a casa me bajé y me quité el casco. Se bajó y me tomó por sorpresa, me besó y subió a su moto.
Entré a la casa y comí algo. Que día. Un día de sorpresas.
Capítulo 20: ¿Creen que Nathan de verdad está enamorándose de Gesesis?
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-Clari!