Broken thread ✧ Kookmin┊T.S

「ˢʷᵉᵉᵗ ᴸᵒᵛᵉ」

Jimin siempre había sido un niño educado, aunque sus padres no le hayan inculcado de tal manera desde casa. Por el simple hecho que eran irresponsables y borrachosos.

Fue suerte que le hayan mandado al colegio porque ahí es donde le enseñaron todos los valores, jamás había recibido algo por su familia, sus tíos por parte de ambos tampoco sabían de su existencia. Simplemente se escaparon con el temor de lo que pudo haber sucedido ya que Yun Hae, madre de Jimin se embarazo a corta edad. Apenas tenía sus 16 años.

Gracias al ser un buen estudiante logró conseguir una beca a un colegio más avanzado, todo era gratis y por supuesto que solo tenía que pagar sus materiales, cosa que se ganaba vendiendo caramelos por la calle o ayudando a hacer recados a cualquier persona adulta que lo necesitara. Siempre luchó por tener una buena vida, salió adelante por su propia cuenta pero no contó en lo que sus padres se metían.

Eran unos malditos drogadictos, todo dinero lo gastaban en apuestas, drogas, hierbas para consumir y al parecer también estafaban. Como era un vicio diario de droga no pudieron dar más y con todo lo que debían murieron, dejando a manos de Jimin, quien apenas conseguía para sus materiales.

Ahora con 22 años aún le faltaba mucho por pagar, estaba cansado de trabajar sin descanso alguno por todo lo que debía hacer, algo que sus padres nunca hicieron. Tuvo que renunciar a sus estudios, estaba decidido a estudiar para Negocios Internacionales pero no lo pudo completar.

Actualmente se encontraba en su habitación llorando de la impotencia, tenía grandes ojeras y estaba muy flaco para su gusto, trabajaba las 24/7.

No dormía bien, no comía a sus horas, tenía una vida bastante complicada y desordenada, no tenía amigos, bueno solo dos. Se llamaban Kim SeokJin y su pareja Kim Namjoon.

Limpiando todo rastro de lágrimas se dispuso a dormir lo necesario para levantarse temprano e ir hacia el restaurante que abría a las 6, Jimin se levantaba a las 5 para estar a tiempo ya que vivía bastante lejos del lugar. Se iría a otro pero era un restaurante que lo pagaban muy bien.

Con tantos problemas y angustia que sentía durmió sus horas necesarias, lo necesitaría para mañana.

꒰࿐։❀

La iluminación de que pronto sería un nuevo día lo hizo levantarse para darse una ducha necesaria, trató de agarrar la ropa más decente que tenía para comer e irse, tomó un bus y para su suerte no había nadie, estaría tranquilo  mientras descansaba un poco. Si, eso necesitaba.

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— Jovencito

El castaño sentía una voz cerca y unos pequeños toques en su hombro, se removió intentando dormir.

— Jovencito, no me ha dicho su parada

Nuevamente escuchó que lo llamaban así que abrió sus ojitos mirando a ambos lados dándose cuenta que el sol ya daba su máximo esplendor mientras las personas transitaban el lugar donde se encontraba.

— ¿Dónde estoy? — preguntó estirandose.

— Estamos en Sejong-daero

Jimin abrió sus ojos sorprendido y con temor, se mordió el labio inferior sintiendo impotencia mientras se revolvía sus cabellos casi maltratados.

— Maldita sea — pagó al señor y bajó a la calle equivocada, ahora estaba muy lejos de su trabajo y quizá lo despidan por llegar bastante tarde.