No tan distintos.

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Narrador POV.

Una mañana algo fresca al inicio acechaba ya el suelo japonés, y con ello, el día de muchos estudiantes universitarios iniciaba. Y nuestro protagonista y su tutora no eran la excepción.

El día había comenzado muy temprano para ambos. Por su parte, el rubio, se lo propuso para no volver a llegar tarde y ser regañado por el profesor de turno. A decir verdad amaba la carrera que estaba estudiando, era un sueño que poseía desde muy pequeño. Pero cuando vio por primera vez a sus héroes en la TV de la sala de la casa que compartía con su madre, se propuso ser uno de ellos.

El camino no fue fácil, claro esta, más aún con muchas de las cosas que le pasaron en el camino, pero no iba a rendirse. No era su costumbre hacerlo, y menos lo sería ahora. Todo, absolutamente TODO, lo hacía por ella.

Por otro lado, su tutora no era muy diferente a el. Desde pequeña siempre había deseado ser una gran bailarina, como a todas las que admiraba, y su madre la había impulsado a estudiar esta carrera que tanto amaba y que llevaba con orgullo el peso de ser la "Presidenta del Consejo escolar y universitario".

Ambos tenían algo en común, el ser más grandes aún por fuera de las carreras que habían estudiado. Solo el futuro y cuanto esfuerzo por cumplir sus metas pongan, deparará que sera de ellos. 

Jake POV.

Ah, un nuevo día comenzaba para mi, y ya estaba arrepintiéndome de no haberme llevado una chaqueta o suéter antes de salir de casa. Maldita sea mi suerte de no tener el poder de prevenir el tiempo.

Por otro lado, salí temprano para no tener que andar inventando excusas con el profesor. No me sentía de ánimos para ello, así que levante a las 6 AM solo para poder estar a tiempo. Además, el chico que conocí ayer en el gimnasio... Ryuji, dijo que pasaría por mí para ir juntos.

Parecía un buen chico, y definitivamente era apasionado por lo que hacía y estudiaba. Definitivamente era el prototipo de amigo que siempre había querido tener en mi vida. Además, le gustaban los videojuegos, lo que le daba puntos extras en el amigometro.

Lo esperé durante casi diez minutos, hasta que por fin apareció a lo lejos, gritando mi nombre con desesperación y angustia diría yo. Creo que tenía miedo de que me vaya sin el, o es muy dramático. Me inclino a la segunda opción.

- !Jake¡ !Jake¡ !No te vayas sin mí por favor¡- Gritó, antes de colocarse a mi lado, viendose notoriamente agitado por la pequeña carrera que acababa de realizar.

- Oh, buenos días, dormilón. ¿Cómo ha amanecido el bello durmiente?- Dije, con notorio sarcasmo.- Hace diez minutos que te espero aquí parado, ya se me estaba congelando el trasero.- Luego me pregunto, que porque no tengo amigos.

- Tampoco es para ponerse así, solo fueron diez minutos. Y dormí bien, muchas gracias por tu preocupación.- Dijo, contestando a mi sarcasmo, lo cual me saco una pequeña risa.

-Bien jugado.- Reí suavemente, chocando su puño.- ¿Nos vamos?- El chico teñido a mi lado solo asintió para comenzar a caminar a mi lado.

Pasamos todo el camino discutiendo sobre videojuegos y riendo a carcajadas con las estúpidas bromas que hacíamos. Todo fue tan rápido que no me percaté de que ya habíamos llegado a la universidad. Una pequeña castaña de cabello enmarañado se paró frente a nosotros.

- Buenos días a ambos.- Dijo, para luego mirar a mi compañero, y darle un pequeño beso de pico.- ¿No nos vas a presentar cariño?- Efectivamente era su novia.

- Oh si...- Dijo, aún un poco atontado por el beso.- Jake, ella es Haru, mi novia y amor de mi vida. Haru, el es Jake, el nuevo en la universidad y mi próximo mejor amigo.-

Lados Opuestos. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora