Wait on me || Vughead, Jeronica

🌿Capítulo dieciocho.🌿

"Espérame,
       sé cómo querer,
       y quiero quererte un poco más."

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Este cerró su computadora.—Para nada.—murmuró para llevar su mano al muslo de Veronica y dejarla ahí, mientras esta cerraba sus ojos.  Llevó su mano hasta la cortina del avión para cerrarla. Este besó la cabeza de la morocha, la cual ya tenía sus ojos cerrados, pero no estaba dormida.

Al bajar del avión, Jughead tomó los bolsos de ambos mientras la morocha acomodaba las cosas en su bolso.

—Recuerda que yo tengo tu pasaporte, cuando lleguemos al departamento recuérdamelo.

Veronica sonrió mientras tomaba su valija y este le devolvió la sonrisa mientras tomaba su mano.

—¡Tortolitos!—gritó Tyler.

Jughead miró a Veronica—¿Esa voz no es de...?—Veronica asintió:—Tyler—concluyó esta segura.

Ambos giraron su cabeza para ver un chico agitando sus manos y soltaron una carcajada al verlo, caminaron hasta él, tomados de la mano.

—¿Cómo están mis amigos?—preguntó poniéndose entra ambos, abrazándolos por los hombros.

—¿Yo soy tu amigo?—preguntó Jughead.

Tyler lo miró indignado—¡Claro que si!.

Los tres rieron—¿Cómo fueron sus minisvacaciones?.

Veronica toció falsamente—Fuimos a un funeral, Tyler.

—Ouu, cierto—este hizo una mueca—¿Había mucha gente llorando?—ambos lo miraron—Perdón, ya me callo respecto a eso.

—Si, por favor—asintió Ronnie.

—¿Y ustedes reforzaron su amistad o pasaron a segundo escalón?—preguntó viendo como las manos de ambos seguían aún enlanzadas.

—Nosotros...—ambos se miraron—somos diferentes—aseguró Ronnie.

Tyler abrió su boca—alguna cagada con la relación están haciendo y yo no lo quiero saber.—aseguró—Caminemos hacia el auto.

Al sentarse en el auto, Tyler lo encendió—¿Dónde los dejo?.

—En mi departamento

Jughead miró a Veronica—¿Piensas secuestrarme?

—Pues, si lo piensas bien, podría hacerlo. Además de que tengo todos tus papeles legales como documentos y pasaporte.

Tyler miró a Jughead por el retrovisor—a mi no me aviso de esto—negó el chico.

La morocha rodeó sus ojos—No, solamente quiero medirte para hacerte el traje.

—Pero literalmente no hemos llegado. ¿No quieres descansar?

Veronica abrió su boca—¿Tu crees que tengo tiempo para esa mierda?

Tyler golpeó el volante—A ver, pendejos, ¿Dónde quieren que los deje?

—En la casa de Veronica—aseguró Jughead.

—Bien.

Al llegar, Tyler solamente los acompañó a la recepción del departamento para irse nuevamente con su chica. Ambos subieron por el asensor y al entrar, Veronica abrió su boca.

—¿Puedo girarme y correr?—murmuró Jughead al ver a Hiram serio.

—Diría "que sorpresa", pero no me sorprendo en absoluto—negó el hombre.