Mirrors (Jimsu)

Como si fueras mi espejo

Me mantenía concentrado y con mi vista al frente, una gota de sudor corrió a través de mi frente pero lo dejé pasar.

A través de la mira del fusil logré encontrarlo, el se mantenía oculto tras un espacio pequeño entre la parte trasera de un edifico, me dolía la espalda por la misma posición pero no me movería por nada del mundo.

Ya habíamos cometido un error, otro paso en falso y ambos terminaríamos en el más allá.

Al volver mi vista en la mirilla pude ver como se movía con sigilo para entrar al edifico abandonado, vestido completamente de negro -al igual que yo- se camuflaba perfectamente con el ambiente.

- Agust  a Min- escuché como me hablaba por el intercomunicador y lo encontré subiendo las escaleras del 2do piso- voy por el objetivo, se encuentra aún en el último piso.

-Te veo, no te perderé de vista así que ve tranquilo- lo vi pasar por una ventana en dirección al último piso, y luego perderse por un pasillo oscuro- trata de activar los lentes infrarrojos antes de entrar.

- Obvio que lo haré, ¿Me crees estúpido?-  sentí su sonrisa a través del comunicador y eso soltó una risa en mi.

- Bueno... recordando la misión de Inglaterra, diría que sí.

- Como iba a saber yo, que el bebe se pondría a llorar en ese instante.

Recordaba muy bien esa misión, era de mis favoritas, nos encomendaron atrapar a un ex-convicto que se había escapado de la cárcel de máxima seguridad de dicho país.

Lo localizaron en una residencia en Londres y es por ello que nos dijeron que debíamos pasar desapercibidos como empleados del lugar, a mi me tocó ser un mayordomo y a Agust una mucama. Sí, así es una mucama, su complexión algo delgada lo dejaba pasar desapercibido y para mí, el verlo con falda fue una de las mejores cosas que me pudo pasar.

Estábamos listos para esa misión y cuando esté llego la jefa de las mucamas mando a Agust a cambiar al bebe de una de sus compañeras.

Debíamos estar juntos para poder atraparlo así que tuve que hacer de las mías para poder llevar al objetivo cerca de Agust, la zona de los dormitorios quedaba cerca del salón principal y para nuestra fortuna está se conectaba por un pasillo. Así que mientras Mi compañero cambiaba al bebe, yo le había dicho al objetivo que debía tomarle medidas para un nuevo atuendo, así que de lo más confiado lo guíe por el pasillo hasta el salón principal.

Yo debía distraerlo mientras Agust se le acercaba por detrás para poder administrarle la sustancia que lo dejaría inconsciente. Todo iba de acuerdo al plan hasta ese momento...