El corazón del metal

Capítulo 2

Bueno, creo que no hace falta decirlo, pero en caso de que no estuviera claro antes:

Descargo de responsabilidad: Todos los personajes, escenarios, etc. públicamente reconocibles son propiedad de sus respectivos dueños. Los personajes originales y la trama son propiedad del autor de esta historia. El autor no está asociado de ninguna manera con los propietarios, creadores o productores de ningún material previamente protegido por derechos de autor. No se pretende infringir los derechos de autor.

Gracias, por favor déjame saber tu opinión sobre mi trabajo.

¡Ama siempre!

El tiempo había pasado en un torbellino, con Goten encontrando ropa abrigada para su compañía, preparando té y reuniendo las herramientas y suministros necesarios. Mientras que todo el tiempo la joven solo había intercambiado cortesías comunes cada vez que Goten le traía algo, lo cual terminaron en los primeros diez minutos de su llegada.

A pesar del alboroto que había creado, la casa estaba silenciosa, casi demasiado silenciosa.

En pocas palabras, los últimos veinte minutos vieron a los tres ocupantes de la casa, en el caso de Goten volverse cada vez más curiosos y observadores, la mirada de la mujer se perdió en las profundidades del infinito, y para bien, Cepheus se volvió más irritable con cada minuto que pasa.

Goten finalmente había encontrado su cauterizador. Lo guardaba en su almacén ya que no había tenido que usarlo en bastante tiempo ahora, era el que usaba anteriormente, y desde que compró uno nuevo lo guardó en casa en caso de emergencia. No pensó que lo necesitaría hoy, dada la expresión aburrida e irritada que marcaba el rostro de su paciente. Pero eso era lo que pasaba, el perro, aunque era uno de sus pacientes más frecuentes, aún lograba ponerlo por un bucle con su expresión aparentemente impenetrable, la misma expresión de 'qué diablos te importa' adornaba su rostro, ya fuera una uña encarnada o una herida abierta.

Parecía que si se le diera la oportunidad de conversar de manera similar a un ser humano, enumeraría todas las quejas del mundo y se las arreglaría para encontrar una falla incluso en las cosas más perfectas.

Bueno, en realidad el propio Goten nunca creyó realmente en el concepto que la palabra 'perfecto' encarnaba, en su opinión nada era completamente impecable, era solo la mera coincidencia, que si lo que uno buscaba era lo que el otro proporcionaba, las dos piezas parecían encajan, creando así la ilusión de lo que la gente llama 'perfecto'. Y, por supuesto, estaba familiarizado con el uso universal de 'perfecto' y llegó a la conclusión de que hay ciertas cosas que las personas perciben como deseables universalmente, como la simetría para uno, y está bien, pero luego anunciar que la persona o el El objeto es absolutamente perfecto, era un poco absurdo en su opinión.

Pero, de nuevo, ¿era su necesidad de racionalizar todo, o su desagrado general por la palabra? No lo sabía, tal vez la había escuchado demasiadas veces en su vida como un recordatorio constante para saber exactamente lo que no era. , eh no tiene sentido pensar en cosas que le dan un sabor amargo a la boca ...

Aunque eso todavía lo lleva a pensar, que si la versión de la gente de la 'perfección' era tan difícil de conseguir, casi todos se conformaron con algo menos, como 'bueno' o incluso 'genial' a veces. Porque a diferencia de la 'perfección', Goten sabía a ciencia cierta que esas cosas existían y que no eran ni la mitad de malas, de hecho, a pesar de la ironía de su proceso de pensamiento, esas cosas 'buenas' o 'grandes' pueden ser incluso la versión de alguien. de 'perfecto'!