Megan la miraba asustada esperando que reaccione, pero al ver que su prima se abalanzó sobre ellas con esas cuchillas en las manos reaccionó rápido tomando del brazo a su madre y escondiéndose con ella en el baño de la habitación.
Pero eso no las salvaría de X-23...
Esta comenzó a romper la puerta rápidamente con sus garras y el arma las miró lista para cazarlas con una respiración agitada al igual que sus presas.
Pero Megan tuvo la gran idea de quitarse el olor y el aroma. Se metió dentro de la bañera donde estaba la ducha y la abrió rápidamente mientras sus manos temblaban.
Agua fría cayo sobre ella y su madre, el aroma desaparecio rápidamente y los ojos de Laura volvieron al color natural del verde esmeralda.
Vio como su tía y prima estaban en esa situación y entendió que no fue su culpa completamente.
Había sido ese aroma otra vez.
-Debemos irnos ahora.
Laura quiso escapar de ahí porqué sabia que podría acercarse algo peor. Y así fue, se escuchaban ruidos abajo en la sala.
Laura bajó inquietante para defender a su tía y prima de lo que sea, pro se encontró con ella... Ahí estaba, su gran pesadilla.
-¡Hola X-23!-un tono oscuro e irónico salió de su boca. Era Kimura sosteniendo en su mano derecha con facilidad una ballesta lista para ser usada.
Laura corrió hacia ella, aún no había guardado las garras.
Creyó que podría vencerla, pero al fin y al cabo Kimura había sido su entrenadora en la base y conoce sus movimientos y técnicas.
Aprovechó que esta se haya abalanzado sobre ella y la tomó del cuello. Como Kimura era mucho más alta que su aprendiz la elevó en el aire apretando mas su cuello. Laura logró soltarse golpeándole la cara con su pie. Esta la dejó caer al suelo bruscamente.
Se mantuvieron peleando unos instantes, hasta que Kimura noqueó de un golpe a Laura y la esposo. Tomó la otra punta de la esposa que estaba enganchada en la muñeca de la joven y la arrastró chocandola con cualquier pared o mueble que estuviera en su camino. Abrió una puerta y se encontró con un sótano. La siguió arrastrando, pero esta vez golpeando su cuerpo y su cabeza con cada escalón de la larga escalera.
Pero dentro del oscuro sótano estaban escondidas en un rincón Megan y Debbie...

Kimura, muy observadora, como solía ser, notó la presencia de las dos y esposo a Laura a una barra de la baranda de la escalera para poder acercarse a ellas.
-Oh miren que tenemos aquí...

Dijo tomando fuerte su ballesta para dispararles.
Megan se interpuso para que no lastimará a su madre. Debido a esto Kimura no le dio importancia a la adulta y tomó a la adolescente y comenzó a golpearle, para su suerte Laura se recuperó luego de unos pocos minutos y observó la escena.
La rabia la consumió al ver a su prima en ese estado y logró liberarse de las esposas silenciosamente y llamó a la castaña que sonreía maniática antes de lanzarle una flecha a la espalda de Megan.
-¡Hey Kimura!-Llamó de atrás poniéndose de pie y sacando sus garras.-¡Alejate de ellas!-Pateo su rostro cortándola con su garra en el pie incluida en el ataque.
Golpeó su abdomen y su rostro contra una mesa de material, pero aún esta se mantenía de pie.
-¡Megan! -gritó a su prima quien observaba la lucha con cierto terror- Toma lo necesario y vayanse lejos de aquí. ¡Rapido!-gritó por último mientras le rompía en labio a Kimura y su prima corría escaleras arriba con su madre. Notó que ya se habían alejado lo suficiente...
Durante la pelea su olfato y su gran observación le indicaron que había un caño de gas. Lo cortó a la mitad con sus garras haciendo que saliera el gas sin control. Y mientras Kimura contraatacó Laura se apresuró para prender la luz y así en cuestión de segundos la casa explotó con ellas adentro. No dejo nada, ni objeto, ni cimientos, ni Kimura viva.

Luego de minutos el increíble factor curativo de Laura la hizo volver a la vida y salió de ahí antes que llegara cualquier autoridad y fue en busca de Megan y Debbie.
Días después se encontraban en un hotel barato para poder descansar, en el cuál Laura no durmió para poder hacerles los documentos falsos para ellas para irse del país.

-Al día siguiente 08:09 am-
-¡Vamos Laura!-La tomó del brazo Megan emocionada para entrar en el aeropuerto.
-No.
-¿Qué dijiste?
Suelta su brazo y la mira con atención.
-No ire con ustedes. No puedo.

-Laura, nosotras te amamos.-Interfirió Debbie que ya se había recuperado. Laura las mira a las dos a los ojos.
-¿¡QUE ESTAS HACIENDO!? ¡¡NO PUEDES DEJARME!!
-Los problemas están cerca mío. Y no quiero que las lastimen. Quiero que estén a salvo.
Megan logró calmarse y ella al igual que su madre llegaron a comprender y asintieron.
-Adios Megan.-Y Laura volteó pero un gritó inoportuno la interrunpio.
-¡Laura espera!-Gritó Megan y volvió a acercarse sacando de su mochila un camafeo. Al final de la delicada cinta negra había una especie de medallón dorado que tenia una flor. Megan abre el delicado objeto a la mitad mostrando dos fotos.-Esa soy yo y ella Sarah, tu madre.
Laura observó detenidamente el objeto y sin pensar una vez mas abrazó a su prima fuertemente. Podría decirse que fue su primer abrazo dado por ella. Era tan puro. Tan sincero. Tan especial...
-Gracias.
La miró fijo a los ojos con cierta mezcla de felicidad y tristeza.
-Adios.
Se dio vuelta y sin más interrupciones se marchó. La lluvia que había comenzado tiempo atrás seguía mojando su cabello y camuflando las continúas lágrimas que corrían por su rostro...
Años y meses después...
Luego de que se haya pasado mas de 3 años estudiando a los X-men y en especial a Wolverine, luego de que haya conseguido un traje cómodo y casi haber matado a su única posible familia, luego de que S.H.I.E.L.D la haya arrestado por ser responsable de miles de muertes y que en secreto el Capitán Steve Rogers le haya dado la libertad.
Y que luego de que todo lo ocurrido se haya quedado a la deriva durmiendo y comiendo de donde sea, una noche bajo las estrellas, frente a un fresco bosque volvió a pensar y pensar lo ocurrido, hasta quedar dormida.
-¡¡NOSOTROS DEBEMOS MORIR!! ¡¡NOSOTROS SOMOS ARMAS!!
Decía alterada con el ceño fruncido y voz exaltada. Tenía un puño cerrado debajo de la garganta de Logan y la otra en la suya. Había logrado ganarle en la batalla dejándolo un tanto inmóvil y debilitado.
-No, tú no. Si quieres matame a mi. Tú no elegiste esta vida.
Respondía aún con su actitud dulce a la joven con las pocas fuerzas que le quedaban para hablarle.
-¡¿Que?! ¡No! Debo morir...
Al escuchar esto Logan corrió suavemente el puño cerrado de la garganta pequeña de la joven.
-Quizás sea lo mas cercano que tengas a una familia...
Familia.
Familia.
Familia.
Familia.
Familia...
-¡AAAAH!
Despertó de su pesadilla con un gritó y respiraciones agitadas. Gotas de sudor recorrían su rostro y sus pupilas aún estaban dilatadas.
Miró el cielo y cálculo la hora, eran las 08:00. Como se lo dijo en voz baja hacía ella misma.
Se acomodó un poco la ropa y se sumergió en el bosque en busca de poder encontrar algo para comer aunque le costaba un poco concentrarse, ya que esa palabra que se repetía en el sueño la invadía.
"Familia."
El bosque tenía salida a una ruta, la cuál del otro lado tenía como pequeñas veredas a gran altura que funcionaban como un mirador en el cual podía observarse un hermoso lago.
Llegó al final del bosque atraída por curiosidad y por un aroma muy familiar.
Una mezcla de tabaco y bebida alcohólica.
Era él...