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Unos días antes de que comiencen las vacaciones de invierno, se celebra una fiesta en la casa de Hwang Yeji.

Naturalmente, significa que la mayoría del alumnado está listo para divertirse antes de regresar a casa para las vacaciones; Jaemin no tiene motivos para regresar con su familia, pero no significa que no esté listo para divertirse con todo lo que tiene. Las últimas semanas habían sido estresantes al menos; de aceptar sus sentimientos a sentirse mal porque a Donghyuck nunca le agradará que vuelva a pasar por tantos exámenes, se pone la ropa más bonita que tiene y que Yangyang no ha robado todavía, y está en eso. Quiere divertirse y no dejará que nada lo arruine desde aquí.

Excepto por, bueno...

— Sabes que no podemos quedarnos aquí para siempre — Le dice Jaemin a Mark con un suspiro mientras se inclina contra la pared del baño frente al espejo — Se supone que debemos divertirnos. No solo eso, sino que la gente querrá usar el baño, Mark.

— Apesta ser ellos — Responde Mark rápidamente. Parece muy cómodo sentado en el inodoro cerrado y jugando me ama, no me ama con las flores en el lavabo. Ya ha pasado por tres, y Jaemin sabe que debería evitar que Mark destruya la decoración de Yeji, pero es tan ridículo que no puede hacerlo porque cada vez que los pétalos llegan a la conclusión de que a Jeno no le gusta él ( lo cual es una mentira, pero depende de Mark averiguarlo), Mark toma otro, y no parece que se detenga hasta que encuentre una respuesta que le guste.

— No puedo creer que seas así porque solo porque te inventaste en la cabeza que...

— Jeno está siendo raro, ¡De acuerdo! — Mark insiste — Está como enfermo o algo así. No lo sé, pero definitivamente está actuando raro, y si salgo, ¡Me seguirá a todas partes! Te dije que se vino abajo con algo, pero nadie me cree.

— ¿Pensé que querías eso? Pensé que realmente querías que Jeno estuviese encima de ti las 24 horas del día, los 7 días de la semana. ¿Qué cambió? Pregunto genuinamente, ¿Qué cambió?

— Yo quería eso... ¡En ese entonces! Pero eso es diferente, no sé lo que quiere cuando me sigue mirando.

Jaemin deja escapar un suspiro mientras se pellizca el puente de la nariz.

— ¡Como si quisiera comerme vivo! ¿Crees que lo cabreé o algo así? Es tan intenso — Mark se estremece — Estoy asustado y excitado, en serio. No puedo decir que odio esto, pero no sé si me gusta. Hasta que lo descubra, lo estaré evitando.

— Oh, Dios mío — Gruñe Jaemin — Ambos son tan estúpidos, no puedo hacer esto.

Para consternación de Mark, alcanza el pomo de la puerta, y este último no tiene otra opción que seguirlo afuera una vez que el baño sea tomado por nada menos que Yangyang.

— En serio, chicos, orinar es un derecho humano y me están privando de eso, ¡Lo cual apesta! — Grita este último mientras cierra la puerta.

Entonces se refugian en la cocina, lo que significa que Jaemin está buscando el alcohol más fuerte que hay y Mark sigue lloriqueando.

— En serio, no te entiendo — Dice Jaemin una vez que ha encontrado un poco de tequila — ¿Cuál es el problema con Jeno estando obsesionado contigo? No sólo quería eso, sino que logró hacer que todos por aquí estén hartos de oír hablar de ello. Hemos tenido suficiente, por el amor.

— Voy a ignorar lo que acabas de decir — Anuncia Mark mientras se apoya en el mostrador.

— Solo digo que tienes que disfrutar de tus dorados tiempos gay. ¿Alguna vez has considerado hacer un movimiento ahora que tienes la atención de Jeno para ti, que es más de lo que el resto del cuerpo estudiantil podrá decir?

Harto del culto a los besosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora