Ya había pasado tres semanas del incidente con el glitch y Five seguía cumpliendo su castigo de limpiar los baños ¿Phil se estaba quedando sin trabajo para castigar a todos los techs que asistieron a la fiesta? Si. Después de todo fue la gran mayoría del equipo, así que obviamente no había tanto trabajo como para castigarlos como era debido, por lo que comenzó a impartir castigos que no conllevaban trabajo en las oficinas o atrapando Glitchs. Pero viendo el lado positivo, nunca se habían adelantado tanto con los papeleos.
Five maldecia por una mancha en el espejo del baño de hombres, por más que frenaba y fregaba, la maldita mancha no se salía. Su concentración era tanta que nisiquiera notó cuando alguien se paró en la puerta a verlo.
- ¿Estás intentando limpiarlo o hacer un túnel para escaparte? Sabes que un portal es practico para eso ¿verdad?
- Scott - dijo a modo de saludo al verlo atraves del espejo - no te escuché llegar.
Y no, no quiero huir, sino que no logro quitar esta mancha.
- Ah si, es porque es un holograma, lo puso Phil por todas los lugares que los techs tengan que limpiar, para que tarden más - respondio divertido mientras se acercaba. Por su lado, Five boqueaba tratando de reaccionar al reciente descubrimiento.
- ¿¿Es enserio?? ¡Hace una hora que estoy tratando de limpiarla!
- Ey no fue mi idea - levanto las manos de forma inocente - supongo que Phil solo quiere molestarnos un poco más. Mañana nos levanta el castigo, creo que por fin se quedo sin ideas.
- Si - río ligeramente - bueno, tengo que prepararme. Mitch y yo saldremos esta tarde - comentó mientras ponía en orden los artículos de limpieza que utilizó.
- Oye ¿Tu y Mitch son pareja o algo por el estilo?
Five se quedó callado un momento por la repentina pregunta y por la duda de que respuesta dar. Si bien había salido varias veces con Mitch desde que se confesaron, no habían hablado de noviazgo ¿se podría decir que ya son... novios? Bueno, Five no salía con nadie aparte de Mitch y viceversa... pero eso no garantizaba nada ¿no?
- Eeeeh la verdad... alg- algo así-si... - Scott se quedó meditando un segundo la respuesta y cuando estaba por hablar, el celular de Five sonó. Mostró que justamente era el susodicho quien lo llamaba, se despidió y salió del baño, dejando atrás a un pensativo Scott.
...
Después de encontrarse con Mitch en la salida de la tienda hinobi, ya iban en el auto del chico hablando sobre adonde ir esa tarde.
- Pues yo diría que a comer algo - sugirió Mitch sin quitar los ojos del camino.
Five lo miró un momento, admirando la expresión seria que ponía cuando manejaba, le encantaba esos momentos en los que solo estaban ellos dos, cuando el auto hacía como escudo de cualquier interrupción que el mundo exterior pudiera brindar.
Ese día Mitch se había lucido con su vestuario o más bien a Five le encantaba como le quedaba a Mitch cualquier cosa que se pusiera. Miró desde el reloj negro que se destacaba en su muñeca derecha gracias a la camisa arremangada de color plata, el cuello de la camisa siempre bien acomodado y el cabello brillante. Bajó la mirada a sus pantalones negros, bien planchados ¿Por qué le quedaba tan bien todo lo que usaba? Nadie lo sabía.
Mitch lo miró de reojo al no obtener respuesta a su sugerencia, apesar de que fue solo un minuto de silencio. Al notarlo, Five dirigió su mirada al frente para disimular.
- Creo que podríamos... ir a lo de mis abuelos... - dijo lentamente para ver cómo reaccionaba - Cocinan delicioso y nunca los viste en persona.
Mitch pareció meditar la información - No estaría mal, pero todavía es temprano para comer algo, así que quieres que vayamos al parque de diversiones que abrieron hace poco, quiero ver si es tan bueno como dicen
- Si, me parece perfecto - dijo sonriendo
El resto del camino se lo pasaron en un agradable silencio, cada uno sumergido en sus propios pensamientos, aunque de vez en cuando se dedicaban miradas fugaces, para ver si el otro estaba cómodo.
No tardaron mucho en llegar, al bajar ya se escuchaban la risa de los niños que corrían arrastrando a sus padres de un juego a otro, se veía a los enamorados tomados de la mano mientras comían algodón de azúcar, pudo ver a lo lejos a Scott, caminaba junto a una chica que no llegó a reconocer, porque se metieron en la casa de los sustos, seguramente se encontrarían en algún momento y sabría de quien se trata.
Se volvió hacia Mitch esperando que dijera a que juego quería ir primero, este observo cada uno hasta que se quedo mirando fijamente la rueda de la fortuna, sonrió levemente, pero pronto esa sonrisa despareció y señaló la montaña rusa diciendo que nunca se subió a una tan grande como la que habían instalado ahí. Five lo siguió y tímidamente rozó su mano con la de Mitch, este notó lo que quería y sin mirarlo entrelazo sus dedos con los del sonrojado chico.
Subieron a la montaña rusa, Five se alegró de ir antes de comer cualquier cosa, ya que no habían terminado el recorrido y ya sentía ganas de vomitar, pero al no tener nada en el estómago, no pasó nada.
Mitch se reía como nunca antes lo había hecho, tomado de la mano con Five, gritaban cada vez que bajaban a toda velocidad de una altura considerable. Inconsciente buscaron sus ojos para ver a su acompañante justo antes de otra bajada, los dos se dedicaron una amplia sonrisa y justo antes de que llegara la excitante bajada, Five tomó a Mitch por el cuello y le plantó un beso lleno de energetica alegría, al separarse Mitch no tuvo tiempo de reaccionar, porque la sensación de mariposas en el estómago se intensificó con la caída.
Al bajar del juego Five salio primero sin mirarlo, se podía ver el color rojo en su cara, caminaron un poco más hasta que Mitch vio que el cuarto de espejos estaba vacío, agarró la mano de Five y sin advertencia alguna, lo arrastró hasta el centro del cuarto, acuno su rostro entre sus manos y lo besó lenta y delicadamente, antes de que el otro pudiera procesar lo que pasaba, se separó unos centímetros sin despegar su mirada de los ojos negros de Five.
- ¿Qué fue eso? - preguntó sonriendo al tiempo que rodeaba el cuello del rubio con sus brazos, haciendo menor el espacio que los separaba.
- Tenía ganas de besarte - respondió despreocupo mientras colocaba sus manos un poco más arriba de su cintura, también acercándose más.
Five sonrió cálidamente, ambos tenían un brillo en los ojos que solo aparecía cuando estaban juntos. Mitch amaba ver a Five así, sonrojado y sonriendo, es que se ve tan tierno cuando esta así, aparte de que descubrió que cuando veía a Five en ese estado su pecho se llenaba de un calor agradable, daría lo que fuera para que esos momentos fueran eternos. Pero las risas de unas niñas que se disponían a entrar en el cuarto los llevó a la realidad de nuevo, haciendo que se separaran sin tener ganas, dejando como único contacto sus manos entrelazadas y con una mirada cómplice salieron del lugar al tiempo que dos niñas rubias de no más de 5 años corrieran en dirección de los espejos.
La tarde pasó bastante rápido, entre juego y juego habían besos fugaces, bromas infantiles y miradas cálidas que les llenaba el alma a ambos.
Estaban saliendo de la cabina fotos cuando vieron que Scott se acercaba con la chica que lo acompañaba, no la conocían, pero tenía una energía contagiosa, que hizo automática la comodidad entre los cuatro. Hablaron de cosas triviales, para luego despedirse ya que la chica, llamada Lili, arrastró a Scott hacia los juegos por premio.
Five río antes la comica situación y volteó para encontrarse con Mitch, descubriendo que de nuevo miraba la rueda de la fortuna. Por lo que decidido, tomó la mano de Mitch y lo arrastró hacia la gigantesca máquina, justo a tiempo que la última persona se arrepentía de subir, dejando libre un compartimento para que ellos subieran. Mitch no se quejó en ningún momento, tenía que admitir que le gustaba cuando Five hacia esa clase de cosas inesperadas sin preguntarle.
- Siempre me gustaron las ruedas de la fortuna, pero esta en la primera vez que me subo a una - comentó Five mirándolo
- Si... también es la primera vez que me subo a una - respondió mirando las personas que cada vez se hacían más y más pequeñas en lo que subían. Suspiró y pasó su brazo sobre los hombros de Five, este apoyó su cabeza en el rubio casi que inconscientemente. Mitch notó como se acurrucada a su lado y ponía su mano sobre la suya. Sonrió al tiempo que dejaba un pequeño beso en la frente del Five.
- Oye... note que veías mucho este juego desde que llegamos... si querías subir ¿Por qué no me dijiste? - cuestionó en tono suave, para que no se malinterprete como un reclamo.
- Pues... hay un motivo por el cual nunca me subía a una de estas cosas...
- y... ¿Cuál es...?
Mitch se tomó unos segundos antes de abrir la boca, pero el apagón repentino hizo que la cerrara de nuevo, todo el parque se apagó de golpe, dejando las máquinas quietas, se podía escuchar el murmullo de la gente.
- ¿Qué pasó? - preguntó Five en lo que se enderezaba.
- No lo sé... - se colocó los lentes techs y los activo en la versión nocturna para averiguar que pasaba, pero no hizo falta, porque sus brazaletes sonaron ruidosamente, al tiempo que un fuerte rugido hacia temblar al parque.
Mierda... pensó Mitch al ver el tamaño del glitch...
...
Holaa, gracias por seguir aquí ❤ poco a poco se me va yendo el bloqueo, también cambie mi forma de narrar, espero que les guste💗
Cuidense, bye💕