Yuri on Ice! x OC x Haikyuu...

By M00nHun7r3ss

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Akabane Rin, una joven patinadora artística de 16 años de ascendencia rusa y japonesa se ha trasladado a Toky... More

○●Capítulo 1●○
○●Capítulo 2●○
○●Capítulo 3●○
○●Capítulo 4●○
○●Capítulo 5●○
○●Capítulo 6●○
●○Capítulo 7○●
●○Capítulo 8○●
Importante
●○Capítulo 9○●
●○Capítulo 10○●
●○Capítulo 11○●
●○ Capítulo 12○●
●○Capítulo 13○●
●○Capítulo 14○●
●○Capítulo 15○●
●○Capítulo 16○●
●○Capítulo 17○●
●○Capítulo 18○●
●○Capítulo 19○●
●○Capítulo 20○●
●○Capítulo 21○●
●○Capítulo 22○●
○●Capítulo 23●○
●○Capítulo 24○●
●○Capítulo 25○●
●○Capítulo 26○●
●○Capítulo 27○●
●○Capítulo 28○●
○●Capítulo 29●○
○●Capítulo 30●○
●○Capítulo 31○●
●○Capítulo 32○●
●○Capítulo 33○●
Capítulo de esta semana
●○Capítulo 34○●
●○Capítulo 35○●
●○Capítulo 36○●
●○Capítulo 37○●
●○Capítulo 38○●
●○Capítulo 39○●
●○Capítulo 40○●
●○ Capítulo 41○●
●○ Capítulo 42 ○●
●○Capítulo 43○●
Notición
●○Capítulo 44○●
Especial Preguntas y Respuestas
Navidad Navidad Dulce Navidad
☆Especial Recuerdos 2☆
☆Especial Recuerdos 3☆
☆Especial Recuerdos 4☆
◇◇Especial: Akabane Rin◇◇
◇◇Especial: Akabane Ivan◇◇
《 Especial: Entre búhos y gatos 》
《Especial: Gato cuidador》
《Especial: El mejor búho》
《Especial: Entre cuervos alocados》
《 Especial: Navidad 》
《 Especial: Año Nuevo 》
Capítulo de esta semana

☆Especial Recuerdos 1☆

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By M00nHun7r3ss

Este especial tratará sobre momentos que pasó Rin en los últimos 7 años, en este caso, será sobre una Navidad

Espero que os guste este especial, y si queréis proponer situaciones o tenéis preguntas sobre alguna cosa, intentaré contestarlas. Muchas gracias a tod@s por leer esta historia.

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24 de diciembre de hace 3 años (Era el cuarto año de Rin en Moscú)
(Los personajes hablan en ruso durante toda la situación)

- Yuraaaa, vamos, que van a quedarse vacías las tiendas. - gritó Rin desde la puerta, ya vestida y lista para marcharse a comprar los últimos regalos de Navidad que faltaban. - Puajajajajajaja, esa bufanda te queda fatal. - rió ella al verle salir de su habitación. Cabe desracar que Yuri Plisetsky y Rin vivieron en a misma casa durante esos 7 años, pero esa es otra historia.

- ¿Y está? - dijo el chico enseñándole otra bufanfa de diferente color.

- Déjame ver - dijo ella acercándose al chico y cambiando su bufanda con cariño.

- ¿Has acabado ya? - dijo él. Tenerla tan cerca hacía que se pusiese nervioso aún después de tanto tiempo.

- Casi, ten paciencia - respondió mientras aún seguía atando la bufanda con mucha concentración. - Listo, ya estás. - anunció y a continuación le dio un beso en la mejilla al chico - está sí te queda bien, Yuri.

Yuri estaba en otra parte, en otro planeta o incluso otro universo. Veía los labios de la chica moverse y sonreír dulcemente, pero no oía nada de lo que ella decía. Estaba paralizado, con la mano tocando el lugar donde momentos antes habían besado los labios de la chica. Esos labios rosas, tan suaves y que tantas ganas tenía de probar. Aquella iba a ser la noche. Ese sería su regalo para la chica.

- ¿Yuri? ¿Yuuuri? Tierra llamando a Yuri. ¿Estás ahí, Yuri? - dijo la chica mientras seguía riendo y agitando la mano delante de los ojos del rubio.

- S... sí, dime. ¿Qué me he perdido? - respondió él.

- Vámonos ya, Yuri, antes de que cierren. - dijo ella riendo una vez más.

Los jóvenes salieron de la casa y tomaron un autobús hasta un centro comercial de la zona.

- ¿Y a Viktor? - preguntó Rin sobre el regalo para su entrenador.

Ya llevaban 3 bolsas llenas de cosas: ropa para Mila, calentadores para Lilia, un libro de poesía para Georgi, un abrigo nuevo para Yakov, hasta juguetes para Makkachin. Además, entre ellos habían quedado en no regalarse nada, para no gastar demasiado dinero ya que seguían siendo estudiantes y el dinero no crecía en los árboles, pero en secreto ambos ya habían comprado varios regalos para el otro.

- Para el viejo nada, no se lo merece. No ha querido coreografiar mi última práctica. - dijo Yuri indignado.

- Pero siempre te está ayudando Yuri. Y además, mañana es su cumpleaños. Con más razón deberíamos comprarle algo.

- Ya tiene regalos para su perro, ¿qué más quieres?

- Yuri, no seas así. - le miró con seriedad.

- Está bien... no te enfades... ¿qué tal si le compramos un nuevo conjunto de patinaje? El otro día le oí quejándose de que el azul era ya muy viejo.

- ¡Qué gran idea, Yuri! - saltó sobre él para abrazarlo

- S... sí, supongo que sí... - murmuró él con la cara roja.

Tras comprar el cojunto de Viktor, decidieron tomar algo antes de volver a su casa para prepararse para aquella noche.

- Un chocolate caliente con un pedazo de pastel Red Velvet, por favor. - pidió Rin.

- Un chocolate caliente con un pedazo de pastel de queso, por favor. - pidió Yuri.

Tras tomar sus respectivos pedidos, tomaron las bolsas de las compras y volvieron a casa mientras seguían charlando.

- Yuri, ¿me peinas? Por favor - le miraba con ojos de cachorrito.

- Eres como una niña pequeña - gruñó él, mientras acababa de ponerse una corbata roja en conjunto con el vestido de la chica. Le encantaba que ella pareciera una niña pequeña. Le encantaba su vocecilla y su murada era irresistible. No podía negarle nada.

- Oye, si yo solo te he pedido que me peinases. - se quejó ella.

- Ven, anda. - dijo él antes de despeinarla mientras sonreía.

- He dicho peinar, no despeinar - rió ella también.

- Tampoco te queda tan mal así, no sé. Piénsalo - dijo mostrándole la cámara delantera de su móvil para que se viera, usandola a modo de espejo.

- Y a ti tampoco - dijo ella antes de despeinarle a él también y empezar a reírse.

Ambos reían, pero Yuri paró de repente y se quedó mirando embobadon a la joven. Estaba preciosa. El vestido rojo le quedaba increíble. Ni siquiera con los tacones era más alta que él, lo cual le parecía adorable. Y ese collar de plata se lo había regalado él en su último cumpleaños. Incluso despeinda estaba preciosa... ella eran preciosa a su vista.

Su risa, su voz, su mirada, su sonrisa, su forma de expresarse, sus gustos, su pasión por el patinaje, su dulzura, todo de ella le encantaba. Ella le encantaba.

La tomó de la mano con suavidad y ella paró de reír y le sonrió confundida.

- ¿Qué pasa, Yuri? Ya me vas a peinar - bromeó ella.

Yuri no respondió, solo se quedó paralizado mirando como sus manos encajaban perfectamente, rozando su piel suave y como sus uñas estaban perfectamente pintadas con un color blanco y mucho brillo.

- S...si. Traeme el peine, que si no, va a quedar mal.

Tras peinarla con máximo cuidado, con todo su cariño, ató un lindo lazo rojo para decorar el peinado de la chica, que sonsostia en una parte suelta y una mecha a cada lado que se juntaban detrás.

- Lista, ya estás.

Rin se levantó y quiso abrazar a Yuri, pero cuando fue a hacerlo se resbaló, cayendo sobre este en el sillón de la sala de estar. Estaban muy cerca, a míseros centímetros. Ambos tenían la cara super roja, y estaban nerviosos, Rin decidió abrazarle por la cintura en ese momento, colocando su cabeza en el pecho del chico.

- Rin, ¿estás bien? - preguntó el rubio preocupado.

- Sí, tranquilo. Estoy bien.

Yuri la rodeó con sus brazos y siguieron así un rato más, en silencio, pensativos.

Rin se incorporó levemente y se acercó a la cara del chico

- Yuri, sé que es mañana, pero,... - entonces tomando su mejilla con una mano, le dio un suave y corto beso en la comisura de los labios - ¡Feliz Navidad, Yura!

Luego se levantó y fue corriendo a su habitación para tomar de allí todas sus cosas y los regalos ya envueltos.

Yuri se quedó tumbado, con la cara muy roja y susurró: Feliz Navidad, Rin

Al rato llegó Lilia para recogerles y llevarles al salón donde celebrarían todos juntos la Nochebuena. Los jóvenes casi sin hablarse o mirarse tomaron todas sus cosas y los regalos y subieron al coche de Lilia. Y mientras Lilia y Rin mantenían una conversación tranquila, como si no hubiera pasado nada, Yuri estaba pensativo "¿Por qué habrá hecho eso?, ¿Sentirá lo mismo que yo?, ¿Y qué es lo que siento yo?, ¿Lo habrá hecho para jugar conmigo? No. Ella no es así...".

Cuando ya llegaron al salón, todas las miradas se posaron sobre la joven pareja que iba vestida al conjunto, pero que estaba muy separada, muy seria. Viktor pensó en hablar con Yuri primero.

- Buenas noches a todos - saludó Rin de forma seria con una sonrisa algo forzada en la cara.

- Rin, cariño, estás preciosa. Ese vestido te queda espectacular, ¿a que sí, Georgi? - se acercó a ella Mila mientras giraba para verla desde todos los ángulos posibles.

Georgi se acercó y tomó a Rin de la mano haciéndola girar sobre sí misma como una bailarina.

- Espléndido, como siempre, señorita Akabane. - acabó diciendo.

- Oh vamos, Georgi, llámame Rin, que ya nos conocemos desde hace años.

Los tres empezaron a reír. Mientras tanto en otra parte del salón, Yuri seguía pensativo y un preocupado Viktor intentaba hablar con él.

- ¿Qué ha pasado? - le preguntó.

- Nada importante - le respondió el rubio evadiendo su pregunta.

- Es importante, Yuri. Desde que habéis llegado no habéis hablado, ni siquiera os habéis mirado. No estabais juntos, sino separados. ¿Ha sido en el camino hacia aquí?

- No

- Entonces ha sido mientras estabais en casa. ¿No?

- Si

- ¿Ha sido ella o tú?

- No lo sé... simplemente no lo sé Viktor. Ella... y yo... yo... no hice nada... simplemente me quedé ahí paralizado... pero también quería hacer algo... pero no pude... y ella está enfadada, o decepcionada, o triste, o no lo sé... y estoy desesperado porque no sé como hablarle desde de eso...

- Yuri, tranquilízate, por favor. A ver, dime. ¿Qué hizo ella?

- Ella... me besó...

- ¿Y qué pasó? ¿Fue porqué si? ¿Se cayó? ¿O te lo iba a dar en la mejilla?

Tras contarle lo ocurrido, un triste Yuri se quedó a la espera de una respuesta por parte de su amigo. Rin mientras tanto seguía dándole vueltas al asunto, aunque estuviera con Mila y Georgi que no la dejaban estar quieta un momento "Rin, prueba esto, está riquísimo" "Rin baila conmigo" "Rin ven, mira qué centro de mesa más bonito" "Acompañame, que me tengo que retocar el maquillaje"

Después de dar mil y una vueltas al salón, Rin por fin se pudo sentar. Por casualidad se sentó en una de las mesas cercanas a Yuri y Viktor, así que escuchó su conversación mientras se escondía de Mila y Georgi.

- Deberías decírselo. ¿Sabes, Yuri? Ella no esperará por ti para siempre. Ahora mismo se sentirá no correspondida.

- ¿Y qué le digo? ¿Cómo se lo digo? Si es que no querrá ni verme.

- Dile todo lo que me has dicho a mí. Dile que te importa, dile que no quieres perderla, dile todo. Estoy seguro de que sí querrá hablar contigo

- Lo intentaré...

La cena había empezado, todos el grupo estaba sentado en una mesa redonda enorme. Viktor estaba al lado de Yuri, y al lado de este estaba la castaña con una gran sonrisa en la cara. Junto a ella estaban Mila y Georgi. Y el resto de sitios los ocupaban los entrenadores.

- ¿Qué tal lo estás pasando, Yuri? - le preguntó la chica casi a susurros tras tocarle el brazo.

- Rin.. - dijo sorprendido - Yo.. esto... bien, si. ¿Y tú?

- Estoy cansada - rió ella señalando a los otros dos patinadores que habían estado mareándola todo el rato.

- Ya os he visto. No te dejaban parar - rió el chico.

Pasaron la cena hablando y luego empezó la música. Iba a empezar el baile. Rin salió a tomar el aire y Viktor la siguió.

- ¿Todo bien, pequeña?

- Hola Vitya, sí. Ya va todo mejor, creo. ¿Te lo ha contado?

Viktor simplemente asintió.

- ¿Crees que debería hablar con él?

- Sería una buena idea.

Entonces salió Yuri en busca de Rin

- Rin Akabane, está sonando tu canción favorita. Esto... ¿me concederías el honor de bailarla conmigo? - hizo una reverencia enfrente suya tendiéndole la mano.

Rin miró a Viktor quien estaba súper emocionado asintiendo (muy shipper y tal)

- Acepto tu propuesta, Yuri Plisetsky. - respondió la chica tomando su mano.

Luego los tres empezaron a reír y el rubio llevó a la castaña a bailar.

Era una canción rápida, con mucho ritmo. Esta se acabó y empezó una canción más lenta. Yuri miró a Rin. Pensaba que se alejaría, pero esta solo hizo una reverencia y se quedó quieta enfrente suyo. El chico se acercó y puso sus manos en la cintura de la chica. Ella puso sus manos en sus hombros, rozando su cuello con los pulgares. Ambos sonrieron y empezaron a bailar, con delicadeza, con dulzura.

- Rin, tengo algo que decirte. - susurró el chico.

- ¿Está todo bien, Yuri?

- Sí, ahora sí. - atrajo a la chica hacia su cuerpo abrazándola mientras aún bailaban.

- Vale, entonces dime.

- Rin, yo... te quiero. Antes me quedé paralizado, porque no esperaba que tu sintieras lo mismo.

- Yuri...

- Y es que no... no quiero perderte por nada del mundo. Eres la persona más importante para mí. Desde que nos conocemos siempre has estado a mí lado, incluso aunque yo te trataba mal hace un tiempo. Tú seguías intentando ser mi amiga, seguías intentando alegrarme el día.

- Siempre lo voy a estar, ya lo sabes, Yuri

- Y yo no quería estropear nuestra relación... no quería estropear nuestra amistad diciéndote mis estúpidos sentimientos.

- Yuri, mírame - le dijo ella cogiéndole por la cara. - tus sentimientos no son estúpidos. Y yo... Yuri... yo también te quiero. Eres increíble, Yuratchka - sonrieron juntando sus frentes.

La canción estaba terminando. Entonces, Yuri la cogió por el mentón y la miró a los ojos.

- No te lo he dicho antes, pero estás preciosa, Rin - le susurró al oído.

Ella se sonrojó como nunca y eso que ya le había dicho más veces eso, pero aquella vez había sido única.

Después el chico posó sus labios delicadamente sobre los de ella, con miedo de romperla si la tocaba, con miedo de que se desvaneciese como si de un sueño se tratase.

Aquel había sido su primer beso. El primer beso de ambos.

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Muchas gracias por leer esta historia, espero que la estéis disfrutando mucho.

Siento mucho la tardanza con los capítulos nuevos, pero estoy trabajando en varios especiales y en otras historias, y entre los estudios y tal, no tengo demasiado tiempo.

Nos vemos pronto

🤍Rin🤍











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