Capítulo 1

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¡IMPORTANTE!

Antes de empezar a leer:

Esta historia está hecha con el único afán de entretener, (no de manera profesional) tomando en cuenta peticiones de los mismos lectores para su satisfacción y diversión.

De igual manera, te invito conocer mis proyectos como autor independiente, encuentra y lee mis libros con representación LGBT disponibles en Amazon, tanto formato físico como digital. Historias de romance y fantasía con escenas spicy que te encantaran.

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Antes de que comiencen, les recomiendo leer una guía de lo que es el OMEGAVERSE dando a entender también que como el OMEGAVERSE puede ser modificado al gusto del escritor yo también realicé pequeños cambios, como ejemplo, entre miembros de la familia si un omega u alfa (sean hermanos o padres) está en celo, el aroma de estos será desagradable entre ellos (lo explico porque es importante) así evitaré las relaciones entre personas de la misma familia como he leído en otras historias OMEGAVERSE xD y entre otras cosillas que más adelante verán.

De antemano, agradezco de su apoyo y atención.

Ahora, te dejó disfrutar de esta historia.


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Andrew:

Nuevamente en celo, que maldita lata, odiaba entrar en celo y pasar por los malditos dolores que sufría mi cuerpo y los mareos que sentía a pesar de Tomar los supresores. No había podido dormir y unas grandes ojeras oscurecían mi rostro.

-¡Andrew! ¡Dice mamá que te apresures o no alcanzarás a desayunar! -Llamó Camila, mi loca hermana, tras la puerta-. Y dice Taylor que si puedes...

-¡Sí, lo sé, los supresores!

-¡Te esperamos a bajo!

Taylor era nuestro hermano mayor, y era un alfa, por lo que mi aroma al entrar en celo solía molestar sus sentidos, al igual que el suyo a mí. La única ventaja para mí era que el celo de mi hermano era una vez cada seis meses a comparación del mío, que por desgracia, yo sufría de un extraño trastorno hormonal, y mi celos eran por lo menos una vez al mes, odiaba eso, me traía bastantes problemas y sobre todo dolores. Y Camila, ella era beta, por lo que su aroma era muy sutil y no era molesto para ninguno de los dos ni el de nosotros para ella.

Me dirigí al baño y lo primero que hice fue Tomar los supresores que estaban por terminarse, solo me quedaban 2 píldoras más; espera que surtieran efecto mientras me aseaba. Terminé de arreglarme para la escuela y bajé a la cocina. Mi madre tenía servido el desayuno, Camila terminaba de ayudarle a servir el jugo de naranja. Mi madre al igual que mi hermana era una beta, y nuestro padre... pues que decir de él, nos abandonó, y fue por mi culpa. En la familia de mi padre el que un varón fuera un omega era una desgracia, ya que hacía más de ocho generaciones que ningún varón había sido omega, no hasta que yo resulté serlo. Taylor era el orgullo de mi padre, pero yo... él me odiaba, me menospreciaba, y en ocasiones insultaba, por ello mi madre se separó de él.

-Buenas hermanito -Taylor apareció, alborotando mi cabello con su mano-. Apestabas horrible en la mañana.

-Sí disculpa, pero ya Tomé los supresores.

-Lo puedo notar, ya tu olor es... tolerable, aún hueles como a pies pero lo tolero -bromeó.

-Idiota -sonreí levemente.

Sangre de OMEGAOnde histórias criam vida. Descubra agora