Bell: Si, lo se, pero no me importa lo que crean otras personas, y bien, volviendo al tema principal, vengo a ser aventurero! (Dijo con una sonrisa)

Eina: De verdad! Vaya nunca creí que alguien como tú quisiera ser un aventurero! (Dijo mirando a Bell con algo de sorpresa)

Bell: Si, bueno......ya te dije que es una larga historia.

Eina: Bien, entonces yo seré tu asesora, solo llena este formulario y oficialmente serás un aventurero (dijo dándole un papel)

Bell solo tomo el papel y lo lleno rápidamente para volver a dárselo a la semi-elfa.

Eina: Bueno, supongo que ya es todo, bueno ya que soy tu consejera te diré que tengas cuidado en el calabozo, y que no bajes más del piso 8 o 9 ya que solo eres nivel 1, pero tomando en cuanta lo que hiciste hace unos días te diría que no bajaras más del nivel 10 o 12.

Bell: Bien, muchas gracias Eina-san, supongo que nos vemos más tarde y muchas gracias por ser mi linda asesora (dijo con una sonrisa antes de irse)

La elfa se sonrojó un poco por el último halago de Bell antes de irse, está solo suspiro para tomar el papel que lleno Bell y seguir trabajando pero en ese momento al leer el papel noto algo que le llamo la atención.

Eina: Familia Hestia? Nunca había oído hablar de esa Familia (dijo algo extrañada)

*Con Bell*

Nuestros querido albino solo caminaba algo feliz hacia el famoso "Calabozo o Dungeon" el famoso lugar donde las bestias o mounstruo habitan y por cada piso que bajes estás eran mucho mas fuertes.

Para Bell está era su primera vez llendo a un lugar así, Bell ya había estado en guerras, masacres y también había peleado con bestias y mounstruo de gran calibre, pero nunca había ido a este lugar.

Bell estaba un poco nervioso, no lo podía negar, pero también estaba algo feliz, ya que estaba cumpliendo lo que le prometió a su abuelo en el pasado.

"El convertirse en un gran aventurero y tener un harém" por supuesto quitando lo último.

Después de un rato caminando Bell ya estaba en las puertas del calabozo, muchos aventureros le daban algunas miradas curiosas y otros solo intentaban ignorar su presencia y no meterse en problemas con él.

Bell había llegado al primer piso de la mazmorra, tenía que admitir que no era lo que se esperaba, todo parecía una cueva y estaba poco iluminado, realmente pensaba que sería unos pasillos gigantes con Miles de Moustruos esperándolo para matarlo pero realmente este solo pasaba y bajaba algunos pisos sin señales de ningún mounstruo.

Al llegar al piso 5 este ya podía ver a los Mounstruos, algunos duendes y otras criaturas, Bell solo sonrió para lanzarse sobre aquellas criaturas, Bell solo las asesinaba con elegancia y mucha facilidad, después de un par de horas en las que Bell mató a todas las criaturas que se les puso en medio con una espada y con algunas dagas, este tomo las piedras las cuales soltaban las bestias al ser asesinadas y fue de nuevo a la superficie.

Bell tenía un buen botín, piedras de muchos y variados tamaños que seguramente le darían mucho dinero cosa que a él le sobraba pero un poco más de dinero nunca estaba de más.

Bell seguía caminado por las calles de Orario pero en un momento escucho el sonido de un águila y del cielo bajo su compañera Feyd.

Bell: Hola de nuevo Feyd, como estubo la cacería?

El águila solo levantó una de sus patas para mostrar a un pequeño ratón algo sucio y a medio comer.

Bell: Veo que divertido como siempre.

Danmachi: Bell el último AssessinoWhere stories live. Discover now