1 de Febrero
Parte 2
Narra Harry:
De pronto siento como el castaño rosa mis labios por un instante y con rapidez mueve mi cabeza hacia delante para darme un beso en la mejilla haciéndome abrir los ojos de la impresión.
- ¡Oigan eso no se vale!, les pedí un beso y eso no es uno - dice mama mientras Louis me suelta y se empieza a reír.
-Usted pidió un beso, pero no dijo en dónde. – dice entre risas.
Siento como mi cara se torna más y más rojo, ¿qué rayos acaba de pasar?
-Bueno. Pensándolo bien, tienes razón, pero ...
-Pero nada. ¡Gracias por la comida, pero ya tenemos que irnos mama! - le afirma el castaño mientras me sostiene de un brazo y me ala hacia la puerta.
-Bueno, emm, cuídense chicos, espero la pasen muy bien en el día de hoy. - escucho que grita la amable señora mientras el castaño termina de alarme del local.
- ¡Uff! qué bueno que salimos rápido de ese lugar. estoy seguro de que si nos hubiéramos quedado más tiempo mama nos seguiría pidiendo fotografías hasta que se le acabara el rollo de la cámara. –comenta el castaño entre risas mientras el hombre de esmoquin nos habré la puerta nuevamente.
-¿Por qué esa cara ? - pregunta el castaño después de entrar con él a la limusina y me ve con la cabeza mirando al suelo.
-Lo que paso hay adentro ... ¿no te molesta?, no quisiera que cambiara nada entre nosotros Louis. Yo... no quisiera dejar de verte. - digo algo apenado mientras el conductor enciende la limusina y conduce despacio hacia delante.
- ¿La verdad?, no me importa. Ya te dije que lo tomaras como un juego y no te preocupes, nunca dejaría que algo nos separara Harry.
-Señor T, hay una dama que está saludando el vehículo, ¿quiere que me detenga? – escuchamos decir al chofer mientras baja las ventanillas para que veamos a una mujer de pelo negro, piel mestiza y algo regordeta parada en frente de una tiende de chocolates.
- ¡María!, ¡si, deténgase un momento por favor! Ven, tengo alguien a quien presentarte. - me dice lo último al abrir la puerta nuevamente para que pudiéramos salir.
-Te dejo que ya están aquí, si, gracias por decirme, adiós- escucho decir a la mujer por el celular mientras nos acercamos a lo que parece una casa pequeña de chocolate. - ¡Hola mis niños!, ¡me alegro que ya estén aquí!, pensé que no pasarían por aquí a probar uno de mis deliciosos manjares- nos dice alegremente la mujer con un carisma que a cualquiera lograría sacarle una sonrisa.
-Hola María, claro que pasaríamos a saludarte -dice Louis mientras le da un fuerte abrazo a la señora. – Si estas en esta parte del pueblo debes probar uno de los chocolates de María es una ley, ¡son increíbles!
- ¡Y Tú, debes ser el chico que pudo atrapar a nuestro Louis!, Harry ¿cierto? - escucho incrédulo como dice señora al tomarme de la mejilla y halarla un poco antes de darme un abrazo.
-Mu... mucho... gusto -afirmo mientras trato de respirar. – disculpe, pero ¿Cómo sabe mi nombre? –atino a preguntar cuando vuelvo a respirar con normalidad.
- ¿Pues como más va hacer? ¡mama me lo contó todo!, ¡es increíble que te consiguieras a alguien tan adorable Louis! Bueno, bueno, bueno, sé que tienen mucho que hacer, así quee... tengan, esto de mi parte, recíbanlo como un regalo por el día tan especial que es hoy. -nos dice entrando apurada a su local y volver con dos barras de chocolates envueltas en un paquete dorado.
-Muchas gracias María. Volveremos a pasar en algún momento por mas- dice el castaño juguetonamente al tomar las barras. - Cuídate mucho, saluda de nuestra parte a Albert - dijo el castaño mientras me empuja nuevamente hacia la limusina.
-Louis ¿oíste eso?, Mama le contó de nuestra supuesta relación - le digo poniendo con mis dedos comillas al decir relación.
-Aaah... se me había olvidado. Si quieres que algo se sepa en todo el pueblo, díselo a Mama, ella se encarga de contar todo lo que pasa por aquí.
- ¿¡QUEee...!?, ¿¡entonces como te atreviste a decirle que si éramos pareja!? , ¡ya debe de saberlo todo el pueblo! , ¿no te molesta que se lo cuente a todos?
-Descuida, está todo bien. No me molesta en lo absoluto- afirma relajado el oji azul que quita su mirada de la ventana para verme directamente a los ojos.
-Pero ¿y si quieres traer alguna chica algún día? ¿Qué pasara cuando no nos vean juntos?, pensaran que me estás engañando o ella mal interpretaría todo o...
-Bueno, bueno, a ver. Solo les diría que rompimos o algo así y listo, ahora ten, come. - me dice destapando su barra de chocolate e introduciéndome un pedazo a la boca para callarme. -Son muy buenos - afirma llevándose un pedazo a la boca y poniendo cara de satisfacían.
No entiendo lo que está pasando para nada, ¿Cómo es que no le importa que el pueblo completo sepa de nuestro supuesto noviazgo?, a cualquier hetero le molestaría ¿o no?
-¿Ahora hacia dónde caballeros? - nos pregunta el chofer mientras baja la compuerta para vernos la cara.
-A la plaza mil soles will -afirmo el castaño mientras termina de comerse su chocolate.
-Will... - articulo antes de que el señor subiera la ventanilla nuevamente. - ¿Le gusta el chocolate? Tenga la mitad. No puedo comerlo todo yo solo, no después de todo lo que desayunamos. - le digo mientras corto la barra por mitad y se la paso.
-Muchas gracias joven Styles la verdad me gusta mucho el chocolate - me dice dándome una sonrisa de agradecimiento.
- ¿Pasa algo? – pregunto al sentir la vista del chico a mi lado mirándome con una expresión indescriptible.
-Emm.. no, no, no es nada. – dice esquivando mi mirada y volviendo a mirar hacia afuera de la limusina.
Al llegar abro la ventana para asomar la cabeza y ver una pequeña plaza blanca con todas las tiendas ordenadas en una fila, cada una con un nombre muy peculiar en un letrero encima de las puertas.
- Ya hemos llegado – afirma saliendo del vehículo para abrirme la puerta.
- ¿shugar night? , ¿zora? , ¿ qué rayos es black horse , ¿Qué clase de tiendas son estas Lou?
- ¡Oye!, no critiques, hicieron lo mejor que pudieron con los nombres. Oye Will, porque no vas y comes algo tú también, ya te llamo cuando necesitemos que nos transportes. - dice el castaño al conductor.
-Gracias señor, ustedes solo llámenme y aquí estaré. Pásenla bien.
Entramos a una de las primeras tiendas llamada Dulce prenda. Al entrar veo la tienda totalmente brillante. Colores por doquier, paredes de caoba pintado de colores pasteles muy fosforescentes y ropa muy llamativa.
-¡wooo!... Que lujo de tienda.
- ¿Te gusta?, mira muy bien la ropa. Cada tienda tiene su propia línea de ropa y objetos exclusivos, es un acuerdo que pactaron hace mucho tiempo para evitar que nadie fuera competencia de nadie, así cuando alguien venga buscando algo que no vendan aquí el encargado tiene el deber de mandarlo a la tienda en donde esta lo que busca. Es una forma de ayudarse mutuamente.
Las tiendas eran neutras por fueras todas del mismo color blanco, pero por dentro cada una era fiel a su nombre de una tienda decorada con dulces a una totalmente oscura alumbrada por pequeñas estrellas en la pared, ¡este lugar es increíble!
-¡¡¡Harry..!!! , ¿podemos paran un momento?- dice el oji azul después de un gran suspiro. - llevamos horas entrando a cada una de las tiendas y ya me está dando hambre- termina de decir al sostenerme del brazo para detenerme antes de entrar a otra tienda.
-Está biennnn... entonces ... ¿adónde vamos ahora?
-Mmmm... ¡tengo una idea! ¡tú solo sígueme! - me dice al empezar a caminar.
El castaño se detiene un una de las tiendas más grandes de la zona y empieza a subir las escaleras sin siquiera voltear a mirarme. Cuando llegamos al cuarto nivel, el ultimo, nos encontrarnos con un espacio amplio lleno de mesas y al fondo puestos de diferentes tipos de comidas.
-Escoge uno - me dice el castaño mientras nos sentamos en unas sillas al lado de los barandales que cubren los bordes.
-¡¡Quiero eso!!-afirmo mientras señalo un puesto de Hog Dog llamado "Mientras no se caiga".
Como no es de extrañarse el dueño saluda a Louis con un abrazo. - el truco está en añadirle de apoco de cada cosa. - escucho atentamente al ojiazul mientras veo como empieza a llenar su hot dog. En este puesto Pueden añadirle todo lo que quieran mientras nada se caiga. - Cuando algo se caiga, aunque sea la mínima cosa, no podrás añadirle más al hog dog.
- ¿Cómo rallos conoces a todos en el pueblo? - le digo algo exaltado mientras trato de echarle maíz a mi hog dog.
-Este pueblo no es tan grande, nadie se muda para esta zona y usualmente los habitantes nunca sales de aquí, Mmm... creo que Berni fue el último en mudarse de aquí y... eso que fue hace mucho tiempo, así que conozco a la mayoría por Berni cuando volvió al asilo.
- ¿Qué hacemos ahora Louis? - le digo un rato después con el ultimo pedazo de comida en mi boca al terminar de bajar las escaleras.
-Mmm... ¡ya se! , ¡conozco lugar que queda muy cerca de aquí! , ¡vamos!- dice rápidamente sujetando mi mano y empezando a correr.
A lo lejos se logran ver unos árboles rojizos y un parque muy colorido, con bancos por doquier, el suelo parece de la antigüedad al igual que los faros de luz que hay en cada esquina. Típico escenario de una película de vampiros de los 90.
-Este lugar es muy bonito - le susurro mientras caminamos y acaricio los árboles por donde pasamos.
- ¿Si verdad?, siempre me ha gustado venir aquí. Este lugar me transporta al pasado... - de pronto siento la mano del chico entrelazarse con la mía provocando que sienta como si una corriente eléctrica pasara por todo mi cuerpo.
- ¿¿¡Q...que haces!?? - le digo algo nervioso.
-Recuerda que estamos fingiendo ser una pareja, ¿Qué pareja da un paseo romántico por el parque sin estar de la mano?
- Ves muchas películas Louis... -creo que hoy voy a morir definitivamente, ¡mi corazón se ha sacudido mucho por hoy!
De la nada un faro a nuestro lado se encendió, haciéndonos mirar hacia este. Luego de que el primer faro encendiera los demás faros del parque cobraron vida, dejándonos ver otra parte hermosa del pueblo, La noche iluminada.
El castaño y yo nos sentamos en un banco y rápidamente me recuesto en este para apoyar mi cabeza en sus piernas. No me juzguen, si él quiere que finjamos tenemos que hacerlo bien ¿o no?
Unos segundos después siento su mano acariciando mi pelo mientras vemos como atan un paño blanco en el centro del parque y colocan varias sillas al frente con un proyector mientras las personas empiezan a acercarse de apoco.
-Me encanta esta parte. En los ocasos, a la gente del pueblo les gusta ver una película en el parque. Es más, para los turistas, pero todo el pueblo se reúne siempre, es como una fiesta entre familias- escucho atentamente mientras siento sus suaves dedos acariciar mi pelo. -Sabes, pienso que, si tengo la oportunidad, algún día, me gustaría venir a vivir a este pueblo... – dice con una voz tan tranquila que me hace sentir la calidez que siente al ver a todos unidos en el parque. Este lugar es como una gran familia unida en un pueblo.
-Entiendo porque quieres vivir aquí, este lugar es muy acogedor... a mi... también me gustaría vivir aquí. – le digo sintiendo como sus dedos se detienen por un momento y baja su vista hacia mi cruzando miradas.
-Me alegro que te guste la idea. – dice acariciando mis mejillas con su dedo pulgar. La cara de Louis se ve más hermosa con esta iluminación nocturna. Como me gustaría que esto no terminara...
-¡¡AAHHHH..!! - escuchamos de repente decir en un gran suspiros, de esos de las películas románticas.
Al apartar la vista del castaño veo a todos en el parque mirándonos con cara de ternura... aunque algunos nos ven muy exaltados y horrorizados son muy pocos en comparación a las grandes sonrisas de la mayoría.
-Lou, todos nos están miran - le susurro al levantarme de sus piernas. Creo que en este punto cualquier cosa que hagamos se mal interpretara.
-Entonces creo que no es un buen momento para darte mi regalo - me dice sacando una pequeña cajita negra de su bolsillo. - esto es para ti , espero que siempre lo uses. No sabía que darte hasta que vi esto en el vitral de la plaza. Algo me dijo que tenía que ser tuyo. Feliz cumpleaños.
Al abrir la caga veo un anillo dorado y negro con una pequeña cara de búho en el centro. - ¡¡wow!!...Louis, no...no sé qué decir, ¡muchas gracias! - le digo dándole un fuerte abrazo. Nadie había hecho todo lo que este chico ha hecho hoy por mí.
- ¡Oh por Dios, oh por Dios! ¡le dio un anillo! , ¡¡¡FELICIDADES!!! – escuchamos a lo lejos gritar a Wanda haciendo que todos aplaudieran y empezaran a felicitarnos... ¡Mierda!, esto se salió de control!
- ¡Oh no! , ¿¡por qué no esperaste a que estuviéramos solo!? - le digo mientras bajo mi cabeza de la vergüenza escondiéndola en su pecho mientras escucho al castaño reírse . -ahora ellos creen que estamos comprometidos Louis.
-Descuida, no importa – contesta serenamente mientras siento como me acaricia el pelo.
De pronto el celular del castaño suena haciendo que este lo saque rápidamente su bolsillo- un segundo- me dice apartándome de su pecho para levantarse y contestar.
Mientras lo veo alejarse las señoras del lugar se acercan a mí para ver la supuesta sortija. Todas alborotadas de la alegría. Son muy adorables, pero en serio, esto está fuera de control.
-Ese Louis tiene un gusto muy exótico. Miren que linda sortija en forma de búho – comenta María divertidamente mientras mira más cerca el anillo.
- ¡Serás una linda esposa!, ¿o esposo?, ¡agh! ¡no sé cómo va eso en las relaciones de dos chicos! - me dice una señora de pelo negro y ojos café.
-Es fácil Olivia, ambos son chicos. – dice otra señora de pelo rubio dándole una palmada en el hombro a la señora de pelo negro.
-Señoritas. Lamento la interrupción, pero ya debemos irnos. Si me lo permiten... - dice apartando a las señoras y tomándome de la mano para levantarme -Me lo llevare conmigo. – dice empezando a caminar sin soltar mi mano dejando a todos extrañados. No me queda de otra que despedirme con mi otra mano mientras siento como el castaño se apresura cada vez más rápido hacia la calle.
- ¿Por qué tanto apuro Louis?
-Era mama, me pregunto que donde estamos y que porque no fuimos a clases. debemos llegar y rápido. - me dice sin dejar de mirar hacia delante. -Ya llamé a Will y dijo que nos esperara en la entrada de las tiendas. Debemos llegar rápido.
-Te dije que era mala idea - le digo mientras me suelto de su agarre y camino más delante que él.
- ¿Acaso estas arrepentido de venir hoy?, ¿conmigo? – pregunta seriamente sosteniéndome del brazo y frenando mis pasos.
¡Agh!, este tonto y lindo chicos de ojos azules... aunque quiera no logro molestare con el... –No Louis, no me arrepiento. Hoy... ¡hoy fue increíble! Es solo que sabía que nos descubrirían, eso es todo - le digo haciendo una sonrisa para que me responda de la misma forma.
- Me alegra mucho escucharlo. ¡Vamos, conozco un atajo hacia la puerta trasera de la plaza de las tiendas!
Mientras corro de la mano con el castaño, veo todos los lugares por los que pasamos hoy y siento como mi corazón se calienta. Tal vez nunca este con Louis, pero, con estos momentos me basta para ser feliz. Lo quiero, pero si tengo que dejarlo ir con alguien más para que sea feliz no lo dudaría ni por un minuto...
-¡¡Oye Hazz!!
- ¿Mmm? ¿Qué pasa? – le digo al ver que se detiene de repente.
- Recordé que debo ir a saludar a una última persona antes de irnos.
- ¿Quieres que te espere afuera? -le digo mientras trato de calmar mi respiración.
-Descuida, necesito que vayas con Will y lo retengas, solo serán unos minutos, ¿está bien?
Le respondo con un gesto con mi cabeza antes de verlo devolverse por donde caminamos. Sigo delante para ver la limusina estacionada en la entrada con las puertas abiertas esperándonos así que me apresuro a entrar.
- ¿Dónde está el señor T? - pregunta el hombre al verme entrar de un brinco y caer acostado en la parte de detrás.
-Aquí estoy, lamento la tardanza - dice el castaño haciendo que me siente para darle espacio. - ¡Deprisa Will, tenemos que llegar a casa lo más rápido posible! - dice el castaño al cerrar la puerta.
- ¡A la orden mi capitán! – Nos dice antes de encender la limosina. –Sujétense, llegaremos en un santiamén.
Solo veo por la ventana todas las edificaciones iluminadas pasando rápidamente por mis ojos y de un momento a otro ciento la cabeza de Louis recostarse de mi hombre haciendo que por un momento mi corazón se detuviera.
- ¿Ti...tienes sueño?
-No exactamente...- alcanzo a escuchar mientras siento como se acomoda más. -Solo quiero estar así por un momento si no te moleta... - me dice con un todo de voz muy tranquilo. Sintiendo la calidez de su cuerpo tocar cada parte de mi ser dejo caer mi cabeza sobre la suya y cierro mis ojos para disfrutar cada minuto antes de que lleguemos a casa y esto se termine.
Así pasamos el resto del viaje hasta llegar a la entrada de mi casa y despedirnos de Will.
-Mucha suerte chicos con el resto de su velada chicos y recuerden, ¡la protección es muy importante! – escuchamos que nos dice antes de poner en marcha la limusina. ¿¡Por qué todos piensan que haremos eso!?
-Louis, te quiero dar las gracias ... este día fue... muy increíble, en serio, no sé cómo agradecerte este gesto.
-No debes agradecerme Hazz, quería complacerte, aunque, debo admitir que también estaba complaciendo un capricho mío - me dice mientras una pequeña sonrisa se dibuja en sus labios y noto como se acerca más a mí.
Parados en la reja de la entrada de mi casa solo pude aferrarme al hierro y cerrar los ojos al ver que se acercaba cada vez más y más a mi rostro y ...
- ¡Hasta que por fin llegan!, ¡los hemos estado esperando por mucho tiempo! - grita Zayn al salir de la puerta de mi casa.
- ¿Zayn? ¿Qué haces en mi casa? - pregunto al alejarme del castaño y entrar al jardín.
- ¡¡¡Zayn!!!, ¡se supone que tenías que esperar adentro! - El castaño me sujeta la mano al entrar a mi lado y subimos las escaleras hasta el pórtico. - ¡¡SORPRESA!! -gritan todos al unísono luego de que el ojicafe se corre de la puerta para dejarnos entrar.
Al entrar veo la casa llena de globos, serpentina, a mama, la madre de Louis, Lottie, Garett , Gemma, Liam , Eleonor y Barry hasta Liam traía su Tablet en mano con Tay Tay en una video llamada.
-Yo... no sé qué decir chicos... Gracias, de verdad, Muchas gracias - les digo a todos al saludarlos uno por uno con un abrazo mientras siento como mi cara se sienta cada vez más y más caliente.
-No nos des las gracias solo a nosotros, todo esto lo planeo Louis - dice Zayn mientras se coloca de lado de Liam.
- ¡Sorpresa! – dice seguido de una risa. -Es otro de mis regalos. Sé que no querías una gran fiesta después de lo que paso en la mansión así que... invite a nuestros amigos más cercanos.
-No debiste molestarte - le susurro mientras lo envuelvo con mis brazos.
-Como no podría si eres tan importante.
-Bueno, bueno, bueno, ya basta de agradecimientos. Tenemos mucho esperándolos y tengo mucha hambre, así que, ¡A COMER!
- ¡Si, por favor! -dice Gemma mientras todos caminamos hacia la mesa de estar.
Es increíble pensar que hace un año estaba aquí mismo celebrando mi cumpleaños mientras mama, Gemma y yo veíamos una película de los 70 en blanco y negro, - ahora entiendo a lo que se refería Taylor con haber cambiado... -
- ¿Uhhmm? ¿Dijiste algo Hazz? –pregunta el oji azul volteando a mirarme.
-No, Nada... - digo serenamente mientras siento como este me sostiene la mano debajo de la mesa y me la acaricia mientras me da una sonrisa.