El cadáver de la novia

The Wending III

Aquello terminó por darle aquel valor que necesitaba al chico, pues tomo aquel ramo para sin pensarlo dos veces, comenzar a correr en tu dirección sorprendiendo a todos los que se encontraban aún en la capilla

-Lo siento, pero no puedo... -toma tu mano impidiendo así que dieras un paso más, llamando a su vez tu atención mientras te hacía voltear con una sorpresa impresa en tu rostro- no puedo dejarte ir, no así, no se cuándo, no sé cómo, no se dónde ni por que, pero ya no puedo vivir sin ti -suspira desviando su mirada a un lado mientras baja su cabeza- tal vez fue aquel rostro lleno de lágrimas que vi la otra noche bajo la luz de la luna el que me cautivo, el apoyo incondicional que trataste de darme a pesar de todo lo que dije e hice, o tal vez fue desde antes, tal vez fue aquella noche en la que te vi danzar sobre la blanca nieve con esa hermosa sonrisa adornando tu rostro, aunque también pudo ser anoche mientras nos divertíamos tocando el piano -suspira con frustración- no se, pero lo que si se es que esto que siento aquí -lleva un de sus manos hasta su pecho- no es un simple cariño cualquiera, te amo ____ y no quiero dejarte ir, al menos no así -baja la mirada hasta tus manos, toma tu izquierda y deposita el anillo en la palma de está- es verdad que fue por un error por el que nos casamos la primera vez, pero en esta ocasión ya no será así -eleva la vista con una sonrisa llena de decisión en sus labios- cásate conmigo _____, está vez hagámoslo de la manera correcta

-Adrien... -exclama dolida la ojiazul a sus espaldas-

-Yo no podría Adrien, no quiero que te sientas obligado a hacer esto, no te quiero arrastrar a una vida bajo tierra o peor aún, a un lugar más allá de esta tierra o de la nuestra -obserbas al pequeño gusano y al señor Fu- te amo Adrien y por eso quiero lo mejor para ti, quiero que vivas junto a alguien que te pueda dar una familia, junto a alguien que te pueda dar lo que yo no, quiero que vivas tu vida feliz junto a una mujer que te ama, quiero que vivas una vida plena por mi, y esa vida probablemente la consigas junto ella -le explicas tomando sus manos con cariño mientras veías como el bajabs la mirada afligido- es un hermoso gesto el que estas tratando de hacer por mí y en verdad te lo agradezco con todo mi ser, no sabes lo feliz que me hace escuchar aquello, pero no puedo ser tan egoísta contigo, como dije, quiero que seas feliz aunque no sea conmigo, solo así podré estar en paz -acaricias su rostro- y si alguna vez regreso de nuevo a este mundo, si de me da esa gran oportunidad, espero poder encontrarme contigo de nuevo para poder vivir todo aquello que en esta vida no pudimos -le sonríes tratando de aguantar las lágrimas en tus ojos- por ahora solo se paciente y se feliz por ambos, mi amor, que yo te esperaré de igual manera hasta que el día de volvernos a unir llegué

-Pero yo no podré ser feliz si tú no estás junto a mi, al menos no después de que te conocí, y si es verdad que  podremos regresar y unirnos de nuevo en este mundo, si es verdad que para que eso pase yo tengo que morir primero, en ese caso quiero irme contigo entonces, quiero irme junto a ti y volver a renacer, quiero volver a vivir todo lo que el destino nos arrebato en esta vida, quiero morir junto a ti -te ve con suplica mientas toma la mano con la que acariciabas tu rostro para colocarla en su frente a manera de suplica- por favor..

-No quiero que tomes una decisión precipitada solo por lástima o por algunos sentimientos pasajeros, Adrien es la muerte de lo que estamos hablando, ya no habrá marcha atrás -tratas de hacerle entender de nuevo-

-Se que ya no habrá marcha atrás y no me siento de tal modo, quiero hacerlo, quiero estar a tu lado hasta el final... -
entrelaza tu mano con la de él- nuestro final... -te sonríe con una decisión, sinceridad y alegría la cual parecía hacer brillar aún mas sus verdes ojos- casemonos

-Si él ya ha tomado su decisión, creo que lo mejor sería que lo consideraras un poco querida -te aconseja el anciano Fu- una decisión de tal magnitud no se toma así como así y si él está dispuesto a dar la vida para pasar una eternidad junto a ti, es por qué lo que siente por ti es más grande de lo que crees, debe de amarte mucho para estar considerando dar su vida a cambio, no menosprecies esos sentimientos, piensa un poco más en como se siente él