Mafia of secrets. [REESCRIBIENDO]

Momente.✓

Capítulo XV: “Momentos”.

17/11/1989.
Dubai, EAU.
7:50 p.m.

Verlo en esa faceta. Verlo así de preocupado por ella, por su… hija, era una faceta que nunca me imaginé ver en él, pero le quedaba espectacular.

Justo cuando él sale de la habitación todo queda en silencio, su trío de amigos estaban perdidos, parecían no sorprendidos por cómo él había llamado a la cría hace unos momentos. Desde mi lugar puedo verla perfectamente, estaba a un lado de su cama. Sus facciones aún eran las de una adolescente, capaz unos quince años.

Es hermosa, no se podía negar, para cualquier persona, ella era muy linda, probablemente el tipo de cualquier persona. Su cabello rojo como el fuego, sus pecas, lo poco que vi sus ojos pude notar el azul hipnotizante de estos, todo en ella es bello.

Pero, aún no noto características de los Hossler en ella, aparte de que la diferencia de edad entre ella y Jaden no encajan para nada. Y al parecer, no era la única que tenía un notable interés en la chica. Lucas a mi lado la miraba casi hipnotizado a mi lado, daba gracia, debía admitirlo, pero debemos mejorar su máscara de indiferencia un poco más.

A los segundos de separar mi mirada de la pelirroja ella empieza a recobrar la conciencia y noto el momento preciso en el que los ojos del mayor brillan con maldad.

— Entonces, dejaremos de Jaden le diga a Lyn que le cortaron la pierna, ¿verdad?

Retuve con mucho esfuerzo la carcajada que amenazaba con salir de mi boca.

— ¿Qué mier…?

— La boca.

— Sí, perdón. ¿Qué me pasó? –cuestiona mirándolo.

— Te desmayaste cuando veníamos para acá. Tardaste más de lo que esperaba en desmayarte. –bromea él sacándole una sonrisa.

— Ja ja ja, eres muy gracioso papá.

Aprecio desde mi lugar la complicidad que hay entre ambos. El cómo ella cierra los ojos ante su tacto derritió completamente mi corazón.

Me perdí toda la conversación y solo escuché cuando me mencionaron, estaba tan perdida que solo atiné a asentir en su dirección.

La escena entre mi hermano y ella logra sacarme una sonrisa, no pude evitar pensar en el pasado, en esos recuerdos que daba por enterrados y olvidados.

El celeste de su mirada capta el azul de la mía, ambos lo pensamos, ambos recordamos, ambos volvimos a revivir los recuerdos gracias a los quinceañeros.

Los momentos vividos, los buenos y los malos volvieron, pero nada quitó nuestras sonrisas en muchas horas. Ni siquiera cuando la noche llegó a Dubái y nuestros ojos se cerraron cayendo en los brazos de Morfeo.

19/11/1989
Dubái, EAU.
12:12

— ¿Estás bien?

— ¿Yo? –asiente– sí, ¿tú lo estás?

— Sabes que sí, pero llevas dos días sin salir de aquí, ¿a qué le huyes o a quién?

— ¿Por qué tendría que huir de algo o alguien siendo quién soy?

— No lo sé Sara, pero si no huyes de nada, ¿qué haces aquí?

— Tomar el sol.

— Sabes a lo que me refiero. Desde que te reencontrarte con Jaden no sales de aquí, eso dice mucho.

— Eso no dice nada Lucas, deja de leer tantos libros, te hacen mal.

— Tú me hiciste fan de la lectura, cállate.

Ambos nos quedamos en silencio observando la playa y es que no sé que decir.

— No es muy de reina de la mafia huir del pasado.

— ¿Qué tratas de decir?

— Que estás huyendo de cosas Sara, primero mamá y papá, y ahora Jaden Hossler.

— No huyo de ninguno.

— ¿Entonces que hacemos en Dubái  y encerrados en casa?

— Estamos en Dubái por tu sobrino y estamos en casa porque me siento mal.

— Te sientes mal del corazón porque has comido más que nunca hoy. ¿Te doy un consejo?

— Sorpréndeme. –ironizo.

— Mientras más huyas de las cosas más cabrona será la reacción. No huyas de algo que no vale la pena, sigue adelante y lucha contra ello, si no, sabrás cómo joderte.

Dicho eso se va directo al establo dejándome sola, de nuevo.

Me pongo a pensar en sus palabras y puedo asegurar que se clavaron demasiado en mi mente. Maldito sea el día en el que le enseñé a manipular la mente.

Pero tenía razón, no debo esconderme de nada, menos de algo tan simple como Jaden, aunque seguía esa incomodidad al pensar en él. Supongo que era normal.

O era mi instinto tratando de avisarme el futuro que me esperaba junto a él.

Corto pero bueno, se hace lo que se puede después de tanto tiempo.