‹‹ IX ‹‹

51 5 0
                                    


«Es imposible que mi día sea malo, si estas en el.»







Lily





El día transcurrió con mucha lentitud y a pesar del cansancio que tenía no pude dejar de pensar en cómo haremos para igualar fuerzas con aquellos dementes, Lenne no desaprovecho la oportunidad de descansar en pociones, por suerte el profesor Slughorn no notó esto.

Después de que la cena terminara, con las chicas nos fuimos al dormitorio, debía contarles a ellas lo que los merodeadores Lenne y yo estábamos planeando.

Lenne les contó lo que habíamos escuchado en el bosque prohibido, claro que omitiendo la parte de la transformación de Remus.

— Ni siquiera lo preguntes, Lily. — Exclamó Alice saltando de su cama con vehemencia — ¡Yo me apunto en su ejército!

— ¿Dónde hay que firmar? — Musitó Pandora con un suspiro soñador, como cosa rara en ella.

Sonreí ante aquello, sabía de antemano que podía contar con ellas.

— Pero Lily ¿Cómo piensan reclutar a más gente? — Preguntó Alice, intrigada.

— Púes yo le dije a los chicos que lo hicieran, pero aún no hemos decidido cómo ni donde vamos a reunirlos para prepararnos

Pandora suspiró con expectativa. — Al menos te diste cuenta de que si siente celos por James, me refiero a lo del campo de entrenamiento — Exclamó distraída, tomándonos por sorpresa.

Alice y Lenne se dedicaron una mirada socarrona.

Demonios, ahora quien las soporta.

— Y ¿qué pasó entonces Liz? — Insinuó Alice, mirándome con picardía.

— ¿Cómo qué paso? Nada, no paso ni pasará nada. — Me encogí de hombros y rodé los ojos.

— No te hagas la indiferente Lily — Soltó Lenne con gracia — Ese beso que "James" me dio no te provoco simplemente "nada" y, lo sabes.

¿Cuál es la insistencia de las chicas en querer torturarme así??

— Chicas. . . no siento ESO por James, ¿entienden? no lo siento. — Aclaré, harta de siempre discutir ese tema y a pesar de mentirme a mí misma.

— Si claro, lo que tú digas. — Dijo Alice entre carcajadas — Eso suena igual a que diga que no siento nada por Frank y, enserio amo a ese tonto — Declaró Alice con una sonrisa tierna en el rostro.

— Sí, igual a decir que no tengo planeado casarme y vivir para siempre con mi Filius, y todas aquí saben que ya estoy preparando la decoración de nuestro hogar en la colina — Musitó Pandora con un tonó soñador.

— O igual a decir que Marlenne no se muere por Sirius y . . . viceversa — Dije en tono socarrona devolviendo sus bromas, sabía que la rubia se enojaría por aquello y, como predije, Lenne me fulminó con la mirada.

Todas reímos ante eso.

— Ok, ya entendí no pongan más ejemplos, ya quedó más que claro. — Dije recuperando el aliento. — Pero basta por hoy del tema, es tarde, será mejor que durmamos ahora.

Sempiternamente InefablesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora