Hermosa (Kagaya y tú)

V

TN

- eres muy inteligente TN- habló agarrando mi barbilla para que lo viera
- solo dime el porque me quieres
- por nada importante en realidad solo... Hacer sufrir a ese desgraciado
- eres un...- iba a agarrar mi Katana pero antes de que me diera cuenta él ya me tenía agarrada de ambos brazos en cada lado de mi cabeza
- Vamos TN, tú y yo sabemos perfectamente que no me puedes hacer nada y menos con esa cosa- señaló la espada.
- si que soy una estúpida
- no solo eso, también eres muy egocéntrica, solo pensaste por ti y no por tu amado, ni por tu amigo ni por nadie.

Quería decirle algo pero sabía que tenía razón, cada maldita palabra que decía era verdadero, pero que más podía hacer, lo hecho hecho está ¿No?
Él me agarró del brazo y me llevó a un cuarto donde me encerró con llave.

- ¿Y que más piensas hacer?¿Voy a ser la princesa atrapada en el último cuarto de la torre más alta esperando a su príncipe azul?
- tal vez si tal vez no, no lo sé. Ahora cálllate y ni se te ocurra escapar porque te va a ir muy mal.
-... Oye
- ...
- oye, te estoy hablando. Oye, oye oye oye oye oye oye oye.
- ¿Qué quieres?- gritó
- ¿Me puedes dar comida? c:
- no soy tu sirviente
- pues no es mi culpa que no haya desayunado.
-...
- ¿Si me vas a dar comida?
-...
- responde, anda di que si, di que si, di que sí, ándale siiii.
- cállate.
- solo si me das comida.
- no sé porque te tengo de rehén

Escuché sus pasos alejarse así que solo me senté en el piso recargandome en la puerta.
¿Por qué soy tan estúpida? Me decía eso una y otra vez. Solo pensé en mi. No en kagaya, ni en Uzui, ni en nadie. Solo en mí.

- voy a abrir la puerta- dijeron del otro lado- y no se te ocurra escapar.

Me fui a sentar a la cama que estaba del otro lado del cuarto y él entró con una bandeja.

- come rápido
- ¿No vas a salir?
- voy a ver que no guardes nada
- quiera o no, no podré salir de aquí y si lo hago solo será unos segundos antes de ser asesinada por ti.
- si que eres inteligente
- cállate.

Empecé a comer siendo observada por él, no me sentía incómoda pero si triste ya que kagaya siempre me miraba son una sonrisa mientras comíamos y no pude evitar soltar una lágrima por recordarlo.

~en otra parte~

X- lo siento señor, no hemos encontrado a TN- habló un peliblanco
Y- pero la encontraremos- dijo con ánimos un rubio
Z- gracias por los ánimos rengoku- respondió el hombre que estaba frente a todos los pilares- pueden ir a descansar, mañana será otro día.

Todos los pilares se fueron mientras que el patrón camino sin un rumbo fijo mientras pensaba en su amada.
Cuando vió en donde estaba frente a un pequeño río y rodeado de árboles de glicina, él no pudo evitar sonreír ya que ahí... Fue su primera cita. Las lágrimas se hicieron presentes y el hombre solo seguía sonriendo mientras susurró

Dónde estás...