-Rosas para el amor eterno -arrancas una tirándola al suelo sin remordimiento- lilas para la dulzura -haces lo mismo mientras suspiras con pesadez- nube blanca... -lanzas lejos aquel pobre bouquet el cual Aspik se acercó a olfatear-

-¿Por qué tan triste? -te cuestiona la pequeña araña de antes mientras bajaba a la altura de tu rostro con ayuda de su telaraña-

-Tal vez tiene razón Tikki, tal vez somos diferentes -desvias la mirada con dolor-

-Tal vez le deberían de examinar el cerebro -al escuchar aquella voz en tu cabeza, te apresuraste a sacar al pequeño gusano de tu oreja, el cual se quejo un poco por tal acción- yo puedo hacerlo -dijo colgando de cabeza mientras lo sostenias con tus esqueléticos dedos-

-Tal vez si debe estar con "la señorita viva" - exclamas esto último con una voz un tanto graciosa y burlona, pero la cual no dejaba de denotar dolor y molestia- la de rosadas mejillas y corazón latiente -obserbas al pequeño gusano en tus dedos mientras recargas tu codo sobre tus piernas cruzadas para enseguida apoyar tu rostro en tu mano-

-Oh, esa chica no vale la pena -argumenta un tanto molesta la araña poniéndose de tu parte- tú tienes mucho más que ella, tú tienes... ¡una maravillosa personalidad!

-Que es lo que tiene esa malcriada que tu no lo tengas -comenzo a canturrear el gusano aún de cabeza entre tus dedos-

-Lo bello de tu risa no se puede comparar -le segundo la araña-

-Pero tiene pulso -respondes tras un suspiro de derrota mientras dejas al pequeño de ojos verdes junto a la araña-

-Valorado sin razón -canta de nuevo el gusanito-

-Excesivo -le secunda la araña de nuevo-

-Sin Valor -completa el animalito-

-Si él pudiera conocerte mejor -canturrean está vez juntos-

-Y el anillo no lo lleva donde
debería estar -habla la de mitad negras mientras corre hasta tu mano y eleva tu dedo anular con aquella argolla en el-

-Ni siquiera toca piano -aparece el gusano junto a ella-

-Mucho menos cantar, no se puede comparar... -exclama ambos de nuevo-

-¿Y qué? aún respira -murmuras dándoles la espalda- 

-¿Y qué? -cuestiona ambos apareciendo frente a ella-
No importante -habla el y ella alternandose-

-Excesivo

-Sin Valor

-Si solo viera lo
especial que puede ser -cantan juntos de nuevo- Si él pudiera conocerte mejor... -te recuerdas en la tapa de aquel ataúd, la cual servía como respaldo mientras los ves soltando un suspiro, te pones de pié en busca de algo de paz y caminas alejando te un poco de ahí-

-Si me quemo con la no siento el calor -cantas está vez con aquel dolor presente en tu pecho mientras te abrazas por unos segundos a ti misma- si un cuchillo me atraviesa
no hay dolor -caminas en círculos a paso lento frente a ellos- y su corazón palpita y yo muerta se que estoy -te recargas en una puerta cercana-
y el dolor que siento en mí -colocas una de tus manos en tu pecho-
anda y dime no es real, pero aún tengo una lágrima ... que dar -te deslizas de manera lenta y cuidadosa hasta quedar sentada al pie de aquella vieja puerta-

-Lo único exclusivo que tiene algún
sentido es que viva está -exclama el gusano a la altura de su rostro mientras era cargado por la araña la cual colgaba de su telaraña-

-Excesivo -menciona ella-

-Sin valor -argumenta él-

-Pasajero es ese estado todos sabemos muy bien y la muerte es el
remedio que nos llega sin saber -explica la de motas de nuevo mientras el pequeño Aspik se acerca a ti-

El cadáver de la noviaWhere stories live. Discover now