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Tónet ya estaba caminando de nuevo, por ahora le costaba mucho trabajo y le dolía bastante, pero una o dos veces al día, con la ayuda del chino caminaba. Cada vez que caia al piso o se volvía a sentar se sentía peor que antes, ya quería moverse, ya quería caminar y ya quería ayudar. Se sentía como un abuelo al que debes de cuidar, como un bebé que no puede hacer nada más que llorar y quejarse.
El quería hacer algo, quería ser algo, no solo quedarse en su cama viendo cartón Network, que de echo le gustaba mucho, pero igual.

Cierto día, Yun salió a comprar cosas para comer, como siempre dejando a Tonet solo en la mansión. Era normal que Tonet se preocupara porque siempre había la probabilidad que se cruze con algún policía, o alguien le reconozca. Pero esta vez era diferente.
La lluvia caia incontrolablemente sobre la ciudad de los santos, el cielo era gris y la niebla se sentía a lo lejos. El ambiente estaba frío y húmedo, las calles vacías y la ciudad extrañamente silenciosa. Las gotas de lluvia golpeaban su ventana constantemente y los segundos pasaban como horas para el Moreno sentando en la cama. El chino no regresaba, y ya había pasado demasiado tiempo de lo que normalmente se tardaba.
Estaba temblando de los nervios, imaginandose todas las situaciones y posibles cosas que le pasaron a su chino, ¿y si lo encontraron? ¿Y si lo descubrieron? ¿Y si le arrestaron y esta en la cárcel? ¿Si se encontró con Conway o Greco?
Sentía que sus ojos lloraría vidrios si no hacía algo. Y lo peor es que no podia hacer nada, apretaba su frazada con fuerza mientras miraba sus piernas inestables. Escuchaba los disparos a su alrededor, un helicoptero volando por encima de él, el sonido de recarga, la voz de conway dando órdenes por la radio, los patrullas acercándose, abriendo su puerta y apuntandole. Mientras el chino estaba en Federal, parado de espaldas siendo acusado de sus delitos, para que uno de esos malditos uniformados le esté apuntando por la espalda, y dispare sin remordimiento. Mientras el chino cae al suelo desplomado y se desangra frente a todos esos policías enurgullecidos por su gran trabajo. Esa imagen que se creó en su cabeza fue su perdición, con tan sólo pensarlo sintió su mundo desplomarce.
No dejaría al chino solo, no lo dejaría morir bajo las sucias manos de esos picoletos. El chino era su vida, y el mataría y siempre pudo matar por el.

Con todo el esfuerzo que pudo, respiro ondo, y se movió. Cuando intento mover sus piernas, fue tan doloroso que se sentía como si mil navajas se incrustaran en sus piernas. Sus brazos perdieron fuerzas y sentía el dolor agudo en su estómago. Pero no podía dejar de pensar en él pelirrojo.
Aún con dolor infernal, se movió de la cama y logró pararse, se agarro de las paredes y poco a poco camino fuera del cuarto, sentía como el dolor invadía su cuerpo y subía su temperatura, sentía como cada paso que daba le dejaba con menos fuerzas.
Logro bajar las escaleras y casi al final sentía que ya no podía más, ya no podía hacer más por el asiático, aunque logre salir, que haría? Lloraría por el? El asiático no le necesita, solo es un estorbo para este...

Eso pensó al inicio, cuando sintió que veía todo borroso por el dolor, pero Tonet siempre se caracterizó por el carácter terco y nesio que tiene. No logro desplomarce, y camino hasta el final de la casa.
Salió al patio. Una ilusión, nostalgia y tristeza se vinerion a su mente, recordaba muy buenos momentos en este patio, la piscina y donde estacionaban el helicoptero, recordó a su tío, a nadando y a los demás, sintió el nudo en la garganta con ganas de llorar y sufrir pero recordó que aún tenía a su asiático, y no iba a perderlo como a los demás. No importa si no podía hacer nada, igual lo intentaría.

Aunque esas fueron sus palabras, cuando se acercaba más y más a la puerta, sentía menos estabilidad que antes. Todo comenzó a ponerse borroso y el dolor le estaba consumiendo torturosamente. Aunque en su mente solo estaba el asiático, de un momento a otro todo se volvió negro. No pudo pensar más y cayó al suelo. Se quedó inconsciente y tan sólo escuchaba como las gotas de lluvia tocaban su cuerpo, haciéndole daño con la fuerza que caían.
Afortunadamente, el chino no estaba muerto o en la cárcel, y cuando Tonet cayó desmayado, poco tiempo después el chino llegó con las bolsas de compras.
Su cuerpo se retorcio al ver al Moreno tirado en el piso, solto las bolsas y corrió hacia el menor.
Lo levantó y lo puso contra el, apoyo su cabeza a su pecho y al escuchar su corazón palpitar, sintió tanta calma como nunca antes la había sentido, jamás había sentido tanto halibio como en ese momento.
-Polque saliste Tonet, estas loco?!
Tonet, abrazo a Yun con las pocas energías que tenia, y comenzo a llorar en el honbro de este. Sus lágrimas se juntaban con la lluvia y los llantos se confundían con la niebla.

-No quería perderte, tenía miedo

-Pelo que dices

-Tenía miedo que no regresaras, eres lo único que tengo

Yun escucho su corazón palpitar por primera vez después de este comentario, tanto tiempo pensando que su corazón permanecía entre cadenas, pero hoy logró escucharlo. Bajo la lluvia dañina de la ciudad, mientras se mojaba bajo esta, con "El" llorando en su hombro.

-Jamás te dejale tone

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Tonet: *Ya en la cama de nuevo, seco y un poco adolorido* porque tardaste tantoooo, entre en crisis!

Yun: Es que había mucha gente en el supel, y fui a otlo. También la lluvia fue molesta

Yun: NO VUELVAS A SALIL SOLO MALDITO GILIPOLLAS, CASI ME MATAS DEL SUSTO CABLON!

EH MALICON!! 𝓒𝓱𝓲𝓷𝓸 𝔁 𝓽𝓸𝓷𝓮𝓽 𝓢𝓹𝓪𝓲𝓷𝓡𝓟 Where stories live. Discover now