乡¡𝙀𝙨𝙩𝙧𝙚𝙡𝙡𝙖𝙨!乡 Tsukishima Kei x Lectora.

Cap 9.

Narrador Omnisciente;

Nervios.

Eso se podía sentir en el equipo de Karasuno.

Hoy eran las preliminares, se enfrentarán Ohgi Minami --cabras, dígame ¿Así se escribe? Si no es así digan qudbne, Thanks--

- Siento mi estómago hecho un revoltijo -hablo Yamaguchi, tu rapidamente te acercas a el y le sobas la espalda-

- Tranca, tranca amigo mio... Respira profundo.

(…)

- Tengo sueño -dices bajo-

Los chicos estaban calentando para el partido que será en unos minutos.

Te quedaste un rato hablando con Tanaka hasta que Daichi lo llamo diciendo que era su turno de rematar, este asintió.

Cuando este iba a dar un paso escucho unas voces del equipo contrario hablando mal de el por su apariencia “rebelde”

Pensaste que le iba a gritar o cualquier cosa pero solo hizo su pose Budha.

- Iré adelante... Tengamos un buen partido -dijo para luego posicionarse en su lugar, Kageyama iba a ser quien se la levante-

- ¡Tomen esto! -dijo el pelado rematando el balón con mucha fuerza haciendo que este hiciera un sonoro ruido, pero también hizo que esos chicos se asustarán- agradezco la oportunidad Kageyama -dijo haciendo la misma pose y acompañada con una reverencia, tu hermano hizo lo mismo algo confundido-

Sin que nadie se diera cuenta te acercas a uno de esos chicos y le agarras de la camisa para mirarlos amenazante.

- Mira cabron, si molestas a alguien de MI equipo, te juro que te voy a golpear el trasero -dijiste soltandolo y llendo con tu equipo-

Fuiste nuevamente con tu equipo y sientes unos brazos rodear tu cintura, ya sabías quien era así que te das vuelta y acaricias su cabeza.

- ¿Nervioso hermano? -el asiente y tu ries levemente- tranquilo, yo también lo estoy.

Quedaron en un corto silencio cuando el azabache lo rompió con una voz algo arrogante.

- Pero... Hay algo que no dijimos -tu lo miras sorprendida y sonries con arrogancia-

- Uno...

- Dos...

- Tres...

- A los hermanos Kageyama, nada les da miedo, si uno de nosotros tenemos nervios o terror, mejor le damos una patada en el trasero -dijeron los dos al mismo tiempo mientras agarran sus meñiques-