capitulo 10

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"A mi me sorprendió que la hija de la condesa Bells fuera la reina de la caza"

- el segundo lugar, no está mal- dijo el rey animando a su segundo hijo el duque de Northwest.

-claro que no está mal, además esto es solo una simple competencia - dijo la reina alegremente porque aunque su hijo no ganara, el primer príncipe no había sido ni mencionado en los puestos. La reina Rachelle se apoyo en el antebrazo del rey - bien hecho, Aleph - termino animando la reina Rachelle, quien pensaría que tendría un lado tan maternal.

Aleph no se sentía halagado por la palabras de sus progenitores, debido a que no estaba acostumbrado a tratarlos tan fuera del protocolo real, pero ahora estaba preocupado por como mejorar su relacion con Ashia que siempre lo mantenia detras del muro que ella tenía.

- ¡Papá!- dijo Callum corriendo hacia el duque de Northwest.

Aleph salió de su trance para cargar a su hijo en brazos y sonreírle.

- Callum dije que no corrieras - dijo la duquesa un poco agitada apareciendo en escena.

Ashia inmediatamente desvió la mirada del duque de Northwest, debido a su recién adquirido hábito de dejarlo con la palabra en la boca como lo había pasado horas atrás. Ashia se sentía abrumada por todo lo que estaba pasando, y odiaba llegar a su límite porque su cuerpo lo desfogaba en llanto algo que detesta de ella, solo la hacía sentir más débil de lo era.

- Lo siento - dijo Callum arrepentido por desobedecer a su madre.

- esta bien Callum, ¿cierto Ashia? -dijo el rey interviniendo en la conversación de la familia.

- si majestad - respondio Ashia rendida ante la pérdida de autoridad ante su hijo.

Callum examino a su abuelo el rostro de su madre, el se sentía apenado amaba a su mamá, bajo de los brazos de su padre aturdido por la nueva perspectiva que veía. Apoyándose en la cintura de su mamá. 

- Este pequeño, crece muy rápido - se regocijo el rey

Era poco decir que el rey quisiera a su nieto, lo adoraba y lo consentía en todo los aspectos, Ashia le incomodaba esa actitud debido a que su hijo seguía siendo pequeño y no quería que se pierda en los encantos del consentimiento, pero prefirió callar como estaba acostumbrada.

- Ashia, ¿Dónde estabas, querida?-dijo la reina acercándose a la duquesa de Northwest.

- Salude a algunas señoritas, y me recorrí los alrededores con Callum, su majestad - dijo Ashia vacilante.

- Es bueno que te dediques al pequeño príncipe - dijo su majestad interviniendo.

Ashia asintió sonriendo tímidamente. Había pensado en todo lo sucedido, sabia que la reina había mandado a Chiara que hablara con ella, pero no había caído en sus insinuaciones. Luego lo de Aleph y el príncipe Brandon. El tenía derecho a estar molesto, no sabia, las medidas del rey deben acatarse aunque para ella era una medida que involucraba mucho a su hijo en la enemistad que tenían los príncipes. Su mente necesito un poco de espacio a solas, para meditar. Cuando se encontró con la señora Berta, le comento sobre que pensaba su hijo y comprendió cuan preocupado estaba poniendo a su pequeño.

- Gracias su majestad - dijo dirigiéndose a el rey de North - ...Madre, no interrogue a mi esposa, estamos en un evento real  - comento el duque de Northwest que aprovechó para acercarse a la duquesa de Northwest - Esposa me acompañaría al banquete.

Ashia se sorprendió por la intervención de su esposo que normalmente no solía involucrarse, pero sinceramente no le agradaba estar a solas con el, casi provocaba la misma sensación que estar con la reina de North.

La Duquesa TítereDonde viven las historias. Descúbrelo ahora