Capítulo 1 - El comienzo

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—No te pongas así hermano, ojalá reciba su merecido pronto —El hermano menor se levantó de su asiento y con una sonrisa en la cara dijo—: Pienso encontrar la forma de hacer este festival más interesante de todos modos...

—Haz lo que quieras mientras no arruines mi discurso.

...

-Casa de la Familia Moo-Ariele-

Mientras el sol se ponía en el horizonte, desapareciendo entre las hojas de los árboles del bosque; las flores tornasoladas de las enredaderas en la casa reflejaban colores hermosos sobre las paredes de la habitación de Xiang.

—¿Qué tendrá esta semilla de especial? Ese anciano me la entrego diciendo que me ayudaría a cumplir mis deseos, pero, ¿Debo confiar en las palabras de un anciano extraño?... Ahora que lo pienso, no lo había visto nunca antes en el pueblo... —Pensaba Xiang, sentada en su cama mientras observaba con atención una pequeña semilla que sostenía entre sus dedos—. Necesito hacer que funcione.

Xiang era una niña de 12 años con tez blanca como la luna y con cabello negro como la noche.

Todas las personas que vivía en la ciudad y en pueblo compartían en mayor o menor medida la sangre de la familia Ariele, todos los habitantes tenían cabello de color rubio y tez bronceada, a excepción de la familia de la rama principal quienes tenían cabello dorado. Pero Xiang era una excepción, parecía no pertenecer la familia Ariele.

12 años atrás, su madre adoptiva Fang Moo-Ariele, una mujer delgada, perteneciente a una rama de clase baja de la familia Ariele, la encontró tirada cerca de la entrada del pueblo.

Los vecinos decidieron guardar el secreto al descubrir a Fang con él bebe por miedo a que la rama principal decidiera eliminarla. Así fue como Xiang creció, a escondidas de las familias más poderosas y preguntándose la verdad de su origen. ¿Como podía ser la única que no compartiera la sangre Ariele?

—Quiero conocer mi pasado... ¿De dónde provengo? ¿Por qué me abandonaron en primer lugar? Necesito respuestas... —susurraba Xiang mientras el sol ponía en el horizonte.

Cerro los ojos por un segundo y una voz comenzó a resonar dentro de su mente.

—Vaya... —exclamo la voz—. Así que tienes una mente capaz de traerte hasta aquí eh...

—¡Que... —dijo Xiang sorprendida—. ¿Quién eres?

—No tiene sentido responder a esa pregunta en este momento, no lo entenderías... Paso bastante tiempo desde la última vez que un "ser" pudo escucharme.

Xiang miró a su alrededor y se percató de que no se encontraba en su habitación. Un silencio abrumador recorría el ambiente y nada, excepto la voz que resonaba en su mente, podía escucharse. El lugar parecía una especie de espacio vacío, salvo por una pequeña roca en donde parecía estar sentada.

—¿En dónde estoy?

—En ningún lado en particular y en todos a la vez se podría decir. Es a lo que tus llamas "inconsciente" pero... realmente es mucho más de lo que imaginas...

—No comprendo... lo último que recuerdo es estar en mi habitación. ¡Esto no tiene sentido! —replicó la joven desorientada mientras intentaba encontrar una respuesta lógica a la situación—. ¡Debo estar soñando!

—No es un sueño pequeño ser. Este espacio es tan real como tu existencia y esa pequeña semilla, que llevas ahora entre tus manos, fue la que te permitió conectarte conmigo. Como regalo por llegar hasta aquí te ayudare a despertar su verdadera forma —La voz susurro al unas palabras que ella no logro entender y dijo—: Ahora "Brota".

La semilla atravesó las manos de la joven y cayo frente a la roca en donde permanecía sentada. Un circulo de luz blanca comenzó a brillar a la altura del suelo y un pequeño brote plateado creció frente a sus ojos. No media más de cinco centímetros y tres pequeñas hojas brotaron de su punta. Cada una de un color diferente. Una Blanca, otra rosa y la última celeste.

—Este "mundo" en el que vives actualmente no es nada más que uno de los infinitos planos que existen en este universo. El universo espiritual —Continúo explicando la voz—. Los primeros humanos en "conectarse" con este universo fueron los líderes de las 5 familias más poderosas del mundo terrenal. Al final de sus vidas mortales alcanzaron un nivel de conocimiento y espiritualidad tan avanzado que les permitió trascender a este reino.

»Me gustaría seguir explicándote más pero mi tiempo aquí se acaba —La voz hizo una pausa antes de seguir—. Si decides continuar en el camino que te llevara a tus respuestas debes beber un té hecho con las hojas de este brote y meditar a la luz de la luna. El camino se abrirá para ti, pero debo advertirte que no será nada fácil. Estoy ansioso por ver a que conclusión llegas cuando conozcas la verdad... —dijo la voz antes de desaparecer completamente.

Xiang permaneció sentada. Pensando en las palabras que la voz había pronunciado y sintiendo que sus preguntas e inquietudes aumentaban a medida que pasaba el tiempo...

-FIN DEL CAPITULO-

El camino hacia la iluminación divinaOnde histórias criam vida. Descubra agora